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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA


EDUCACIÓN UNIVERSITARIA
UNIVERSIDAD EXPERIMENTAL DE LARA
MARTIN LUTHER KING

DERECHO PENAL

PNG: Estudios Jurídicos


Sección: 1201
Unidad curricular: Aspecto Coercitivo de la Norma Jurídica y la Sanción
Social
Profesor: Abg. Jesús Rivas
Estudiante: Yeliud Santos
Cedula: V-24.925.006
Teléfono: 04120562557
Correo: Yeliud6@gmail.com
Las partes en un tribunal penal
Las partes en el proceso penal son: Misterio Público, La Victima, El Imputado y
sus respectivos abogados.
Partes respecto a la acción penal son: Las partes acusadoras, que son las que
pueden ejercer la acción penal (acusar) y entre en las que se pueden encontrar al
representante de la vindicta publica (fiscal o procurador del Ministerio Publico,
Fiscalía General, Ministerio Fiscal, Fiscal de Distrito, o como se llame en cada
lugar concreto), la víctima del delito, devenida o no en querellante (mediante
acusación privada) y los acusadores populares, allí donde se les permita; y la
parte acusada, que es aquella contra la que se dirige la acción penal y está
constituida por el imputado y sus defensores. Estas son las partes esenciales de
todo sistema acusatorio.
Partes respecto a la acción civil derivada del delito: tenemos las partes
demandantes, entre las que puede figurar el Ministerio Publico o Fiscalía, la
víctima como demandante civil y la comunidad en general o el Estado, como
demandante, civiles cuando la ley lo permite; y las partes demandadas entre las
que se encontrara el imputado-demandado y el tercero civilmente responsable.

El juez penal
El juez penal, es el órgano del Estado encargado de resolver, mediante la
aplicación de la ley, los conflictos de intereses que el Ministerio Público somete a
su conocimiento, con el propósito de preservar el orden social.

El fiscal Penal
El fiscal, es el funcionario, integrante del Ministerio Público, que lleva
materialmente la dirección de la investigación criminal y el ejercicio de acción
penal pública; es decir, es a quien corresponde desempeñar directa y
concretamente, en un proceso penal, las funciones y atribuciones del ministerio
público, en los casos que conoce. Si bien el Ministerio Público es responsable de
otorgar protección de víctimas y testigos, ello no implica que el fiscal sea su
abogado. El Fiscal no es el Abogado de la víctima, debido a que si hay una
persona denunciante, el Fiscal puede optar tanto por sí o por no el impulso de la
persecución penal (lo cual llevaría investigación y acusación contra la persona
denunciada), es por ello el abogado de la sociedad.

El Alguacil
EL ALGUACIL El alguacil es un funcionario permanente del tribunal, que coadyuva
con el juez y el secretario, como subalterno para la administración de justicia. Son
funcionarios de libre remoción y nombramiento por el juez.
El secretario penal
El secretario es un funcionario judicial que integra el tribunal con carácter
permanente, con las facultades y deberes que les señalada la ley, para coadyuvar
en la función jurisdiccional, sin inmiscuirse en la facultad de decisión exclusiva del
juez. Son los depositarios de la fe pública de quienes acuden a los tribunales.

Teorías de la Pena
La doctrina se clasifica en teorías absolutas y relativas. Según las primeras la
pena se justifica por si misma encuentra en sí misma la razón de ser como
consecuencia del delito.
Señalan tales teorías que no debe plantearse el problema de otros fines concretos
que se propone el estado al sancionar, se sanciona porque se ha cometido un
delito, como una exigencia de justicia por lo cual al mal del delito debe seguir el
mal de la pena.
De acuerdo a las teorías relativas, la pena encuentra su justificación en los fines
prácticos que persigue considerándose un medio para la obtención de tales fines,
que se concretan básicamente en la prevención de los delitos.
Otras teorías reúnen elementos de la retribución con la consecución de objetivos
utilitarios configurando las denominadas teorías mixtas.

La pena como castigo


La comisión de un delito por parte de un sujeto culpable determina la
responsabilidad penal y por ello la sugestión del trasgresor a las consecuencias
que son indicadas por el orden jurídico: la pena. Pero es de notarse que además
de la pena pueden surgir otras consecuencias de la comisión de un delito con
ocasión del mismo como es el caso de las medidas de seguridad, que no guardan
sin embargo relación con la culpabilidad sino con otros criterios de prevención y
asimismo las consecuencias civiles que derivan del hecho catalogado como delito.
La pena es pues la consecuencia lógica del delito y consiste en la privación o
restricción de ciertos derechos del trasgresor que debe estar previamente
establecida en la ley y que es impuesta a través de un proceso como retribución
en razón del mal del delito cometido.
Tal concepto de pena se adapta a la naturaleza misma de esta sanción y se
enmarca perfectamente dentro de las previsiones de nuestra Constitución la cual
contiene diversas disposiciones relativas a la sanción penal y entre otras cosas en
materia de derechos individuales se refiere a la garantía de no poder ser
“considerado a sufrir pena que no esté establecida en ley preexistente” ni poder
ser considerado en causa penal sin antes haber sido notificado personalmente de
los cargos y oído en la misma que indique la ley y a la imposibilidad de que algún
ciudadano pueda ser condenado a pena de muerte o a penas perpetuas o
infamantes o restrictivas de la libertad que exceden de treinta años o la pena de
extrañamiento salvo como conmutación de otra pena y a solicitud del mismo reo.
Uno de los problemas más complejos que se plantea en esta materia y que da
lugar a las más diversas opiniones de acuerdo a posiciones filosóficas y doctrinas
es el relativo al porqué de la pena y a su finalidad.

