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Boletín Médico del

Hospital Infantil de México

Artículo de revisión

La crítica y la educación médica: hacia un conocimiento


liberador. Parte I

Sin contar con el consentimiento previo por escrito del editor, no podrá reproducirse ni fotocopiarse ninguna parte de esta publicación.   © Permanyer 2018
Leonardo Viniegra-Velázquez*
Unidad de Investigación en Medicina Basada en Evidencias, Hospital Infantil de México Federico Gómez, Ciudad de México, México

Resumen
Como marco intelectivo e interpretativo de este trabajo se propone y argumenta el diagnóstico del momento actual como
colapso civilizatorio, provocado por la dominancia de los intereses de lucro sin límites, que ha sido posible por la insensi-
bilidad y la permisividad mayoritarias de la población ante una degradación social y ecosistémica extrema. Detrás de tal
«anestesia» está la dominación de conciencias y cuerpos basada en una educación que reproduce las ideas y las prácti-
cas prevalentes en cada espacio social y perpetúa los rasgos degradantes: individualismo, especialización excluyente,
pasividad, competitividad, consumismo y vulnerabilidad a la manipulación mediática. En esta primera parte, la crítica de la
esfera educativa de la educación médica significó diferenciar y contrastar dos tipos de educación radicalmente distintos. El
primero es la educación pasiva, de vigencia universal que subyace a la degradación, cuyo núcleo es la idea de conoci-
miento equiparable a un aprendizaje memorístico y acumulativo de información heterónoma y desvinculada, y por una pe-
dagogía implícita centrada en estimular y facilitar el consumo y la asimilación acrítica de las verdades establecidas. El
segundo es la educación participativa, una propuesta de superación de la pasiva, en la que el conocimiento es elaboración
y reelaboración propia de los educandos con la mediación imprescindible de la crítica profunda, que construyen y
reconstruyen versiones propias de sí mismos y su contexto; su pedagogía se resume en contagiar entusiasmo por entender
quiénes somos y dónde estamos, y procurar ambientes propicios para la crítica y la elaboración de un conocimiento pene-
trante y liberador, que ha mostrado su factibilidad en situaciones concretas.

Palabras clave: Colapso civilizatorio. Rasgos degradantes. Crítica. Conocimiento. Educación médica. Educación pasiva.
Educación participativa.

Critique and medical education: towards liberating knowledge. Part I


Abstract
This essay defines the current moment as a civilizatory collapse, consequence of the dominance of limitless profit interests,
which has been possible due to the insensitivity and permissiveness of most of the population in the face of extreme social
and ecosystemic degradations. In the background of such “anesthesia” there is the predominant education and its key role
in the reproduction of prevalent social ideas and practices and in the perpetuation of degrading traits: individualism, exclu-
sionary specialization, passivity, competitiveness, consumerism and vulnerability to media manipulation. With this intellective
and interpretive framework, the concept of deep and creative critique was updated in order to deepen the critique of

Correspondencia: Fecha de recepción: 20-07-2018 Disponible en internet: 01-11-2018


*Leonardo Viniegra-Velázquez Fecha de aceptación: 03-09-2018 Bol Med Hosp Infant Mex. 2018;75:327-337
E-mail: leonardo.viniegra@gmail.com DOI: 10.24875/BMHIM.18000080 www.bmhim.com
1665-1146/© 2018. Hospital Infantil de México Federico Gómez, impreso por Permanyer México SA de CV, todos los derechos reservados.

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medical education, allowing for the differentiation and contrast of two radically different types of education. Firstly, the pas-
sive education, reproductive of the degrading traits of universal validity, whose core is the idea of knowledge comparable
to a cumulative rote learning of heteronomous and unrelated information, and by an implicit pedagogy focused on facilita-
ting the consumption and uncritical assimilation of established truths. Secondly, the participatory education (proposal to
overcome the passive), where knowledge is the elaboration and re-elaboration of students with the essential mediation of
critique. The students construct and reconstruct their own versions of themselves and their context; the implicit pedagogy
is condensed in infecting enthusiasm to understand who we are and where we are, and procure conducive environments
for critique and the elaboration of a progressively penetrating and liberating knowledge that has shown its feasibility in

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specific situations.

Key words: Civilizational collapse. Degrading traits. Critique. Knowledge. Medical education. Passive education. Participatory
education.

