Revista internacional de patología del habla y el lenguaje

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Perspectivas de los médicos sobre la alianza terapéutica en

sesiones de patología del habla y el lenguaje presenciales y
teleprácticas

Anneka Freckmann, Monique Hines y Michelle Lincoln

Para citar este artículo: Anneka Freckmann, Monique Hines y Michelle Lincoln (2017): Perspectivas de
los médicos sobre la alianza terapéutica en sesiones de patología del habla y el lenguaje cara a cara y
por telepráctica, International Journal of Speech-Language Pathology, DOI:
10.1080 / 17549507.2017.1292547

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Publicado en línea: 07 de marzo de 2017.

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Revista Internacional de Patología del Habla y el Lenguaje, 2017; Temprano en línea: 1–10

Perspectivas de los médicos sobre la alianza terapéutica en sesiones de

patología del habla y el lenguaje presenciales y teleprácticas

ANNEKA FRECKMANN, MONIQUE HINES Y MICHELLE LINCOLN

Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad de Sydney, NSW, Australia

Resumen
Propósito: Investigar la validez aparente de una medida de alianza terapéutica para la patología del habla y el lenguaje pediátrica y
determinar si existe una diferencia en la alianza terapéutica informada por los patólogos del habla y el lenguaje (SLP) que realizan
sesiones cara a cara, en comparación con los SLP de telepráctica o en sus calificaciones de confianza con la tecnología.
Método: SLP que realizan telepráctica (norte¼14) o terapia presencial (norte¼18) completó una encuesta en línea que incluía las Escalas de la
Alianza Terapéutica para Niños - Revisada (TASC-r) (Formulario del terapeuta) para calificar las percepciones de los médicos sobre la relación con
hasta tres clientes. Los participantes también informaron sobre su percepción general de la relación con cada cliente y su comodidad con la
tecnología.
Resultado: Hubo una fuerte correlación entre los puntajes totales de TASC-r y las calificaciones generales de simpatía, lo que proporciona
evidencia preliminar de la validez aparente de TASC-r. No hubo diferencias significativas entre las puntuaciones de TASC-r para la telepráctica y la
terapia cara a cara (pag¼0.961), ni la confianza de los SLP cara a cara y telepráctica con familiares (pag¼0.414) o tecnología desconocida (pag¼
0,780).
Conclusión: El TASC-r puede ser una herramienta prometedora para medir la alianza terapéutica en patología del habla y el lenguaje. La
telepráctica no parece tener un efecto negativo en la relación entre los SLP y los clientes pediátricos. Se requieren investigaciones futuras para
identificar cómo los SLP desarrollan una relación en la telepráctica.

Palabras clave: telesalud; relación médico-cliente; patólogo del habla y lenguaje