La pena de acuerdo al Código Penal


El código clasifica las penas en corporales o restrictivas de la libertad, y no
corporales; y en principales accesorias.
Las penas denominadas corporales limitan en cierto sentido este atributo
fundamental del hombre implicando su internación en sitios de reclusión o su
reducción a determinado sitio o lugar en tanto que las no corporales, suponen en
su mayoría la restricción de otros derechos aunque también pueden afectar la
libertad del sujeto.
Por su parte las denominadas penas principales son las que la ley aplica
directamente al castigo del delito, como lo expresa textualmente el Art. 11 del
Código en tanto que las accesorias son aquellas que la ley trae adherente a la
principal ya sea en formas necesarias o imprescindibles o en forma accidental.
El carácter de pena principal es exclusivo de las penas corporales y de las no
corporales de multa, caución, de no ofender o dañar, amonestación
apercibimiento. Y son accesorias exclusivamente la interdicción civil, la
inhabilitación política y la sujeción a la vigilancia de la autoridad, la perdida de los
instrumentos o armas con que se cometió el hecho punible y de los efectos que de
él provengan. Por ultimo pueden imponerse como principales accesorias, la
suspensión del empleo la destitución del empleo y la inhabilitación para el ejercicio
de una profesión, industria o arte.

Características de la pena
Las características de la pena son:
 Intimidatoria. Debe preocupar o causar temor al sujeto que comete la
conducta ilegal, es decir evitar el delito por el temor a la aplicación de una
sanción.
 Aflictiva. Debe causar cierta afectación o aflicción al delincuente, para evitar
futuros delitos.
 Ejemplar. Debe ser un ejemplo a nivel individual y general para prevenir
otros delitos, es necesario que sirva de ejemplo, no solamente al
condenado sino al resto de la colectividad.
 Legal. Debe provenir de una norma legal, que exista previamente en la ley,
es necesario que se cumpla el concepto de legalidad.
 Correctiva. Toda pena debe tender a corregir al sujeto que comete un
delito, debe proporcionar a el delincuente una inserción positiva a la
sociedad esto implica que el tiempo de la privación de libertad sea
intervenida y se le dote de herramientas para su reinserción.
 Justa. La pena no debe ser excesiva en dureza o duración, sino que debe
ser relativa a la gravedad de la conducta antisocial y la peligrosidad del
individuo que la comete.

Naturaleza de las penas


El sistema de penas establecido en nuestro Código Penal nos presenta una
organización de estas, en base a su naturaleza y a su gravedad.

Según su naturaleza las penas pueden ser privativas de la libertad, privativas de


otros derechos y multa, y según su gravedad serán graves, menos graves y leves.

 LAS PENAS CORPORALES O RESTRICTIVAS DE LA LIBERTAD.