La docencia realmente fecunda principia cuando vileza, despojo, precariedad, exclusión, inseguridad,
“contagia entusiasmo” por entender quiénes somos y violencia y terror, donde la degradación que hemos
dónde estamos. provocado al ecosistema ha rebasado el umbral de
El autor reversibilidad, ha encendido alarmas y ha movilizado
numerosos contingentes, y prefigura un mundo
inhóspito para las generaciones futuras y de extin-
Introducción
ciones aceleradas de buena parte de las grandes
Para los saberes ortodoxos y convencionales, la ins- especies silvestres.
titución escolar ha sido y es «la forjadora de las fuerzas Precisar el momento histórico, el tipo de educación
liberadoras y de superación de la condición humana». que prevalece a escala global particularizando en la
Sin embargo, la crítica del quehacer de la escuela re- educación médica, identificar los saberes predominan-
vela que tal afirmación es una idealización, una ilusión, tes tanto en lo educativo como en lo médico que
dado su papel histórico ineludible (que escapa a la forman profesionales mayormente indiferentes a la de-
conciencia de los actores) en la reproducción de las gradación, y argumentar alternativas tendientes a la
ideas y prácticas, los usos y costumbres predominan- superación del proceso formativo de este personal de
tes en los diversos campos del quehacer social; pre- salud, son los motivos de este trabajo.
dominio que no obedece a una supuesta superioridad
sobre otras, sino a su sintonía, directa o indirecta, con
El momento actual y la educación
los intereses dominantes del momento histórico1. Esto
explica que, en nuestro tiempo —ante la dominancia Si bien el imperio de los intereses de lucro es de
de los intereses de lucro sin límite que ha degradado larga data, es a partir de los 80 cuando el capital —
la civilización hasta su colapso al aniquilar los anhelos encabezado por el especulativo— acentúa su domina-
de libertad, igualdad, justicia y autodeterminación de ción sobre el trabajo: elude, debilita o anula regulacio-
los pueblos, arrasar los valores propios de conviven- nes, derechos laborales, prestaciones sociales y
cias respetuosas, fraternas y solidarias, y devastar el organizaciones gremiales2,3. También intensifica la de-
ecosistema planetario1—, la población con el mayor predación de la naturaleza-mercancía hasta compro-
nivel de escolarización de la historia haya permanecido meter los soportes de la vida planetaria. Su difusión
mayormente insensible, indiferente o permisiva con la universal por todos los medios, incluida la guerra («la
degradación. diplomacia de los misiles») como motor irresistible de
Tal papel escolar forzoso no es óbice para perse- una globalización económica y política acorde a sus
verar en la búsqueda de un mundo hospitalario que intereses de creciente rentabilidad, expansión y con-
precisa una educación liberadora basada en la críti- centración, nos ha arrastrado al colapso civilizatorio.
ca, cuya premisa es concienciar quiénes somos: una Este, por supuesto, es maquillado o negado por los
humanidad de culturas diversas, etnocéntricas, beli- medios masivos de comunicación occidentales al ser-
cosas, opresoras y oprimidas, que crece sin control, vicio de la dominación, que desinforman, censuran,
agota los recursos naturales, contamina y diezma la tergiversan sucesos, atacan o desacreditan gobiernos
biósfera, «anestesiada» al colapso; y  dónde esta- u organizaciones «insumisas», oscurecen las raíces de
mos: tiempos aciagos de desigualdad extrema, los problemas que padecemos o encubren la conexión
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de los intereses dominantes con las atrocidades y ca- rechaza o elimina lo anticuado, lo poco útil, lo imprác-
tástrofes que se multiplicana. Estas «realidades fabri- tico, lo teorizante, lo especulativo, lo complejo, lo hete-
cadas» controlan conciencias y cuerpos de inermes rodoxo o lo «subversivo», destacando la subestimación
consumidores que, insensibilizados al momento actual, o exclusión del pensamiento teórico, del pensamiento
permanecen mayormente ajenos, indiferentes, acomo- filosófico (con sus diversas disciplinas y variantes) o del
daticios o cómplices de la dominación de los intereses pensamiento crítico, que sacude la quietud y la aquies-
de lucro sin límite con funestas consecuencias4. Los cencia y cuestiona las verdades establecidas. Esos

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aparatos de manipulación y persuasión a escala global condicionantes también explican por qué, a lo largo de
son decisivos en la conformación de subjetividades la historia, diversos esfuerzos reformadores por encau-
desinformadas que interpretan los aconteceres a con- zar la educación en un derrotero liberador se quedaron
veniencia de la dominación sin concienciar la degrada- en ciernes, en el discurso, resultaron inviables o falli-
ción omnímoda en curso. Esto revela que la educación dos, o sufrieron tergiversación, depuración de lo «espi-
universal, a pesar de su gran diversificación, de suce- noso» o cambios regresivos.
siones de corrientes de pensamiento y de «revolucio-
nes educativas», de multiplicidad de modalidades, de
El ethos de la civilización actual y la
métodos pedagógicos, de propósitos, niveles o grados
educación
de especialización, ha sido desplazada y suplantada
en su papel formativo, y que, ante el mayor desafío de La educación que prevalece en las sociedades ac-
nuestra historia, que es el colapso civilizatorio y am- tuales y que parece «coexistir pacíficamente» con el
biental que amenaza gravemente la viabilidad de la colapso civilizatorio y la devastación ambiental, en su
vida en el planeta y nuestra permanencia como espe- papel reproductor de las ideas y las prácticas predo-
cie, se muestre inconmovible, ajena, tibia, ciega o en- minantes de la cultura de que se trate, forma legiones
cubridora, y por tanto irrelevante en la consecución de especialistas explotables por un mercado de trabajo
efectiva de un mejor mundo para las mayorías. muy diversificado y tecnificado, cada vez más restric-
Tal situación histórica también expresa los condicio- tivo, escaso e inseguro, pero se abstiene —con raras
namientos de los actores: reformadores, directivos, pro- excepciones— de despertar el entusiasmo de los edu-
fesorado o alumnado, víctimas propiciatorias del control candos por entender quiénes somos y dónde estamos,
por los aparatos de manipulación y persuasión globa- fundamento del conocimiento realmente liberador. En
les, portadores de usos y costumbres que operan como ese afán por convertirse en fábrica rentable de
«agentes encubiertos» de la dominación en este cam- «mercancías» competitivas, dóciles y apetecibles, la
po. Así, se asume que estos «templos del saber» re- escuela se centra en reproducir «la fuerza de trabajo
quieren sustraerse del «mundanal ruido» y centrarse en actualizada» que las empresas requieren, y se aleja
lo suyo. Con respecto a los planes y programas, se da cada vez más del ideal de «forjar las fuerzas liberado-
preferencia a ciertos diseños curriculares, métodos pe- ras y de superación de la condición humana». De ahí
dagógicos, disciplinas, materias o prácticas por su su irrelevancia para atenuar, contrarrestar o neutralizar
procedencia «del mundo desarrollado», aduciendo ac- las consecuencias funestas de la dominancia de los
tualidad, moda, vanguardia, progreso, utilidad, pragma- intereses de lucro sin límite. En el mismo sentido, el
tismo o superioridad sobre otras. En contraste, se personal escolar, al profesar las ideas y prácticas pre-
dominantes, contribuye con su proceder a perpetuar el
a Las redes sociales vía internet (cuyo origen, centro ethos de una civilización en fase de agotamiento. Los
de gestión y control son los EE.UU.), que se piensan rasgos más destacables son los siguientes5:
como «flujos democratizadores de la información», son – Individualismo, que supone proyectos vitales de
instrumentos clave del sistema de dominación: espionaje
que anula la privacidad y hasta la intimidad para depurar
«cada quien lo suyo y sálvese quien pueda», insensi-
perfiles, disidencias, inconformidades, oposiciones o ble y distante de los intereses colectivos y sus reivin-
rebeldías. Son una vía de inusitada penetración para dicaciones, ajeno a acontecimientos que ocurren más
desinformar, inducir prejuicios, filias, fobias, temores
allá del círculo cercano por más que a todos atañan,
paralizantes, ilusiones vanas y consumismo compulsivo,
o desacreditar gobiernos, etnias, organizaciones, grupos y sean atentados contra la dignidad más elemental.
o personas «indeseables», «enemigos de la civilización»; En el mundo individualista, «la responsabilidad colec-
dilución de mensajes y opiniones esclarecedoras y de tiva por los males de la sociedad no existe».
fondo en océanos de banalidades o falsedades; «secuestro
virtual» de los usuarios que se aíslan e insensibilizan a la – Especialización reduccionista y excluyente, forma
degradación y la catástrofe que padecemos. predominante de la división del trabajo, en la que el
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especialista, con una visión fragmentaria e inconexa La educación pasiva