Introducción
La telepráctica es un modelo de prestación de servicios en evolución en
patología del habla y el lenguaje (Keck & Doarn, 2014). La Asociación
Estadounidense del Habla, el Lenguaje y la Audición (ASHA) define la
telepráctica como la: '' aplicación de la tecnología de las
telecomunicaciones a la prestación de servicios profesionales de
audiología y patología del habla y el lenguaje a distancia al vincular al
médico con el cliente / paciente o del médico con el médico para su
evaluación. , intervención y / o consulta '' (ASHA, 2016). En este estudio, el
término telepráctica se refiere a la entrega
de las videoconferencias en tiempo real de los servicios de
patología del habla y el lenguaje (Edwards, Stredler-Brown,
Houston, 2012).
Existe una gran demanda insatisfecha de servicios de
patología del habla y el lenguaje y una escasez crítica de
mano de obra en comunidades rurales y remotas tanto en
Australia como a nivel internacional (Senado de Australia,
2014; Edwards et al., 2012; Forducey, 2006; Gabel, Grogan-
Johnson, Alvares, Bechstein y Taylor, 2013). Verdon, Wilson,
Smith-Tamaray y McAllister (2011) encontraron que en las
zonas rurales de Nueva Gales del Sur y Victoria, Australia,
solo el 1,7% de
Las ubicaciones cuentan con un servicio de patología del
lenguaje del habla para pacientes ambulatorios pediátricos. En
los EE. UU., Los patólogos del habla y el lenguaje (SLP) pueden
viajar grandes distancias entre las escuelas para brindar
servicios (Grogan-Johnson et al., 2013). La adopción de servicios
de telepráctica está comenzando a permitir que los SLP presten
servicios en áreas geográficas más extensas y aborden la
escasez de prestación de servicios. La telepráctica facilita la
prestación de servicios a los clientes que viven de forma remota
o que no pueden asistir físicamente a las sesiones presenciales
(Edwards et al., 2012) y tiene la capacidad de reducir los tiempos
vía de viaje de los SLP y sus clientes. Esto reduce la fatiga, los
Y gastos de viaje y los costos personales, así como también
aumenta potencialmente la consistencia y la frecuencia del
servicio (Verdon et al., 2011).
Existe una creciente evidencia de que la patología
pediátrica del habla y el lenguaje administrada a través
de la telepráctica es factible y altamente aceptable para
los clientes y cuidadores (Lincoln, Hines, Fairweather,
Ramsden y Martinovich, 2014; Sicotte, Lehoux,
FortierBlanc y Leblanc, 2003; Theodoros, 2008, 2012;
Valentine, 2014; Waite, Cahill, Theodoros, Busuttin y
Russell, 2006; Waite, Theodoros,

Correspondencia: Anneka Freckmann, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad de Correo Campus de Sydney Cumberland, 75 East St, Lidcombe NSW 2141, Australia.
electrónico: afre9276@uni.sydney.edu.au

ISSN 1754-9507 impreso / ISSN 1754-9515 en línea 2017 La Asociación de Patología del Habla de Australia Limited
Publicado por Informa UK Limited, comercializado como Taylor & Francis Group
DOI: 10.1080 / 17549507.2017.1292547
2A. Freckmann y col.