Penas corporales en el sentido estricto del término de penas que afectan la
integridad corporal o la vida del sujeto o su salud, no existen en nuestro derecho y
ni pueden existir, como tampoco las penas que afectan el honor de las personas o
penas infamantes. La Constitución de 1961reafirma estos principios humanitarios
al prescribir la pena de muerte, las penas perpetuase infamantes y cualquier
tortura o sufrimiento físico o moral a persona alguna.
Por tanto se trata de penas restrictivas de libertad, que como tales afecten en
mayor o menor medida la libertad del sujeto impidiendo u obstaculizando su
desplazamiento e implicando la mayoría de ellas la internación en sitios de
reclusión penitenciaria.
Estas penas las llamadas corporales se encuentran establecidas en el Art. 9 del
Código y son las siguientes:
a) Presidio: El código enuncia como la más grave de todas a ésta pues según
este código en su Art. 12, los sujetos impuestos de estas deberán cumplirlas
en las penitenciares que establezca y reglamente la ley y sus características se
encuentran tipificadas en la ley de régimen penitenciario. En consecuencia
quedan como accesorias de esta pena de presidio la interdicción civil durante
el tiempo que dure la condena, la inhabilitación política por el mismo tiempo y
la sujeción a la vigilancia de la autoridad por una cuarta parte de la pena una
vez ya terminada.
b) Prisión: A diferencia de la pena de presidio estas deben cumplirse en las
Naciones aunque en defecto de estas pueden ordenarse su cumplimiento en
las Penitenciarias destinadas al presidio. Y por lo que respecta a las accesorias
le corresponde solo la inhabilitación política durante el tiempo que dure la
condena y sujeción a la vigilancia de la autoridad por una quinta parte del
tiempo de la condena desde que ésta termina, según lo que establece el Art.
16 del Código Penal.
c) Arresto: Es la más leve de las penas que implican el aislamiento del sujeto y se
cumplen en las cárceles locales o cuarteles de policía o cuando lo disponga la
ley en fortaleza o en cárcel política. Ciertos hechos delictivos que atentan
contrala independencia y seguridad de la Nación que se catalogan como
delitos políticos y en los que el Código Penal hace mención al arresto en
fortaleza o cárcel política.
d) Relegación a Colonia Penitenciaria: Según el Art. 19 del Código Penal, esta
pena impone al reo la obligación de residir en la colonia que señale la
sentencia firme que imponga la pena, según algunos autores como Chissone,
es una pena impracticable en la actualidad por no existir las colonias aludidas.
El relegado como lo señala el código, queda sometido a las reglas de vigilancia
establecidas en el reglamento de la colonia y debe someterse como pena
accesoria, la suspensión del empleo que realiza.
e) Confinamiento: Como lo establece el Art. 20 del Código Penal, esta pena
consiste en la obligación impuesta al reo de resistir durante el tiempo de la
condena en el municipio que indique la sentencia firme que se aplique, no
pudiendo designarse al efecto ninguno que diste menos de cien kilómetros
tanto del lugar donde se cometió el hecho como de aquellos en que estuviesen
domiciliados. La pena de confinamiento tiene como pena accesoria, la
suspensión del tiempo que ejerza mientras cumple la condena.
f) Expulsión del territorio de la Republica: Como lo dice el Art. 21 del Código
Penal esta pena impone al reo la obligación de no volver al territorio de la
Republica durante el tiempo de la condena. En la ley especial correspondiente
se prevé que tal pena, como conmutación de otra, puede ser acordada por el
ejecutivo a solicitud del reo por los delitos establecidos en el Código de Justicia
Militar.

 LAS PENAS NO CORPORALES.


Estas penas no afectan directamente la libertad del sujeto, sino más bien otros
derechos de naturaleza primordial o de otro orden. Estas penas se encuentran
establecidas en el Art. 10 del Código Penal y son las siguientes:
a) La sujeción a la vigilancia de la autoridad pública: Esta pena impone al
condenado a dar cuentas a los respectivos jefes civiles de los municipios de
donde residan o por donde transiten de su salida y llegada a estos.
b) Interdicción civil: es una pena accesoria a la de presidio, en virtud de la cual el
sujeto queda privado de la libre disposición de sus bienes por actos entre vivos
y de su administración, así como de la Patria Potestad y autoridad marital. Y
por lo que respecta a la administración de sus bienes, el entre dicho queda
sometido a tutela según el régimen establecido en el código civil para los
entredichos por derecho intelectual.
c) Inhabilitación Política: Es solo accesoria de la pena de prisión y de presidio y
produce como efecto la privación de los cargos o empleos públicos o políticos
que tenga el penado y la incapacidad, durante la condena para obtener otros, y
para el goce del derecho activo y pasivo de sufragio.
d) Inhabilitación para el ejercicio de alguna profesión arte o industria: Es la pena
temporal que solo puede extenderse al lapso que fije la sentencia, que no
puede ser absoluta, y que se limita a determinadas profesiones, arte o
industrias además puede imponerse como principal o accesoria.
e) Destitución del empleo: Se impone como principal o accesoria y produce el
efecto de separar de su empleo al penado sin que pueda ejercerlo otra vez
sino por nueva elección o nombramiento.
f) Suspensión del empleo: Impide como lo expresa el Código Penal, el
desempeño del empleo mientras dure la condena, con derecho a que,
terminada esta puede continuar en el sí para ese momento corriente aun el
periodo fijado para el ejercicio del empleo.
g) Multa: Esta pena consiste según lo expresa el Art. 30 del Código Penal, en la
obligación de pagar al Fisco Nacional o Municipal, según sea el caso, la
cantidad que determine la sentencia, conforme a la Ley.
h) Caución de no ofender o dañar: Obligar al condenado a dar las seguridades
que estime necesarias el juez ejecutor, como lo dice el Art. 31 del Código
Penal. Entre tales condiciones o seguridades por supuesto pueden incluirse las
económicas o de naturaleza primordial como el depósito de una determinada
cantidad de dinero. Tales seguridades exigidas deberán quedar limitadas en el
tiempo a juicio del sentenciador.
i) La amonestación o apercibimiento: Se trata según lo establece textualmente el
Código Penal de la corrección verbal que hace el juez ejecutor en los términos
que ordena la sentencia, extendiéndose un acta de aquella amonestación que
se publicara en la Gaceta Oficial.
j) La pérdida de instrumentos o armas con que se cometió el hecho punible y los
efectos que de él provengan: Expresa el Código que es una pena
necesariamente accesoria otra pena principal ejecutándose así; las armas
serán decomisadas y destinadas al Parque Nacional de Armamento y los
efectos del delio asimismo decomisados y rematados para adjudicar su precio
al respectivo Fisco Nacional del Estado o Municipio, según sea el caso de
acuerdo a las reglas establecidas en los Art. 30 y 33 del Código Penal.

