Está en la página 1de 5

Causas

El incidente que desencadenó la Primera Guerra Mundial fue el asesinato del archiduque Francisco
Fernando de Austria, heredero del Imperio Austro-Húngaro, el 28 de junio de 1914.Francisco Fernando
fue asesinado por un nacionalista serbio: por ese motivo, Austria-Hungría reclamó responsabilidades a
Serbia y le declaró la guerra. Pero entonces, Rusia salió en defensa de Serbia y, como respuesta,
Alemania (aliada del Imperio Austro-Húngaro) declaró la guerra a Rusia y a Francia.¿Por qué los otros
países empezaron a entrometerse en el conflicto entre Serbia y Austria-Hungría? Más allá del fin de una
dinastía, lo que estaba en juego era el poder político en Europa. Los países veían este conflicto como una
oportunidad para justificar la guerra, una excusa para conquistar otros países de forma legítima. Estaban
en juego los grandes imperios europeos de la época, que abarcaban territorios que ahora ocupan varios
países.

Desarrollo

Los combates tuvieron lugar sobre todo en Europa, pero participaron países de los cinco continentes
como los Estados Unidos, Australia, Brasil y China.

En Europa, Italia, Alemania y el Imperio Austro-Húngaro (Austria y Hungría formaban un solo país)
formaban la Triple Alianza desde 1882, también conocidas como las Potencias Centrales; mientras que
Francia, el Reino Unido y Rusia se unieron para crear la Triple Entente en 1907.

Estos países estaban enfrentados por una serie de territorios que se disputaban desde hacía muchos
años. A medida que la guerra se alargaba, cada vez más países se involucraron en el conflicto. En 1915,
un submarino alemán hundió el RMS Lusitania, un transatlántico británico que cubría la ruta entre el
Reino Unido y Estados Unidos. Murieron más de 1.000 pasajeros, entre los cuales había más de 100
estadounidenses.

Este ataque provocó que los Estados Unidos entraran en guerra, aliados con los países de la Triple
Entente. La participación de los norteamericanos acabó decantando la guerra.

Al norte de Francia, en Brieulles-sur-Meuse, hay un cementerio con las tumbas de los soldados alemanes
quemurieron en el Frente Occidental. Julien Warnand / EFE

La Primera Guerra Mundial (1914-1918) fue el primer gran conflicto bélico que implicó a potencias de
todo el mundo.

El final de la guerra supuso el final de estos imperios, así como el nacimiento de nuevos países como
Estonia, Letonia, Lituania, Polonia o Finlandia.

Los países creían que la guerra duraría poco tiempo, semanas o tal vez meses, como habían sido todas
las guerras hasta aquel entonces.

No contaban con la aparición de nuevo armamento: ametralladoras, cañones automáticos, tanques,


submarinos, aviones de combate… Eso provocó que ambos bandos resistieran más tiempo. Nadie quería
rendirse, pero el coste en vidas humanas fue altísimo.

No hay registros oficiales, pero se calcula que murieron alrededor de 9 millones de soldados y más de 7
millones de civiles. El número de víctimas fue mucho más grande que en guerras anteriores, en parte
por los avances tecnológicos de la guerra.
Los efectos y consecuencias de la Primera Guerra Mundial fueron tan grandes que durante mucho
tiempo se la consideró “La Gran Guerra”. Fue una catástrofe que lastró la economía de muchos países
y el futuro de varias generaciones. Por desgracia, veinte años más tarde, los gobiernos fueron incapaces
de impedir una Segunda Guerra Mundial.

Alianzas

Durante la Primera Guerra Mundial, las Potencias de la Entente -- Gran Bretaña, Francia, Serbia y la
Rusia Imperial (a las que más tarde se unieron Italia, Grecia, Portugal, Rumania y Estados Unidos) --
lucharon contra las Potencias Centrales: Alemania y Austria-Hungría (a las que más tarde se
incorporaron la Turquía Otomana y Bulgaria).

