Asociación Española de Psicología Sanitaria AEPSIS

7. Seguimiento

A partir de aquí, si todo ha ido bien, el paciente quizá sólo tenga que volver a consulta
para sus sesiones de seguimiento. Tú, como terapeuta, tienes que saber cómo le está
yendo al paciente, si ha sufrido recaídas o si se ve preparado para afrontar la vida de
una manera más positiva y realista, o no.

Estas sesiones son importantes. Debemos hacer un seguimiento de nuestros pacientes

para poder juzgar si están recuperados realmente o si aún necesitan continuar con la
terapia.

Si la depresión continúa, es recomendable una sesión terapéutica. Se puede realizar

por teléfono, pero lo deseable siempre es una entrevista en persona. Aunque los
pacientes recaigan después del tratamiento, su rapidez para actuar es mucho más
inmediata que antes. Por lo tanto, la recaída puede ser útil en el sentido de que da al
paciente la oportunidad de llevar a la práctica las distintas estrategias que ha
aprendido contigo en la consulta.

De todas formas es bastante seguro que, si ha llevado a cabo todas las instrucciones
que le has dado como terapeuta, el paciente pueda llevar a cabo una vida normal sin
problemas y que, si en algún momento siente que vuelve a hundirse en las aguas de la
depresión, haya aprendido incluso a ser su propio psicólogo y su propio bote
salvavidas, sin la ayuda de nadie más, sólo de sí mismo.

Curso sobre el Tratamiento de la Depresión Mayor

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