Justificación y finalidad de las penas


La pena se justifica por su necesidad como medio de represión indispensable para
mantener las condiciones de vida fundamentales para la convivencia de personas
en una comunidad. Su justificación no es, por consiguiente, una cuestión religiosa
ni filosófica, sino una amarga necesidad.

El delito en consecuencia tiene la pena, y la pena tiene una finalidad, la cual ha ido
evolucionando a lo largo de la historia, desde sus principios hasta nuestros días.
No basta con imponer la pena al delincuente por cometer un ilícito culpable, sino
se requiere de algún argumento adicional, es por eso que la pena necesariamente
debe tener alguna finalidad, ya sea preventiva, retributiva, enmendadora o
simplemente reinsercionista. "No es función del Estado imponer la justicia en la
tierra, sino que debe limitarse a satisfacer las necesidades sociales. El fin de la
pena, esencialmente, es reavivar en la conciencia común el desvalor de la
conducta violadora de la norma que ordena el respeto a cierta categoría de bienes
y, así, reafirmar la importancia de tales bienes y la exigencia de que sean
respetados.
En fin, la pena tiene una función preventiva, con vista a una sola utilidad que es,
evitar la repetición de los delitos y así parar el golpe de la criminalidad.

Delitos
Según al artículo 1 del Código Penal Venezolano, que prevé el principio de
legalidad y también al artículo 61 que constituye la norma rectora de la
responsabilidad penal en nuestro Código Penal Venezolano, el delito se define
como: “Las acciones u omisiones previstas por la ley y castigados por ella con una
pena".

De acuerdo al sistema analítico se toma el delito como un todo integral y se divide,


a los fines de su estudio, en sus diversos elementos integrativos, los cuales son:

1- LA ACCION.
2- LA TIPICIDAD.
3- LA ANTIJURICIDAD.
4- LA IMPUTAMUDAD.
5- LA CULPABILIDAD.
6- LAS CONDICIONES OBJETIVAS DE PUNIBILIDAD.
7- LA PENA.

Es un acto típicamente antijurídico, culpable e imputable a un hombre, castigado


con una pena.
Faltas
La ley establece que realizar conductas que afecten los derechos personales,
patrimoniales o sociales de las demás personas o la sociedad merece castigos
penales.
La gravedad de una conducta podría determinar si estamos ante un delito o una
falta.
Las faltas son infracciones a la ley de menor gravedad. Se tratan de actos que
pueden afectar la integridad corporal o determinados bienes.
¿Cómo se sancionan?
Según el Código Penal, un delito puede sancionarse con la pena privativa de
libertad. En cambio, una falta (por ser de menor gravedad) implica sanciones de
menor grado como las multas o los servicios a la comunidad. De esta manera, la
persona que ha cometido la infracción retribuye con su apoyo a la sociedad tras
haber infringido normas o reglas de convivencia.

Tanto el delito como la falta tienen como consecuencia sanciones penales. El tipo
de sanción variará de acuerdo a la gravedad de la infracción.
Asimismo, tanto el delito como la falta pueden generar antecedentes penales,
detenciones, o juzgamientos antelas autoridades competentes respectivas.
Las leyes establecen sanciones ante diversas inconductas que se cometen
diariamente en nuestra sociedad. Estas sanciones establecidas deben contar con
el apoyo del Estado para ser reguladas y cumplidas debidamente. De esa manera,
se podrá alcanzar una mejor convivencia.

Hurto y Robo

Diferencias
La diferencia entre ambas figuras es bien sencilla. Un hurto consiste en la
sustracción de un bien ajeno sin emplear violencia, fuerza o intimidación. Por
tanto, engloba todo tipo de acciones como, por ejemplo, quitarle la cartera a
alguien en el metro sin que se dé cuenta, llevarse comida del supermercado sin
pagarla e, incluso, entrar en una casa y apropiarse de objetos en su interior,
siempre y cuando no se haya forzado ninguna puerta o ventana.
En cambio, un robo consiste en apropiarse de bienes ajenos empleando fuerza (el
forzamiento o rotura de puertas, ventanas o cualquier otro medio de acceso),
violencia (física) o intimidación (verbal o gestual). Incluye conductas como romper
una ventana y entrar en un inmueble para robar bienes, apuntar a alguien con un
arma o pegar un tirón de bolso y salir corriendo.
Ejemplo
Tendemos a referirnos de manera genérica a los “robos” como cualquier tipo de
sustracción de objetos. Así, tendemos a decir que alguien “ha robado en el
supermercado” cuando introduce un par de productos en su mochila, pero esto no
es técnicamente correcto, pues estaríamos hablando de un hurto.

