La Pandemia, la Vacunación y los Derechos Humanos

La vida en pijama; un enfoque global humanitario

Presentado por

Giovanni Parada_Patiño

Estudiante de Derecho

Docente

Profesor Dr. David Mendoza Beltrán

Argumentación Jurídica, Programa de Derecho, Facultad de Derecho y Ciencias Políticas y Sociales

Universidad La Gran Colombia

Bogotá

2021
El COVID-19 y los derechos humanos 2

La pijama1, aquella descuidada vestimenta para usar en casa, se ha convertido en la nueva

prenda ícono mundial que integra el nuevo outfit2 imprescindible de los seres humanos, la vida, los

sueños, el descanso, la tranquilidad, el trabajo, las esperanzas, la interacción, las nuevas costumbres

temporales y la actividades cotidianas en general. La pandemia de COVID-19 conocida a nivel

mundial como la pandemia de coronavirus, empezó en diciembre de 2019 en la Ciudad de Wuhan3,

capital de la provincia de Hubei, en la República Popular China alterando considerablemente la vida

en el conocido planeta y por consiguiente todo lo que allí habita, converge, establece, normaliza y

rige. La OMS4, reconoció oficialmente esta pandemia el 11 de marzo de 2020, dividiendo la historia

de la humanidad en un antes y un ahora, momentos definitivos como se conoce la vida normalmente

en su constante dinámica en cualquier lugar del mundo.

El virus5 confirmado se transmite tóxicamente al parecer únicamente entre humanos y a

través de las pequeñas partículas y gotas de saliva expulsada, conocidas técnicamente como micro

1 El o la pijama o piyama (del inglés pajamas, que a su vez proviene del hindi pā[e]ǧāma, y este del persa ‫ هماجياپ‬pā[y]ǧāme,
prenda de pierna) es una vestimenta para usar en casa. Suele estar formada por dos piezas: una parte superior y pantalones,
aunque existen también de una sola pieza. El uso del pijama se extendió a partir del siglo XVIII, fecha en que empezaron a
popularizarse unos pantalones importados de Persia que recibían el nombre de pijama. Hasta entonces, tanto hombres como
mujeres habían venido empleando largos camisones confeccionados en lana o terciopelo, que iban abrochados hasta los pies.
Además de como prenda de dormir, existen uniformes de uso profesional que también se denominan pijamas. Tal es el caso de
los «pijamas de quirófano», conjuntos formados por pantalón suelto y camisa, generalmente fabricados de algodón.
2 Outfit es una palabra del inglés que significa vestimenta, ropa o conjunto. El término se ha vuelto popular gracias a las redes

sociales, en donde se utiliza para comentar la manera de vestir de alguien, especialmente de celebridades e influenciadores.
Como tal, outfit es una palabra del inglés que funciona como sustantivo, y que puede emplearse para referirse a la vestimenta o
conjunto de atuendos de una persona.
3 Wuhan, acerca de este sonido [ù.xân] (en chino tradicional, 武漢; en chino simplificado, 武汉; pinyin, Wǔhàn), es la capital de
la provincia de Hubei y la ciudad más poblada en la zona central de la República Popular China. Está localizada en la confluencia
de los ríos Yangtsé y Han. Tiene una población aproximada de 11 millones de habitantes en un área de 8467 km², si se incluye el
área metropolitana.
4 La Organización Mundial de la Salud (OMS) es el organismo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) especializado en

gestionar políticas de prevención, promoción e intervención a nivel mundial en la salud, definida en su Constitución como un
estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente como la ausencia de afecciones o enfermedades.
Inicialmente fue organizada por el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas, que impulsó la redacción de los primeros
estatutos de la OMS. La primera reunión de esta organización tuvo lugar en Ginebra (Suiza) en 1948.
5 Los virus son pequeños pedazos de ARN (ácido ribonucleico) o ADN (ácido desoxirribonucleico), muchos están encapsulados en

una envoltura hecha a base de proteínas conocida como cápside, otros protegen su material genético con una membrana o
envoltura derivada de la célula a la que infectan y algunos otros además rodean su cápside con una membrana celular.
El COVID-19 y los derechos humanos 3

gotas de Flügge6, que se emiten al hablar, estornudar, toser o espirar. La OMS dicta con mucha

rigurosidad que las medidas de prevención en contra, incluyen lavarse las manos, cubrirse la boca y

las vías nasales, el distanciamiento físico, el autoaislamiento y el uso de mascarillas certificadas en

principio y durante tiempo prolongado aún incierto en estos momentos. Las personas de la tercera

edad deben tener un especial cuidado por parte de ellas mismas y sus familias, ya que son propensas

en mayor manera, por lo cual se aconseja imperativamente el confinamiento domiciliario tanto como

sea posible en todo momento.

