PARA DEBATIR: EJERCICIO 3

La paridad y su rol en nuestra democracia

Uno de los aspectos más interesantes y novedosos de nuestro proceso constituyente, es

que la Convención Constitucional que cree la nueva Constitución será conformada
paritariamente entre hombres y mujeres. Este cambio en nuestra visión de la democracia
impulsada por el movimiento feminista, dio cuenta de la necesidad de reconocer a las
mujeres como sujetas políticas en igual condición que los hombres, dada la escasa
participación femenina en los espacios de poder institucionales.

Las candidaturas tuvieron que ser presentadas en listas paritarias, encabezadas por una
mujer, e incluyendo un orden alternado entre un hombre y una mujer, lo que ha sido llamado
como “mecanismo cebra”. En los distritos pares, ningún sexo puede superar al otro, y en los
impares, uno de los sexos sólo puede exceder en un cupo al otro. O sea, si en un distrito se
escogen 7 convencionales, podrían escogerse máximo 4 hombres o mujeres, para que los
otros 3 cupos sean ocupados por personas del otro sexo.

La corrección anterior se realiza al finalizar el conteo de votos. Por ejemplo, si en un distrito

los hombres están sobrerrepresentados, se identifica al hombre menos votado en ese
distrito que resultaría electo, y se le reemplaza por la mujer más votada de ese partido o
lista. Así las cosas, en los distritos donde la paridad se dé naturalmente con el resultado
electoral, no habrá corrección.

Con la consagración de la paridad en las elecciones de constituyentes, se asegura que

ninguno de los dos sexos exceda su representación en un 55%, lo que da un piso mínimo
de 45% del sexo subrepresentado. Esta es una innovación sumamente importante en
nuestra historia institucional, si consideramos que las mujeres representan el 22,7% del total
de integrantes de la Cámara Baja, y un 23,3% del Senado.
 ¿Qué opinamos sobre la paridad?

A continuación, te invitamos a ser parte del debate entre tres amigas (Cristina, Pamela y
Rocío). Posteriormente, puedes regresar al ejercicio y comentar en la casilla
correspondiente tus opiniones respecto a este debate. Tu respuesta será comentada por
un/a participante del curso y podrás, igualmente, responder a alguien.

Cristina: ¿Qué opinan sobre la paridad, chiquillas?, todavía me quedan algunas dudas
sobre cómo cambia nuestra idea de democracia eso de corregir el resultado final para que
representen de forma igualitaria hombres y mujeres. ¿No deberían ganar las personas que
fueron más votadas, no más?, ¿Por qué el sexo de quienes nos representan es tan
importante?, yo muchas veces he votado por hombres, pero ahora no sé…

Pamela: Yo creo Cristi, que la paridad es un avance, porque sino en la práctica, las mujeres
simplemente no existimos en los espacios políticos, donde se toman las decisiones que
también nos afectan. Imagínate que hubo una época en que ni siquiera podíamos votar…
Sin mecanismos de paridad, sólo unas pocas mujeres logran ganar elecciones.

Rocío: Sí, eso es verdad. Sin ir más lejos, en Chile hemos tenido una sola presidenta mujer
en toda la historia. Pero… entiendo tu argumento, Cristi. O sea, igual que haya mujeres no
necesariamente significa que esas mujeres defiendan nuestros derechos. Yo igual estoy en
desacuerdo con muchas mujeres políticas, y también algunas veces he preferido votar por
hombres, y lo seguiré haciendo si siento que me representan más que las mujeres.

Cristina: Si poh... ese punto es súper importante. Igual, pensándolo bien en relación con lo
que decía la Pame, si queremos que la democracia sea lo más representativa posible de
nuestra sociedad, ¿es suficiente la paridad?, o debieran haber otros mecanismos para
asegurar la representación según pertenencia a un pueblo indígena, una determinada clase
social, ser migrante, etc.

Pamela: Justamente ese es uno de los puntos más interesantes de discusión que ha abierto
el proceso constituyente, ya que además de paridad, existe un mecanismo de escaños
reservados para pueblos indígenas, y debe haber un mínimo de candidaturas de personas
con discapacidad en las listas de los pactos electorales.

Rocío: Mira, no tenía idea de eso de la inclusión de personas con discapacidad en las listas.
Siento que hay muchas realidades que se siguen desconociendo en nuestra democracia
actual… la mayoría de los políticos no solo son hombres, sino que vienen de colegios y
universidades de élite. ¿Qué tanta importancia creen que tiene eso en la toma de
decisiones políticas?

Pamela: ¿La identidad de cada persona, dices tú? Pucha, no sé… creo que es un avance
mínimo reconocer las diferentes identidades que confluimos en este país, y que todas y
todos puedan participar de la toma de decisiones. Ojalá que estas reglas como la paridad,
los escaños reservados, y mejores mecanismos de inclusión de discapacidad, se
reconozcan a nivel constitucional, para que en ningún espacio de poder hayan puros
hombres de la élite.
Rocío: Sí, bueno... Quizás también haya que pensar en otros mecanismos más allá de la
democracia representativa, es decir, que las decisiones se tomen de forma más directa,
porque sino igual es difícil representar a toda la diversidad de personas que somos como
sociedad.

Cristina: Esa es mi duda justamente, ¿igual estamos frente a un cambio radical en la forma
en que entendíamos la democracia como regla de la mayoría o no?, ¿o es que nunca en
nuestra democracia las decisiones las han tomado las mayorías?

Pamela: Da para mucho el tema… Imagínate que recién en 1998 se modificó la

Constitución, estableciendo que las mujeres y los hombres somos iguales ante la ley. Antes
las mujeres ni siquiera éramos mencionadas en las Constituciones.

Te invitamos a participar del ejercicio de debate respondiendo a las siguientes preguntas:

¿Cómo piensas la democracia representativa para el Chile del futuro?

¿Estás de acuerdo con que la paridad sea reconocida como un principio en todas las
instituciones del Estado?

¿Crees que se necesitan otros mecanismos correctivos para fortalecer nuestra

democracia?

Retorna al ejercicio de debate aquí