De acuerdo con el artículo 451 del Código Penal es hurto cuando se apodere de
algún objeto mueble, perteneciente a otro para aprovecharse de él, quitándolo, sin
el consentimiento de su dueño, del lugar donde se hallaba, se comete también
este delito cuando el hecho imputado recaiga sobre cosas que hagan parte de una
herencia aún no aceptada, y por el copropietario, el asociado o coheredero,
respecto de las cosas comunes o respecto de la herencia indivisa, siempre que el
culpable no tuviere la cosa en su poder.

Micro delincuencia
La delincuencia más común es la llamada delincuencia menor o micro
delincuencia, que normalmente es cometida por una persona o un grupo menor.
Los delitos cometidos pueden ser de carácter menor o también llegar a ser graves
y clasificados, pero no son de grandes proporciones, es decir, no son cometidas
por grupos organizados ni planeadas para afectar en gran manera a la sociedad.
El delito entre ciudadanos surge en relación proporcional a la pobreza, sumada a
la elevación de patrones y expectativas de consumo como validación personal y
social. Todo indica que el consumismo (como valor) es la condición necesaria para
que la pobreza sea factor de delincuencia, puesto que ella en sí misma no lo es ni
lo ha sido. A lo anterior se suman también el desempleo, la desigualdad y desde
luego la muy lamentable calidad de la educación.

La muer te accidental de un ser querido por culpa de otro, las lesiones, el hurto, el
daño en la propiedad, entre otras cosas, son conflictos cotidianos que han sido
registrados en toda la historia de la humanidad. El derecho penal ha intervenido en
ello por tres razones fundamentales:
1. Para desterrar la venganza privada como mecanismo de satisfacción y de
reparación moral al dolor sufrido.
2. Para reflejar en la ley la reprobación ética de ciertas conductas que merecen
castigo por sí mismas, independientemente del arreglo que pueda haber entre las
partes.
3. Para recluir y separar de la comunidad a los individuos antisociales que pueden
repetir los daños que han causado; es decir, excluir a los criminales de la vida
cotidiana, ya sea para confinarlos o para redimirlos según sea la versión del
derecho punitivo de cada sociedad en los diferentes episodios de la historia. La
micro delincuencia no es una corporación. Parece que se trata de conductas
individuales casi aisladas, episodios desafortunados que surgen en el día a día de
la cohabitación masiva en poblaciones y ciudades.

Ejemplo
Se incluyen aquí delitos como asaltos, carterismos, robos, fraudes, violaciones,
vandalismo, grafitis y pinturas en muros y monumentos, entre otros.

Macro delincuencia
La delincuencia más grave, se denomina delincuencia organizada o macro
delincuencia, e implica una organización o grupo mayor y un delito de grandes
proporciones que puede ser de carácter intermedio o mayor. Pueden incluir los
mismos delitos de la delincuencia menor pero por ser ejecutada por grupos
organizados, a los distintos delitos se les llama industria.

Ejemplo
Se podría hablar de industria del robo, industria del secuestro, narcotráfico, etc.
Además, provee de fondos a muchas empresas y personas que con o sin
conocimiento hallan en esta enorme organización a un cliente altamente solvente.

