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LA ECONOMIA DE LA EMPRESA COMO CIENCIA y consideraciones en torno a la obra de Erich Gutenberg ‘Grundlagen der Betriebswirtschaftslehre”’ (*) Por SANTIAGO GARCIA ECHEVARRIA, Dr. en Ciencias Econémicas por Universidades de Colonia y Madrid. 1 INTRODUCCION Y PLANTEAMIENTO. El 22 de mayo de 1957 pronunciaba Erich Gutenberg su discurso conmemorativo del aniversario de la fundacién de la Universidad de Colonia con el titulo “La Economfa de la Empresa como Ciencia” (1), esto es, seis afios después de la aparicién del primer tomo de su obra “Die Grundlagen der Betriebswirtschaftslehre”, Esta obra originé la “Methodenstreit” de la Economia de la Empresa provocando una am- plia y dura discusién (2), discusién que se ha extendido durante va- tios afios en torno a la problemética del método, sistemética y proble- mas singulares de la Economfa de la Empresa. Ninguna otra obra de * Al mismo tiempo comentario bibliogrifico, en la segunda part: de este articulo, de la obra de Erich Gutenberg, Grundlagen der Betriebswirtschajtslebre («Enzykloptdier der Rechts und Staatswissenschaft», ed. por W. Kunzel, P. Lerche W. Mieth, W. Vogt) Springer Verlag, Berlin, Heidelberg, New York: Tomo I: Die Produktion, 17 edicién 1970, 505 p. (1.* edicién 1951). Tomo II: Der Absaiz, 12 edicién 1970, 507 p. (1.* edicién 1954). Tomo III: Die Finanzen, 4 edicién 1970, 424 p. (1.* edicién 1968). Existe una traduccién al castellano de los. to- mos I y Il, Fandamentos de la Economia de la Empresa, El Ateneo, Buenos Aires, Lima, Rfo de Janeiro, Caracas, Montevideo, México, Barcelona: ‘Tomo I: La Produccién, 1961 (traduccién de la 3.* edicién alemana), Tomo II: La Venta, 1960 (Traduccién de la 3.* edicién alemana). Actualments se esté preparando la edicién del Tomo III: La Financiacién en la empresa, que se publica en la «Colec- cién de Economfa de Ia Empresa», de ICE, Madrid, 1972. (1) Gutenberg, E.: Betriebswirtschaftslebre als Wissenschaft. Scherpe-Ver- lag, Krefeld 1957, (2) Gutenberg, E.: «Zum Methodenstreit» en Z{bF 1953, pp. 327 38. asi Gutenberg comienza en este artfculo su contestacién a los ataques de Mellerowice en los siguientes términos: «Todo aquel que se encuentre dentro de la tradicién universitaria alemana comprenderé el que no rechace en el mismo tono de agresivi- dad personal que utiliza Mellerowicz en su discusién conmigo» (Z/B. 1952, pp. 145 ss.). 782 SANTIAGO GARCIA ECHEVARRIA la disciplina ha tenido la incidencia de Ja aportacién de Gutenberg ep la moderna Economfa de la Empresa. La aparicién en 1951 de su ptimer tomo “Die Produktion” y en 1954 “Der Absatz”, junto a la amplia toma de posiciones adoptadas por todos los componentes de Ia disciplina (3), labor completada con la reciente aportacién de su ter- cer tomo, “Die Finanzen”, significa la consolidacién de la moderna Economia de la Empresa como disciplina cientifica: “Desde Schma- lenbach apenas puede encontrarse ningtin otto autor que haya influido de forma tan intensiva sobre el desarrollo de la Economia de la Em- presa y haya promovido nuevos planteamientos y métodos como Gu- tenberg” (4). El desarrollo de Jos tiltimos veinte afios confirma esta aportacién maestra de Erich Gutenberg cuya influencia, no sélo en la actual actividad investigadora y docente, sino en la de los futuros afios, serd decisiva. Por todo ello consideramos como una oportunidad magnifica que nos brinda la publicacién del tercer tomo, y wiltimo de su planteamien- to de la disciplina, para analizar a fondo la base cientifica de la