La vacunación ha empezado a ser la nueva esperanza de la humanidad llegando por dosis

personales a cada país en el mundo. Se han establecido protocolos de salud pública que fomentan

procesos adecuados y sanitarios para tal fin. En medio de la enfermedad y la cura, los derechos

humanos convergen en la importancia y jerarquía de edades, riesgos y otros factores de salubridad,

alborotando en ciertos países un flagelo casi invisible de la violación de ciertos derechos humanos,

quebrantando en principio el derecho fundamental a la vida, que empiezan a contaminarse por la

corrupción y los tráficos de influencias irrespetando los turnos y poniendo en riesgo la existencia de

los realmente vulnerables o que se convierten en carne de cañón7. Esta pandemia ha sido una prueba

error que manipula a la población entre la vida y la muerte y poco a poco se han ido estableciendo

nuevos roles para poder practicar de la mejor manera los derechos humanos a toda la población

mundial, en atención de la supervivencia y el respeto por los pueblos sin discriminación de razas,

géneros, religiones o pensamientos, cumpliendo en gran medida ese respeto universal de los 10

6 Las micro gotas o gotas de Flügge son pequeñas gotas de secreciones que se expulsan de forma inadvertida por la boca y la
nariz al hablar, estornudar, toser o espirar. Su existencia e importancia fue demostrada en la década de 1890 por el bacteriólogo
e higienista alemán Karl Flügge, de quien toman el nombre.
7 Carne de cañón es una frase hecha que hace referencia a la persona o grupo de personas, normalmente pertenecientes a una

muy baja posición social, a las que se expone sin miramientos a sufrir cualquier clase de daño, incluso la muerte.
El COVID-19 y los derechos humanos 4

principales tratados internacionales sobre derechos humanos, algunos complementados con

protocolos facultativos relativos a preocupaciones específicas.

El COVID-19 que en sus inicios fue nombrado _neumonía por coronavirus_ es una

enfermedad altamente infecciosa y virulenta causada por el virus SARS-CoV-28. Los síntomas son

muy similares a los de la gripe y resfriado común, haciendo confundir en muchas ocasiones en su

diagnóstico final, sin embargo además de los clásicos síntomas de la gripe, también incluye

malestares incisivos como los de fiebre alta, tos compleja, disnea, mialgias y fatigas extremas en la

salud del paciente en progreso. También produce principios de neumonía, dificultad para respirar,

sepsis y choques sépticos que son los que conducen con gran frecuencia al deceso del paciente. Por

10 meses aproximadamente desde su anuncio oficial como pandemia, no existía vacuna o

tratamiento para su cura, sin embargo los laboratorios se pusieron a la tarea y ya se están enviando

mundialmente vacunas a todos los países del mundo como lo son Sinovac (China), Sinopharm

(Wuhan, China), Sinopharm (Beijing, China), Oxford/AstraZeneca, Moderna y Pfizer y BioNTech,

según la información compartida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los laboratorios

mencionados son los que están liderando el asunto científicamente, ya que a este punto hay 141

vacunas en desarrollo, según la OMS.

El origen de la pandemia suscitó en los hospitales locales de Wuhan detectando los primeros

casos a mediados de diciembre del año 2019, fecha próxima a la navidad, una navidad que la

8Elcoronavirus de tipo 2 causante del síndrome respiratorio agudo severo, abreviado SARS-CoV-2, es un tipo de coronavirus
causante de la enfermedad por coronavirus de 2019, cuya expansión mundial provocó la pandemia de COVID-19.
El COVID-19 y los derechos humanos 5

humanidad jamás olvidará. Estos casos detectados se pudieron enmarcar principalmente en el

Mercado Mayorista de Mariscos del Sur de China de Wuhan 9. Ya para el 9 de febrero de 2021, una

alta comisión de la OMS se trasladó a China para investigar a profundidad el origen y concluyeron

con gran alerta que el fin del mundo social conocido había empezado con una pandemia tan

determinante, mortal y lasciva que dar la noticia era un momento determinante, difícil y de gran

desconcierto social, suprimiendo en principio el origen entre animales-humanos.

Las estadísticas empezaron a crecer desbordadamente hora tras hora, los enfermos y nuevos

muertos empezaron a enlistar los casos en diversos países de Europa incrementando la turbación a

salir a las calles y tener contacto con otras personas, casi comparado con las histerias masivas de las

películas de zombies10 que recrean como sería el fin del mundo si la humanidad se viera amenazada

por un flagelo virulento sin precedentes. Día tras día las personas infectas aumentaban como si no

hubiese un mañana, las estadísticas crecían sin control, las noticias en los medios de comunicación

en televisión, radio y prensa digital recitaban lo infame, con algunas noticias amarillistas y otras con

gran decoro, creciendo en el descontrol colectivo. Sin embargo todos en el mundo opinaban,

comentaban, decían y se creían con atribuciones para diagnosticar sin argumentos fundamentales y

muchos tomaron la noticia de la pandemia deportivamente, otros países entraron en toques de

queda obligatorios inmediatamente, frenando esas actitudes folclóricas ante un estado de alerta roja.