Diferencia entre macro y micro delincuencia


La delincuencia es uno de los temas que más preocupa a la sociedad actual,
debido principalmente al aumento del número de delincuentes y a que cada vez
sean más los menores que cometen delitos.
¿Pero el narcotráfico y la delincuencia organizada deben ser tratados con el mis-
mo proceso, los mismos principios y las mismas reglas que el hurto, las lesiones,
el fraude y otros delitos que se cometen en la cotidianeidad de la vida civil?
La realidad nos anuncia que debemos distinguir entre la macro delincuencia y la
micro delincuencia, para resolver y distribuir las atribuciones, que deben afrontar
las autoridades a cada una de ellas. Por esto entendidos ya los conceptos
anteriores podemos especificar que la micro delincuencia es en tendida a los
delitos que en menor grado se ocasionen en una población de manera individual,
mientras la macro delincuencia es entendida como la delincuencia organizada,
que maneja grandes flujos de capitales y son capaces de financiar corporaciones
de diferentes índoles con dinero obtenido ilegalmente (narcotráfico), con el fin de
lavar esos activos.
Iter Criminis
Iter criminis es una locución latina, que significa «camino del delito», utilizada en
Derecho penal para referirse al proceso de desarrollo del delito.
El hecho punible tiene todo un proceso o desarrollo conocido como Iter Criminis, el
cual tiene dos fases:
1. Fase Interna:
Como sabemos el Derecho Penal sanciona conducta y no pensamientos. Esta
fase no se castiga ya que se encuentra dentro del pensamiento de la persona.
Aquí hallamos 3 momentos:
a) Ideación: Consiste en imaginarse el delito. Ejemplo: A quiere matar a B.
b) Deliberación: Es la elaboración y desarrollo del plan, apreciando los detalles y
forma en que se va a realizar. Ejemplo: A puede utilizar un arma de fuego y
sorprender durante la noche a B.
c) Decisión: El sujeto decide poner en práctica el plan. Ejemplo: A decide matar a
B, con un arma de fuego y durante la noche.
2. Fase Externa:
En esta fase se exterioriza la fase interna, o sea, los actos planeados por la
persona se realizan en el mundo exterior con el propósito de cometer un delito.
Esta fase se divide en:
a) Actos Preparatorios: Son aquellos que se presentan con anterioridad a la
ejecución del delito y que están dirigidos a facilitarlo. En principio, los actos
preparatorios no son punibles, salvo cuando en forma independiente
constituyen delito. Ejemplo: A planea cometer un homicidio y para ello se
agencia en el mercado negro de un arma de fuego. El delito presente en ese
instante es el de posesión ilegal de arma de fuego.
b) Actos de Ejecución: Estos aparecen con la exteriorización del pensamiento
humano mediante conductas que tienen una determinada finalidad. Los actos
de ejecución implican acciones u omisiones que están dirigidas a configurar el
tipo penal. Ejemplo: A apunta a la cabeza de B y dispara un arma de fuego.
Si los elementos del tipo se dan completamente, estamos ante la consumación del
delito. En el caso: B muere a causa del disparo. Se consumó el homicidio. Si los
elementos del tipo no se presentan completamente, el delito queda en tentativa.
Supongamos que B no muere, quedando gravemente herido. Habría tentativa de
homicidio, pero se configuraría el delito de lesiones.
Resumimos, entonces, a este nivel que la realización del delito se lleva a cabo en
un proceso general que consta de dos etapas claramente diferenciadas: una
primera, donde hallamos la ideación, deliberación y decisión criminal (etapa
interna); y otra, que se presenta cuando el agente pone en obra la decisión
(Etapa externa): proveyéndose de los medios o instrumentos elegidos, con miras a
crear las condiciones para lograr la obtención del fin (actos preparatorios),
comienza la utilización concreta de los medios elegidos en la realización del plan
(actos de ejecución), y puede llegar a completar en su totalidad la acción descrita
en el tipo, con todos sus efectos, esta es, la obtención del fin típico planeado
mediante los medios utilizados por el autor (consumación), y con ello lograr el
objetivo que se había propuesto al cometer el delito, que se encuadra fuera de la
acción típica (agotamiento). A todo este proceso se la llama Iter Criminis (camino
del delito). De estas etapas sólo entran en el ámbito de lo punible las de ejecución
y consumación.

La imputabilidad en contraposición al principio de la legalidad


La Imputabilidad es la capacidad del individuo para comprender que su conducta
lesiona los intereses de sus semejantes y para adecuar su actuación a esa
comprensión.
La imputabilidad es el conjunto de condiciones subjetivas que debe reunir el
perpetrador de un delito, suponiendo en él la capacidad de conocer y comprender
dicha ilicitud para que sea factible colocar en sus manos las consecuencias de su
acto.
La inimputabilidad constituye el aspecto negativo de la imputabilidad.
La inimputabilidad es uno de los temas más difíciles y exquisitos en el ámbito de
las ciencias penales. La mayor parte de las legislaciones consideran que existen
cierto número de individuos que por su especial situación (trastorno mental,
enajenación mental, menores de edad), deben recibir un trato diferente por parte
de la ley al cometer un hecho legalmente descrito. A estos individuos se los
denomina "inimputables" y al fenómeno que los cobija "inimputabilidad".

Código Penal: De la aplicación de la Ley Penal


Artículo 1.- Nadie podrá ser castigado por un hecho que no estuviere
expresamente previsto como punible por la ley, ni con penas que ella no hubiere
establecido previamente.

Los hechos punibles se dividen en delitos y faltas.


Por contraposición al principio de la legalidad Tipificada en el Art. 1 del Código
Penal, tenemos a los inimputables que son personas consideradas como
incapaces de derecho penal, esto significa que no pueden ser sancionados por el
hecho de que realicen una conducta que la ley considera como delito.

Código Penal: Art. 62. No es punible el que ejecuta la acción hallándose dormido o
en estado de enfermedad mental suficiente para privarlo de la conciencia o de la
libertad de sus actos.

