Universidad Nacional del Nordeste

Facultad de Medicina. Carrera de Medicina

Medicina, Hombre y Sociedad
Eje alimentación. Guía didáctica Nº1

Comisión 12 – Grupo Nº1

Apellido y nombre DNI

 Maldonado, Luciana
 Maldonado, Gonzalo Nahuel 44.952.587

 Maldonado, Cristian Ramón David 36.673.285

 Maldonado, Sheila 43.788.439

 Malgor, Paula María 43.931.933
 Malvicini, Rosario María 44.718.511
 Mamani, Luciana Ailén 44.684.428
 Manrique Cabrera, Lumila Denise 33.549.512
Consignas Nº 1 y 2 (link)
https://lucid.app/lucidchart/invitations/accept/b827f1e6-bcee-4963-ab28-80cb30f87050
Consigna Nº3
La evolución humana ha tenido mucha relación con el tipo de alimentación que llevaron nuestros
antepasados y su estilo de vida. Los primeros cambios físicos que se dieron en los homínidos
estuvieron íntimamente ligados a los alimentos que podían obtener para subsistir. Hoy en día se
sabe que la estructura genómica fue configurada en el período paleolítico que comienza con el
Homo Habilis y la primera manufactura de piedra. Es por ello, muy importante, conocer a la dieta
paleolítica que estableció el genoma hasta el día de hoy y comprender el surgimiento de la
discordancia evolutiva.
En la historia de Mara, se relata como Sofía, su hermana, tras charlar con ella sobre su aumento
de peso durante el aislamiento preventivo, le recomienda realizar una “Dieta Paleo”. Tras la
búsqueda en diversos sitios web, Mara se enriquece de información acerca de esta dieta, bien
denominada como “Paleolítica”, constituida en un 35% de carne proveniente de la cacería y
carroñería (alce, bisonte mamut) y el resto por frutas, vegetales de hojas, tubérculos, raíces,
semillas y nueces. Resulta ser que este tipo de alimentación proviene de hace millones de años, en
las poblaciones de cazadores-recolectores. Es importante destacar que ese consumo específico de
alimentos configuró el genoma del hombre actual, por lo que las modificaciones que devinieron en
las etapas siguientes, como el surgimiento de la agricultura y ganadería, y más recientemente, la
revolución industrial, produjeron una cierta “discordancia evolutiva” en la alimentación. Esta
discordancia, según algunos expertos, podría ser la causa de varias enfermedades no transmisibles
como la enfermedad coronaria, hipertensión arterial, diabetes, entre otras.
Luego de leer el material brindado por esta clase, y de enriquecer nuestros conocimientos acerca
del tema, podemos afirmar que la recomendación de Sofía a Mara sobre realizar la dieta paleolítica
es conveniente. La dieta actual difiere sustancialmente de la mantenida por nuestros antepasados,
los hombres del paleolítico. Considerando que la genética humana se conformó en aquella etapa
de la prehistoria, Mara se beneficiaría al mantener ese tipo de alimentación, además de realizar
actividad física diariamente. La dieta paleolítica solo obtenía los nutrientes de 2 grupos de alimentos
(carnes y pescado, frutas y vegetales) mientras que la actual ha incorporado también a lo largo del
tiempo los lácteos, pan y cereales trayendo como consecuencia un elevado consumo de grasas y
sodio.
Esta interesante clase nos permitió comprender el origen de las enfermedades crónicas no
transmisibles ligadas a la mala alimentación y sedentarismo, frecuentes en la sociedad actual.
También entendimos paso a paso la evolución del hombre y el porqué de los cambios físicos
relacionados a la cambiante alimentación. Es muy importante aplicar estos conocimientos a la vida
cotidiana y difundirlos a nuestro círculo social cercano, promoviendo pequeños cambios en el hábito
alimenticio, reducir el consumo de grasas no esenciales, y realizar actividad física diariamente.