TEMA 6: LA ESCRITURA GÓTICA CURSIVA

LA ESCRITURA DE ALBALAES
Es una gótica cursiva angulosa o fracturada.
Nace alrededor de 1250, y desaparece a finales del reinado de Pedro I (1350-1369). Es la
primera gótica cursiva castellana, de la que derivan la cortesana y la procesal.
Marca el cambio de las formas angulosas a un trazado curvilíneo. Características:
- Tendencia a unir las letras de cada palabra.
- Contraste entre el pequeño cuerpo de las letras y los astiles, muy prolongados.
- El cuerpo de la letra, estrecho en el s. XIII, se ensancha en el s. XIV.
- Los caídos, una vez alcanzado su punto más bajo, suben por la izquierda a la caja de
escritura, formando casi una línea paralela con el trazo principal, en letras como p y q.
- Una consecuencia de esa práctica es que la f y la s altas duplican su trazado, dando la
impresión de que hay dos letras. Esta característica tiende a desaparecer en el s. XIV.
- Aparecen algunos trazos envolventes, más por motivos estéticos que por unir letras o
palabras.
Algunas letras peculiares son la d, de tipo uncial, la t, muy similar a la c y la z, con una
forma parecida a la del número 5.

LA ESCRITURA GÓTICA REDONDA

Letra precortesana o cortesana primitiva:
Comienza en torno a 1325. Es una letra de transición, entre la de albalaes y la cortesana.
Su uso se sitúa entre 1350 y 1425 aproximadamente
Por ser una letra intermedia, no tiene una acusada personalidad, aunque hay algunos
rasgos distintivos que permiten su identificación. Son estos:
- Desaparece la duplicación sistemática de trazos en los caídos, incluidos los de s alta y
f.
- La letra tiende a ser más redonda y menos aguda.
- No hay tanto contraste entre cuerpo y astiles de letras como en la de albalaes.
Se empiezan a exagerar los rasgos envolventes. A principios del s. XV ya no se utilizan
solo por motivos estéticos, sino para conseguir mayor rapidez en la ejecución de la
escritura.

LA ESCRITURA CORTESANA
Se trata de una escritura gótica cursiva redonda.
Se establece su nacimiento en torno a 1425, pero la época de mayor uso es durante el
reinado de los Reyes Católicos.
Su rasgo más característico el el uso de curvas envolventes, utilizados para nexos, signos
de abreviación o como simples adornos. Los astiles inferiores de algunas consonantes se
prolongan y envuelven la propia letra para enlazar con la letra siguiente, especialmente en
el caso de h, i, m, n, q, s, y. También sucede con la cedilla de la c.
La e puede aparecer sin ojo, con una forma parecida a la c.
No posee un alfabeto mayúsculo totalmente definido, aunque se usen algunas letras
mayúsculas.
Hay que advertir la presencia de signos abreviativos en palabras escritas con todas sus
letras y, por el contrario, palabras abreviadas sin ningún signo que indique la falta de
letras.