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CONTROLES DE CONVENCIONALIDAD Y CONSTITUCIONALIDAD EN

MATERIA DE DERECHOS HUMANOS A CARGO DEL PODER JUDICIAL.

El sistema de justicia mexicano ha tenido una transformación, a partir de las


reformas constitucionales de 6 y 10 de junio de 2011, así como con el
pronunciamiento de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ante la sentencia
de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en torno al caso Rosendo
Radilla Pacheco.

Ahora los jueces mexicanos federales y locales tienen la obligación de


aplicar el control difuso en torno a la protección de los derechos humanos dentro
del ámbito de su competencia. Además se declaró como jurisprudencia histórica
aquella que indicaba que México adoptaba, en exclusiva, un control concentrado
de constitucionalidad.

La reforma constitucional de 6 de junio de 2011 incorpora la figura de la


Declaratoria General de Inconstitucionalidad (excepto en materia tributaria), que
opera cuando en los juicios de amparo indirecto en revisión se resuelva la
inconstitucionalidad de una norma general por segunda ocasión consecutiva, o
cuando los órganos del Poder Judicial de la Federación establezcan jurisprudencia
por reiteración en la cual se determine la inconstitucionalidad de una norma
general.

En estos casos, la Suprema Corte de Justicia de la Nación lo notificará a la


autoridad emisora (órgano legislativo) y transcurrido el plazo de 90 días naturales
sin que se supere el problema de inconstitucionalidad, la Suprema Corte de
Justicia de la Nación emitirá, siempre que fuere aprobada por una mayoría de
cuando menos ocho votos, la declaratoria general de inconstitucionalidad, en la
cual se fijarán sus alcances y condiciones en los términos de la ley reglamentaria.
Ello no sólo beneficia a quien promueve un amparo (principio de relatividad de las
sentencias1), sino que favorece a toda la sociedad (efecto erga omnes2), al dejarse
de aplicar esa ley.

Por su parte, la reforma constitucional de 10 de junio de 2011, amplió el


ámbito de protección jurídica, pues ya no sólo se protegen los derechos públicos
subjetivos reconocidos en la Constitución, sino además, los derechos humanos
establecidos en los tratados internacionales, suscritos por México, de acuerdo con
lo que señalado en el artículo 133 constitucional. Asimismo, la nueva
denominación del Capítulo I del Título Primero de la Constitución, supera el
concepto de garantías individuales e incorpora el de derechos humanos, de modo
que ya no hay un otorgamiento, sino un reconocimiento. También, se recoge la
figura de la “interpretación conforme 3” y el principio de interpretación “pro
personae4”.

Ante estos acontecimientos, surgen varias interrogantes ¿Qué controles le


corresponde ejercer a los jueces nacionales (federales y locales) en nuestro actual
sistema jurídico? ¿De convencionalidad o de constitucionalidad? ¿Difuso o
concentrado? ¿Hay compatibilidad entre la interpretación conforme y el principio
pro personae con estos controles? ¿Qué pasa cuando en la Constitución Federal y
en los pactos internacionales confluyen normas en el tema de derechos humanos?

En sesión de 11 de julio de 2011, la Suprema Corte de Justicia de la Nación


sólo reconoció el control de convencionalidad, mientras que en la diversa de 25 de
octubre siguiente, declaró como jurisprudencias históricas aquellas que hablaban

1
Que dice que las sentencias que se pronuncien en los juicios de amparo sólo se ocuparan de los individuos particulares o de
las personas morales privadas u oficiales que lo hubiesen solicitado, limitándose a ampararlos y protegerlos si procediere en el
caso especial sobre el que verse la demanda sin hacer una declaración general de la ley o el acto que la motivare.
2
Es decir, que los efectos se hacen extensivos a todos aquellos que se encuentren en el mismo caso.
3
Según Miguel Carbonell, la interpretación conforme implica que “todas las normas relativas a derechos humanos (del rango
jurídico que sea) se deberán interpretar a la luz de la propia Constitución y de los tratados internacionales). Esto implica la
creación de una especie de bloque de constitucionalidad (integrado no solamente por la Carta Magna, sino también por los
tratados internacionales), a la luz del cual se deberá interpretar el conjunto del ordenamiento jurídico mexicano.” [Benavente
Chorres, Hesbert. El Juez de Control en el Proceso Penal Acusatorio y Oral. Flores Editor y Distribuidor. México. 2012. Pág. 175.]
4
Para el mismo jurista el principio pro personae “supone que cuando existan distintas interpretaciones posibles de una norma
jurídica, se deberá elegir aquella que más proteja al titular de un derecho humano. Y también significa que cuando en un caso
concreto se pueden aplicar dos o más normas jurídicas, el intérprete deberá elegir aquella que (igualmente) proteja de mejor
manera a los titulares de un derecho humano.” [Loc. cit.]

