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Etapas de producción de corto plazo.

Economía

Autor: Redactores mailxmail
Curso:
|4 alumnos|Fecha publicación: 10/09/2012
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Las etapas de producción de corto plazo, guardan relación con el


rendimiento de la producción y son tres: la etapa de rendimiento creciente (ERC),
la etapa de rendimiento decreciente (ERD) y la etapa de rendimiento negativo
(ERN).

En cada una de estas etapas se realiza un análisis comparativo que nos


indica el estado del producto físico total, medio y marginal con respecto al trabajo.
La determinación de estos valores la obtenemos reemplazando en las fórmulas y
graficando los resultados obtenidos.

Las etapas de producción para el corto plazo son las siguientes:

 Etapa de rendimiento creciente (ERC).


 Etapa de rendimiento decreciente (ERD).
 Etapa de rendimiento negativo (ERN).

- Etapa de rendimiento creciente. Esta etapa se caracteriza por un


incremento del producto físico total en porcentaje mayor a incremento de trabajo.
La causa del incremento del producto en porcentaje mayor a cambio del trabajo se
debe a la mayor productividad a razón de la división de tareas, pues al dividir
tareas el personal se especializa en la actividad de producción, que en el grafico
esta corresponde al tramo convexo y al tramo en que la curva es ascendente a
tres trabajadores.

- Etapa de rendimiento decreciente. Esta etapa corresponde a un


incremento del producto en porcentaje menor a incremento de trabajadores. La
causa del incremento en porcentaje menor es la disminución de la producción, que
se refleja en la curva PFMi de tres a seis trabajadores.
- Etapa de rendimiento negativo. Esta etapa se caracteriza por la
disminución de la producción, como se observa en el CP7, disminuye la
producción porque se ha contratado personal innecesario, que se puede convertir
en un parasito para la empresa ya que no tiene mucho que hacer y distrae al
personal con charla u otros.

Producción a corto plazo


El corto plazo se considera el período de tiempo durante el cual los costes
fijos todavía son fijos, lo que significa que si tienes una fábrica, tienes que hacer lo
posible con ella, porque no se puede ni vender, ni agrandar, ni alquilar: no se
puede modificar. El capital también se considera fijo, lo que significa que, en el
corto plazo, solo se pueden modificar los costes variables, siendo la mano de obra
el coste variable más común.

Si nos fijamos en los gráficos adyacentes,


vemos cómo la productividad marginal (en azul claro, gráfico inferior) disminuye
con cada unidad adicional de trabajo, a raíz de la ley de los rendimientos
decrecientes. Los dos diagramas nos permiten distinguir entre tres fases, que se
caracterizan por el punto de inflexión que marca la ley de los rendimientos
decrecientes. En el primer diagrama, vemos cómo la producción aumenta
exponencialmente con cada unidad adicional de trabajo, hasta un punto en el que
las unidades adicionales comienzan a ofrecer cada vez menos a cambio. En el
segundo diagrama, vemos también la productividad media, para definir aún más
en detalle a qué nivel hay que producir.

En la fase I, la productividad media y marginal aumentan con cada unidad


adicional, que en el primer diagrama corresponde al tramo hasta el punto de
inflexión. La fase I termina en el margen extensivo (u óptimo técnico), siendo este
la línea que divide las fases I y II. Fase II es donde idealmente deberíamos estar.
La productividad media disminuye con cada unidad adicional, pero la productividad
marginal sigue siendo positiva. La línea que separa las fases II y III se llama el
margen intensivo (o máximo técnico), a partir del cual habrá demasiados factores
de producción variables (trabajo) para el nivel de factor de producción fijo (capital).
Cuando la productividad marginal se vuelve negativa, entramos en la fase III, y
deberíamos considerar reducir la mano de obra. También podemos ver que, en el
nivel óptimo, la productividad media y marginal coinciden.

Isocoste
En microeconomía una recta isocoste o isocosto representa todas las
combinaciones de factores productivos que suponen un mismo coste.12 Aunque
similar a la Recta de balance en la teoría del consumidor, la utilización de la recta
isocoste se emplea en la minimización de costos en la producción, en lugar de la
maximización de la utilidad. Para los dos factores productivos trabajo y capital, con
costes unitarios fijos de los insumos, la ecuación de la recta isocoste es:
donde w representa el salario del trabajo, r representa la tasa de utilización del
capital, K es la cantidad de capital utilizado, L la cantidad de mano de obra
utilizada, y C es el costo total de la adquisición de las cantidades de los dos
factores.
El valor absoluto de la pendiente de la recta isocoste, con el capital en el eje
de ordenadas y el trabajo en el eje de abcisas, es igual a la proporción de los
costos unitarios de la mano de obra y el capital. La pendiente es:
El conjunto de rectas isocostes en combinación con el mapa de
curvas isocuantas determinan el punto óptimo de producción en cualquier
nivel dado de producción. En concreto, el punto de tangencia entre
cualquier isocuanta y una línea isocoste da la combinación de coste más
bajo de factores que puedan producir el nivel de producción asociada a esa
isocuanta. De manera equivalente, proporciona el máximo nivel de
producción que puede realizarse por un determinado costo total. La línea
que une los puntos de tangencia de las isocuantas e isocostes (con precios
de factores constantes) se llama la senda de expansión de la producción.3

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