Russell y Cahill, 2010a, 2010b, 2012). Existe una creciente (Duchan y Kovarsky, 2011; Leach, 2005; Nelson,
evidencia de que la telepráctica es tan efectiva como la 2011). La capacidad de "establecer una buena relación y
prestación de servicios cara a cara tanto para la evaluación facilitar la participación en la intervención de patología del
como para la intervención (Bridgman, 2014; Grogan- habla" se incluye como uno de los Estándares ocupacionales
Johnson et al., 2013; Waite et al., 2010b). Sin embargo, para basados en competencias de Speech Pathology Australia
fecha, la mayoría la investigación se ha centrado en programas (SPA) (Speech Pathology Australia [SPA], 2011, p. 10). Otros
evaluación estructurados y de tratamiento como el términos que a menudo se utilizan como sinónimo de
Lidcombe Programa para la tartamudez infantil 2014; alianza terapéutica son compenetración, alianza de trabajo
(Bridgman, Waite et al., 2010a, 2010b) intervención menos y relación terapéutica.
en vez de estructurada, basada en el juego, utilizada por Se ha descrito que la alianza terapéutica consiste en un
comúnmente muchos SLP. A pesar de esto vínculo afectivo entre el cliente y el médico, así como el
Al aumentar la base de pruebas, muchos SLP se muestran reacios a acuerdo y la colaboración entre el cliente y el médico en las
utilizar la telepráctica como modelo de prestación de servicios. tareas, metas, métodos e intensidad de la terapia
terapéutica (Bordin, 1979). El acuerdo sobre "tareas" y
Barreras para la adopción de la telepráctica "metas" se considera concreto y explícito (Horowitz, 2013),
mientras que "vínculo" en la alianza terapéutica incluye
En algunas áreas, en particular Australia, la adopción hasta
componentes emocionales (por ejemplo, empatía, confianza
la fecha ha sido lenta (May y Erickson, 2014; O'Callaghan,
y respeto). La alianza terapéutica es la base de la confianza
McAllister y Wilson, 2005; Theodoros, 2012). Los SLP que
entre el cliente y el clínico, lo que permite que el cliente se
utilizan la telepráctica se diferencian de sus colegas que no
sienta lo suficientemente seguro como para desafiarse a sí
lo hacen por sus actitudes y percepciones de la telepráctica
mismo para lograr sus objetivos (Horowitz, 2013; Simpson &
y también por las barreras organizativas y políticas (May y
Reid, 2014).
Erickson, 2014). Es más probable que los médicos (incluidos
Plexico, Manning y DiLollo (2010), en su estudio cualitativo de las
médicos, enfermeros y profesionales de la salud afines) con
relaciones terapéuticas en la intervención de tartamudez en adultos,
actitudes positivas hacia la telepráctica continúen prestando
identificaron la alianza terapéutica como un factor en el éxito de la
servicios a quienes los necesitan, incluso si la demanda es
intervención. Investigación en
baja o cuando existen presiones externas de la fuerza
otras disciplinas también ha demostrado que thera-
laboral (Wade, Eliott y Hiller, 2014). La aceptación de la
peutico Alianza influencias terapia resultados
telepráctica por parte de los médicos impulsa la
(Anderson y col., 2012; Kazdin y Durbin, 2012;
disponibilidad de la fuerza laboral y promueve la asignación
Morrison y Smith, 2013; Shirk, Karver y Brown,
de recursos para los servicios. Sin actitudes positivas de los
2011). En terapia ocupacional, Morrison y Smith
médicos, los servicios de telepráctica son insostenibles
(2013) sugirió que un fuerte vínculo entre el cliente y el
(Wade et al., 2014).
médico motivó al cliente a trabajar hacia sus objetivos
Se ha informado que las actitudes negativas de los
porque querían lograr para la otra persona. Ambas
médicos constituyen una barrera para la adopción de la
partes se involucraron mejor con la terapia debido a
telepráctica por parte de los SLP y otros profesionales de la
este vínculo, y el aprendizaje siguió, lo que resultó en el
salud (Hill y Miller, 2012; May y Erickson, 2014; Tucker,
logro de la meta. Cuando los objetivos no estaban
2012b; Wade y Eliott, 2012; Wade et al., 2014). Los SLP
claros, había menos sentimientos de logro y la alianza se
también informan falta de comodidad y acceso a la
percibía como más débil. Este ciclo de alianza y éxito de
tecnología adecuada (May y Erickson, 2014; Tucker, 2012b).
metas puede ser similar en la patología del habla y el
Las barreras para la adopción incluyen el uso e
lenguaje (Plexico et al.,
implementación de tecnologías (Keck y Doarn, 2014; May y
2010).
Erickson, 2014; Wade, Eliott y Hiller, 2012), por ejemplo,
La alianza terapéutica puede involucrar a más partes
incluyen aprender a usar nuevas tecnologías, privacidad de
además del cliente y su SLP. Por ejemplo, en
datos y fallas tecnológicas. (Keck y Doarn, 2014).
terapéutico relaciones que confiar fuertemente en
Entrenamiento de compañeros de comunicación (por
Aparte de estas preocupaciones, las actitudes negativas
ejemplo, patología pediátrica del habla y el lenguaje y
del SLP hacia la telepráctica suelen estar relacionadas con el
terapia de afasia) se construye una relación no solo con el
posible efecto adverso en la relación médico-cliente y el
cliente sino también con sus cuidadores, quienes
desarrollo de la relación (Mashima y Doarn, 2008; May y
desempeñan un papel vital en la terapia (Anderson,
Erickson, 2014; Tucker, 2012b). La comunicación es una
Balandin y Stancliffe, 2015; SimmonsMackie, Raymer y
parte importante para facilitar los servicios de patología del
Cherney, 2016). Las múltiples relaciones entre el cliente, los
habla y el lenguaje; sin embargo, se han realizado
cuidadores y los médicos pueden verse afectadas por
investigaciones limitadas dedicadas a su medición en
diferentes factores e influenciadas por diferentes aspectos
patología del habla.
de la terapia y el resultado de cada parte (Accurso, Hawley y
Garland, 2013).
Alianza terapéutica