disci- plina de la Economfa de la Empresa y situar la obra de Gutenberg den- tro de la moderna configuracién. Sobre la configuracién en nuestro pafs de estas ensefianzas y la repentina necesidad despertada con la més reciente evolucién espaiiola en los afios sesenta plantea y planteard, en més de una ocasidn, setios problemas y discusiones, de mayor o menor trascendencia para la disciplina y su ensefianza, por lo que se intenta con esta aportacién contribuir a aclarar posiciones metodolégicas (5). Vamos a plantear en un primer plano un estudio metodoldgico de Ja disciplina para pasar a continuacién a analizar la aportacién de Gutenberg. Consideramos que es en este planteamiento donde se pod (3). Ver a este respecto los comentarios bibliogréficos y aportaciones a la «Methodenstreit» de la Economfa de la Empresa de Schwantag, Mellerowicz, K. Hax, Fischer, Loffelholz, Waffenschmidt, Schiifer, Hartmann y Gutenberg apa- recidas en el transcurso de los afios 1952, 1953 y 1955 en el Zeitschrift fir Be- tebawirtschalt (ZB) y el Zeitschrift fiir bandelswissenschaftliche Forschung (ZfbF). (4) Riebel, P.: «Eine betriebswirtschaftliche Theorie der Produktion», en Finanzarchiv, N. F., afio 26, Cuaderno 1. (5)_ Garefa Echevarrfa, S.: «Die Bettiebswirtschaftslehre in Spanien. Entwi- cklung, Problematik und Prespektiven in Forschung und Tehre», en Wirtschaft und Betricbswirtschaftslebre in Griechenland und Deutschland, editado por Erich Gutenberg, in Memoriam Panagiotis Stratoudakis, Gabler Verlag, Wiesbaden 1971, pp. 111 ss, LA ECONOMIA DE LA EMPRESA COMO CIENCIA 783 contemplar con la amplitud y claridad necesaria: a) la evolucién, ac- tual configuracién y tendencias de Ja fundamentacién cientifica de la disciplina y b) Ja significante aportacién de Erich Gutenberg para tal desarrollo. PRIMERA PARTE SOBRE LOS ESTUDIOS METODOLOGICOS EN LA ECONOMIA DE LA EMPRESA Il ASPECTOS GENERALES La disciplina de la Economfa de la Empresa se encuentra desde hace dos décadas en un proceso de transformacién y de nuevas orien- taciones, lo que se manifiesta muy especialmente en la direccién de la investigacién y en sus métodos. La magnitud de este desarrollo pue- de, sin duda, compararse hoy a la evolucién en algunas disciplinas en las ciencias naturales (6), La Economia de la Empresa no ha perma- necido al margen en cuanto a la recepcién de los resultados de Ja mo- derna teorfa de las Ciencias, lo que se refleja en 1a metodologfa de la investigacién, Ha sido precisamente el elevado grado de abstraccién “logrado en el planteamiento tedrico”, como afirma Wittmann (7), lo que ha permitido un tratamiento més completo y homogéneo del contenido de la disciplina, pudiendo actuar de forma “més clara y sin compromisos de lo que lo habfa hecho hasta ahora” (8). El “dilema” planteado a veces entre los representantes de la praxis y los represen- tantes de 1a ciencia, en base de Ja laguna existente en varios campos entre teorfa y practica, no es en verdad un dilema sino todo un pro- (6). Heinen, H.: Betriebswirtschfislebre heute, Gabler, Wiesbaden 1967, pagina 3. (7) Witmann, W.: «Entwicktungsweg und Gegenwartsauftrag der Be- tricbswittschaftslehre», en Zeitschrift fiir bandelswissenschaftliche Forschung, aio 15 (1963) nam. 1, p. 5. (8) Ib. 284 SANTIAGO GARCIA ECHEVARRIA gtama complementario de investigacién. Asf afirma tajantemente Gu- tenberg a este respecto: “Si la Economfa de la Empresa debe tener consistencia como disciplina cientifica, se deben dar entonces en el futuro dos condiciones: en primer lugar, la condicién de que las cons- tantes