Así, desde allí, ha estado el mundo en ires y venires, desafiando poco a poco un virus

aparentemente tranquilo, pero letal y nada amigable. Sin embargo si vemos el panorama desde una

óptica mucho más abierta y amplia, analizando las debilidades, amenazas y oportunidades, nos

9 El Mercado mayorista de mariscos de Huanan o simplemente como Mercado de mariscos de Huanan, fue un mercado mojado
de la ciudad china de Wuhan, en el este de la provincia de Hubei.
10 Un zombi se refiere en términos generales a un ente que, de una u otra manera, puede resucitar o volver a la vida. El concepto

de zombi encuentra sus orígenes en una figura legendaria propia del culto vudú haitiano. Se trata de un muerto resucitado por
medios mágicos por un hechicero para convertirlo en su esclavo.
El COVID-19 y los derechos humanos 6

damos cuenta que no todo lo allegado ha sido negativo para la humanidad en general. Empezando

por la misma sociedad, los derechos humanos y la misericordia mundial, la cuarentena ha desatado la

integración familiar y nuevas formas de expresión compasiva que antes de la situación eran tan

subjetivas o propicias únicamente para situaciones extremas.

El mundo allí afuera en su plenitud, la naturaleza, los animales, los cielos, las aguas, el aire, el

medio ambiente en general encontraron después de casi más de 100 años de dinamismo,

industrialización y humanismo exagerado extremo, un descanso a esa revolución industrial que un

día inicio contaminando todo a su paso en el afán del progreso y el consumismo. La naturaleza tomó

su parte casi plena y dio un reinicio de evolución placentera y tranquila que se ve marcada en cada

lugar rural y citadino, imprimiendo una nueva era de respiro, transformación, reforma y serenidad

ambiental que también a futuro repercutirá en los seres humanos incluso eliminando casi totalmente

el calentamiento global y recuperando increíblemente la capa de ozono11. Los animales sintieron en

su gran mayoría también una tregua a su persecución mortal y con plena libertad caminaban por las

ciudades como si fueran sus hogares natos de conformación de manadas, mostrando al mundo que

si es posible vivir en comunidad sin matar o acabar con las especies diferentes a nosotros, dando

ejemplo de verdadera humanidad como animales sintientes y con derechos.

También cambio sustancialmente la economía, los valores representativos de las monedas

que dominan el comercio mundial, la banca, la inversión. El consumismo taimado y perverso, la

forma de realizar las compras y el trabajar para suplir las necesidades básicas en la mayoría de

11 Científicos demostraron que la capa de ozono se está recuperando. Por fin una buena noticia. Sin embargo, no todo se le
atribuye a la cuarentena. La revista Nature publicó un artículo en el que explican los beneficios que ha traído al planeta el
Protocolo de Montreal, firmado en 1987. En él se acordó una medida muy importante, con un gran impacto para la capa de
ozono. Se prohibió el uso de aerosoles nocivos, que dañaban la atmósfera. En el estudio, Antara Banerjee y sus colegas de la
Universidad de Colorado Boulder modelaron los patrones cambiantes del viento relacionado con la recuperación de la capa de
ozono. "No solo ha estimulado la curación de la capa de ozono, también ha estimulado los recientes cambios observados en los
patrones de circulación aéreos del hemisferio sur".
El COVID-19 y los derechos humanos 7

sociedades faltantes de prosperidad y progreso se frenó generando un descanso plural obligado en

varios sectores colectivos sociales. La forma de ocuparse productivamente se transformó en el

teletrabajo desde la comodidad e intimidad de la casa, evolucionando a darle el poder casi máximo a

la tecnología y sus secuaces digitales, proporcionando la potestad como un bien indispensable para

vivir. Si el mundo antes de marzo de 2019 estaba al alcance de una pantalla inteligente, ahora, en

tiempos plenos de la era del COVID-19, hasta la vida misma se vive plácidamente a través de

dispositivos “inteligentes” que guardan el todo de la gran mayoría de las personas que confían su

existencia a un teléfono; un dispositivo electrónico que facilita la comunicación, más no es el alma de

las personas, que sentados en la cama, la sala o incluso desde el baño, siendo sus zonas de confort

preferidas, manipulan el mundo buscando la aprobación y dominio digital. Para tal comparación se

encuentra como gran ejemplo, la película HER 12 (2013) dirigida por Spike Jonze, que protagoniza

Joaquín Phoenix13, el mismo actor del JOKER (2019). HER explora, entre otros temas, la

complejidad de las relaciones afectivas humanas y la soledad insurrecta guardada en un tiempo

futuro inmediato en el que la tecnología está cada vez más humanizada y en que el aislamiento y las

paredes físicas con grandes ventanas que nos separan del mundo en tiempos de hiperconexión y con

semidioses perfectos que someten las vidas simples de los casi siete mil millones de humanos que

habitamos este planeta y contando cada día, porque el encerramiento ha aumentado las tasas de