1
de un concentrado de constitucionalidad 5, sin embargo, no se pronunció en el
sentido de si México se adoptaba o no el control difuso constitucional de las
normas. Finamente al resolver el expediente Varios 912/2010, después de varias
discusiones, los ministros llegaron a la conclusión, entre otros aspectos, de que
todos los jueces, sin excepción, están obligados a verificar que las leyes que
aplican no violen las disposiciones contenidas en la constitución y en los tratados
internacionales, relativas a derechos humanos y emitió entre otros criterios los
siguientes:

“SISTEMA DE CONTROL CONSTITUCIONAL EN EL ORDEN


JURÍDICO MEXICANO. Actualmente existen dos grandes vertientes
dentro del modelo de control de constitucionalidad en el orden jurídico
mexicano, que son acordes con el modelo de control de
convencionalidad ex officio en materia de derechos humanos a cargo
del Poder Judicial. En primer término, el control concentrado en los
órganos del Poder Judicial de la Federación con vías directas de
control: acciones de inconstitucionalidad, controversias constitucionales
y amparo directo e indirecto; en segundo término, el control por parte
del resto de los jueces del país en forma incidental durante los procesos
ordinarios en los que son competentes, esto es, sin necesidad de abrir
un expediente por cuerda separada. Ambas vertientes de control se
ejercen de manera independiente y la existencia de este modelo
general de control no requiere que todos los casos sean revisables e
impugnables en ambas. Es un sistema concentrado en una parte y
difuso en otra, lo que permite que sean los criterios e interpretaciones
constitucionales, ya sea por declaración de inconstitucionalidad o por
inaplicación, de los que conozca la Suprema Corte para que determine
cuál es la interpretación constitucional que finalmente debe prevalecer
en el orden jurídico nacional. Finalmente, debe señalarse que todas las
5
La Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó “ÚNICO: Han quedado sin efectos las tesis jurisprudenciales números
P./J. 73/99 y P./J. 74/99, de rubros: “CONTROL JUDICIAL DE LA CONSTITUCIÓN. ES ATRIBUCIÓN EXCLUSIVA DEL PODER JUDICIAL
DE LA FEDERACIÓN.” y “CONTROL DIFUSO DE LA CONSTITUCIONALIDAD DE NORMAS GENERALES. NO LO AUTORIZA EL
ARTÍCULO 133 DE LA CONSTITUCIÓN.”

2
demás autoridades del país en el ámbito de sus competencias tienen la
obligación de aplicar las normas correspondientes haciendo la
interpretación más favorable a la persona para lograr su protección más
amplia, sin tener la posibilidad de inaplicar o declarar su
incompatibilidad”.6

“PARÁMETRO PARA EL CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX


OFFICIO EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS. El mecanismo
para el control de convencionalidad ex officio en materia de derechos
humanos a cargo del Poder Judicial debe ser acorde con el modelo
general de control establecido constitucionalmente. El parámetro de
análisis de este tipo de control que deberán ejercer todos los jueces del
país, se integra de la manera siguiente: a) todos los derechos humanos
contenidos en la Constitución Federal (con fundamento en los artículos
1o. y 133), así como la jurisprudencia emitida por el Poder Judicial de la
Federación; b) todos los derechos humanos contenidos en tratados
internacionales en los que el Estado Mexicano sea parte; c) los criterios
vinculantes de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
derivados de las sentencias en las que el Estado Mexicano haya sido
parte, y d) los criterios orientadores de la jurisprudencia y precedentes
de la citada Corte, cuando el Estado Mexicano no haya sido parte”. 7

“CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO EN UN MODELO


DE CONTROL DIFUSO DE CONSTITUCIONALIDAD. De conformidad
con lo previsto en el artículo 1o. de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, todas las autoridades del país, dentro del
ámbito de sus competencias, se encuentran obligadas a velar no sólo
por los derechos humanos contenidos en la Constitución Federal, sino
también por aquellos contenidos en los instrumentos internacionales
celebrados por el Estado Mexicano, adoptando la interpretación más
6
[TA] LXX/2011(9a.); 10a. Época; Pleno; S.J.F. y su Gaceta; Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 1; Pág. 557.
7
[TA] LXVIII/2011(9a.); 10a. Época; Pleno; S.J.F. y su Gaceta; Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 1; Pág. 551.