fuerzas cambiantes del acontecer en la practica de la empresa y del mercado, impriman impulsos en el esfuerzo cientifico de la dis- ciplina de Ja Economia de la Empresa, esto es, necesidades de Ia pri que llevan a una reflexién cientffica; en segundo lugar, la condicién de que la disciplina disponga de aquella espontaneidad que nace més en el pensamiento que en los hechos y cuyos resultados deben satis- facer, en un primer término, més a la Iégica que a las necesidades de la préctica, De ambas fuentes proceden las fuerzas... que imprimen a la disciplina su direccién y su carécter cientifico” (9). De donde de- ducimos con claridad meridiana la base o fundamento del proceder cientifico de la disciplina, ya que solamente en esta base se asegurard el futuro cientffico de la Economia de la Empresa. is En 1957 afirmaba Moxter (10) que, en el campo metodolégico “Ja situacién de Ja disciplina de la Economfa de la Empresa (es) extra- ordinariamente insatisfactoria”. En los ultimos quince afios, sin em- bargo, ha tenido lugar una amplia actividad investigadora en totno a la problemitica metodolégica de la disciplina. Y ello no sélo por lo que concierne al andlisis metodolégico de las aportaciones de los grandes maestros de la disciplina, sino que muy especialmente por lo que se refiers al andlisis de la problemética de la Economfa de la Empresa a la luz de los resultados de la moderna teorfa de las ciencias, de la filosofia, de la teorfa del conocimiento y de la légica, sin dejar a un lado los recientes andlisis del lenguaje. La discusién en torno a los aspectos metodolégicos en los tiltimos afios se ha revivido. Si bien con Schmalenbach se inicia ya un nuevo proceso de aper- tura de la Economfa de la Empresa como disciplina cient{fica, surgien- do fundamentalmente el problema de la independizacién cientffica de Ja disciplina de la praxis, desarrollando su terminologfa, concepto y (9) Gutenberg, E.: «(ber cinige Fragen der neueten Betriebswirtschafts- Iebre», en Zeitschrift fiir Betriebswirtschaft, afio 36 (1966), mim. 1, p. 17. (10) Moxter, A.:. Methodologische Grundfragen der Betriebswirtschaftslebre, Westdeutscher Verlag, Kéln 1957, p. 3, pie de pégina mim, 12. LA ECONOMIA DE LA EMPRESA COMO CIENCIA 785 métodos, perfodo que se puede sefialar como el jalén de atranque de Ja moderna Economia de la Empresa, esto es, con el final de la segun- da década del siglo actual (11), es, sin embargo, en los albores de los afios cincuenta cuando Iega a una nueva formalizacién cientifica, La “Methodenstreit” de la Economia de la Empresa se produce en los primeros afios de la década de los cincuenta entre Gutenberg y Mellerowicz, cuya dureza no desdefia en nada a la Methodenstreit “vieja” (Schmoller-Menger), y “nueva” (Sombart-Max Weber), pro- vocando la configuracién de grupos y numerosas tomas de posicién. Su efecto positivo no se empieza a recoger hasta finales de los afios cincuenta y, sobre todo, durante toda la década de los sesenta. La preocupacién por la problemética metodolégica salta a un primer pla- no, con su fuerza creadora para la disciplina. Como afirma Akerman: “La historia de las doctrinas econémicas revela que los periodos en que se demostré interés general por el pro- blema del método y por la epistemologia fueron periodos de actividad y de rapido desarrollo de la teorfa, mientras que los periodos en que los tedricos trabajamos dentro del marco tradicional del anélisis con- ceptual se revelan como periodos de estancamiento” (12). La filosofia tradicional no aporté ningin resultado satisfactorio