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Jueves 14 de jumo de 1838. PJIECIO S cL.unos.

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StjCKÜ'ClO.'» I."» BAilCEJ-OSA
Las Sesiones de Cortes
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G A C I N E r E VE L I X T Ü I U t » LA rHOV. (Ri;<c.o DE POBTC.
L.,» «nscrito!. ai O. N . al iiie«.. . 8 rs. OEL G. ÜÁCloyU. d« períótlicúii o.'iciouiUt y e«lraui<!rus , HrlTlcíjialel lib. v a t í m . Je ct):ir«
calle Aiicba , b.* ^S
L i í iKi ^u^^;ritOll 16 r». ESTtBLCCIDA EK Ll MISMA REDACCIO:*.
grdlis A l o j sii'icritos al G. K. l'i.r tioKitri» 6., r
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n n s II. ¡<;, g í t : a r digámoslo a>í anduvo mss g e n e r o s o , ó por mi parte, seGores, en medio d e las recla- q u e produce esta contribución decimíl. E l s e -
DIEZ.MO.
lo» Ilaínai ]Ie aquí el elocuente discurso pronun- pur lucjor d e c i r , mas justo q u e la misü.a c o - inacioaes q u e haya habido eu vari.is épocas ñor secretario del Despacho de Hacienda q u e
»iu caLi. uiision eclesiásti..'a. contra las usurpaciones del c l e r o , no veo ui eu aquella época propuso la supresión del diez-
(¡0 por el señor Marlinez de la llosa
M.is aun llevada U suma á esta c i n t l d a d , he encontrado eu la historia de E s p i n a esa m o , imaginó nn sistema; p e r o el actual no lo
cuerpr I e' Congreso de diputados en la sesión todavía es diminuta é iusnGciente. T u v e el h o - oposición tenaz y constante á pagar el diezmo, ha proliij.ido, y no veo q u e algún señor d i p u -
[Ui del ¡I ,| día 5 de junio. nor de niauilestar en a q u . l d i a q u e a u n q u e u o y prueba de ello es q u e ha tenido q u e irse á tado l o h i y a h e c h o . Solo el señor Arguelles es
lii regí 11,1,
£! Sr. Murtinez delaRnsa: El primer dia se atendiera mas q u e d lo meramente indispen- buscar en los años posteriores al siglo xiv en (juien ha propuesto 1 0 0 mílloues exigidos s o -
I" lo» rejí Miit! toiiíá la paUbra sobre esta ciie>li'iii un- sable del c u l t o , á las parroquias y á los p á r r o - el reinado de Juau el I. ¿Y cuántos siglos con- bre las mismas bases q u e la coutríbucíou e s -
hacer. [[«iití.iiiiia, observaria el Cciiii;i"t'so el .sumo j eos , á aquella clase del clero q u e dispensa mas taba antes el diezmo? Dígalo el Cougreso por traordinaría de g u e r r a , es d e c i r , que ha p r o -
Ijiio con (¡ue procuré tía. ria i ¡.u t rn-iio ius beurlicios de la r e l i g i ó n , y q u e mas c o n - ese mismo texto. Cuando h u b o esta tspecie de puesto un solo medio para uua sola de las c u a -
tacto tieue Con el p u . í b l o , lo menos en que se proceso en el reinado de Juan el I , el mismo tro obligaciones á q u e estaban afectos los diez-
.iflell ea J niio, para (jue no .se estraviase con cue.stiu-
podia graduar era en 1 0 0 .nillones, y para p r o - Mo:.irca (juiso oir á los prelados: no se trataba mos. Para culirirU propuso esta l e y , (jue el
0 0 r;.|,a;^ secuudarias que pudier»n retardar su prou-
.jecuciou. La presenté bijo el aspecto prdc- ij-jrlo presenté como un dato, que no poiiia r e - sobre si se habia de pagar li no el diezmo , C o n f i e s o no lia tomado en consideración.