Tratados

Brest-Litovsk

La joven República bolchevique, nacida tras la Revolución de Octubre en Rusia, firmó el 3 de marzo de
1918 el Tratado de Brest-Litovsk con los Imperios centrales. Este puso fin a los combates en el frente
oriental, pero Rusia perdió gran parte de sus territorios occidentales en beneficio de Alemania, entre
ellos Polonia, los países bálticos y Finlandia, y más del 30% de su población.

Versalles

El tratado firmado el 28 de junio de 1919 en el palacio de Versalles puso fin a la guerra entre Alemania y
los Aliados. Alemania, que no tuvo ni voz ni voto en el acuerdo, fue designada como única responsable
del conflicto. Dividida en dos por el corredor polaco, que aisló la Prusia Oriental del resto del país, perdió
el 15% de su territorio y el 10% de su población. También tuvo que ceder todas sus colonias y se le
impuso el pago de enormes reparaciones de guerra, especialmente a Francia. La región de Sarre quedó
bajo el control de la Sociedad de las Naciones, un organismo creado en el Tratado de Versalles, por
iniciativa del entonces presidente estadounidense Woodrow Wilson, para que las potencias pudieran
solucionar sus problemas de mutuo acuerdo. Alemania, humillada, rechazó el “diktat” (dictado) de
Versalles, que alimentó un gran rencor entre la población y fue aprovechado por la propaganda nazi.

Saint-Germain-en-Laye

El Tratado de Saint-Germain-en-Laye, firmado el 10 de septiembre de 1919 entre los Aliados y Austria,


disolvió el Imperio de los Habsburgo, que tenía siete siglos de antigüedad, dando origen a media docena
de Estados nuevos o parcialmente nuevos, según el principio instaurado por el presidente Wilson del
derecho de autodeterminación de los pueblos. Esa división originó numerosas tensiones posteriores.
Checoslovaquia reunió a los checos, los eslovacos y también a considerables minorías alemanas en
Bohemia o húngara, en Eslovaquia. Rumanía se amplió con Transilvania y Besarabia. Yugoslavia
congregó a los eslavos del sur. Polonia recibió la antigua Galitzia austriaca, así como territorios que
pertenecían a Alemania como Posnania o Alta Silesia. Lo único que quedó del extinto Imperio fue una
pequeña Austria (83.000 km2 y 6,5 millones de habitantes, únicamente alemana), y una pequeña
Hungría (92.000 km2 y 8 millones de habitantes).
Neuilly

El Tratado de Neuilly, firmado el 27 de noviembre de 1919 entre los Aliados y Bulgaria, que había
entrado en la guerra en 1915 en apoyo de Alemania, transformó las fronteras del país. Regiones enteras
cambiaron de Estado. Al oeste, pasaron a Yugoslavia; al noreste, a Rumanía; y al sur, a Grecia, que
recibió la mayor parte de Tracia.

Trianón

El Tratado de Trianón, el 4 de junio de 1920, le quitó a Hungría, separada de Austria desde el 31 de


octubre de 1918, dos tercios de su territorio. Tres millones de húngaros se encontraron entonces en el
extranjero, la mayoría de ellos en Rumanía.

Sèvres y Lausana

El Tratado de Sèvres (10 agosto de 1920), que disolvió el Imperio otomano, fue rechazado por los
nacionalistas turcos liderados por el general Mustapha Kemal Atatürk, que prosiguió los combates
contra los armenios, los griegos y los franceses. Con sus victorias militares, el nuevo hombre fuerte de
Turquía impuso un nuevo tratado a los Aliados, que se firmó en Lausana, el 24 de julio en 1923. Turquía,
convertida en una República, conservó Anatolia y los estrechos, pero perdió todas sus posesiones
árabes. Palestina y Mesopotamia quedaron bajo el mandato británico, y Siria y Líbano, bajo control
francés. El final del Imperio otomano causó un enorme movimiento de poblaciones: cerca de 1,3
millones de griegos tuvieron que abandonar Anatolia y unos 500.000 turcos se marcharon de Grecia.
Desarrollo de la batalla de Verdún
Datos de la batalla de Verdún

Esta batalla, una de las más largas y sangrientas de la Gran Guerra, terminó con una victoria de los franceses, que
lograron frenar el avance alemán hacia París.

