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La carpa es una de las escasas especies de peces que tienen la posibilidad de ser consideradas
como domesticadas, sin embargo hay una notable diferencia entre la manera domesticada y la
silvestre (de la cual se originó) con en relación a su capacidad reproductiva, aumento, trabajo
de alimentos, etcétera. La manera silvestre está cubierta de escamas y crece poco a poco, en
lo que la “carpa noble” (tanto la domesticada con escamas o la espejo, con una o 2 líneas de
escamas) usan el alimento artificial con base en cereales y el alimento natural realmente bien,
demostrando un incremento veloz.
La carpa es una especie omnívora (de extenso espectro alimentario), y va a poder consumir
granos de cereales de elevado contenido en hidratos de carbono. El desarrollo de este pez
podría ser bueno si la tasa de alimento natural y suplementario es de uno a uno. El alimento
natural provee los importantes aminoácidos, ácidos grasos y algunas vitaminas, mientras tanto
que los granos de cereales (debido a su elevado contenido en almidón), dan la energía para
una instantánea ganancia en peso.
Es fundamental para el desarrollo del pez la proporción de alimento natural del que puede
contar con.
Los límites físicos químico y biológico son los que determinan la calidad del agua y por ende
ejercen una acción específica sobre el desarrollo de las especies de cultivo y estos serían:
Temperatura
Las carpas prefieren temperaturas de 22 a 25 ºC, consideradas como óptimas,
aunque resisten rangos mínimos de 17 y máximos de 30 ºC, que en periodos
prolongados llegan a provocar trastornos de tipo fisiólogo
Oxígeno disuelto
Se ha definido que el grado de oxigeno óptimo para la carpa va de 5 a 7 miligramo.
/l.
pH
Los peces necesitan mínimo un pH de 5 con un buen de 7,5 y un pH.
los lípidos han sido reportados como fuentes importantes de energía y de ácidos grasos
esenciales para el crecimiento de algunos peces. Las carpas, como peces omnívoros, pueden
utilizar efectivamente tanto lípidos como carbohidratos como fuentes de energía.
De aquí que los lípidos se pueden utilizar como energía, de modo tal que las proteínas,
nutrientes mucho más valuables, se destinen exclusivamente para el crecimiento. En
particular, los ácidos grasos libres, derivados de los triglicéridos (grasas y aceites) representan
la principal fuente de combustible aeróbico para el metabolismo energético del músculo del
pez.