del mundo, no capta la interrelación de los aconteci-
Para captar por qué la educación es mayormente
mientos que lo sacuden y afectan. Además, muestra
desinterés por conocer el contexto histórico y social reproductora —por acción u omisión— de los rasgos
que le tocó vivir, genera distancia o aversión al pen- degradantes es preciso retrotraerse a la división del
samiento complejo e integrador («lo importante es trabajo social cuando se disociaron producción y uso
estar al tanto del propio ámbito de actividad; lo demás del conocimiento, y la escuela asumió el papel de res-
guardarlo, atesorarlo, ordenarlo y transmitirlo. Desde

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es harina de otro costal»), y vive sumergido en un
mundo individualista, oscuro, caótico e inseguro. tiempos remotos, la escuela debió equiparar informa-
– Pasividad ante los excesos y abusos del poder que ción con conocimiento y favorecer actitudes aquiescen-
aplasta los derechos, cuya raíz son las graves limita- tes, acumulativas y acríticas en los educandos con «las
ciones cognoscitivas propias de la especialización re- verdades establecidas». Así, prevaleció la idea de co-
duccionista y excluyente, a lo que se agregan las nocimiento como consumo, acumulación y retención
actitudes predominantes de impotencia o dejación de información, y languideció la de participación como
ante las adversidades, que han sido interiorizadas y generación de ideas, opiniones o iniciativas propias.
se manifiestan en conformismo, fatalismo e inacción. De ahí el denominarla educación pasiva, desarrollada
– Competitividad propia de un mercado de trabajo res- de manera extensa y pormenorizada en otros luga-
trictivo, injusto, precario e implacable, que fomenta res6,7. Ahora, al referir los caracteres más destacables
relaciones de rivalidad, desconfianza o antagonismo de la educación pasiva, cabe subrayar que no se en-
(no de solidaridad), que exacerban la voluntad de cuentran en estado puro, sino en forma de predomi-
dominio con sus secuelas: desigualdad, abuso, so- nios. En situaciones concretas y dependiendo del nivel
metimiento y exclusión. educativo, estas características muestran infinidad de
– Consumismo real o imaginario de toda clase de ob- variantes, matices e intensidades:
jetos materiales y simbólicos para satisfacer deseos – Un currículo fragmentado en multitud de temas y
y obsesiones, o desfogar angustias e insatisfaccio- materias desvinculadas, donde se disocian teoría y
nes, que sostiene una economía que profundiza las práctica, favorece en los educandos la incompren-
desigualdades, agota los recursos naturales y devas- sión, el desinterés y hasta el recelo del pensamiento
ta el planeta. Este consumismo controla conciencias complejo e integrador, lo que «germina» en una vi-
y cuerpos al suplantar y adulterar los vínculos inter- sión del mundo fragmentaria e inconexa que, a la
subjetivos, al inducir deseos irrefrenables por medio larga, oscurece la interdependencia de los aconteci-
de una publicidad avasallante y favorecer conductas mientos que los sacuden y afectan, cuya resultante
evasivas y adictivas de todo tipo. en los niveles superiores es la especialización re-
– Alta vulnerabilidad a la manipulación mediática con duccionista y excluyente.
respecto a multiplicidad de asuntos que se descono- – Los temas de estudio (particularmente en el nivel
cen o escapan al entendimiento, enraizada en el básico) suelen carecer de sentido para lo que más
individualismo y la especialización excluyente. interesa, conmueve, preocupa, despierta curiosidad,
Tales rasgos, que «se respiran en la atmósfera glo- atrae o entusiasma a los educandos por su momento
bal» reproducidos por la escuela y que subyacen a la etario (experiencia vital), condicionando un aprendi-
insensibilidad o complicidad con la degradación, se zaje insulso y fugaz que no deja huella, que «vacuna»
designan rasgos degradantes dada su permisividad contra el hábito de estudio o, peor aún, refuerza la
con el ánimo desaforado de lucro que encuentra esca- idea de que en la educación formal no se aprende
sas y dispersas resistencias en su camino destructivo. «lo importante para la vida» (raíz de la deserción
Ni que decir tiene que estos rasgos exhiben gran va- escolar y la autoexclusión).
riabilidad, y algunos están atenuados o ausentes en – Desalienta o reprime el deseo por el conocimiento
multitud de organizaciones; particularmente, en un (raíz de la pasividad ante los abusos del poder), re-
buen número de pueblos y culturas originarias de la presentado en el imaginario de los educandos por
geografía planetaria que representan, en muchos ca- información mayormente desvinculada y carente de
sos, la reserva moral y convivencial de nuestra auto- sentido que deben recordar so pena de menosprecio
destructiva especie, víctimas sin tregua de exclusión, o exclusión.
despojo o violencia si se oponen al progreso… de los – Al reducir el acto cognitivo al consumo, la acumulación
buenos negocios. y el recuerdo de información, y propiciar la aceptación
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tácita y acrítica de las verdades establecidas, refuerza de su experiencia vital en la preservación de su


la pasividad de los educandos ante el conocimiento, integridad y vitalidad, la consecución de alimento, la
adormece las ­potencialidades cognoscitivas y críticas, convivencia comunitaria, la crianza, la elaboración de
y los hace vulnerables a la manipulación que desinfor- herramientas o al enfrentar fenómenos naturales ame-
ma, induce creencias, prejuicios, filias, fobias o temo- nazantes o peligrosos. La reflexión es, en principio,
res paralizantes. concienciar aconteceres, y en particular los actos pro-
– El sistema escolar en su organización, métodos peda- pios y de grupo respecto a sus fines. Cuando la re-