, tal c o m o drbe presentarse á cuerpos l e - piignarsi-, la cantidad de unas 2 0 3 parroquias, pues los pueblos uo opouiau la menor resisten- P e r o , señores , es raeneiter v e r la situación
lia con ua
jilort'.s. P e r o el Congreso no habrá olvidado i según los (Utos mas s e g u r o s , a u n q u e i m p e r - cia al pag"; el litigio era sobro si lo hablan de en q u e nos hallarnos, y q u e las mismas n e c e -
1"C : estila
después se sacó l i cuiíslion de este terreun, ftcttis, los (pu: presentH el único c t n s o q u e t e - cobrar lu'i obispos ti los seiíores. H e aqui lo sidades q u e el año pasado nos apuraban, nos
ISO á üjc/
ir decirli> a s i , se envolvió con otras mas ü m'iiios, verificado á fines del siglo anterior del que decían los señores (leyó). Este, señores, es estrechan este a ñ o . E t a s mismas necesidades
JOS unidas á la principal, pero uo uecesa- cual resultan 19,ISG parroquias. S"guu la d i - el retrato fiel y autéutico (jue h a c e este histo- q u e aliora pesan sobre uuiutros fueron las q u e
>3 dia» lij
i. ¿ D f b j , ó u n , continuar el rii.zino por I visión territorial ejecutada en el aPo de 1 8 3 4 i riador d e suma fé , Alonso de Palencia. En esa obligaron á nuestros antecesores á votar lacoti-
n o 'psieri
hay en España 18,381 parroquias, y buscando representación se ven los derechos q u e a l i g a - tinuacion del diezmo, y el mismo señor S:^cre-
no estral sfio? T a l fue la c*presiou sencilla c o u (pie
t-4mbieu el censo eclesiástico, c e n s o ej.ícutado bau los señores; y j o pregunto si h a y algunos taiio del D e s p a c h o de Hacienda d e aquella é p o -
lo les guf rusenté al Cimgresíi. D e s p u é s , seúores, se
eu el mismo año d e 1 8 3 4 1 ="''= asigna el n ú - mas «agrados sobre la tierra que haberla gaua- ca, q u e ine escucha, en el mismo momento i|ue
UQCbtruEi citaron otras cuestione.s de religión, d e l e -
mero de parroquias eu 2 0 , 8 2 0 . Resulta p u e s dü c o n SQ propia sangre; el haber restablecido .se d e c r e t ó la supresión del d i e z m o , á los tres
laciou, e c o n ó m i c a s ; parecieud» .sieii;pre | c o -
q n e an.luve bastantemente exacto al sentar el á los españoles eu el uso de sus tierra.s, reser- días presentó el proyecto d e s u coDtíuu.icion
os facciosn qiie se rehusaba traer al principio práctico
principio de q u e no podia calcularse en menos vándose estas prestaciones. Pues esto es el o r í - diciendo cou sinceridad , y uo podia ser de oti'a
casas baíl ¡jre el cual giraba úuicaiuente la necesidad
el número d e parroquiís en España q u e en gen de esos derechos q u e eu el siglo x i v alega- s a e r t e , que ya en e! mismo dia en que se v o -
DOS apora.
20'?, y asignando íl c^'da una la mezquina suma ban los .s»^ñnres i la faz de las Cortes. Los e c l e - taba la supresión tenia pensado pedir la c o n t i -
Tampoco necesito recordar q a e nmcha? d e
de 5 3 reales, resulta el gasto de 1 0 0 millones siásticos fundaban su derecho e u los derechos nuación, por q u e el mismo Gobierno reconoció
proposiciones q u e se hicieron al principio
rado en ti de r s . ; y si es verdad rpie algunos curas p á r - de la Iglesia; pero es de notar q n e al sostener q u e la supresión del diezmo llevab» envuelta
sil casi ciertas, y muchos d e los a r g a i n e n -
I su cu.iit, rocos atienden á m i s d e una iglesia, también es los laicos el s u y o , al i m p u g n a r el del brazo esa c o n d i c i ó n : esto mismo se hizo en la asam-
(¡ne se presentaron como incontestables, ó
cierto que hay muchas iglesias en q u e no basta eclesiástico, daban por principal razón q u e eu blea c o n s t i t u y e n t e , y asi )0 uo hago mas qu-i
a se d e s p l o m a r o n pnr sn propio peso , ó
! í n mniii! un cura párroco; porque de lo contrario q u e - Italia a o cobraba los diezmos, y q u e en Espa- r e p e t i r á este C o n g r e s o : h a g a m o s lo mismo;
'.•han sido coulradicbos p o r los mismos q u e
ndo lasf.-[ darla suspendido el pasto espiritual. También ña los clérigos tenían muchas propiedades. continúe p o r este año el diezmo, y entre tanto
hii-ieroo de mauera que puede decirse q u e
uadd» tiit; es cierto q n e la a } u d a d e dotación de los p á r - busquemos los medios de llenar este vacío.