12
La película HER nos sitúa en un futuro no muy lejano donde vive Theodore (Joaquin Phoenix), un hombre solitario que trabaja
como escritor y que está pasando por las últimas etapas de un traumático divorcio. La vida de Theodore no es demasiado
emocionante, cuando no está trabajando se pasa las horas jugando a videojuegos y, de vez en cuando, sale con sus amigos. Pero
todo va a cambiar cuando el escritor decide adquirir un nuevo sistema operativo para su teléfono y su ordenador, y este sistema
tiene como nombre "Samantha" (voz de Scarlett Johansson). Samantha es un nuevo modelo de inteligencia artificial y a Theodore
le gusta desde el primer momento: su voz es sexy y bonita, sabe escuchar, da buenos consejos y su función es satisfacer los deseos
de su dueño. Cada vez pasan más tiempo juntos y lo que Theodore no podía imaginarse es que Samantha y él acabarían
enamorándose el uno del otro, pero Samantha no es una persona, sino un robot, lo que sume a Theodore en una extraña
sensación de júbilo y dudas.
13 Joaquin Rafael Phoenix es un actor estadounidense. Ganador del Óscar y nominado en 3 ocasiones para el mismo, dos Globo

de Oro, un Grammy, un SAG, un BAFTA, dos Critics Choice Awards, la Copa Volpi en el Festival Internacional de Cine de Venecia
y el premio a Mejor Actor en el Festival de Cannes.
El COVID-19 y los derechos humanos 8

natalidad el último año en un 4% a nivel mundial, siendo la pandemia una excusa para la

reproducción infinita; así pareciera.

La pandemia también trajo pesares, muchas lágrimas e infortunios a nivel familiar. Como

todo virus siempre existirá una posible vacuna al pie del cañón lista para eliminarlo, entonces los

científicos se pusieron a la tarea de buscarla a toda costa y en tiempo record, ya que la

implementación promedio de una inoculación para que sea efectiva y adecuada requiere cinco años

aproximadamente de investigación, pruebas y error antes de salir al mercado oficialmente legal por la

OMS como la posible salvación. En este caso el tiempo no se tomó en cuenta, fue etéreo y se

declaró enemigo de la vida, los grandes laboratorios químicos y farmacéuticos empezaron a trabajar

mancomunadamente día y noche para encontrar una vacuna con efectividad del 99.9999998888 por

ciento en lo posible, ofreciendo la mejor posibilidad para ser inmune al virus en el caso de las

personas que no lo han padecido y la protección posterior para quienes ya lo padecieron y lograron

salir avanti de las garras de una enfermedad desconocida y mortal que parece inofensiva y superflua.

Para inicios de marzo del presenta año, diez vacunas distintas han sido aprobadas

oficialmente con un 95% de eficacia para el uso en el público general, sin embargo existen otras 66

vacunas en estado beta14 que están en cola para ser ensayadas en fase I, II y III15. Las vacunas contra

14 El estado “beta” es un estado inestable e inseguro que requiere de mayor investigación para adjudicarse un estado alfa o
completo que se pueda sacar a la luz. El concepto “beta permanente” es la antítesis al confort firme y estable.
15 Fases de desarrollo de una vacuna: Los diferentes estudios de investigación tienen como prioridad la seguridad de uso de una

vacuna y en seguida su eficacia. Los estudios son realizados en fases: fase preclínica y fases I, II, III, y IV. •Fase preclínica:
Resultados experimentales sobre la eficacia y tolerancia en modelo animal apoyan su posterior investigación en humanos. Los
estudios preclínicos usan sistemas de cultivos de tejidos o cultivos de células y pruebas en animales, que pueden ser ratones o
monos, para evaluar la seguridad de la vacuna candidata y su capacidad imunógena, o capacidad de provocar una respuesta
inmunológica. •Fase I: Usualmente testa una nueva vacuna en etapa experimental en un pequeño número de humanos, en
general menos de 100 adultos con el objetivo de evaluar inicialmente su seguridad y sus efectos biológicos, incluida la
inmunogenicidad. Esta fase puede incluir estudios de dosis y vías de administración. •Fase II: Testa una vacuna que fue
considerada segura en la Fase I y que necesita un grupo más grande de humanos (generalmente entre 200 y 500) para monitorear
seguridad y también los ensayos que determinaran la eficacia de la vacuna. Las metas de las pruebas de fase II son estudiar la
vacuna candidata en cuanto a su seguridad, capacidad imunógena, dosis propuestas, y método de administración. •Fase III: Tiene
como objetivo evaluar de forma más completa la seguridad y la eficacia en la prevención de las enfermedades e involucran una
mayor cantidad de voluntarios que participan en un estudio multicéntrico adecuadamente controlado. Pueden incluir cientos a
El COVID-19 y los derechos humanos 9

el COVID-19 contienen un vector que son versiones inactivas del propio coronavirus, llamado

adenovirus16 al que se le complementa ARN17 del SARS-CoV-2 para su estructura molecular óptima.

