01 SUMILLA: INTERPONGO QUERELLA POR DIFAMACIÓN AGRAVADA
SEÑOR JUEZ DEL JUZGADO PENAL UNIPERSONAL DE LA MOLINA.-
XXXXXXXXXXXXXX, abogado con registro
del Colegio de Abogados de Lima Nro. XXXXX, identificado con Documento Nacional de Identidad Nro.XXXXXX, con domicilio real y procesal en la calle Coronel Inclán N° 691, Dpto. 32, distrito de Miraflores – Provincia y Departamento de Lima y con Casilla Electrónica N° 93320 del Poder Judicial de Lima, y correo electrónico: albertocardenas8380@hotmail.com; A Ud. respetuosamente digo:
I. PETITORIO:
De conformidad con los artículos 108 y 459 del Código Procesal Penal y
ante la vulneración de mis derechos al honor y a la buena reputación, consagrados en el inciso 7 del art. 2 de la Constitución Política del Perú, solicito el inicio de la acción penal privada con la interposición de la presente QUERELLA EN CONTRA DE: Angel Miguel Rosales Porras, por la comisión del delito de DIFAMACIÓN AGRAVADA, tipificado en el tercer párrafo del art. 132 del Código Penal. Solicitando se imponga la pena correspondiente, así como el pago de la reparación civil por el monto de S/ 105 000,00 (Ciento cinco mil soles con 00/100 soles), en atención a los fundamentos de hecho y de derecho que expongo a continuación:
II. DATOS DEL QUERELLADO
La querella interpuesta se dirige en contra de: Angel Miguel Rosales Porras, identificado con Documento Nacional de Identificación Nro. 09307863, y con domicilio en la Calle Javier Heraud Nro. 234, segundo piso, Urbanización Covima, distrito de la Molina – Provincia y Departamento de Lima.
III. FUNDAMENTACIÓN FÁCTICA:
1. Que, en el Segundo Juzgado de Paz Letrado del Distrito de San Miguel
–Lima, existe un proceso de alimentos (Expediente Nro. 00102-2006- 0-1824-JP-FC-02) seguido por la señora Lisseth Pamela Urteaga Alvarado en su calidad de madre de mi menor hija Camila Grace Cárdenas Urteaga.
2. Que, mediante escrito de fecha 21 de octubre del 2021, el querellado
presentó, ante el Segundo Juzgado de Paz Letrado de San Miguel, un escrito de Devolución de Cedula de Notificación debido a que el mencionado juzgado le había notificado erróneamente a su domicilio.
3. Que, en el escrito presentado por el querellado, en el punto número 2
(DOS), manifiesta que ÉL ES UN TERCERO AJENO A LA RELACIÓN PROCESAL, es decir, el querellado NO ES LITIGANTE dentro del mencionado proceso de alimentos. Asimismo, en el punto número 3 (TRES) del mencionado escrito, el querellado ASEVERA QUE HE PROCEDIDO CON “TEMERIDAD PROCESAL” AL CONSIGNAR UN DOMICILIO QUE NO ME PERTENECE.
4. Que, desafío al querellado a que demuestre de forma indefectible y
fehaciente que lo vertido y aseverado en su escrito de Devolución de Cedula es cierto, toda vez que, las manifestaciones del querellado me han generado una evidente afectación a mi honor y a mi buena reputación, tanto más si ostento un título universitario de la carrera de Derecho, es decir, el querellado me está difamando, atribuyéndome una conducta reprochable que va en contra de todos los principios éticos y legales que se me han inculcado a largo de mi carrera profesional. Siendo también que el querellado al aseverar que he actuado con Temeridad Procesal, lo ésta haciendo ante varias personas (el Juez, el secretario del despacho judicial, la demandante, mi menor hija de 16 años, los familiares de mi hija de parte de madre, etc…)
5. Que, si bien el Código Penal en su artículo 133°, inc 1, establece lo
siguiente:
“No se comete injuria ni difamación cuando se trata de Ofensas
proferidas con ánimo de defensa por los litigantes, apoderados o abogados en sus intervenciones orales o escritas ante el Juez.”
Vuestro despacho debe tener presente que el querellado NO ES
LITIGANTE, NI APODERADO, NI ABOGADO DE NINGUNA DE LAS DOS PARTES dentro del proceso de alimentos, por lo que el artículo 133° inc 1, NO LO EXIME NI DISPENSA DE LA RESPONSABILIDAD PENAL Y CIVIL por el agravio cometido en contra de mi honor, mi buena reputación, mi imagen y mi autovaloración.
