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Grandes Divisiones Geológicas, Formación y Estructura de las Montañas

Los terrenos, y las épocas a que corresponden, se agrupan en cinco grandes


categorías que se distinguen, principalmente, por los fósiles existentes en las capas
sedimentarias, por los fósiles existentes en las capas sedimentarias. Un solo grupo, el
primero, que es el más antiguo, contiene pocos fósiles: por esta razón se lo ha
denominado era precámbrica o azoico. De un grupo a otro se distingue de una manera
muy clara el progreso de la vida animal y vegetal en la superficie del globo. Los
terrenos más antiguos corresponden los fósiles de seres vivos de organización menos
complicada. A medida que nos acercamos a la época actual, se encuentran tipos de
animales y de plantas más perfeccionados, hasta que llegan a ser cada vez más
parecidos a las formas actuales. Los cinco grupos principales son, comenzado por el
más antiguo:

1° Era Precámbrica o azoico;


2° Era Primaria o Paleozoico (de palaios, antiguo);
3° Era Secundaria o Mesozoico (de mesos, medio);
4° Era Terciaria o Neozoico (de neos, nuevo)
5° Era Cuaternaria o Antropozoico (de antrophos, hombre)

Estas eras han sido divididas y subdivididas en gran número de grupos menos
importantes que toman, generalmente, su nombre del de la región un aspecto
característico

Era Precámbrica o Azoico

Bajo la denominación de Precámbrica se agrupan todas las formaciones geológicas


anteriores a la era primaria.
Los continentes y los mares: En América del Norte, o escudo canadiense, se
distinguen tres sistemas de depósitos separados por discordancias y correspondientes
a otros tantos plegamientos que han constituido la cadena huroniana (Canadá). Las
mismas formaciones se han descubiertos en Finlandia y Escandinavia (escudo báltico).
Por último, el escudo siberiano y el escudo de hemisferio sur (Brasil, Arabia, Australia,
India, Madagascar) formaban el zócalo continental y estaban separados por inmensos
océanos.

Las rocas: La mayoría de las rocas sedimentarias se ha transformado en rocas


cristalofilias; granitos, gneis, mica esquistos, calizas, cristalinas. El espesor de los
terrenos (50 kilómetros) es considerable, y para depositarse han necesitado,
seguramente, un tiempo de cincuenta o sesenta millones de años

Los fósiles: Los fósiles son raros y de difícil determinación. Sin embargo, permiten
afirmar que la vida existía ya; pero su conservación es tan defectuosa, los restos de
seres vivos están tan deteriorados, que no permiten identificar los primeros habitantes
de la tierra. No se conoce el origen de la vida.

Era Primeria o Paleozoico

Geografía: La mayor parte de la superficie del globo estaba cubierta por el mar. Las
proporciones de las masas continentales eran muy pequeñas comparadas con las
actuales. Francia estaba sumergida, a excepción del Macizo Central, los Pirineos y la
Bretaña. Esta ultima formaba parte de un continente que abarcaba la extremidad sur de
Inglaterra y de Irlanda. Algunas islas emergían en los Alpes y los Vosgos. Ciertas partes
del Macizo Central, de la Bretaña y de Inglaterra se elevaron sobre el nivel del mar
durante la era primeria. Aun hoy se encuentran en ellas trazas de sedimentos primarios.
La meseta de Brabante emergió durante la época y acusa muy netamente las diferentes
formaciones de este grupo: Coblenciano, Givetiano, Dinantiano. Dos grandes cadenas
de montañas emergieron: la cadena caledoniana, a fines del Silúrico, produjo las
Tierras Altas de Escocia, y la cadena escandinava. La cadena herciniana surgió durante
el Carbónico y acabo la formación de Europa. Sus huellas, gastadas por la erosión, se
encuentran en el Macizo Armoricano, el Macizo Central (Escocia), los Vosgos, la Selva
Negra y Bohemia.

Fósiles: Los seres vivos existentes en el paleozoico comprendían ya ciertos tipos de


organización bastante elevada en la escala biológica, tales como los cefalópodos y los
peces, entre los animales, y los helechos y la coníferas, entre los vegetales, los
caracteres paleontológicos de esta época prueban, pues, que la vida había ya, desde
hacia tiempo, en la superficie del globo, y que había tenido tiempo bastante para
progresar. Debemos admitir que las formaciones más antiguas correspondientes a
organismos menos elevados han sido demasiado profundamente modificadas para que
puedan conservar las huellas de los seres primitivos.