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gógicos y didácticos, prioridades temáticas, formas de flexión permitió discernir y comparar entre modos de
trabajo de alumnos, tareas o exigencias de rendimiento, hacer las cosas según los logros, fue posible el per-
equipara aprendizaje con recuerdo de información —a feccionamiento de acciones cada vez más apropiadas
mayor recuerdo, mayor éxito escolar (que supone ma- o efectivas para lo buscado. Así, surgieron los basa-
yor consumo)— y refuerza la competencia entre edu- mentos de la crítica. Sin embargo, al aparecer los
candos (por alcanzar distinciones, reconocimiento o dogmas —las religiones primitivas y los monoteísmos
evitar la exclusión) y el consumismo que apuntala el que las sucedieron para dar sentido a la existencia,
modelo económico que colapsa la civilización. confortar ante la inexorabilidad de la muerte o conjurar
– La evaluación, medio de control, clasificación, cen- adversidades y catástrofes— la crítica debió restringir-
sura o exclusión de alumnos, lejos de fomentar la se al ámbito instrumental, vedándosele las ideas exis-
crítica constructiva y la autocrítica (camino insustitui- tenciales, lo que ha permanecido, sin grandes cam-
ble de superación), suscita sentimientos y actitudes bios, hasta nuestros días.
negativas o de rechazo, que la desvirtúan en el papel
que debería cumplir: estimular el aprendizaje.
La crítica profunda y creativa
– La idea de progreso escolar basada en lo instrumen-
tal: la disponibilidad y el uso de las tecnologías de la La crítica sobreviviente de innumerables vicisitudes
información y la comunicación potencia el consumis- históricas, a pesar de sus puntos ciegos y graves limi-
mo y la dependencia de tecnologías fetichizadas. taciones, suscita recelo o es blanco de intimidación de
– Los egresados de la escuela reproducen y amplifican los centros de poder, y es soslayada o malentendida en
los rasgos degradantes que caracterizan a las socie- las sociedades mediatizadas; de ahí los riesgos de re-
dades actuales, con proyectos vitales de «cada habilitarla como medio cognoscitivo imprescindible y
quien lo suyo y sálvese quien pueda», que acentúan develar sus alcances potenciales. En esta búsqueda, la
la desigualdad, la marginación, la injusticia, la exclu- idea de crítica se ha modificado desde sus versiones
sión, la opresión, la violencia y la inseguridad, y iniciales13. Así, otras facetas de la crítica se fueron cla-
avanza la devastación planetaria. rificando y especificando (¡la crítica de la crítica!) hasta
Estos caracteres de la educación pasiva son su formulación actual como la lógica de pensamiento
extensivos, mutatis mutandis, a la educación médica4, metódico del proceso de cognición, que pone el acento
insistiendo en que, en situaciones concretas, no se en dos aspectos del proceso (ignorados, soslayados o
encuentran ni en estado puro ni en su totalidad, sino minimizados por otras corrientes). El primero, afín a la
en forma de predominios. Al respecto, es obvio que tradición filosófica, es la inclinación a ponerlo todo en
numerosos egresados se distancian de tales caracte- cuestión (supuestos implícitos, ideas, hechos, usos y
res, pero por razones «extracurriculares» y frecuente- costumbres), a dudar de lo «comprobado o definitivo»,
mente «a pesar de la escuela». La moda actual de las a intentar llegar a la raíz de lo que parece natural y
competencias profesionales no representa un cambio evidente. El segundo incita el potencial creativo del
de fondo; se trata más bien de actualizaciones y ade- sujeto, confiriendo a la crítica verdadero sentido, pre-
cuaciones del currículo médico a las necesidades del disposición a idear y proponer formas de pensar, escu-
mercado que deja intocados los rasgos degradantes y driñar y actuar, que aspiran a superar lo establecido
donde la crítica es un aderezo del discurso con esca- respecto a los objetos de conocimiento en cuestión; de
sas posibilidades de ejercerse y profundizarse8-12. ahí el denominarla crítica profunda y creativa para
distinguirla de acepciones comunes, como juicios su-
perficiales en pro o en contra, o argumentaciones ten-
La crítica y el conocimiento
denciosas para legitimar, censurar o descalificar.
Los esbozos del pensamiento crítico aparecen con El primer aspecto de la crítica profunda y creativa
los primeros grupos humanos en los actos reflexivos que representa el sano escepticismo en la búsqueda
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del conocimiento tiene particular relevancia en estos no definitivos en la búsqueda y la caracterización de


tiempos de guerra mediática (entre otras) contra todo esta teoría de la crítica, cuyos inicios se remontan a dos
lo que resista, estorbe o se oponga al dominio de los décadas13. Por tanto, no se proponen aquí como punto
intereses del capital especulativo y de las grandes de partida u objetivos de corto plazo de quienes em-
corporaciones, que persuade, desinforma y espía, fa- prenden su aventura cognitiva, sino para precisar lo
brica «realidades paralelas» que embaucan y controlan distintivo de la crítica profunda y creativa respecto de
mentes y cuerpos, domesticándolos e insensibilizándo- otras ideas. Operan como indicador de su presencia y

