Actividad Integradora

“Cuento”

Lenguaje y Comunicación
Profesor. Karin Marines Ortiz

Emilio Portillo Reynoso 2°E

Ciclo Escolar
2019-2020
 Cuento: ¡Nosotros no fuimos!
Érase una vez una pareja muy unida, tan unida como los átomos, esta
pareja se encontraba de vacaciones en un lugar muy bonito, era una
de las islas más hermosas del mundo. Esta isla era tan bonita como la
mujer, una joven señora de tez blanca, labios rojos como las fresas y
ojos tan azules como las olas del mar. Ella era Sarah y su esposo
Carlos un hombre de complexión robusta como un árbol y con un
carácter como el de un león.

Las vacaciones fueron en una isla del Caribe, en donde el agua era
tan clara como el vidrio de un vaso, En esta travesía la pareja se
encontraba descubriendo lugares de esta isla, algunos lugares eran
tan misteriosos que ni se atrevieron a entrar, al llegar a su hotel se
quedaron admirando la belleza de la construcción, pues era de lo más
hermoso que habían visto en su vida.

Al estar contemplando la vista de la construcción, se dieron cuenta que

a lo lejos se podía observar un gran barco, el cual estaba tan grande
como “El Titanic” y blanco como el azúcar, pues este era para la fiesta
de un multimillonario llamado Marc Quince, un conde de Europa que
va a anunciar su boda con una mujer más joven que él, de rasgos
asiáticos, tez blanca y facciones finas.

Ella era Kath Cho, la afortunada de casarse con el multimillonario,

ellos al investigar de Marc se dieron cuenta que era uno de los
hombres más ricos del mundo y pensaron que ella estaba
aprovechándose de la oportunidad, así que solo decidieron ir a la
recepción del hotel para ir a su habitación y descansar, pero al llegar a
la recepción se detuvieron para pedir la llave de la habitación, al estar
esperando por un buen tiempo decidieron hacerle la platica a un joven
que estaba a su lado.

Al preguntarle su nombre, se dieron cuenta que era familiar de Marc y

ellos le preguntaron:

¿Qué te trae por aquí Luis?

(A lo que Luis respondió): Estoy haciendo las reservaciones para los

invitados de boda de mi padre, pero yo no quiero estar aquí solo en su
fiesta. ¿Les parece si los invito?

Y ellos respondieron: ¡Claro! Con todo gusto te podemos acompañar.

En seguida ellos se fueron a su habitación a descansar y pasaron

unas cuantas horas, se levanto Sarah para ir al baño, cuando tocan en
la puerta varias veces y se despierta Carlos yendo a ver quien toco, se
encuentra con la sorpresa del capitán de barco que fue a darles un
traje y un vestido para que fueran la fiesta de la noche, ellos se dieron
una ducha y se vistieron.

Pasadas las 12 de la noche comenzó la celebración del compromiso

de Marc y Kath, hubo 12 invitados de los cuales 3 eran viejos amigos
de Marc y los demás eran familiares.

Estaban cenando, cuando Marc quería hacer un brindis por su futuro

matrimonio, y así de repente sucede algo que nadie esperaba, se
apagan las luces y se escuchan 3 impactos de bala.
Se prenden las luces y nadie sabía que había pasado, pues habían
matado a Marc, también hirieron a Sabrina la hermana de Marc,
dándole en el brazo con la bala.

Todos estaban preocupados por lo que había sucedido, y lo único que

se preguntaban era ¿Quién habrá sido?, pero entonces todos se
quedaron mirando a Sarah y Carlos y empezaron a discutir sobre ellos
y decían ¿Quién los dejo pasar? O ¿Quién los invito?, cuando Luis
alzo la voz para decir: Ellos son mis invitados, y yo confió en ellos.

Tiempo después empezaron a interrogar a todos los que estaban en el

barco, tratando de averiguar quién era el culpable de estos atroces
crímenes.

Al llegar a la costa, estaba una de las agencias más importantes de

investigación del mundo, y llego el jefe de la investigación Jean Pierre
LaCroix, un reconocido e intachable investigador de Francia, el fue el
indicado para este caso ya que era un íntimo amigo de Marc.

Al enterarse que había matado a Marc, el se propuso hallar al asesino

de uno de sus mejores amigos pues el fue quien lo ayudo a llegar a
donde estaba ahorita LaCroix, pasaron unas horas hasta que el
detective tuvo los primeros testimonios del caso.

Casi todos los testimonios de las personas que estaban en el barco

decían que Carlos y Sarah fueron los asesino por que eran unos
desconocidos y parecían sospechosos, otros testimonios decían que el
mas sospechoso era un sobrino de Marc que estaba enojado por que
mataron a su padre por la culpa de Marc.

Entonces el investigador llego a la primera conclusión, en la que decía

que los mas sospechosos eran Carlos y Sarah, pero algo no lo
terminaba de convencer.

Pasaron los días y se fue dando cuanta de las piezas que faltaban de
el caso, y eran muy pocas, así que decidió volver a investigar a Carlos
y Sarah para preguntarles quien fue el que los invito.

A lo que ellos respondieron: Nos invitó Luis el hijo de Marc, por que
nos dijo que no quería estar solo en la fiesta de su padre.

Ahí fue cuando todo se aclaro y el detective hizo una posible cuartada,
en la que Luis podía ser el posible asesino de su padre.

El detective quiso hacer una trampa en la que podía saber quién era el
asesino, así que junto a todos y los fue pasando uno por uno y les dijo
que uno había acusado a otro y así con todos.

Cuando el detective termino la prueba vio muy enojado a Luis, al ver

que estaba solo fue a verlo y le pregunto el porqué de su enojo.

A lo que él respondió: Estoy enojado por que yo fui el que mato a mi

padre, pero fue por que esa mujer con la que se iba a casar se quería
quedar con su dinero, y por eso yo lo mate para que culpara a alguien,
por eso invite a Carlos y a Sarah y ellos iban a ser los que iban a ser
culpados y yo iba aquedarme con el dinero de mi padre. Pero ya no
pude por el remordimiento de culpar a alguien que no tiene que ver
nada con esto.

Y así fue como Luis se entregó a la policía, pero les dejo algo a Sarah
y a Carlos en recompensa de lo sucedido.

Al abrir el regalo que les dejo Luis se dieron cuenta que era una
maleta llena de billetes y también una carta que decía lo siguiente:

Perdónenme por todo lo que les quise hacer y ojalá algún día me
perdonen.

Atte.; Luis Q.

Y después la policía se llevó a Sarah y a Carlos, les dieron un vuelo

de regreso a su hogar y fueron felices por toda su vida.

FIN.