Sin embargo, cuando el demente hubiere ejecutado un hecho que equivalga en un


cuerdo a delito grave, el tribunal decretará la reclusión en uno de los hospitales o
establecimientos destinados a esta clase de enfermos, del cual no podrá salir sin
previa autorización del mismo tribunal. Si el delito no fuere grave o si no es el
establecimiento adecuado, será entregado a su familia, bajo fianza de custodia, a
menos que ella no quiera recibirlo.
Por regla general todas las personas tienen capacidad penal, es decir, pueden ser
castigadas por los delitos que cometan, pero existen excepciones a esta regla
como los menores de edad y quienes padecen una enajenación mental, pues se
considera que al momento de realizar la conducta tipificada como delito, el agente
no tenía la capacidad de comprender el carácter ilícito de su conducta.

En consecuencia de lo anterior, una persona no puede ser castigada por un hecho


previsto en la ley como delito sino era imputable al momento de cometerlo.
Para poder hacer un juicio de reproche sobre una persona que ha cometido una
acción antijurídica y típica, es necesario atribuírselo mediante el análisis de su
posibilidad de comprenderla. En esto se han detenido los teóricos para establecer
si el sujeto tiene libre albedrío y por lo tanto hay que distinguir entre imputables e
inimputables, o si, por el contrario, todos estamos determinados y somos en todo
caso socialmente responsables.

Este es el problema de la imputabilidad, la cual es innegable cuando se ha


esclarecido que hay factores de la conciencia y la inconsciencia que intervienen en
la comisión de un delito, lo cual genera la imputabilidad en contraposición al
principio de la legalidad.

La Punibilidad
Son ciertas condiciones, distintas del tipo legal, a cuya existencia está sometida la
aplicabilidad y la aplicación de la pena a la persona a la cual se le imputa, se le
atribuye, la perpetración de un delito determinado, en la cual se exige tal condición
objetiva de punibilidad.
Son todos los elementos del delito, porque es menester que concurran todos ellos
para que pueda y deba aplicarse a la persona que se le imputa la perpetración de
un delito, la pena previamente establecida en la Ley Penal. Para que pueda y
deba dictarse auto de detención contra una persona determinada, dicha aplicación
debe estar dentro de otro elemento del delito llamado tipicidad.
La punibilidad, es la cualidad de acarrear la aplicación de una sanción penal, si es
un elemento, si es una característica del delito.

La Acción
El comportamiento humano es la base de la Teoría del delito. Si no hay acción
humana no hay delito. El fenómeno delictual tiene que estar acompañado por una
acción humana. El delito se basa en la actividad humana por acción u omisión.
La acción es conducta omisiva o activa voluntaria, que consiste en un movimiento
de su organismo destinado a producir cierto cambio, o la posibilidad, en el exterior
del mundo (Teoría de la causalidad).
Es todo comportamiento humano que depende de la voluntad. El delito es acto
humano, cualquier mal que no tiene origen en la actividad humana no puede
reputarse como delito.
La posibilidad de cambio en la realidad se da en los delitos frustrados como
también en la tentativa. Si es involuntario (caso fortuito) u ocurre en el fuero
interno y no llega a manifestarse, la acción se excluye del campo delictivo.

Sujeto de la acción:
El sujeto de la acción es el ser humano, si no es un ser humano, no puede
considerar delito.

Ausencia de la acción:
El obrar no dependiente de la voluntad del hombre, no es "acción". Por tal razón
no hay delito cuando median.

Fuerza irresistible:
El peatón es impelido contra un escaparate y lo rompe. No es autor. No hay acción
voluntaria por parte de él. ¿Quién es responsable de pagar el escaparate? La
persona que empujo.

Acto Reflejo:
No es factible impedir movimientos reflejos que provienen del automatismo del
sistema nervioso. No hay acción voluntaria, sino por reflejo.

Estados de inconsciencia o Situaciones ajenas a lo patológico (sueño,


sonambulismo, hipnotismo):
Para ser admitidos como excluyentes de la acción requiere de un análisis y
estudios cuidadosos.

Impresión paralizante:
No hay posibilidad de actuar oportunamente y adecuadamente cuando el sujeto
está paralizado, aunque sea momentáneamente, por una intensa impresión física
(deslumbramiento, por ejemplo) o psíquica (como un acontecimiento imprevisto,
por ejemplo ver a la mujer de uno con otro en un estado de adulterio), pues los
mecanismos volitivos precisan de un tiempo para desplegar su eficacia.
La Culpabilidad
La culpabilidad es la reprochabilidad de la conducta de una persona imputable y
responsable, que pudiendo haberse conducido de una manera no lo hizo, por lo
cual el juez le declara merecedor de una pena. Es la situación en que se
encuentra una persona imputable y responsable.