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los a la degradación en curso, lo que, aunado a las desarrollo efectivos al acometer asuntos de interés, o
ideas y prácticas predominantes en los distintos ámbi- como punto cardinal que oriente su profundización en
tos del trabajo social —que deben su predominio a una la construcción del conocimiento.
especie de sintonía, directa o indirecta, con los – Inclinación cuestionadora del conocimiento estable-
intereses dominantes— operan como «agentes de la cido que distingue dos objetos:
dominación» por esos intereses que nos precipitan al a) Las lógicas profundas subyacentes que condicio-
colapso civilizatorio que devasta el ecosistema plane- nan las formas predominantes de pensar, idear,
tario. Esto significa que ejercer la crítica para develar percibir, actuar u organizarse (antropocentrismo,
esos agentes y proponer alternativas al orden impuesto etnocentrismo, colonialismo, reduccionismo o em-
es, ahora, un imperativo de supervivencia. pirismo), y las ideas y prácticas prevalentes en los
El sentido de la crítica profunda y creativa es facilitar diversos ámbitos del trabajo social.
elaboraciones de un conocimiento cada vez más pe- b) Las versiones tendenciosas y falaces de los acon-
netrante del sí mismo que se extiende a la humanidad teceres del mundo que difunden los aparatos me-
(quiénes somos), y del contexto extensivo al mundo
diáticos de la dominación.
que habitamos (dónde estamos). Su posibilidad radica
– Avidez ponderada por formas de pensar, de actuar,
en las potencialidades cognoscitivas inherentes a la
de ideas, puntos de vista o informaciones divergen-
condición humana —negadas, ignoradas, reprimidas o
tes de la ortodoxia, que al permitir contrastar o con-
inhibidas secularmente —en tanto, primordios de cog-
trapesar lo predominante favorecen perspectivas e
nición pueden ser avivados por esta lógica para con-
interpretaciones más aproximativas a la realidad de
vertirse en potencias, que al desarrollarse y progresar
los sucesos. Al ampliar el horizonte reflexivo, acre-
en su poder cuestionador y generativo pueden liberar
cientan la materia prima para elaborar alternativas
las mentes de las ideas y prejuicios que las constriñen
que busquen superar lo establecido.
y someten, para que las impulse en la búsqueda de
– Dos componentes interdependientes e indisociables
otro mundo posible a contrapelo de la degradación.
con sus respectivos objetos cognitivos: la autocrítica,
La crítica se perfecciona a través de las potencias
vía preferente de conocimiento del sí mismo (quiénes
cognoscitivas que anima. Lo primario para su ejercicio
es que surja un genuino interés cognitivo por ciertos somos), y la heterocrítica, orientada al contexto (dón-
objetos debido a su significado afectivo y trascenden- de estamos).
cia vital, como el sí mismo y el contexto percibido. Este – Predisposición a idear y proponer formas de pensar
interés, por efecto de la crítica, toma forma de inclina- e interactuar alternativas a lo establecido respecto a
ción y de un carácter cuestionador y propositivo que los objetos cognitivos en cuestión.
posibilita el dominio —siempre inacabado— de las ha- – Actitudes colaborativas derivadas de la evidencia de
bilidades cognoscitivas implicadas en la penetración superioridad cognoscitiva de los proyectos
cognitiva del objeto, para actuar en consecuencia (en colectivos.
general, solo se puede dominar y destacar en profe- – Fortaleza al perseverar —a pesar de la censura o el
siones, oficios o aficiones que despiertan vivo interés). rechazo de los centros de poder—, derivada de la
Se comprende, así, que en la educación pasiva —que afectividad depositada en ese objeto simbólico de-
prioriza el consumo y la acumulación de información seable, valioso y provechoso: el conocimiento del sí
ajena al sujeto y desalienta el deseo por el conocimiento mismo y del contexto.
como elaboración propia— prevalecen circunstancias – Visión epistemológica que prima las ideas sobre los
en las que la crítica es una quimera y su perfecciona- hechos, y lo integrador sobre lo fragmentario, como
miento es ilusorio. objetos de crítica (al contrario del empirismo reduc-
A continuación, los atributos más destacables de la cionista), y favorece un conocimiento transdisciplina-
crítica profunda y creativa. Se trata de puntos de llegada rio del sí mismo y del contexto.
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– Volición deliberativa al emprender, persistir, virar, conflictos o situaciones problemáticas, aportan clari-
desistir o reiniciar proyectos. dad en el qué hacer o cómo hacerlo, suscitando es-
– Lógica, que organiza e integra las diversas habilida- tados anímicos de vivo interés, gratificantes o de so-
des cognoscitivas propias de lo siguiente: siego que se condensan en entusiasmo por la
a) La introspección: concienciar, reconocer, discernir, elaboración. Lo anterior es extraño a la idea de cono-
inferir, cuestionar, deliberar, idear. cimiento implícito en la educación pasiva: consumo y
b) La esfera de las ideas: comprender, analizar, reco- acumulación de información ajena, sin sentido para