I mismas armas que se empleaban .se trou- U n hecho ha llamad) mi atención queriendo
rocos es lo q u e comunmente se llama d e r e c h o s
tron en las manos de quieurs las esgriinian. ver si efectivamente habia habi.íoesa tenaz opo- Es de notar, señores, q n e fue tal el couv.?n-
de L! jiiiiiii se atreverá á sostener que la coutribii-
de estola y pie de altar; pero ademas de- q u e
sición qne se ha supuesto, y ha sido el signen- cimíento de las Cortes pasadas , q u e , ccimo
esta es uua cantidad vaga, indeterminada, si se
H\ del d i e z m o en mayor ó menor canlid,«d te. Al verificirse en el siglo d é c i m o quinto tuve el h o n o r d e decir t i o t r o d i a , se aprobó
ti-ne en cuenta en las grandes poblaciones, en
dtbe continuarse? A mí me basta leer on aqo« ia grande crisis política d e q n e nació la la continuación p o r una mayoría de 1 0 0 votos;
las pcqueGas p r o d u c e poquísimo.
icu}o coo.stilucional para c:»3cr!o a s i ; m e guerra d e las comunidades, vemos juntarse los y es de notar también q u e en el triunfo tan
•ti haber v!.ito q u e las Cortes que hicieron JV.) entraré ahora, señores, en hacer el a n á - procuradores de lodo el r e i u o ; y es'íutos del c o m p l e t o de esta opinión t u v o la mayor parte
"niistitucion , y q u e di'cretaron su supresión lisis de los gastos q u e exige la reparación d e influjo d e la corte por q n e estaba ausente el el señor A r g u e l l e s , q u e hizo un csrelente d i s -
rdaron también su continuación, sin q n e las iglesias ui de todo lo necesario al cnlto y Mouarca contra el cual se liabiau levantado, y c u r s o , q u e me bastaiia l e e r , si fuera dable el
nesen q u e por esto iiirriníji.in la Constitu- ministros inferiores, ni tampoco d e lo q u e e x i - cuaudo uo se oía mas q u e el clamor del pueblo repetir los discursos a q u e l l o s , para cautivar
pero al ver q u e despuei .se lia Vdtado el gen otras gerarqoías eclesiásticas, empezando salido de lo íuliino de los corazones; cuando á m u c h o s votos con su lectura, porque allí se d e -
•lüü diozrr.o por los mismos que alegaban por los ilustres prelados y las dignidades d e nadie ofuscaba el brillo de la c o r o n a ; cuando mostró de la msuera mas palpable que debía
riiigirse la Con^ti^«l•ion <-iin este impuesto las catedrales (¡ue están rn pie y subsisten , á las Cúrt.ís pediau q n e .se h s igualasen los tri- continuar el diezmo por este a ñ o .
i.l. '..•ir. conde di Itis NUK'US ¡>idió la j'rdidirapara los cuales debemos atender porque es preciso butos; cuando se levantó una voz contra las Encontrándose las cortes anteriores en c i r -
fl. •.aclaración)., no me piiedr! c a b . r la ru<-iior mirar las cosas no c o m o podrán s e r , ni c o m o demasías de la c o r t j de llouia pi;!iendo la r e - ounstaucias casi iguales á l a s e n q u e nos e n c o n -
il.
j.i de q u e uo hay tal infracción. Asi q u e , si fueron, sino c o m o deben ser. paraeíou de agravios, no lie encontrado (¡ue se tramos nosotros, empleó el ilustre Diputado
i habido razones ¡uslas^ para vot.<r el medio Dije también el o t r o dia que otra parte d e pidiese la abolición de los diezmos: y c u e n t a , las mismas razones que se han empleada para
nno , esas mismas debe h a b e r porque son los diezmos estaba dedicada á estahlecimieutos señores, que la esposicion que los pueblos d e q u e en este nño continué, y no lia habido ahora
nlicas, para votar sn continuación p o r uu de instrucción pública, y á lo.i d e hospitalidad Castilla elevaron al Monarca contenía 1 1 8 c a - una sola reíl.xion q a e el S r . .-arguelles no lii-
:i;y d e aqui venimos á parar d e una m a n e - y q n e en esto se vtia claramente el espíritu d e pítulos: eu ella esteudieron s o s miras no solo á cie.<e entonces p a r a q n e c ' o t i i u i a s e . Ilabráotros
íotiai. ¡Qvoluntaiia al fiu de la cuistion , es decir, los siglos q n e nos han precedido. P u e s estos uu objeto político y civil, sino q u e tatiibien se m e d i o s , se decía; y contestaba el Sr. A r g u e -
)li"t<) de donde no dtbíanios desviarnos. ; E s establecimientos, en tanto q u e no ge e s t a b l e - esteudieron á lo económico y religioso, porque l l e s , y cou r a z ó n ; ¿pero cuáles? Se quería in-
5 JUDÍO. ijii uece.saria la continuación del diezmo; si, cen otros medios para atender á ellon, scverian se tenían en aquella época conocimientos q u e volucrar U cuestión económica con la cuestión