La capacidad de los laboratorios en su producción ha sido limitada y la distribución da

prioridad a la población de mayor riesgo en el mundo, como son los adultos mayores siendo los

primeros humanos en ser atendidos a plenitud junto con los médicos y trabajadores de la salud que

están expuestos constantemente, siendo un gran grupo prioritario de riesgo y con gran atención

mundial dándole gran significado a los derechos y principios fundamentales de los derechos

humanos en su total esencia. Los países que tiene una economía fuerte, estable y reservada han sido

los primeros clientes sanitarios que han adquirido más de once mil millones de dosis de vacunas por

adelantado antes de salir oficialmente, representando el 14% de la población mundial.

La vacunación a nivel Colombia estableció mecanismos bilaterales de vacunación, las dosis

de las vacunas están establecidas así: (i) Pfizer: 10 millones de dosis adquiridas para 5 millones de

personas, (ii)AstraZeneca: Colombia compró 10 millones de dosis para 5 millones de personas,

(iii)Janssen: 9 millones de dosis para 9 millones de personas, (iv)Moderna: el Gobierno Nacional

acaba de adquirir 10 millones de dosis para 5 millones de personas, y (v)Sinovac: 2.5 millones de

dosis para 1.250.000 personas.

miles de humanos en un país o varios países. Las pruebas de fase III son aleatorias y doble ciego, e involucran la vacuna
experimental que se prueba contra un placebo (el placebo puede ser una solución salina, una vacuna para otra enfermedad o
alguna otra sustancia). En general es el paso anterior a la aprobación de una vacuna. •Fase IV: Son los estudios que ocurren
después de la aprobación de una vacuna en uno o varios países. Estos estudios tienen como objetivo evaluar como la vacuna
funciona en el “mundo real”. En general son los estudios de efectividad y también siguen monitoreando los eventos adversos.
Tomado de file:///C:/Users/USER/Desktop/U/4to%20Semestre/Argumentaci%C3%B3n%20jur%C3%ADdica/2020-cde-covid-19-
fases-desarrollo-vacuna.pdf
16 Los adenovirus son una familia muy contagiosa de virus que infecta tanto a humanos como a otros animales. Son virus no

encapsulados de ADN bicatenario que pueden provocar enfermedades o malestares como infecciones en las vías respiratorias,
conjuntivitis, cistitis hemorrágica y gastroenteritis.
17 El ARN mensajero (ARNm) es una molécula de ARN de cadena simple, complementaria a una de las cadenas de ADN de un gen.

El ARNm es una versión del ARN del gen que sale del núcleo celular y se mueve al citoplasma donde se fabrican las proteínas.
Durante la síntesis de proteínas, un orgánulo llamado ribosoma se mueve a lo largo del ARNm, lee su secuencia de bases, y utiliza
el código genético de traducir cada triplete de tres bases o codón, en su aminoácido correspondiente.
El COVID-19 y los derechos humanos 10

Implantando y poniendo como punto de partida los Derechos Humanos y el Derecho

Internacional Humanitario en triada junto con la pandemia y la vacunación; es necesario y de

carácter imperativo “garantizar” que la respuesta de defensa en primera instancia esté a la altura de

los derechos humanos básicos de igualdad, salud pública y equidad, generando la confianza de

respuestas asertivas y proporcionadas ante la calamidad. Los países y las medidas restrictivas

obligatorias “deben” tener especial cuidado en no violar los estipendios de las comunidades más

vulnerables teniéndolas en cuenta como primera opción de cuidado. Las agrupaciones de la mano

del estado y su gobierno de turno deben trabajar asociadamente eliminando ese sentimiento de

desconfianza y descontrol que se puede percibir si no existe un correcto manejo de la pandemia

violando derechos constitucionales y derechos humanos fundamentales importantes.

Las colectividades en principio haciendo venia a los derechos humanos y sus convenios

internacionales deben asistirse a sí mismas desde sus hogares, individualmente, teniendo conciencia

colectiva de salud pública, amabilidad, solidaridad y ética social. Si revertimos en la historia, las leyes

internacionales de derechos humanos describen marcos que avalan que los esfuerzos de salud de los

países deben proporcionar voluntades máximas de atención a todos los habitantes sin limitación,

exclusión, discriminación o preferencia alguna. Los derechos principales que implican emergencias

de salud pública local, nacional y mundial incluyen el derecho a la salud primeramente que por

horizontalidad jerárquica está conectado con el derecho esencial a la vida.

Todas las comunidades sin supresión del país, idioma o raza, están llamadas a jugar un papel

definitivo en los derechos humanos y la emergencia en la enfermedad. Entre sus funciones

principales está la responsabilidad social de sana y verdadera información a través de noticias reales y

precisas sobre lo que realmente está aconteciendo alrededor de la emergencia, en la prevención

social masiva del pánico y el miedo generalizado, en la ayuda mutua y la integración en la búsqueda

de la bienandanza sanitaria pública como fin principal total. En su desempeño se debe asegurar el
El COVID-19 y los derechos humanos 11

alimento, el mínimo vital, las facilidades de conseguirlo, los suministros en medicamentos y el

cuidado de atención médica prioritarias, sobre todo para los menores de edad y octogenarios. Las

personas en jefe y líderes comunitarios deben estar preparadas constantemente con información

actualizada y oportuna para que propaguen dicha investigación en bien de la comunidad. Todas estas

acciones deben estar orientadas al bien común, general y la protección de los derechos humanos

para cada una de las personas habitantes en cualquier lugar de los cuatro puntos cardinales.