3
favorable al derecho humano de que se trate, lo que se conoce en la
doctrina como principio pro persona. Estos mandatos contenidos en el
artículo 1o. constitucional, reformado mediante Decreto publicado en el
Diario Oficial de la Federación de 10 de junio de 2011, deben
interpretarse junto con lo establecido por el diverso 133 para determinar
el marco dentro del que debe realizarse el control de convencionalidad
ex officio en materia de derechos humanos a cargo del Poder Judicial,
el que deberá adecuarse al modelo de control de constitucionalidad
existente en nuestro país. Es en la función jurisdiccional, como está
indicado en la última parte del artículo 133 en relación con el artículo
1o. constitucionales, en donde los jueces están obligados a preferir los
derechos humanos contenidos en la Constitución y en los tratados
internacionales, aun a pesar de las disposiciones en contrario que se
encuentren en cualquier norma inferior. Si bien los jueces no pueden
hacer una declaración general sobre la invalidez o expulsar del orden
jurídico las normas que consideren contrarias a los derechos humanos
contenidos en la Constitución y en los tratados (como sí sucede en las
vías de control directas establecidas expresamente en los artículos 103,
105 y 107 de la Constitución), sí están obligados a dejar de aplicar las
normas inferiores dando preferencia a las contenidas en la Constitución
y en los tratados en la materia”.8

En ese contexto, en México hay dos controles 9, el de convencionalidad y el


de constitucionalidad y ambos son distintos, pues el primero es el resultado de la
internacionalización de los derechos humanos reconocido en nuestra Carta
Magna, en cambio el segundo es propio del mecanismo de defensa de la
Constitución.

8
[TA] LXVII/2011(9a.); 10a. Época; Pleno; S.J.F. y su Gaceta; Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 1; Pág. 535.
9
Hay quienes opinan como los ministros Zaldivar Lelo, Luna Ramos y Valls Hernández, que, cuando se realiza un control de
convencionalidad, se está realizando también un control de constitucionalidad.
Mientras que otros opinan como los ministros Silva Meza y Pardo Rebolledo que, el control convencional se vincula, con el
control constitucional, pero pese a esa conexión que corren por distintos carriles.

4
Ahora bien, me parece que para abordar estos temas debemos aceptar la
supremacía de la Constitución y la posibilidad de que todos los órganos del Estado
se subordinen a ella; en ese sentido, la Carta Magna es el primer referente.

Así tenemos que, el artículo 133 Constitucional otorga a los tratados


internacionales firmados por el Presidente de la República y ratificados por el
Senado, jerarquía por encima de la legislación doméstica, mientras que el numeral
1º introduce la salvaguarda de los derechos humanos. Y es de ambos artículos de
donde nace el control convencional difuso limitado a la materia de derechos
humanos, el cual, llama a los jueces nacionales (y en general a todas las
autoridades) a promover, respetar, proteger, garantizar y hacer prevalecer los
derechos y principios que se establecen en los convenios internacionales, en el
ámbito de sus competencias, de conformidad con los principios de universalidad,
interdependencia, indivisibilidad y progresividad.