|ue se li> »i.' Esta es la cuestión. privados de esta subsistencia y en gran peligro no habia en ninguna parte d e E u r o p a , u i e n i a de m o n a r q u í a , y decía el Sr. Argüolles : esta
icurreiitii Lo punto , sefiores, en el q u e todos h e m o s de cerrarse si »e les qnitaran estos recursos. ilnstrada Francia. E u esa representación se ve no es cuestión de persona". S e alegaba q n e no
di^pntaiio m-euido, es la necesidad, la justicia y el d e - el bosquejo d e nn Gobierno representativo fun- se cobraría el diezmo , y contestaba el Sr. . \ r -
Otra clase á la q u e estaban también desti-
i el menor nle llenar la» altis tibligacion»» ya mencio- dado casi en las mismas bases del q u e ahora i gii^lles q n e s.: c o b r a i i » , y se ha c o b r a d o : se
nados los diezmos , es la q n e comnnmpDte se
den se lii ii'. ,; D.-ben lleu.irse por medio del diezmo, costa de tanta sangre se ha establecido. .\lli representaba q u e habría o p o s i c i ó n , y contesta-
entiende con el n o m b r e de partícipes legos.
S''g<in I» for medio de otra contribución ? D e aqui está consignado q u e no se pidan las bulas á ba el S r . Argi¡.!!les : no h i b r á oposición sino
Dije q u e estas prestaciones las tienen casas po-
iserlariii o.iortuiiiJad de haber presentado á la vista Ruma; allí se pide q u e no se prediquen en cier- de parte da los malévolo»; nosotros debemos
derosas, bien por servicios prestados, bien por
iciou por •"•i seDores diputados el presupuesto do las ta manera las indulgencias; allí se e x i g e la r e - votar la continuación del d i e z m o , es pira bien
euagenacioues, bien p o r c o m p r a s , y q u e se
g-oeral li '^iciones q u e se cubilan con el diezmo. sidencia d e los obispos en sus dióccMS, y q u e d e la n a c i ó n , y nosotros d e b e m o s querer este
debe tener en cuenta la validez d e los títulos
ropue.sti! 3'c el h o n o r el olr.t dia de presentar este se les quite la p i r t e d e los frutos si no lo c u m - b i e n ; y fué tal su persuaci.iu , q u e se llevo tras
de dichas prestaciones: siu embargo hay m a -
cia : y 'I' 'iro ante el Congreso dividiendo estas obli- plen. P u e s en ninguna ocasión mejor q u e aque- de sí la mayoría. Pues l,i luis'na, la miiima r a -
c h o s propietarios de esta clase q n e no están
gio.s. Lni wai s en cuatro ciases. lla p u d o pi'dirse con mas libertad la supresión z.in existe liov para q n e se apruebe por este
rn los pod.rosos : en el principado d e Catalu-
im. 2. £i !•* primera q u e llama la atención por su de este tributo si hubiese habido la inipacieu- año la continuación del ijiezoio. La comisión
ña y en Galicia , las poseen personas d e la clase
lUltado ti Jiiilnd, p o r su importancia, porque uo hay cía q u e se supone. ipie n o m b r ó e l Congreso se ha dividido en tres
media. También las ha habido por don g r a t u i -
anunciar Id leve ni pequeBo cuando va enlazado con d i c t á m e n e s , prueba de la gran dificultad de esa
to y largueza d e los Pieyes; pero estudiando el P e r o dej.iado esto aparte, v entrando en el
l e aqui ^'i.limieuto religioso , fue la de atender í resolución; mas á pesar d e esa divergencia en
d i e z m o , se rebaja m u c h o la idea q u e á p r i - punto capital de la cue»tion, el mas i m p o r t a n -
'IHtos del culto y del c l e r o . Me aventuré q u e se v e , por di^cirlo así, c o m o en miniatu-
mera vista se tiene de (jue ha nacido de u n te es q u e si el Estado percibe una gríin patt-',
' i r , a u n q u e siu datos positivos, (¡ue esti- ra la expresión de las varías opiniones q u e se
principio religioso. Los diezmos han sido c i v i - la mitad ó ua tercio de esta renta si podrá s u -
;rmina '3 U cantiilad necesaria para esta atención
les y eclesiásticos, han nacido del d e r e c h o c i - primirse sin acudir á esta necesidad, sin llenar han mostrado en este C')ngresu, todos hemos
ta cqi ¡tal ' época actual en 190 millones poco mas
vil, v se comprende con solo decir c o m o se ha por otro medio este vacío. El mismo señor Mi- convenido en el fondo de la c u e s t i ó n , y no p o d i í
iit.i iinls- tilos. L o s datos q u e para ello tenia eran
verificado la restauración en España. Cuando nistro d e Hacienda (pae reclamó la supresión ser menos tratándose de españoles y Diputados d.!