6. Cabe señalar que el bien jurídico protegido en el delito de la
difamación agravada es el honor, y en éste caso se configura el daño moral, el cual es indemnizable, toda vez que, el daño moral no necesita estar especificado en los hechos probados cuando fluye de manera directa y natural del relato manifestado en los párrafos precedentes. Esto debido a que se puede comprobar de manera directa un sentimiento de mi dignidad lastimada o vejada, el cual será susceptible de valoración pecuniaria. Además, el daño moral no deriva de pruebas de lesiones materiales, sino de la significación espiritual que el delito tiene con la relación al querellante o víctima.
7. Según se establece en el Código Penal, artículo 132.- Difamación:
[…] “Si el delito se comete por medio del libro, la prensa u otro medio de comunicación social, la pena será privativa de libertad no menor de uno ni mayor de tres años y de ciento veinte a trescientos sesenticinco días-multa”.
Al respecto, el Magistrado Salinas Siccha establece que este tipo
penal se configura cuando el sujeto activo, ante varias personas, reunidas o separadas, pero de modo que haya posibilidad de difundirse tal acontecimiento, atribuye, imputa, inculpa o achaca al sujeto pasivo de un hecho, cualidad o conducta capaz de lesionar o perjudicar su honor. Siendo lo trascendente en el hecho punible de difamación la difusión, propalación o divulgación del acontecimiento ofensivo que se imputa al sujeto activo o a la víctima. [01]
III. FUNDAMENTACIÓN JURÍDICA:
1. Constitución Política del Perú, artículo 2°, inciso 7
2. Código Penal Peruano, artículos 130°, 132° y 133
3. Código Procesal Penal Peruano, artículos 108° y 459°
4. Resolución expedida el 29 de enero de 2019, por La Sala Penal
Permanente de la Corte Suprema al resolver el Recurso de Nulidad N° 1358-2018-Lima.
SOBRE LA RESPONSABILIDAD CIVIL DE LA QUERELLADA
Solicitamos se imponga el pago de una reparación civil por el monto de S/
105 000,00 (Ciento cinco mil con 00/100 soles), lo cual comprende la indemnización por los daños y perjuicios ocasionados, respecto a la siguiente argumentación:
DAÑO MORAL: Que, La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema al
resolver el Recurso de Nulidad N° 1358-2018-Lima, en su resolución expedida el 29 de enero de 2019, precisó que, tratándose del daño moral, "es de aplicación la doctrina in re ipsa loquitur, cuando la realidad del daño puede estimarse existente por resultar ‘evidente’, es decir, El daño moral no necesita estar especificado en los hechos probados cuando fluye de manera directa y natural de los hechos probados, pudiendo constatarse un sufrimiento, un sentimiento de su dignidad lastimada o vejada, susceptible de valoración pecuniaria. Por otro lado, la Corte refirió que la reparación civil, de acuerdo al artículo 93° del Código Penal, comprende la indemnización de los daños y prejuicios, la cual deber determinarse conjuntamente con la pena y el principio del daño causado (artículo 92 del Código Penal y Acuerdo Plenario N° 5-2008/CJ-116).
IV. MEDIOS PROBATORIOS
1.- Original de la Cedula de Notificación Nro. 11618-2021-JP-FC.
2.- Original de la Resolución Nro. 145 (Ciento cuarenta y cinco), emitida por el 2° Juzgado de Paz Letrado de San Miguel. 3.- Original del escrito de Devolución de Cedula firmada por el querellado.
V. ANEXOS:
Anexo–1. Copia de DNI del querellante, Luis Alberto Cárdenas Blancas.
Anexo–2. Original de la Cedula de Notificación Nro. 11618-2021-JP-FC. Anexo-3. Original de la Resolución Nro. 145 (Ciento cuarenta y cinco), emitida por el 2° Juzgado de Paz Letrado de San Miguel. Anexo-4. Original del escrito de Devolución de Cedula firmada por el querellado. Anexo–5. Comprobante de pago del arancel judicial correspondiente por presentación de querella. Anexo–6. Comprobante de pago de dos Cedulas de Notificación.
POR LO EXPUESTO:
A Ud. Señor Juez, admita la querella formulada y proceda conforme a lo