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nocer, deducir, inducir, sintetizar, interpretar, con- la experiencia vital, de presencia fugaz, que no deja
frontar, enjuiciar, integrar, jerarquizar, teorizar. huella afectiva favorable, sino vivencias superficiales
c) El mundo fáctico: definir el problema, las hipótesis o desagradables (sanciones por el olvido de datos en
y las aproximaciones; elegir modelos probatorios y la evaluación).
de análisis de datos, los marcos interpretativos de
los hallazgos o los alcances y las limitaciones de
El conocimiento penetrante y liberador
los estudios, donde la crítica de lo propio o lo ajeno
implica deliberar y decidir con base en lo que se Después de especificar la versión actual de la teo-
juzga más apropiado, relevante, suficiente, perti- ría de la crítica profunda y creativa, cabe referirse al
nente, fuerte, heurístico, factible o revelador. proceso de cognición a que da lugar como expresión
d) La esfera de la práctica: construir montajes de de las potencias cognoscitivas animadas por la críti-
observación apropiados, registrar hallazgos, ela- ca: el conocimiento penetrante y liberador, que per-
borar artículos de investigaciones factuales o re- mite a los educandos ahondar en quiénes somos,
flexiones, y ensayos sobre problemas, puntos de dónde estamos y qué hacer en consecuencia. Sus
vista o teorías, o revisiones críticas de ellos. atributos distintivos y alcances destacables son los
e) El ámbito colectivo: comunicar, escuchar, dialogar, siguientes:
argumentar, debatir, controvertir, proponer, persua- – Proceso de cognición que, al vincular afectividad
dir, incentivar, concertar o cooperar. favorable e intelecto, suscita pasión, la fuerza vital
Se entiende de lo anterior que no hay cosas críti- de todo emprendimiento cognoscitivo perseverante y
cas: una teoría, una pedagogía o una obra de arte fructífero.
(que pueden construirse por medio de la crítica, pero – Elaboración de puntos de vista propios en el plano
no ser críticas per se). En cambio, sí puede haber individual y en el colectivo con el intercambio y la
conciencia, actitud o pensamiento crítico. La crítica colaboración sinérgica de los participantes.
profunda y creativa, como lógica de la cognición vi- – Progresión ascendente de esclarecimiento y poder
gorizada por la afectividad, confiere penetración, ver- liberador que implica lo siguiente:
satilidad y fuerza creativa a las potencias cognosciti- a) Develar las lógicas subyacentes al proceso de cog-
vas del sujeto, que es capaz de elaborar y reelaborar nición que lo bloquean, inhiben, restringen o
versiones aproximativas e inacabadas del sí mismo, desvirtúan.
cuyo horizonte es la condición humana, y del contex- b) Desarrollo de perspectivas transdisciplinarias de
to, en último término, el mundo que habitamos. Cuan- aproximación a los problemas cognitivos, más allá
do el conocer es fruto de las potencias cognoscitivas de los límites arbitrarios y ficticios entre disciplinas
animadas por la crítica, se trata de una elaboración erigidos por la especialización excluyente del tra-
propia cuyo punto de partida obligado es la reflexión bajo social. Se basan en la complejidad que deriva
de la experiencia vital: las vivencias de interacción en visiones integradoras del sí mismo y del contex-
con objetos de gran significado (personas, cosas o to, de la interdependencia de objetos y aconteci-
sucesos) que conmueven, preocupan, gratifican, dis- mientos que sacuden la conciencia colectiva donde
gustan, atraen, repugnan, entusiasman o atemorizan. encuentre inteligibilidad el caos aparente del movi-
La inclinación a reflexionar la experiencia vital apare- miento social, y representan contextos de interpre-
ce cuando alguien significativo avezado a ello logra tación y valoración en el momento de observar,
contagiar entusiasmo por entenderla como reveladora experimentar, valorar, decidir o emprender.
del sí mismo y del contexto, y puerta de entrada al c) Penetración del sí mismo, como miembro peculiar
conocimiento de uno y otro. Tal afectividad intensa y de una humanidad etnocéntrica, belicosa y des-
favorable surge cuando las potencias cognoscitivas, tructiva (quiénes somos), y del contexto, como re-
al elaborar el propio conocimiento, esclarecen dudas, presentación mínima de un mundo en tiempos
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aciagos de desigualdad, injusticia y violencia con manipulación mediática. La sintonía estriba en favo-
un ecosistema devastado (dónde estamos). recer los intereses de lucro, dado que tales rasgos
d) Responsabilidad indeclinable (lo moral, cima del son condición necesaria de su dominación.
conocimiento penetrante) por el cuidado de la vida – La tercera tiene hondas raíces históricas, porque la
en todas sus manifestaciones y del ecosistema educación pasiva, bajo diferentes ropajes, ha cons-
planetario. treñido e inhibido secularmente (al soslayar la crítica)
e) Propuestas de superación de lo establecido o el despliegue y el desarrollo de las potencias cog-

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acostumbrado respecto al pensar, decir, actuar, noscitivas, perpetuando la pasividad ante el conoci-
investigar u organizarse a contrapelo de la degra- miento. Esto ha significado la forma de control de
dación, que lleva a emprender proyectos vitales conciencias y cuerpos menos ostensible, cegándolos
altruistas y colectivos de lucha inacabable por un a la dominación de los intereses en turno. Ahora
mundo propicio para la dignificación de la vida mismo es lo que subyace a la indiferencia y la insen-
humana y planetaria (qué hacer). sibilidad ante la ruina de una civilización que a todos
arrastra y que destruye el planeta
En la educación pasiva, la crítica, como lógica
Crítica y educación médica
organizativa metódica de la cognición, está ausente,
Ahora, después de precisar la crítica profunda y crea- minimizada o desvirtuada, como revela la idea de
tiva, y el conocimiento penetrante y liberador, que es conocimiento que promueve e impulsa (consumo y
consecuencia de su ejercicio, y argumentar acerca de acumulación de información). Solo hasta los niveles
su papel insustituible en la formación de colectivos superiores la crítica, en especial en los programas de
iné-ditos capaces de develar quiénes somos, dónde formación de investigadores, hace una aparición res-
estamos y qué hacer en consecuencia, se analizan sus tringida a lo metódico instrumental de las indagacio-
implicaciones y significado para la educación médica. nes factuales, soslayando el universo de las ideas
En primer término, respecto de la esfera educativa for- donde moran las lógicas, los ismos, los prejuicios, los
mal. Para la segunda parte, se deja lo relativo a las dogmas, las creencias, los saberes establecidos o las
ideas y prácticas predominantes en el quehacer médico, prácticas predominantes que condicionan las formas
que es el otro eje formativo de estos profesionales. sociales de pensar, percibir, indagar, interpretar, ac-
El primer paso en la crítica de las ideas y prácticas tuar u organizarse (al respecto, el empirismo reduc-
de la educación prevalente (incluida la educación mé- cionista y la especialización excluyente son emble-
dica) consistió en caracterizar la educación pasiva. mas del quehacer científico actual). En suma, las
Ahora prosigue al revelar que su predominio no es ideas y prácticas de la educación pasiva, incluidos los
síntoma de superioridad, sino de sintonía con los inte- niveles superiores y de posgrado, operan, al igual que
reses dominantes que adopta diversas formas: las que predominan en los otros ámbitos de actividad,
– Una deriva de la privatización que sumerge a las como agentes de la dominación (de gran efectividad,
instituciones educativas en las leyes del mercado, pues no se perciben como tales) de los intereses de
con la exigencia de constituirse en negocios de alta lucro, al afianzarlos, favorecerlos o encubrirlos. Con-
rentabilidad que convierte en mercancía la propia secuencia de lo anterior es que el proceso educativo
educación (no en un derecho humano) con la pro- preponderante está imposibilitado —aunque se lo pro-
ducción en serie de bienes animados apetecibles ponga— para cumplir los ideales formativos de forja-
para un mercado de trabajo restrictivo y abusivo. Es dor de las fuerzas liberadoras y de superación de la
decir, personal competente y versátil (en la operación condición humana en lo espiritual, moral, intelectual
de tecnologías), productivo, dócil, individualista, con- y convivencial (donde lo material es un supuesto y,
formista e intercambiable. Aquí, la sintonía consiste con frecuencia, un señuelo de superación), y en la
en representar y afianzar los intereses dominantes. responsabilidad por el cuidado del ecosistema
– Otra se debe a la intromisión abierta, directa y cre- planetario.
ciente de los intereses empresariales en la conforma- En cuanto a la investigación educativa, también se
ción del currículo, que refuerza el papel de la educa- desarrolla, con raras excepciones, bajo la mirada res-
ción en la reproducción social de los rasgos trictiva de la educación pasiva (con muchas variantes
degradantes: individualismo, especialización reduc- y matices); de ahí que los supuestos progresos educa-
cionista y excluyente, pasividad política, competitividad, tivos que aporta la investigación suelan ser «llover so-
consumismo alienante y vulnerabilidad a la bre mojado». El progreso de la educación no tiene que
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L. Viniegra-Velázquez: La crítica y la educación médica. Parte I