para los estudios metodolégicos de la Economia de la Empresa. El desarrollo de la filosoffa tradicional en torno a sus propios problemas contribuyé muy poco a considerar las necesidades de cada una de las disciplinas singulares. El desarrollo metodolégico de las ciencias exac- tas constituye una prueba evidente del resultado positivo de investigar sus ptopios fundamentos. Y de aqui surgen nuevos impulsos también para otras disciplinas. La necesidad de justificar cada vez en mayor medida las investigaciones metodoldgicas, sobre todo en aquellos sec- tores del saber con una inmediata incidencia sobre la esfera de la ac- tuacién, son una consecuencia de la aceptacién de valores de medida Ptagméticos pata enjuiciar un procedimiento, En el campo de las Ciencias Sociales y Econémicas, la amplia consideracién prioritaria de Ja investigacién positiva y el insatisfacto- (11) Gutenberg, E.: Uber einige Fragen..., ob. cit., p. 1. (22) Akerman, J.: «Realismo de la teorfa econémica: cuatro problemas Metodolégicos», en La Economia en 1961, editado por P. Mayor, Aguilar, Ma- drid 1962, pp. 10. 186 SANTIAGO GARCIA ECHEVARRIA tio resultado de dos Methodenstreits en cincuenta afios (13) ha llevado durante décadas a que la investigacién bdsica entrase mds en la defen- siva. Todo lo cual ha originado que en las ciencias sociales el estado de la investigacién basica ha sido muy insatisfactorio desde el punto de vista filoséfico. Por lo general, todos los debates se han tealizado en un plano caracterizado esencialmente por un cierto dogmatismo en el punto de partida de Ja teoria del conocimiento y, adem4s, por un tradicionalismo ampliamente extendido. Ambos son, siguiendo a Ka- de (14), los mayores obstéculos que se han interpuesto hasta principi de los afios sesenta, e incluso atin hoy dia, al desarrollo de una funda- mentacién Iégica, amplia y completa del pensamiento matematico. Esta situacién ha afectado a la Economfa de la Empresa, dominando sélo en los wltimos quince afios los métodos formal-deductivos, y ello no sélo por lo que afecta a los métodos de investigacién matemético- deductivos, sino también en el tratamiento de Jos problemas institucio- nales-juridicos, ya que se deduce de determinadas normas juridicas y premisas econémicas (15). Sin duda, como sefiala Léffelholz, “...muchos de los metodolo- gistas de la Economia de la Empresa hubieran legado a otros resulta- dos si hubieran estado més compenetrados con los problemas filosé- ficos” (16). La preocupacién metodolégica en la disciplina durante Jos iltimos afios ha planteado nuevos problemas y nuevas orientacio- nes. No se trata hoy dia sdlo de definir e investigar la fundamentacién filosdfica de 1a disciplina, sino de considerar ademés si la Economia de la Empresa puede establecer, ella misma, normas para un juicio “econémico”, esto es, la direccién ampliamente extendida del “econo- mismo”, siendo Lisowskys uno de sus principales representantes. Fren- te a este planteamiento, y siempre en la biisqueda de medidas valora- tivas, y a la vista de la incapacidad de la filosoffa de la Economia de la Empresa de desarrollar axiomas practicos cientificamente validos, se (13) Kade, G.: Die logischen Grundlagen der mathematischen Wirtschafts- theorie als Methodenproblem der theoretischen Okonomik, Humblot, Berlin 1958, p, 11. (14) Ib. (15) Albach, H.: Stand und Aufgaben der Betriebswirtschaftslehre heute, Zeistschrift ftir betriebswirlschafiliche Forschung, aiio 19 (1967), nim. 7-8, p. 449. (16) Laffelholz, J.:

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