Por otro lado, aunque la Suprema Corte de Justicia de la Nación no lo haya


dicho de manera tajante, y partiendo del concepto de control constitucionalidad
difuso definido como la facultad de inaplicar leyes contrarias a la Carta Magna y la
capacidad de declarar la inconstitucionalidad –como en el sistema anglosajón–,
podríamos decir que en México hay un control constitucional difuso limitado, pues
los jueces del fuero común sólo pueden inaplicar normas que sean contrarias a la
Carta Magna en materia de derechos humanos, en tanto que el Poder Judicial de
la Federación además de lo anterior puede declarar la inconstitucionalidad de
normas a través del juicio de amparo, controversias constitucionales y acciones de
inconstitucionalidad. 10
10
Eduardo Ferrer Mac-Gregor señala que: el Control de Convencionalidad tiene 2 manifestaciones: una de carácter
“concentrado” por parte de la Corte Interaméricana, en sede internacional y otra de carácter “difuso” por los jueces nacionales
en sede interna”. [Ferrer Mac Gregor, Eduardo. El control difuso de convencionalidad en el estado constitucional. Esta obra
forma parte del acervo de la Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Documento
electrónico. Formato disponible en: http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/6/2873/9.pdf (Consulta realizada 01.10.12) Pág.
173.]
En ese mismo orden, podríamos decir que el Control de Constitucionalidad tiene 2 manifestaciones: una de carácter
“concentrado” por el Poder Judicial de la Federación en juicio de amparo, controversia y constitucionales y acciones de
inconstitucionalidad en todo el país y otra de carácter “difuso” por los jueces nacionales del orden común. Véase tesis aislada
LXX/2011(9a.), de rubro: “SISTEMA DE CONTROL CONSTITUCIONAL EN EL ORDEN JURÍDICO MEXICANO” supracitada.
Juan Carlos Hitters dice que: El “control de convencionalidad” es un mecanismo que debe ser llevado a cabo, primero por los
cuerpos judiciales domésticos, haciendo una “comparación” entre el derecho local y el supranacional, a fin de velar por el

5
En ese sentido, la función del juez, y en general, de todas las autoridades,
se trata de que en el ámbito de su competencia dejen de aplicar una norma por
considerarla contraria a las disposiciones protectoras de derechos humanos
contenidas en la Constitución o en un tratado internacional en el que haya
participado el Estado Mexicano.

Por otra parte, el control de convencionalidad y constitucionalidad no son


incompatibles con la interpretación conforme y “pro personae”. De hecho, estos
principios son útiles en el actuar del juez, quien primero debe hacer una
interpretación conforme en sentido amplio, es decir que debe interpretar el orden
jurídico a la luz de la Constitución y los tratados internacionales en materia de
derechos humanos; luego, cuando haya varias interpretaciones, y partiendo de la
presunción de constitucionalidad de las leyes, preferirá aquella que salvaguarde
un derecho humano superior.11

En otro aspecto, también puede acontecer que existan disposiciones


protectoras de un mismo derecho humano tanto en la Constitución como en un
tratado internacional y en ese sentido, la Segunda Sala de la Suprema Corte ha
dicho que bastará con referir la contenida en la Carta Magna sin que sea
necesario acudir a la diversa del tratado internacional, según se advierte de la
siguiente tesis:

“DERECHOS HUMANOS. SU ESTUDIO A PARTIR DE LA REFORMA


AL ARTÍCULO 1o. CONSTITUCIONAL, PUBLICADA EN EL DIARIO
OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 10 DE JUNIO DE 2011, NO

efecto útil de los instrumentos internacionales, sea que surja de los tratados, del ius cogens o de la jurisprudencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos; y luego esa tarea debe ser ejercida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos si
es que el caso llega a sus estrados. [Hitters, Juan Carlos. 2009. “CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD Y CONTROL DE
CONVENCIONALIDAD. COMPARACIÓN (Criterios fijados por la Corte Interamericana de Derechos Humanos)”. Estudios
Constitucionales, num. Sin mes, pp. 109-128. Documento electrónico. Disponible en:
http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=82011841005 ISSN 0718-0195 o en
http://redalyc.uaemex.mx/buscador/search.jsp?
query=Criterios+fijados+por+la+Corte+Interamericana+de+Derechos+Humanos&rbArt=rbArt (Consulta realizada 01.10.12) Pág.
109.]
11
Véase [TA]; 10a. Época; Pleno; S.J.F. y su Gaceta; Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 1; Pág. 552. “PASOS A SEGUIR EN EL
CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD Y CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS.”

