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1) Deleuze: Post scriptum sobre las sociedades de control.

Las sociedades disciplinarias surgen luego de las sociedades de soberanía. Entre el siglo XVII y
XVIII hasta el siglo XX, este cambio está supuesto por la llegada del capitalismo de
concentración, tanto en la producción como en la propiedad, centrado en la compra de
materias primas y la venta de productos. Operan mediante la organización de grandes centros
de encierro. El individuo pasa sucesivamente de un círculo cerrado a otro, cada uno con sus
leyes. Primero la familia, después la escuela, luego el trabajo ocasionalmente el hospital y a
veces la cárcel. En las fábricas se debía alcanzar un punto de equilibrio, el más alto para la
producción y el más bajo para los salarios, la fábrica hacía de los individuos un cuerpo y los
sindicatos podían movilizar a la masa. Se pretende gestionar su agonía y mantener a la gente
ocupada mientras se instalan esas nuevas fuerzas que ya están llamando a nuestras puertas.

Se trata de las sociedades de control, que surgen a finales del siglo XX hasta la actualidad,
cuando las disciplinas comienzan a entrar en crisis en provecho de nuevas fuerzas que iban
produciendo lentamente y se precipitaron una vez terminada la segunda guerra mundial. Los
centros de encierro son reemplazados por el ‘’control’’ al ‘’aire libre’’ de forma territorializada.
Su causa también está ligada a un cambio en el capitalismo, que pasa de vender productos a
vender servicios, ya no está centrado en la producción, ya no compra materias sino acciones,
pasa de ser un capitalismo de producción a uno de productos.

Esto no significa que una sociedad reemplaza y anula a otra, sino que en determinado
momento de la historia predominan ciertas tecnologías y dispositivos de poder que dan como
resultado un tipo específico de sujeto. Estas apariciones se deben a que dichas tecnologías de
poder entran en crisis y dejan de ser eficaces y rentables para el control y la dominación.

Bejar: El ámbito de lo íntimo.

El hombre moderno se ve continuamente escondido entre el deseo de desarrollar sus


potencialidades en la paz de la privacidad y la necesidad de ser una criatura social. La vida
privada y pública, social y política son dos caras de la misma moneda y la separación es una
creación histórica de un momento particular, donde se concibió a la esfera privada como el
lugar por excelencia de la libertad y la autonomía de los otros y del Estado mismo.

Concepción liberal: La privacidad es conquista y supone el triunfo de la individualidad en la


lucha contra el poder. Se deduce a partir de esto una noción defensiva de lo privado ante la
amenaza potencial que significa el gobierno. Para contener estas amenazas se necesita una
garantía legal: la privacidad es definida entonces como un derecho del individuo.

El respeto al ámbito privado es una prueba de la legitimidad del gobierno. Hay tres áreas
donde el poder no puede entrometerse:

 La actividad económica (propiedad privada)


 La vida doméstica (la familia y el hogar)
 El dominio íntimo (el desarrollo de su conciencia y fe)

El ámbito privado es el último lugar al que puede recurrir el individuo para ‘’protegerse una
amenaza externa. La vida es una obra de arte relacionada con la pasión. Depositan mucha fe
en el individuo, creen en su razón y en su lógica.

Concepción moderna: cuando el ámbito deja de ser un espacio entre bambalinas y empieza a
se el área predominante de la vida al individuo. El ámbito público deja de ser interesante para
el individuo, es descomprometido, narcisista y autocomplaciente. Desea mucho su autonomía
pero también es muy independiente, por eso se encuentra entre el dilema de desarrollar sus
potenciales de manera íntima y ser una criatura social. Tener convicciones políticas se vuelven
una cuestión del pasado. Hay una pérdida de la tradición, no se siente identificado con la
cultura. La vida ya no es una obra de arte, ahora es supervivencia.

2) A. Para Durkheim, los hechos sociales tienen una serie de características enunciadas a lo
largo del capítulo:

 Exteriores: Esto significa que son exteriores al individuo. Quiere decir que su creación y
desaparición no afecta a un individuo, ya que estos hechos están presentes ante la
presencia y posterior ausencia de los mismos individuos.
 Colectivos: Quiere decir que su presencia esta en más de un individuo, esta presente
en un conjunto de individuos.
 Coercitivos: Es tal vez la más relevante de las características. Esta característica tiene
dos puntos: que los hechos sociales son impuestos al individuo y que este mismo
individuo no puede librarse de esta imposición.

Hay que tener en cuenta que el hecho social no solo existe donde hay una organización
definida. Hay otros hechos que tienen la misma objetividad y el mismo ascendiente sobre el
individuo: las corrientes sociales y corrientes de opinión. Estas representan dos formas de
hechos sociales que no están cristalizadas, no son permanentes y no requieren de una
organización definida, pero cada una implica una imposición sobre los individuos.

Las corrientes sociales son las manifestaciones colectivas o fenómenos de masas donde el
individuo se tiene arrastrado por la muchedumbre, la cual ejerce un poder coercitivo. Por
ejemplo: una asamblea, un recital, una marcha multitudinaria, etc.

Las corrientes de opinión son las que nos impulsan a determinados comportamientos,
representan tendencias en la sociedad. Por ejemplo: Corrientes que nos impulsan al
matrimonio, al suicidio, a la natalidad, etc. El autor explica que mediante la estadística a través
de las cifras, se neutralizan las circunstancia individuales.

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