La fauna: En los terrenos primarios se encuentran protozoarios (foraminíferos), pólipos


(coralarios, graptolitos), equinodermos (cistideos, blastoideos, crinoideos), artrópodos
(crustáceos, arácnidos, insectos), braquiópodos, gusanos, moluscos (gasterópodos,
cefalópodos), vertebrados (peces, anfibios, reptiles). No se encuentran aves ni
mamíferos. Los más importantes de estos fósiles, son los trilobites, especie de
crustáceos que no se encuentran más que en los terrenos primarios, y que, por
consiguiente, sirven para caracterizar dichos terrenos; los cefalópodos tetrabranquiales
caracterizan igualmente la época paleozoica (orthoceras, cirtoceras, giroceras). Los
peces acorazados no existen más que en la época primaria, alcanzan su apogeo en el
Devónico, para desaparecer luego; citaremos las especies: Coccosteus, Pterichthys,
Cephalaspis. Los selacios son numerosos durante la era paleozoica, sobre todo en el
periodo Carbónico. Los anfibios están representados por el grupo de los estegocefalos,
cuyo esqueleto esta incompletamente osificado. Sus dientes están, por lo general,
cubiertos de aristas sinuosas enmarañadas, lo que ha hecho que se diera a algunos de
estos animales el nombre de laberintodontes. En este grupo debemos citar el
branquiosaurio, parecido a una gran salamandra, el arquegosaurio que parece hacer
sido el predecesor de los reptiles. Los anfibios no hacen su aparición hasta el
Carbónico. Los primeros reptiles datan del Pérmico. Como puede verse por esta breve
exposición, la fauna paleozoica era ya bastante compleja, sobre todo al final del
periodo.
La flora: La flora esta también muy bien representada, especialmente a partir del
Devónico. Comprende talofitas (hongos, algas), de las que se encuentran ya indicios al
principio del Silúrico: helechos, aparecidos en la época silúrica, muchos de los cuales
alcanzan dimensiones enormes (10 metros de altura). Este periodo constituye el reino
de los helechos arborescentes, de las equisetáceas (calamitas) y de las licopodiáceas
(lepidodendro) aparecidas en la época devónica. Esos diferentes órdenes pertenecen a
las criptógamas. Las fanerógamas están representadas, a partir del Devónico, por las
cordaitas, a las cuales deben añadirse las coníferas, a partir del Pérmico. Los helechos
con semilla constituyente la transitacion entre las plantas sin flores y las plantas con
flores.

Clima: Los climas han sufrido variaciones a través de los tiempos primarios. Existieron
glaciares al comienzo del Cámbrico. En el Silúrico, el clima se hizo sensiblemente
uniforme para toda la Tierra, y lo mismo en el Carbónico, mientras que el Devónico y el
Pérmico de Europa se caracterizaron por un clima desértico.

Durante el pasado Geológico se ha producido una formación de montañas en varios


lugares del mundo. Los jóvenes cinturones montañosos que abarcan la cordillera
Americana; hace cien millones de años se formaron los primeros jóvenes cinturones
montañosos, entre ellos están el Himalaya que dio inicio a su crecimiento hace 50
millones de años, estos cinturones montañosos se forman por movimientos de placas
tectónicas, es decir, cuando una capa choca con otra y la capa más delgada se hunde
bajo la otra, se quema en la lava y esta genera montañas

Estos jóvenes cinturones existen también en otras partes del planeta, como en las
cadenas montañosas del Paleozoico y Precámbrico, aunque esas estructuras
antiguas están hoy en día profundamente erosionadas y topográficamente sobresalen
en relación con lo que está alrededor, y goza los mismos rasgos estructurales en las
más jóvenes, en este grupo más antiguo son los Apalaches del este de Estados Unidos,
y los Urales en Rusia. Aunque los principales cinturones montañosos se demoran unos
más que otros, todos obtienen las mismas estructuras básicas.
También uno de los principales avances de la estructura de la tierra se inicio en 1840,
cuando Sir George Everest (a quien debe su nombre el monte Everest), concluyo la
primera investigación topográfica de la India, utilizando dos métodos diferentes, durante
esta investigación midió la distancia entre las ciudades de Kalianpur y Kaliana, las
cuales estaban situadas al sur de la cordillera del Himalaya, el primer método que
empleo fue la técnica convencional de triangulación, y el otro la distancia la distancia se
estableció astronómicamente, aunque las dos técnicas debían producir resultados
parecidos, pero los cálculos astronómicos obtenidos colocaron a ambas ciudades por
casi 150 metras más cerca una de la otra que la técnica de triangulación. La
discrepancia se atribuyo a la atracción gravitacional por el Himalaya sobre la plomada
utilizada para nivelar el instrumento astronómico, se sugirió que la deflexión de la
plomada seria mayor en Kaliana que en Kalianpur, porque esta estaba más cerca de las
montañas.

Unos años después, J. H. Pratt calculo la masa del Himalaya y el error que la influencia
gravitacional de las montañas debería haber producido. Para su asombro, Pratt
descubrió que las montañas deberían haber producido un error tres veces mayor que el
realmente generado.

Por lo tanto los estudios sismológicos y gravitacionales han confirmado la existencia de


raíces de corteza debajo de algunas cordilleras montañosas. El grosor de la corteza
continental es normalmente de unos 35 kilómetros, pero para algunos cinturones
montañosos se han determinado grosores que superan los 70 kilómetros. Regiones
elevadas que son soportadas fundamentalmente por la flotación de las raíces de la
corteza son los Andes, Sierra Nevada y la llanura tibetana

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