6
IMPLICA NECESARIAMENTE QUE SE ACUDA A LOS PREVISTOS
EN INSTRUMENTOS INTERNACIONALES, SI RESULTA
SUFICIENTE LA PREVISIÓN QUE SOBRE ÉSTOS CONTENGA LA
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS
MEXICANOS. Conforme a lo previsto en el artículo 1o. de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, a partir de la
reforma publicada en el Diario Oficial de la Federación el 10 de junio de
2011, en atención al principio pro persona, no resulta necesario
considerar el contenido de tratados o instrumentos internacionales que
formen parte de nuestro orden jurídico, si es suficiente la previsión que
sobre los derechos humanos que se estiman vulnerados, dispone la
Constitución General de la República y, por tanto, basta el estudio que
se realice del precepto constitucional que lo prevea, para determinar la
constitucionalidad o no, del acto que se reclama”. 12

En conclusión me parece que las reformas citadas, las reflexiones y


criterios –aunque aislados– de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, han
sido favorables a nuestro sistema de justicia, pues anteriormente, el poder judicial
del orden común se limitaba a aplicar la ley independientemente de que estuviera
o no apegada a la Constitución, y con este nuevo panorama, puede inaplicar
aquellas normas que contravenga disposiciones de derechos humanos contenidas
en la Constitución o Pacto Internacional, sin tener que esperar a que el Poder
Judicial de la Federación declare el actuar de la autoridad responsable contrario a
la Constitución o aplique aquella disposición contenida en un tratados
internacionales en materia de Derechos Humanos que haya pasado por alto la
autoridad responsable; aunado que el efecto del amparo que declare la
inconstitucionalidad o inconvencionalidad de una ley puede tener efectos erga
omnes siempre que se cumpla con las hipótesis previstas en el artículo 107,
fracción II, de la Constitución Federal.

12
[TA] 2a. XXXIV/2012 (10a.); 10a. Época; Segunda Sala; S.J.F. y su Gaceta; Libro VIII, Mayo de 2012, Tomo 2; Pág. 1348.

7
Fuentes consultadas:

 Benavente Chorres, Hesbert. El Juez de Control en el Proceso Penal Acusatorio y


Oral. Flores Editor y Distribuidor. México. 2012.

 Castilla, Karlos. El control de convencionalidad un nuevo debate en México a partir de


la sentencia del Caso Radilla Pacheco. Esta obra forma parte del acervo de la
Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
Documento electrónico. Disponible en:
http://biblio.juridicas.unam.mx/estrev/pdf/derint/cont/11/pim/pim20.pdf (Consulta
realizada 01.10.12)

 Corte IDH. Caso Radilla Pacheco Vs. México. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 23 de Noviembre de 2009. Serie C No. 209.
Documento electrónico. Disponible en: http://www.corteidh.or.cr/casos.cfm (Consulta
realizada: 27.09.12)

 Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Documento electrónico.


Disponible en: http: //diputados.gob.mx (Consulta realizada 27.09.12)

 Ferrer Mac Gregor, Eduardo. El control difuso de convencionalidad en el estado


constitucional. Esta obra forma parte del acervo de la Biblioteca Jurídica Virtual del
Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Documento electrónico. Disponible
en: http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/6/2873/9.pdf (Consulta realizada 01.10.12)

 Hitters, Juan Carlos. 2009. “CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD Y CONTROL DE


CONVENCIONALIDAD. COMPARACIÓN (Criterios fijados por la Corte Interamericana
de Derechos Humanos)”. Estudios Constitucionales, num. Sin mes, pp. 109-128.
Documento electrónico. Disponible en:
http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=82011841005 ISSN 0718-
0195 o en http://redalyc.uaemex.mx/buscador/search.jsp?
query=Criterios+fijados+por+la+Corte+Interamericana+de+Derechos+Humanos&rbArt
=rbArt (Consulta realizada 01.10.12)

 IUS. En línea. Disponible en: http://ius.scjn.gob.mx/paginas/tesis.aspx (Consulta


realizada 07.10.2012)

 Versión taquigráfica de la Sesión Pública Ordinario del Pleno de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación, celebrada el 11 de julio de 2011. Documento electrónico.
Disponible en:
http://www.scjn.gob.mx/PLENO/ver_taquigraficas/11072011PO1201sn.pdf (Consulta
realizada: 30.09.12)

 Versión taquigráfica de la Sesión Pública Ordinario del Pleno de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación, celebrada el 25 de octubre de 2011. Documento electrónico.
Disponible en: http://www.scjn.gob.mx/PLENO/ver_taquigraficas/pl20111025.pdf
(Consulta realizada 30.09.12)

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