Para que haya culpabilidad tiene que presentarse los siguientes presupuestos o
elementos de la culpabilidad:
a) Dolo o culpa
Estos elementos son también llamados formas de culpabilidad) La exigibilidad de
una conducta adecuada a la prohibición o imperatividad de la norma. Y por faltarle
alguno de estos presupuestos, o por existir las llamadas, Causas de Inculpabilidad
el autor no actúa culpablemente, en consecuencia está exento de responsabilidad
criminal.
b) Imputabilidad
La imputabilidad es la capacidad psíquica de una persona de comprender la
antijuridicidad de su conducta y de no adecuar la misma a esa comprensión.
La Imputabilidad es el estado de incapacidad para conocer el deber ordenado por
la norma y la ineptitud de actuar, por cuenta propia, con arreglo a su mandato.

El Dolo
Es la producción de un resultado típicamente antijurídico, con consciencia de que
se quebranta el deber, con conocimiento de las circunstancias del hecho y el curso
esencial de la relación de causalidad existente entre la manifestación humana y el
cambio del mundo exterior, y con voluntad de realizar la acción y con
representación del resultado que se quiere.
Causas de inculpabilidad:
Son aquellos que incluyen la culpabilidad, y por lo tanto el delito, y por
consecuencia la responsabilidad penal. Son las que impiden que se reproche a
una persona imputable, el acto típicamente antijurídico que ha realizado.
Los Elementos del Dolo
• Elemento volitivo. Tiene que actuar la voluntad. El individuo tiene que querer
hacer.
• Elemento Intelectual. El sujeto debe saber lo que hace y esperar un resultado.
Para que exista dolo tiene que haber estos dos elementos del dolo.
También existe ausencia de la acción cuando lo que lleva a cometer el delito es
una fuerza interior irresistible, por ejemplo el hambre extremo. Se roba un pan
para no morir de hambre.
Antijurícidad (Causas de Justificaciones)
La Antijuridicidad es un elemento del delito cuya presencia es necesaria para que
este sea relevante o trascendente en el plano legal. Es por ello que decimos que
una acción u omisión típica debe ser antijurídica.
Denominamos como antijurídica aquella conducta que es ilícita o contraria a
derecho y esa condición junto con la tipicidad nos permite determinar que estamos
ante una infracción penal dando paso a una pena o medida de seguridad en
consecuencia.

Causas de Justificación
Existen determinados hechos que se adecuan a un tipo penal, pero que ante el
cumplimiento de ciertas condiciones establecidas en la ley, no lo hace punible y en
consecuencia, no surge la responsabilidad penal.
Esta situación obedece, a que ese hecho a pesar de su apariencia delictiva, está
direccionado a tutelar el interés del agredido frente al interés del agresor en la
legítima defensa, y por lo tanto, se considera un interés de mayor valor, que no es
contrario a los fines objetivos que tutela el ordenamiento jurídico penal, tales como
los valores e intereses.

Se considera que para el obrar justificado es necesario tener conocimiento de las


circunstancias que dan fundamento a la justificación, esto es del llamado elemento
subjetivo de la justificación. En este marco se hace necesario destacar la
evolución de la doctrina científica en materia de la justificación. Se puede
mencionar dos corrientes, la del principio de interés preponderante y la de la
prevalencia del derecho frente al injusto.

En efecto dentro de la evolución dogmática del principio de la prevalencia del


derecho frente al injusto se ha cuestionado que la justificación tenga efectos
generales, por el contrario se afirma hoy que resulta imperativo distinguir la
justificación general, de la justificación penal propiamente dicha, consecuencia
está última del llamado principio de proporcionalidad, así conforme esta visión en
el derecho penal tendría que aceptarse como causa de supresión la ilicitud penal
de aquellos casos en los que aunque el hecho no resulta conforme al orden
jurídico, su antijuridicidad no reviste una gravedad proporcionada a la proyectada
para legitimar la utilización de los efectos jurídicos ajustados al derecho penal.
Aunque en opinión de Fernández Carrasquilla (1998) en este postulado no se es
claro el estado de necesidad ni en la obediencia a la orden del superior, más sin
embargo si explica satisfactoriamente la legítima defensa, el ejercicio del derecho
o el cumplimiento de un deber.
Causas de Justificación en el Derecho Penal Venezolano

A fin de conocer las causas de justificación que consagra el Código Penal


venezolano:
a) La Legítima defensa, prevista en el artículo 65 numeral 3º y en el artículo 425.
b) El estado de necesidad por colisión de bienes jurídicos y deberes pautada en
el artículo 65 numeral 4º y artículo 73.
c) Ejercicio de un derecho, oficio o cargo que se preceptúa conjuntamente con el
cumplimiento de un deber en los artículos 65 numeral 1º, 280 y 283.

Se reitera que las causas de justificación que excluyen la antijuricidad y por ende,
la responsabilidad criminal, por eliminar la contradicción al derecho acogidas por el
legislador venezolano, son iguales a las aceptadas por el resto de los
ordenamientos jurídicos de inspiración italiana, española o prusiana, así como por
la doctrina más reputada en la ciencia penal, donde igualmente hay coincidencia
en señalar que de todas, la legítima defensa es la institución de mayor importancia
y jerarquía doctrinal por ser la más estudiada.

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