EL PASTOR Y LA PERDIZ

Autor: Zafira Bejarano

Un pastorcito llevó a pastar a todas sus al campo, tocaba alegremente su quena
cuando escuchó que alguien gritaba: AUXILIO, AUXILIO.
El pastor busco en todas direcciones y a pocos metros de él vio una perdiz que estaba
enredada en la hierba y no podía soltarse.
SE acercó y la perdiz le dijo: “Ayúdame por favor, mi patita se enredó en la hierva y no
puedo soltarme, si me ayudas te regalaré unos huevitos mios para que te los lleves a tu
casa y te los comas”.
El pastorcito, cortó la hierva y liberó a la perdiz, esta le dijo: “muchas gracias pastorcito
ahora debo cumplir mi promesa”.
La perdiz guió al pastorcito hasta su nido y le regalo 4 huevitos, el niño lo recibió
diciendo: Muchas gracias señora perdiz, seguro que lo disfrutaré.