ver con perfeccionar la educación pasiva cómplice y de la educación participativa es que posibilita la
soporte de la degradación. Requiere otra base episte- conformación de ambientes propicios para la crítica
mológica que posibilite un cambio de enfoque de la y la elaboración del conocimiento (con énfasis en la
formación de profesionales progresivamente conscientes educación médica)7:
del mundo degradado y degradante que habitamos, y – La condición sine qua non de participación en el
con aptitudes cognitivas que los lleven a integrar colec- conocimiento es que la reflexión de la experiencia
tivos que desarrollen su propio quehacer en perspectiva vital tome su lugar como autorreferente y motivador

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a la búsqueda de otro mundo posible y deseable. (Todo de la búsqueda cognitiva.
esto es aplicable a la educación médica). – Como la experiencia vital es punto de encuentro del
sí mismo y del contexto (interacciones del sujeto con
La educación participativa los objetos significativos de su entorno peculiar), la
reflexión erige a ambos como los objetos de conoci-
La teoría de la educación participativa no resultó de miento central de las experiencias de aprendizaje que
un descubrimiento, sino de la crítica de la educación poco a poco se extienden, conforme la crítica profun-
pasiva (sus bases epistemológicas). Su desarrollo no da y creativa favorece un conocimiento penetrante y
fue un fenómeno de todo o nada, sino de aproximacio- liberador, a quiénes somos y dónde estamos.
nes sucesivas al nuevo objeto, que van revelando lo – En el proceso de elaboración del propio conocimien-
que permanecía subestimado, profundizando cuestio- to, lo primario es el aprendizaje con sentido para la
namientos que se quedaron cortos o restringidos, o experiencia vital, lo que ocurre cuando los materiales
redondeando ideas o conceptos más penetrantes o
de estudio seleccionados y secuenciados ex profeso
acciones más efectivas y heurísticas. Tuvo sus inicios
logran la sintonía con los intereses cognitivos del
hace tres décadas, a propósito de especificar los linea-
momento etario y circunstancial de los educandos. Es
mientos de este tipo de educación14, basada en la idea
decir, cuando lo estudiado concierne, esclarece, res-
de conocimiento como elaboración propia de los edu-
ponde, tranquiliza o da salida a lo que más inquieta,
candos a partir de la reflexión de su experiencia vital,
conflictúa, conmueve, atrae o entusiasma al sujeto,
lo que es diametralmente distinto de lo que está implí-
tiene lugar el aprendizaje con sentido, que deja huella
cito en la educación pasiva.
porque está vinculado con sus entrañas afectivas.
Según esta teoría, la posibilidad de encauzar a los
– El acto de estudiar es, por encima de todo, ejercer
protagonistas del proceso educativo hacia la parti-
la crítica al concienciar y opinar sobre el texto, desde
cipación radica en la configuración efectiva de am-
un incipiente «me gusta o no» hasta proponer puntos
bientes propicios para la crítica profunda y creativa,
de vista alternativos, pasando por enjuiciar lo bien o
y la elaboración de un conocimiento penetrante.
Esto implica formas inéditas de articular y alinear mal planteado, lo interesante o insulso, lo esclarece-
las materias del currículo, de priorizar los temas a dor o confuso, lo fuerte o débil, los silencios signifi-
tratar, de estudiar, de organizar las actividades, de cativos o externar coincidencias y discrepancias.
los métodos pedagógicos, del tipo de tareas o de Cuando se conjuntan sentido y crítica, ciertos frag-
los modos de proceder de los diversos participantes. mentos, aspectos o ideas de lo estudiado se interio-
Lo decisivo para lograr esos ambientes es contagiar rizan e integran (tamizados y moldeados por la críti-
entusiasmo a los educandos por entenderse a sí ca), y entran a formar parte del sí mismo (puntos de
mismos y sus respectivos contextos percibidos. Tal vista propios). Poco que ver con el recuerdo efímero
contagio se inicia con la reflexión introspectiva de de información ajena.
su experiencia vital al concienciar preocupaciones, – La crítica es factible desde etapas tempranas por-
desasosiegos, dudas, deseos, preferencias, inclina- que, desde el principio, el sentido de lo estudiado
ciones, conflictos, frustraciones, problemas o aspi- suscita interés y avidez, y el ambiente incita a opinar,
raciones dependientes de su momento etario y de valorar y argumentar al respecto, que son medios de
sus circunstancias peculiares, que los lleva a enten- intercambio de puntos de vista diversos que enrique-
der, satisfacer, superar, proyectar o serenarse, se- cen la discusión en el aula.
gún el caso. Es decir, cuando indagar sobre el sí – La relación entre teoría y práctica se invierte: la teoría
mismo y el contexto se experimenta como interesan- enriquece, a posteriori, la reflexión de la experiencia
te, provechoso, fructífero o gratificante para un me- vital en sus afanes por penetrar el sí mismo y el con-
jor vivir, el contagio ha tenido lugar. Lo destacable texto; las vivencias prácticas reflexionadas cuestionan
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Bol Med Hosp Infant Mex. 2018;75

(critican) la teoría al reconocer sus limitaciones o in- profunda y creativa a manera de fuerzas sociales
suficiencias, para dar cuenta de lo que pretende. portadoras de proyectos vitales altruistas, empeñadas
– El meollo de la labor magisterial es incitar en el alum- en la lucha interminable por la dignificación de la vida:
nado la reflexión introspectiva de su experiencia vital, superación espiritual, intelectual, moral y convivencial
a fin de contagiarle entusiasmo por entenderse y de la condición humana hacia otro mundo posible
entender el mundo que le toca vivir, que es condición (sociedades inclusivas, pluralistas, igualitarias, justas,
para promover y encauzar el ejercicio efectivo de la solidarias y cuidadosas del ecosistema planetario).