Las palabras tienen poder y los haberes humanos se ven violados constantemente por las

mismas y su significado incisivo pluralista. Las comunidades deben dialogar con frases neutrales que

no denoten turbación, escepticismo, infección y propagación, ya que incitan a la disparidad e

insurrección general presas del miedo y la desinformación. Una palabra como “infectado” es capaz

de marcar una gran diferencia y ser el punto de partida que elimine a la comunidad no por un virus,

sino por el pánico excesivo social de intolerancia y descontrol. Un ejemplo puntual es cuando las

personas ignorantemente decían al principio de la pandemia que los médicos eran portadores del

virus en todo momento y fueron ofendidos, excluidos, desterrados e incluso maltratados físicamente

solo por la desinformación de la turbación, presas de la ignominia colectiva.

Los gobiernos, el bloque constitucional y los dirigentes deben “garantizar” el derecho a la

salud como la mejor defensa contra la pandemia mundial del COVID-19, trabajando a diario con la

infraestructura gubernamental asociada de inmunidad pública y médica ofreciendo en todo

momento la atención de calidad en bien social. El Derecho Internacional Humanitario y el

Reglamento Sanitario Internacional tienen la obligación de propiciar e intercambiar recursos

científicos para la consecución de la epidemia. Ningún país por falta de recursos y posibilidades debe

quedarse atrás en recibir ayuda global que les auxilie a enfrentar la pandemia como los países que si

tienen los recursos para tal fin.

El COVID-19 y los derechos humanos 12

Hasta el día de hoy, ningún país y territorio en el mundo está completamente preparado para

poder manejar la emergencia sanitaria que el COVID-19 infiere en sus habitantes. Eventualmente en

el camino se van tomando nuevas proyecciones nacidas de la prueba error con mejores ascendentes,

pero en cualquier momento las parvedades se pueden salir de las manos y crear emergencias de

magnitud importante. Sin embargo entre comunidades y gobiernos la emergencia ya se maneja entre

vaivenes que ayudan a proyectar a futuro nuevas herramientas para no caer en la improvisación y la

falta de recursos adecuados para la administración y el control local. Otro punto importante en la

agenda de la lista de los derechos humanos nacionales e internacionales son las personas que

actualmente están en las cárceles, centros de detención en condición de privación total o pasajera de

la libertad y habitantes de la calle, personas sumamente vulnerables de cualquier problema social.

Los gobiernos deben garantizar totalmente la atención en salud a las personas encarceladas

con las mismas calidades que las personas que se encuentran en libertad viviendo en situación de

indigencia y suma pobreza en las calles, siendo invisibles. Deben garantizar la atención médica sin

discriminación y sin dejarlas de últimas en la atención y vacunación solo por su condición excluida

de la sociedad, ya sea por un delito o por una mala decisión. El hacinamiento, las penitenciarías que

están llenas por sobrecupos, las malas condiciones de sobrevivencia y en virtud de su dignidad no

deben ser otro detonante para violar sus derechos humanos sin miramientos oficiales

deportivamente por el gobierno de cualquier país.

Ninguna medida de emergencia actual tampoco puede excluir, prohibir o dejar en la parte

exterior, a las personas de la posibilidad de trabajar y sentirse productivas, de poder integrarse con

todas las medidas de seguridad, de la diversión, la naturaleza y los espacios libres. El hombre en su

condición natural biológica y espiritual es un ser social, curioso, caminante, que necesita para su

salud anímica y psicológica de la interacción básica mínima vital para la sana tranquilidad colectiva.

Si estos espacios se ven truncados y prohibidos en gran medida, se empiezan a suscitar como lo
El COVID-19 y los derechos humanos 13

vimos en meses anteriores, en problemas de salud pública internos que conllevan a la violencia

familiar, las crisis psicológicas, la inestabilidad mental y otras condiciones que están en contravía de

la humanidad y sus sanas costumbres, incluso a la muerte.

Si las personas dejan de trabajar, recibir su sueldo y producir de manera abrupta, se verán

afectadas sus condiciones de vida proclivemente y entrarán en crisis. Se debe entender que todos

debemos estar en condiciones de aportar nuestro grano de arena para la consecución triunfal de la

pandemia, sin embargo los gobiernos, las empresas públicas y privadas en poder de su rol, deben

intentar asegurar el derecho al empleo en su mayor posibilidad y lo que el conlleva en la vida de un

ser humano; su desarrollo como persona, en familia y su futuro en la sociedad. Si no tienen este

apoyo o se aleja de sus posibilidades, la tendencia a la pena colectiva será grande, sin precedentes y

tendremos una ola de personas psicológicamente adversas y enfermas por las crisis nerviosas que

esta condición puede conllevar a futuro, sobretodo en economías difíciles.