ores ['«'•i '\imativos, p e r o bastante fuertes siu e m -
e m p e z ó á restaurarse la nioaanjuía desde las del d i e z m o , manifestó en sn memoria qneoran la nación. Pero al paso que hemos convenido cu
ación t-i''
Si para presentarlos al conoció.iento de los el fondo, hemos variado con respecto á los medios
detracto moutafias del Norte hasta laAndalncía, los n a - necesarios 5 6 ó mas millones si se h a c i a : si
•r^s diputados , recordé q u e la comisión de cubrir este vacio. Suprímase desde ahora el
turales hicieron varias dnuaciones á tos Ciiudi- atendemos pues á este presupuesto de o b l i g a -
lad en '• •'¡astica d e las Cortes anteriores, que s u -
llos q u e les rescataban d e la dominación de los ciones q u e se cubrían con el d i e z m o , h a b r e - d i e z n o , han dicho l o s n o o s ; échese manoá otros
a des. Lo» '5' estudiarla prolijamente la materia y á
m e r o s , y estos mismos c a u d i l l o s , entregando mos necesariamente de volver la vista al presu- recursos, ha dicho o t r o ; y e l Congreso al dese-
del pri" lUe ao se acusará de haber andado m u y ch.nr ese voto particular, desechó también la
á los colonos sus t i e r r a s , se reservaban una puesto de ingresos si han de cnhrirse? esto es
icioD con- 'Jija, c r e y ó (jue lo estrictamente nrcesa- adición d e e l l a , porque no la c r e y ó suficiente.
parte alícuota d e sus frutos. necesario. ¿Se ha propuesto algún m e d i o real
l'elizmcBl! tra c u a n d o menos la cautidad de ciento Se p r o p u s o después el medio d i e z m o , y el Con-
A este p r o p ó s i t o , y p i r a aclarar n n h e c h o y efectivo para llenar el vacio q n e dejaría la
•nos. rcw ''tDta y tantos luilloues si habia de a t e n - greso no ha tenido á bien aprobarlo por haber
q n e el otro dia no s.; presentó con bastante inmediata supresión del diezmo? £ 1 G o b i e r n o ,
lo l o g " '" al c u l t o , suponiendo va realizadas las creído q n e no era soficiente. Q u e d a b a , p u e s ,
claridad, m e permitirá el Congreso q u e lea nn cnvo voto debe ser d e tanto peso en esias ma-
ti y del- -rmas eclesiásticas q u e s« proponían. T a u el tercer di.-timeo.
retszo de la crónica á q u e aludió u n señor d i - ten?» , el Gobierno q n e conoce las necrsídades
. Del cr¡' 'luina, tan pequeña fue la cantidad en q u e
putado. Trató S. S. de probar q u e esa opinión del Estado, y los medios para cubrirlas, ti Go- Si la» Cortes no hallan suficiente el medio
ou. Mal» CuO la dotación del culto la comisión e c l e -
de q u e el diezmo era d e d-'rechodivino no h a - bierno á quien con suma previsión la Constitu- d i e z m o , ui la contribución extraordinaria d e
'3. ''•^a, q u e el S r . Ministro juzgó convenien-
bia estado arraigada en E s p a ñ a , y trató tam- ción del Estado asigna el deber v obligación de guerra q u e estamos decretando a dura» penas,
'•«ccrla subir i 1 5 2 millones d e modo q u e
bién d e probar la tenaz oposición q u e l o s p u e - cubrir los presupuestos, h» d i c h o del rno<lo mas contríbacion q u e mas bien es nna repíran.iii
^r^ ministro do Hacien J » , q n o debiera r e -
blos habían manifestado á pag-ir el diezmo. Y o i cíplícito j tcrminaule q u e necesita los fondos que u n a e x a c c i ó n , y c u y o n o m b r e de e o u l t i -
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