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crítica en la elaboración de su conocimiento. Esto Deriva de lo dicho que, según la educación partici-
supone, por parte de las y los docentes, haber reco- pativa, el proceso formativo es un continuo (no lineal)
rrido cierto trecho en su aventura de elaboración del de elaboración cognitiva de por vida que puede iniciar-
conocimiento ejerciendo la crítica, porque nadie pue- se desde temprana edad. Es decir, contagiar entusias-
de «contagiar» a otros lo que «no padece» o aquello mo por entender quiénes somos y dónde estamos,
de lo que «no es portador». orientar la búsqueda cognitiva e incitar y encauzar el
– El papel del discente incitado y contagiado es desa- ejercicio de la crítica es, toda proporción guardada y
rrollar sus potencias cognoscitivas mediante la crítica mutatis mutandis, el eje invariante del proceso que
al protagonizar el conocimiento de sí mismo y su toma expresiones diferentes conforme la crítica se
contexto, que se diferencian en dos tipos de aptitu- hace más profunda, el conocimiento más penetrante y
des interdependientes: varían los intereses cognitivos del alumnado según su
a) Metodológicas: lectura crítica de textos teóricos y edadb. El meollo de la participación es el dominio pro-
de informes de investigaciones factuales, realiza- gresivo de la crítica en la cognición penetrante y libe-
ción de investigaciones teóricas (universo de las radora del sí mismo y del contexto. Los obstáculos
ideas) y factuales (mundo de los hechos). para la difusión social de esta educación son múltiples,
b) Prácticas: la aptitud docente y la aptitud clínica5. derivados de su discordancia con los intereses domi-
– La evaluación es el medio de seguimiento y valora- nantes, manifiesta en el campo educativo por la indi-
ción de los alumnos en el desarrollo de aptitudes y ferencia o el rechazo de las cúpulas seguras de sus
de sus progresos en la crítica, donde las insuficien- certezas. De la factibilidad de la educación participati-
cias o desviaciones son, en principio, atribuibles al va son elocuentes las experiencias fructíferas con gru-
sistema educativo. También es recurso valioso para pos de edad extrema: alumnos de primaria temprana
motivar y orientar los esfuerzos de superación indi- y docentes de educación superior15,16.
viduales y colectivos.
– La especialización incluyente es la aspiración forma-
tiva. Cuando los referentes de la cognición a lo largo Responsabilidades éticas
del proceso son el sí mismo y el contexto percibido, Protección de personas y animales. El autor
ciertos componentes o facetas de las disciplinas es- ­ eclara que para esta investigación no se han realizado
d
tudiadas, moldeadas por la crítica profunda y creativa, experimentos en seres humanos ni en animales.
se van conjuntando en una nueva matriz organizativa: Confidencialidad de los datos. El autor declara
los puntos de vista propios sobre ciertos problemas que han seguido los protocolos de su centro de trabajo
en forma de perspectivas integradoras, donde los lí- sobre la publicación de datos de pacientes.
mites arbitrarios entre los saberes tienden a difumi- Derecho a la privacidad y consentimiento infor-
narse para dar lugar a miradas transdisciplinarias4. En mado. El autor declara que en este artículo no apare-
la especialización incluyente, el especialista, provisto cen datos de pacientes.
de marcos interpretativos amplios e integradores,
relativiza su actividad profesional en función de su
b La educación pasiva es, según esta idea, artificiosa
interdependencia con otras, y en colectivo con sus y arbitraria al fijar los distintos niveles educativos
pares van descifrando el orden imperante e ideando basándose en supuestas complejidades cualitativamente
alternativas en el pensar, el actuar y el organizar a fin diferentes de las habilidades cognitivas a desarrollar en
cada nivel (en realidad, la principal habilidad cognitiva
de sobreponerse a los rasgos degradantes y empren- que se promueve a todo lo largo de la educación formal
derla hacia otro mundo posible. es ¡la memoria!), porque subestima –por su miopía
– El desiderátum es el conocimiento penetrante y epistemológica– las posibilidades cognoscitivas y los
alcances cognitivos potenciales de niños y jóvenes que
liberador, que cristaliza en colectivos con potencias suelen permanecer latentes mientras no sean incitados y
cognoscitivas inusitadas pertrechadas con la crítica encauzados en el ejercicio de la crítica.
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L. Viniegra-Velázquez: La crítica y la educación médica. Parte I

Conflicto de intereses 7. Viniegra-Velázquez L. Caracterización de las dos perspectivas epistemo-


lógicas de la educación. La educación y la crítica del conocimiento. Una
perspectiva transdisciplinaria para entender la subjetividad y sus posibi-
El autor declara no tener conflicto de intereses. lidades cognitivas. México: Invipress-Hospital Infantil de México; 2015.
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8. Argüelles A, Gonczi A. Educación y capacitación basada en normas de
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Financiamiento 9. Posada AR. Formación superior basada en competencias. Interdiscipli-
nariedad y trabajo autónomo del estudiante. Revista Iberoamericana de
Ninguno. Educación. 2004;34:1-33.
10. Farfán Flores P, Pérez García I, González Gutiérrez M, Huerta Amezola J,

Sin contar con el consentimiento previo por escrito del editor, no podrá reproducirse ni fotocopiarse ninguna parte de esta publicación.   © Permanyer 2018
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professional for a new century: transforming education to strengthen
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