En estos momentos y a portas de cumplir un año del insuceso mundial, nos seguimos

enfrentando inseguramente a una enfermedad global. La pandemia llegó de manera invisible en

instantes iniciales cuando la navidad; uno de los momentos más felices de la mayoría de humanos,

ingresó sin avisar, sin anunciarse, sin saludar, solo se estableció con el único fin de dar una gran

lección a la humanidad; reflexión colectiva, misericordia, perdón, detenerse a pensar, volver a

empezar. Se le puede citar de mil formas, sin embargo, lo cierto es que realmente la historia moderna

y la globalización se fracturaron en dos, sin reconocer derechos humanos de ninguna clase.

En marzo de 2020, un año fatal para muchos, legalmente se le anunció al mundo el desenlace

inevitable de la pandemia del COVID-19 como uno de los instantes más demenciales y definitivos
El COVID-19 y los derechos humanos 14

del futuro de la humanidad. En ese soplo de tiempo se llegó a tomar el anuncio como si el mundo

sufriera colectiva y masivamente de una gripe indefensa que llegó a asustar hasta los más fuertes y

seguros de sí en sus estados de confort, pero conforme fueron pasando los días, las estadísticas

aumentaban desde Europa, los muertos diariamente empezaron a generar turbación colectiva,

llegando a desinformar y crear pánico mundial, incluso conociendo información de supuestas teorías

conspirativas de una tercera guerra mundial biológica, el anhelado y miedosos fin del mundo, incluso

hasta el apocalipsis que recitan las distintas biblias y líderes religiosos.

Los medios de comunicación alternativos, las páginas digitales que desinforman

imprudentemente y miles de noticias no oficiales, también llegaron a anunciar que el virus era un

arma biológica como el resultado de un complot del nuevo orden mundial y los Illuminati18. Están

son informaciones no oficiales que hablan de maquinaciones y la venida de la tercera guerra mundial

entre potencias, incluso sectas oscuras y hasta extraterrestres que supuestamente circundan la tierra

planeando la destrucción de la humanidad lentamente, haciendo sufrir a los individuos tanto como

nosotros hemos hecho sufrir al planeta tierra desde que la habitamos y tenemos historia.

Luego, poco a poco, entre tanta mortandad casi costumbrista, los seres humanos empezaron

a tener esperanzas en una vacuna concertada y desarrollada por los grandes laboratorios

farmacéuticos. Los gobiernos en su afán de proteger los derechos humanos y la salud pública de

todas las personas, desarrollaron estrategias encaminadas a la sanidad, el cuidado y la tranquilidad

social. Así fueron pasando los días, los meses, el semestre y se aprendió a convivir con la pandemia

18 La Orden de los Illuminati fue fundada en 1776 en Baviera, Alemania, por el jurista Adam Weishaupt. El objetivo de esta
sociedad secreta, inspirada en los ideales de la ilustración y cuya estructura estaba basada en la de las órdenes masónicas, era
acabar con el oscurantismo y con la influencia que en aquella época tenía la iglesia en la esfera política. Tras el ascenso al poder
del príncipe Karl Theodor, la Orden los Illuminati, igual que otras sociedades secretas, fue ilegalizada, disolviéndose en 1785,
menos de una década después de su fundación. Pese a su desaparición, algunos creían que la organización siguió operando de
forma clandestina.
El COVID-19 y los derechos humanos 15

en las afueras de los hogares, de lejos, a ver a las personas como “infectados potenciales”, a estar

encerrados y a ver el mundo a través de las ventanas, a observar la tierra virtualmente y conectarse

con los semejantes a través del internet, las redes sociales, la telefonía móvil y la tecnología con

todos sus paralelos en su máxima expresión. La forma de vivir, hablar, comunicarse, establecer

relaciones afectivas y físicas, descansar, habitar, incluso departir, se vio traumatizada por un límite

bucal de color blanco azul; el tapabocas, el nuevo elemento de moda mundial que ocultó sonrisas,

palabras, besos, los afectos entre las familias, las parejas y los hijos.

Hoy 10 de marzo de 2021, casi cumplimos doce meses internos en nuestros hogares, antes

llamadas casas, porque solo las usábamos para dormir y descansar, siendo cárceles para muchos,

bendición para otros, pagando una condena “a cuenta de cuál crimen” como dirían los que son

amigos de la calle y sus diversos encantos y peligros. Estamos necesariamente acatando unas normas

y reglas nuevas para poder sobrevivir y seguir en y con este planeta, estamos inmersos en nuestras

propias cuatro paredes adornadas de familia, de recuerdos, de remembranzas, día tras día, situación

que jamás llegamos a pensar e imaginar en nuestra modernidad y que solo contemplábamos como el

mero ejercicio de estar por un rato, para llegar, descansar, hacer el amor, ver televisión, dormir y no

habitar en lo posible, porque el mundo allá afuera llama y es mejor que habitar en la tranquilidad,

como lo pensarían millones de personas alrededor del mundo.

