LA PERSONALIDAD DEL INDIVIDUO DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA

CRIMINOLOGÍA

La personalidad del ser humano es muy curiosa, encierra varios aspectos que
conllevan a la realización de conductas distintas a otro ser humano, dependiendo
en muchos de los casos, por las relaciones que mantienen con la sociedad, la
familia, los amigos, etc., pareciera como si todos nos comportáramos de manera
parecida, sin embargo, cada persona es individual, y es ahí cuando nosotros
podemos percibir que alguien se comporta de manera anormal.

Podemos definir que la personalidad “es el término con el que se suele designar lo
único que tiene un individuo, las características que lo distinguen de los demás” 1.
Para cualquier definición de la personalidad debemos tomar en cuenta las
características físicas, mentales y sociales del individuo, se puede decir que la
personalidad antisocial, viene siendo el comportamiento que se externa en forma
de desprecio y violación a los derechos de los demás, abarcando desde la etapa
de la infancia hasta la edad adulta, es todo aquel comportamiento que va en
contra de la ley y del orden social. Dentro de las características de la personalidad
podemos observar que la persona proyecta inestabilidad emocional, dificultades
en el pensamiento, estando desconectado de la realidad y esto da pie a fantasías,
ansiedades, mostrándose ante los demás de una manera fría, rígida, indomable,
etc., lo interesante es que la mayoría de estas personas ocultan sentimientos
internos, sintiéndose inferiores a los demás, de ahí surge la necesidad de un
comportamiento agresivo-peligroso.

Para Alfonzo Quiroz Cuarón, son cuatro los rasgos dominantes de las
personalidades psicopáticas: la irritabilidad, que, ante estímulos mínimos llegan a
la ira, al disgusto y al pleito; la emotividad, una exaltación explosiva, por debilidad
de mecanismos inhibitorios; impulsividad, de ella nace el impulso, es espontánea e
imprevista; y la inmoralidad, intensidad prepotente y egoísta, sin control 2.

Muestran todo lo contrario a una persona sana, es decir, no son capaces de

interactuar fácilmente con los demás, no tienen un manejo adecuado de su
comportamiento, suelen caer fácilmente en excesos, etc., como se mencioné en
un principio, los factores que se involucran son la economía, la familia, el lugar
donde se desenvuelven y conviven, el estado de ánimo influye mucho, debido a
que cuando se está pasando por un problema, en muchas de las ocasiones las
personas no saben controlar sus actos, y es inevitable que cometan delitos.

1
Hikal Carreón, Wael Sarwat. CRIMINOLOGÍA PSICOANALÍTICA, CONDUCTUAL Y DEL DESARROLLO. México.
1ª Edición. 2005. Pág. 67
2
Hikal Carreón, Wael Sarwat. Ob. Cit. Pág. 30
A manera de conclusión, estudiar la personalidad de los individuos que cometen
conductas antijurídicas es algo complejo, esto, porque depende de varios factores
que alteran el bienestar de la persona en su conjunto, despertando trastornos o
desorden de la realidad, llevándolos lejos de un estado de tranquilidad. Sin
embargo considero que algunos de estos comportamientos no son justificables,
debido a que existen maneras de mejorar los problemas de personalidad, siempre
y cuando el sujeto acepte estar en un problema y se someta a alguna terapia
donde pueda controlar aquellos actos que afecten a la sociedad.