Quiénes: El segundo ejército francés bajo el mando del general Henri Pétain (1856-1951), posteriormente
reemplazado por el general Robert Nivelle (1856-1924), frente al quinto ejército alemán bajo el mando del príncipe
heredero Guillermo (1882-1951), con el general Erich von Falkenhayn (1861-1922) como jefe del estado mayor.

Cómo: La ciudad de Verdún fue asediada y los atacantes avanzaron mientras la artillería infligía tremendas bajas.
Una contraofensiva recuperó finalmente el terreno perdido.

Dónde: La ciudad de Verdún, junto al río Meuse (Francia).

Cuándo: Del 21 de febrero al 18 de diciembre de 1916.

Por qué: El alto mando alemán quería atraer a las reservas francesas a una «máquina de picar carne» y destruirlas,
obligando a los franceses a pedir la paz.

Resultado: Después de una espantosa contienda de desgaste, todo lo que se consiguió fueron cuantiosas bajas por
ambos lados.

A medida que la primera guerra mundial se convirtió en una guerra de trincheras a finales de 1914, se hizo más o
menos imposible obtener una victoria tradicional sobre el enemigo. Anteriormente, la victoria se decidía por la
derrota de un ejército en el campo, o por la ocupación (o la amenaza de ocupación) de áreas importantes, como
las capitales. Eso, ahora, era simplemente imposible. Parecía no haber modo de abrirse camino a través de las
líneas y capturar objetivos estratégicos, y las posiciones defensivas profundas hacían prácticamente imposible
expulsar al enemigo del campo. El problema en ambos casos era la disponibilidad de reservas, unida a la capacidad
de trasladarlar a un punto amenazado antes de que se pudiera explotar el éxito de un ataque.

La victoria en la Gran Guerra sería cuestión de agotar al bando contrario, o de hacer tan elevado el coste de
continuar que la paz se volviera esencial. Mientras la oposición tuviera efectivos disponibles para llevarlos a la zona
de combate, la guerra continuaría. El alto mando alemán, por tanto, propuso un plan para destruir las reservas
francesas atrayéndolas hacia una «máquina de picar carne». El plan alemán era atacar algo que los franceses
tuvieran que defender, y destruir su ejército con ataques de artillería e infantería. El objetivo elegido fue la ciudad
fortificada de Verdún.

La batalla del Somme


Datos

Fecha 1 de julio al 18 de noviembre de 1916.

Lugar Valle del río Somme, en el norte de Francia.

Beligerantes Francia y Gran Bretaña vs. Imperio alemán.

Resultado Victoria estratégica de Francia y Gran Bretaña.

Datos de la batalla de Somme


Quiénes: El cuarto Ejército británico, con apoyo del tercer Ejército británico y del sexto Ejército francés,
atacando al segundo Ejército alemán.

Cómo: Tras una masiva preparación artillera, las fuerzas inglesas y francesas atacaron las posiciones
alemanas y avanzaron de forma penosa, obligando a costosos contraataques para recuperar el terreno
perdido.

Dónde: Entre los ríos Somme y Ancre, en el frente occidental en Francia.

Cuándo: Del 1 de julio al 18 de agosto de 1916.

Por qué: Con la guerra estancada y las tropas enemigas atrincheradas en suelo aliado, era necesario
recuperar la ofensiva y romper las líneas alemanas. La necesidad de reducir la presión sobre Rusia y
sobre los franceses en Verdún también desempeñó un papel.

Resultado: Tras sangrientos combates y bajas por ambos lados, se obtuvieron escasas ventajas. No
obstante, el ejército alemán perdió a muchos de sus mejores hombres y más tarde se retiró a la línea
Hindenburg.

La batalla del Somme fue un enfrentamiento bélico que tuvo lugar en el norte de Francia, durante la
Primera Guerra Mundial.

Se libró entre el 1 de julio y el 18 de noviembre de 1916 en el valle del río Somme, en la actual región de
Alta Francia. Se la considera la batalla más sangrienta de la Gran Guerra, ya que produjo más de un
millón de bajas entre ambos bandos.

También podría gustarte