Jamás llegamos a pensar estar por más de doce horas al día en nuestro propio hogar todos

los días, ya que entre tanta sumisión tecnológica, laboral y social; las vidas en la intimidad del cobijo

eran un lujo solo de los ricos, que pueden comprar el tiempo y el descanso. Pues bien, hoy gracias a

la pandemia, esta pasividad es un gran esplendor que pasó a ser consuetudinario y en bucle, que

ayudó a encontrar nuevas alternativas de convivencia y formas de ver la vida, muy distintas a los

paradigmas tradicionales que por más de 500 años en américa estábamos habituados por la lucha y la

conquista del poder. Como todo ser humano inconforme y curioso, la vida en casa las veinticuatro
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horas del día se convirtió en la nueva condición humana favorita de muchos, capaz de hacer florecer

nuevas formas de trabajar, relacionarse, crear y disfrutar, incluso de violentar y propiciar el crimen

intrafamiliar disparando los casos, irrespetando los derechos humanos, sobretodo de las mujeres, los

adultos mayores, los niños y los animales, como si la violencia hacia el semejante estuviera en el

ADN del hombre mismo sin importar su condición, (…)_que falla de diseño científico y espiritual.

En cuatro paredes hemos sido capaces de explorar, conocer y descubrir nuevas alternativas

poco convencionales de amor propio, amor familiar, amor en pareja, la plenitud y desarrollo

personal, laboral y hasta “social”, permitiéndonos reiniciar y sobre todo encontrar lo que antes con

tanto ahínco buscábamos afuera y en otras personas; la libertad, esa ansiada emancipación interna de

poder llegar a casa y descansar en nuestra propia intimidad, de estar con nosotros mismos, sin

presión, con paz, con sosiego y sobretodo, en el agrado y la exquisita complacencia de una buena

pijama como el símbolo icónico de la nueva realidad que nos ha permitido replantear la vida y volver

a empezar, reconstruir y repensar qué estamos haciendo con nuestras vidas, con nuestro futuro, en

sociedad, con nuestras familias, parejas, con los animales y con el planeta en su total humanidad. Los

derechos humanos se reinventan totalmente en la pandemia desde la óptica de la libertad, la estática

en la dinámica, la vida, la tranquilidad de poder ser sin la presión social del parecer.

La calamidad llegó, sí, nos revolcó la zona de confort, destendió camas, reactivo bibliotecas,

zonas de barbacoa, comedores solitarios, pero sobre todo, reacomodo y reconfiguró las relaciones

humanas, esas emociones que fundamentan los mismos derechos humanos. Reinterpreto toda una

simbiosis homogénea de empezar a vivir la vida en comunión, con el respecto al espacio del otro,

sus pensamientos, su palabra, su opinión, sus manías, sus costumbres, su pensamiento, incluso su

intimidad. La vacuna en cambio llegó no solo para salvar vidas y darle una nueva oportunidad a la

humanidad, más allá de la salud pública, la vacuna en cierta manera pretende frenar el revolcón

magnífico que los seres lograron por la interacción social en sus propios ambientes, siendo una
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bendición, pero también un paso atrás porque al estar todos inmunizados volvemos a esa

normalidad anterior de la indiferencia, el irrespeto, la violencia, la sociedad individual y la

mezquindad, entre otros factores desafortunados, porque bien dice el dicho popular: “Duele más la

cura, que la propia enfermedad”.

Los derechos humanos siempre estarán presentes en cualquier modernidad, país y colectivo.

El ser humano estará también siempre liderando la primera línea de la vida y su sustentación vital.

Con la pandemia, los derechos humanos se vieron violados considerablemente de muchas formas

sistémicas, aun así, en la capacidad de cada gobierno se ha logrado prolongar la existencia en ese

derecho vital. La vacunación en parte, será un proceso de desigualdad, corrupción y lucha por el

derecho humano entre etiquetas y edades, con métodos delicados de lucha también, donde la

corrupción y los favores estarán a la orden del día, sin embargo somos más los buenos, los

competentes, los justos, los seres humanos, porque así estemos en la situación que estemos, el

sentido común colectivo, la lucha por la vida, la relevancia de los adultos mayores, la supervivencia

como seres humanos en un mundo habitable, nos dan la fuerza interior de la igualdad y la

misericordia, serán muchas las emociones y los sentimientos para que los derechos humanos se

hagan cumplir de la mejor forma posible en cada rincón del planeta, en cada raza, con cada corazón,

mirada o pensamiento, porque siempre la vida de colores trascenderá sobre la muerte gris y oscura.
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Lista de Referencias

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https://dialogoderechoshumanos.com/blog/36-ciclo-grupo-constitucional/725-pandemia-

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https://www.cetim.ch/los-derechos-humanos-en-el-contexto-de-la-pandemia-del-covid-19/

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https://studentsforliberty.org/eslibertad/blog/derechos-humanos-frente-a-la-pandemia-

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