INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL

ESCUELA SUPERIOR DE TURISMO

Sección de Estudios de Posgrado e Investigación

Administración estratégica de las organizaciones

El arte de la guerra

Amy Monserrat Ramírez Medina

 Ser cauteloso, inteligente y estratega son herramientas que se pueden distinguir en la
lectura, si en términos generales la lectura se basa en enfrentamientos de batalla, se puede
trasladar a diversos temas en este caso a lo largo de la lectura, pude percibir la
diferenciación que podrá hacer posible las victorias.

Los factores fundamentales son, la doctrina, el tiempo, el terreno, el mando y la

disciplina.

La doctrina nos ayudara a tener seguidores fieles dispuestos a seguir el ideal con
firmeza y determinación sin escusas ni pretextos.

El tiempo, las inclemencias por las que se pasan, las condiciones, en algunos
momentos serán favorables en otros desfavorables

El terreno nos implica conocer el ambiente en el que nos podemos mover, de

acuerdo con las características que se encuentres es necesario determinar si es un territorio
fácil o difícil.

El mando haciendo referencia a los pilares que darán la guía para seguir la misión
acompañados de valentía, sabiduría, determinación.

En cuanto a la disciplina, es la organización de las integrantes, también la ejecución

de lo planeado y los actores a los cuales se designan para llevar a cabo las acciones

Como dice la lectura quien sigue los fundamentales tendrá la victoria y quien no,
vera la derrota inminente, de allí se desprenden varios aspectos como lo es la planeación de
las acciones, la claridad para formular estrategias y la ejecución bien organizada,
designando a los involucrados las funciones a realizar, si bien esto es referente al líder es
por la cabeza donde parte la planeación, tener claro el fin que se quiere lograr para poder
avanzar y cumplir con la meta.

Es de vital importancia el diseño de las estrategias, desde imponer la imagen que se

quiere de uno, firmeza, audacia, timidez son algunas de las perspectivas que se pueden
generar para la percepción con el adversario, logrando desde allí la perspectiva para sí
mismo, actuar con inteligencia y no soberbia para poder cumplir el objetivo.
 Mantener una escucha activa para descubrir la estrategia del adversario y poder
predecir los movimientos de ellos, nos ayudara a actuar de manera precoz ante las posibles
acciones, enfrentando diversos escenarios en los que se puedan presentar, con el propósito
de debilitarlos y mantener la energía elevada de los propios y debilitar la energía de los
externos, esto es otra táctica, hacer que actúen primero para que se debiliten y en base a
ello, actuar con prontitud.

Aun cuando el adversario puede significar un enemigo también se puede convertir

en un aliado, por ello también es indispensable considerar la buena actitud que se tenga con
ellos, pues el ejercito contrincante también tiene elementos que se pueden ocupar como
recurso propio, para esto sería una segunda doctrina, poder hacer que los integrantes del
contrario actúen contra él será una doble ganancia, habremos ganado mas elementos de los
que se pueden perder.

Medir la fuerza del adversario y descubrir su talón de Aquiles, nos hará ganar la
batalla con menos esfuerzo, deshaciendo los planes del enemigo, dejando así sin acciones
que realizar, al ver derrumbado el plan del adversario no le quedará más que rendirse y con
ello ganar la victoria esperada por el estratega.

El principio de lo lleno y lo vacío parte de estrategia de debilitar al adversario y

fortalecer al propio, encontrando en ello una manera más de ocupar como trampolín los
recursos de los otros para hacer vales las ganancias propias.

La formación de un buen ejército y el estímulo condicionado para algunos,

considero es una estrategia que puede generar un entusiasmo implícito al ver que los
alguien más resulta con beneficios extras hará la ilusión de poder conseguirlo para todos,
forzando así a los de demás integrantes a comprometerse y arrojarse enteramente por los
ideales adoctrinados.

La firmeza con la que se forja un ejército dará mejores resultados, pero de igual
manera el líder debe de ser el pionero y brindar seguridad para que se le asigna a las
instrucciones que se den, siendo de mayor importancia que el complimiento de los
integrantes sea eficiente, evitando a toda costa tener un ejército inútil.