Texto argumentativo sobre el trabajo como Derecho humano fundamental

JOHAN ESTIVEN LÓPEZ BERNAL

Servicio Nacional de Aprendizaje SENA

2374934: Contabilización de Operaciones Comerciales y Financieras

Instructor: Jhon Jairo Rojas Sanjuanelo

07de diciembre de 2021

El derecho al trabajo

El derecho al trabajo hace parte de los llamados derechos fundamentales que

precisamente por ser de este grupo lleva implícito otros derechos que son de tipo colectivo,

social, económico y cultural, todo ello porque se trata de un derecho de la persona y ésta a su vez

hace parte de unos contextos, inmersa en una cultura y a su vez en la sociedad.

De acuerdo a lo anterior el derecho al trabajo se constituye en base de otros derechos,

pues es la manera de dignificar la vida mediante la actividad realizada ya que con ella se gana el

sustento, además es también una manera de realización por el componente de libre elección que

si lo miramos a nivel más profundo pude ser respuesta a una opción vocacional; pero es aquí

donde vienen las contradicciones dadas entre la declaración universal de los derechos humanos,

la Constitución política de Colombia y la realidad del pueblo colombiano.

Si empezamos a enumerar el derecho al trabajo incluye: “derecho a un trabajo libremente

escogido y aceptado” son muchos los casos en que por falta de oportunidades no hay opción,

simplemente se convierte el trabajo en una actividad de sobrevivencia, en otras palabras, muchas

personas estás ejerciendo oficios u profesiones a los cuales no se sienten llamados, solo los

deben realizar para satisfacer las necesidades básicas: vivienda, alimentación, vestido…

Es posible que haya menguado la cuestión de esclavitud, sin embargo, un trabajo asumido

por necesidad termina siendo una clase es esclavitud ya que es un mayor desgaste tanto físico

como mental.

Derecho a la remuneración adecuada; frente a ello nos encontramos muchos elementos

que se tendrían que revisar: en nuestro país el trabajo de mayor esfuerzo y riesgo es el menos

remunerado, además de tener que laborar en jornadas extenuantes donde la posibilidad de estar
con la familia es mínima, el ingreso es un valor indignante, de manera directa hacemos

referencia a un salario mínimo el cual particularmente me parece una de las cuestiones más

injustas en Colombia, que si lo mirara desde la fe se le diría: “es de los pecados que claman al

cielo” y casi que no necesitaría una explicación pues para todos es conocido que con un salario

de esos la gente no vive sino que sobre vive, nada más observar ingresos versus gastos,

inmediatamente se evidencia el desequilibrio y por tanto el atentado directo contra la dignidad de

la persona y a su vez de la familia.

Sin dejar de lado la falta de reconocimiento de las capacidades intelectuales de la persona

porque en esta lista de los que recibe ese salario encontramos profesionales que reciben este tipo

de remuneración so pretexto de que hay muchos desempleados o que sencillamente no tienen

experiencia.

Periodos de descanso remunerado y pagado: la legislación parece que en muchos casos se

hiciera con intereses personales y no en favor de la comunidad; aquí es una invitación a observar

el contrato obra labor, obviamente no en todas las circunstancias, sino por ejemplo cuando se

utiliza esta figura para despedir empleados con facilidad o para no pagar de manera adecuada,

una muestra de ello las compañías internacionales que contratan a través de una temporal, allí se

acomoda esta formalidad para no reconocer días no laborados, y efectuar un pago por horas u

comisiones que al final es el trabajador es quien sale perdiendo.

Así las cosas, siendo el trabajo un derecho colectivo, social, cultural y económico como

se mencionó al principio son aspectos fundamentales en la vida de las personas, que tienen que

ver con el desarrollo de condiciones básicas de la dignidad humana como la posibilidad de tener

un nivel de vida adecuado; sin llegar al pesimismo sino apuntando a la realidad, en nuestro país

se convierten en un grito que exige de las administraciones a nivel nacional un actuar inmediato
para que se llegue a su cumplimiento pues deben pasar del discurso a la práctica real ya que en

este momento no hay garantías o se han disminuido se ha perdido la búsqueda por la dignidad

humana y se llega más fácil a la cosificación de los seres humanos donde los individuos resultan

ser números o máquinas de producción y no hombre y mujeres reconocidos dignamente en su

calidad de ser.