Está en la página 1de 2

ÉTICA PARA AMADOR

AUTOR: FERNANDO SAVATER

El objetivo de este libro es estimular el desarrollo del pensamiento libre. A continuación


realizaré un resumen de los tres primeros capítulos de este libro y al final sacaré
conclusiones de lo leído.

Resumen del primer capítulo: DE QUÉ VA LA ÉTICA.

En este primer capítulo nos habla que en la vida hay muchas ciencias y materias que nos
pueden ser útiles para poder subsistir y que también hay muchas otras materias que
nosotros desconocemos; no es necesario saber todo en la vida, existen cosas más
importantes como por ejemplo vivir una vida tranquila.

Todo lo que nos afecta y es perjudicial para nuestra salud lo llamaremos “malo”; todo lo
que es beneficioso para nuestra vida lo llamaremos “bueno”.

Este capítulo también realiza una comparación de el hombre con los animales en donde
menciona a las termitas y a Héctor que es un guerrero al igual que las termitas que
forman el reino, en esta parte nos quiere dar a entender que el hombre tiene el
privilegio de ser libre, ya que el humano tiene la capacidad de decidir lo que quiera y en
este caso las termitas no pueden cambiar lo que tienen que hacer.

Se plantean una serie de conceptos para la palabra libertad y de ella recogí el concepto
que me pareció adecuado: «La libertad no es una filosofía y ni siquiera es una idea: es
un movimiento de la conciencia que nos lleva, en ciertos momentos, a pronunciar dos
monosílabos: Sí o No. En su brevedad instantánea, como a la luz del relámpago, se
dibuja el signo contradictorio de la naturaleza humana» (Octavio Paz, La otra voz).

Resumen del segundo capítulo: ÓRDENES, COSTUMBRES Y CAPRICHOS.

Queda claro que hay cosas que nos convienen para vivir y otras no, pero no siempre está
claro qué cosas son las que nos convienen. Aunque no podamos elegir lo que nos pasa,
podemos en cambio elegir lo que hacer frente a lo que nos pasa.

¿Resulta entonces que hacemos siempre lo que queremos?; no a veces las


circunstancias nos imponen a elegir entre dos opciones que no hemos elegido, que
elegimos aunque preferiríamos no tener que elegir.

Se nos pone el ejemplo de un capitán de barco que tiene que tomar una decisión muy
complicada. También se plantean las actividades que hace el hombre normalmente sin
pensarlo, que son nuestras costumbres de cada persona. Los caprichos son aspectos de
la vida de cada persona, que no suelen llevar a nada productivo, porque solo le interesa
a una persona la que tiene el capricho.

«No hemos de preocupamos de vivir largos años, sino de vivirlos satisfactoriamente;


porque vivir largo tiempo depende del destino, vivir satisfactoriamente de tu alma. La
vida es larga si es plena; y se hace plena cuando el alma ha recuperado la posesión de su
bien propio y ha transferido a sí el dominio de sí misma» (Séneca, Cartas a Lucilio).
Resumen del tercer capítulo: HAZ LO QUE QUIERAS.

Decíamos antes que la mayoría de las cosas las hacemos porque nos las mandan (los
padres cuando se es joven, los superiores o las leyes cuando se es adulto), porque se
acostumbra a hacerlas así (a veces la rutina nos la imponen los demás con su ejemplo y
supresión -miedo al ridículo, censura, chismorreo, deseo de aceptación en el grupo...y
otras veces nos la creamos nosotros mismos), porque son un medio para conseguir lo
que queremos(como tomar el autobús para ir al colegio) o sencillamente porque nos da
la ventolera o el capricho de hacerlas así, sin más ni más.

Un comandante nazi del campo de concentración al que acusan de una matanza de


judíos intenta excusarse diciendo que «cumplió órdenes », pero a mí, sin embargo, no
me convence esa justificación; en ciertos países es costumbre no alquilar un piso a
negros por su color de piel o a homosexuales por su preferencia amorosa, pero por
mucho que sea habitual tal discriminación sigue sin parecerme aceptable; el capricho de
irse a pasar unos días en la playa es muy comprensible, pero si uno tiene a un bebé a su
cargo y lo deja sin cuidado durante un fin de semana, semejante capricho ya no resulta
simpático sino criminal.

Todo esto tiene que ver con la cuestión de la libertad. Libertad es poder decir «sí» o
«no»; lo hago o no lo hago; libertad es decidir, pero también, no lo olvides, date cuenta
qué estás decidiendo.

Para unos, ser bueno significará ser resignado y paciente, pero otros llamarán bueno a la
persona emprendedora, original, que no se acobarda a la hora de decir lo que piensa
aunque pueda molestar a alguien.

¿Y sabes por qué no resulta sencillo decir cuándo un ser humano es «bueno» y cuándo
no lo es? Porque no sabemos para qué sirven los seres humanos. Un futbolista sirve para
jugar al fútbol de tal modo que ayude a ganar a su equipo y meta goles al contrario; una
moto sirve para trasladarnos de modo veloz, estable, resistente... Sabemos cuándo un
especialista en algo o cuándo un instrumento funciona como es debido porque tenemos
idea del servicio que deben prestar, de lo que se espera de ellos. Pero si tomamos al ser
humano en general la cosa se complica: a los humanos se nos reclama a veces
resignación y a veces rebeldía, a veces iniciativa y a veces obediencia, a veces
generosidad y otras previsión del futuro, etc. No es fácil ni siquiera determinar una
virtud cualquiera: que un futbolista meta un gol en la portería contraria sin cometer falta
siempre es bueno, pero decir la verdad puede no serlo.

CONCLUSIONES DE LOS TRES PRIMEROS CAPÍTULOS.

Este libro nos habla de lo bueno que es llevar una vida tranquila, nosotros como seres
humanos tenemos la libertad y el poder para elegir lo que queremos hacer; pero nos
cuestiona: ¿lo que hacemos o decidimos estará bien? Lo que es bueno para mí puede no
ser bueno para otros y viceversa.

También hace mención que nuestras decisiones no siempre son las que queremos elegir;
pero entonces salta a mí una duda las personas somos libres para decidir o solo somos
víctimas de las ordenes y caprichos que nosotros mismos dejamos que suceda.

También podría gustarte