La capacidad de construir relaciones terapéuticas de calidad, o compenetración, se ha Medición de alianza terapéutica en salud aliada.Las
identificado durante mucho tiempo como importante en la patología del habla y el relaciones terapéuticas son complejas y multifacéticas;
lenguaje para el éxito de la terapia. en consecuencia, es un desafío

Captar de manera adecuada y sensible las dimensiones
importantes de esta relación con herramientas de
medición cuantitativa (Horowitz, 2013). Hasta la fecha, la
medición de las relaciones terapéuticas generalmente se
divide en dos formas; observación externa de una
relación y obtención de perspectivas de las partes
involucradas (Elvins & Green, 2008; Green,
2006). Se han utilizado escalas de calificación del
observador para medir la alianza terapéutica en psicología;
sin embargo, la mayoría de las investigaciones tanto en
psicología como en patología del habla y el lenguaje se han
centrado en las perspectivas de los clientes y los médicos
(Horowitz, 2013; Leach, 2005; Plexico et al., 2010). Se han
desarrollado varias herramientas diferentes para medir la
relación terapéutica, la mayoría de ellas para psicología.
Shirk y Saiz (1992) desarrollaron las Escalas de Alianza
Terapéutica para Niños (TASC) específicamente para su uso
con niños y sus terapeutas, utilizando los mismos
fundamentos teóricos que el Índice de Alianza de Trabajo
(Elvins & Green, 2008). Ahora consta de formularios de
calificación de terapeutas, niños y padres (Accurso et al.,
2013).
El TASC fue revisado por Creed y Kendall
(2005) para crear las Escalas de Alianza Terapéutica para
Niños - Revisada (TASC-r). El TASC-r (Creed & Kendall,
2005) es una herramienta de 12 elementos que mide la
alianza en las tres dimensiones de tarea, vínculo y metas
y cubre los aspectos positivos y negativos de la alianza
terapéutica. Por ejemplo, las preguntas incluyen "El niño
te considera un aliado" y "El niño siente que pasas
demasiado tiempo concentrándote en sus problemas".
Cada respuesta se califica en una escala Likert de cuatro
puntos (es decir, "no se parece en nada a mi cliente" a
"muy parecido a mi cliente"). Se ha encontrado que tiene
una confiabilidad y validez adecuadas en contextos de
psicología (Creed & Kendall, 2005) y se ha convertido en
la medida más común de alianza terapéutica con niños
en psicología (Elvins & Green, 2008).
El TASC-r se ha utilizado en psicología para estudiar si
las medidas de resultado mediadas por la alianza en la
terapia cognitivo-conductual (Zandberg, Skriner y Chu,
2015) y para comparar la alianza entre el terapeuta y el
cliente entre los tipos de tratamiento (Ormhaug, Jensen,
Wentzel-Larsen y Shirk, 2014). Hasta la fecha, no se ha
medido la alianza terapéutica en patología del habla y el
lenguaje utilizando el TASC-r o cualquier otra
herramienta, lo que dificulta la comparación de la
relación entre grupos y condiciones. Además, hasta
donde sabemos, no se ha medido la alianza terapéutica
en la telepráctica pediátrica.
Telepráctica y alianza terapéutica
Los médicos de todas las disciplinas han expresado su
preocupación por la capacidad de construir una alianza
terapéutica a través de la telepráctica (Simpson y Reid, 2014;
Tucker, 2012a, 2012b). Por el contrario, se sabe poco sobre las
percepciones de los padres / cuidadores o de los niños sobre la
alianza terapéutica durante la telepráctica (Anderson et al.,
2015). Las principales preocupaciones que tienen los médicos con respecto a
Desafiando el supuesto de la relación en la telepráctica3
El desarrollo de una alianza terapéutica a través de la
telepráctica se ha relacionado con el "vínculo". Este es el
componente de la alianza terapéutica que más depende de
la comunicación, tanto verbal como no verbal, durante las
sesiones. Los componentes de la tarea y las metas de
Bordin (1979) parecen tener menos probabilidades de verse
afectados por el uso de la telepráctica (Simpson y Reid,
2014). Se ha planteado la hipótesis de que la telepráctica
puede interferir con el vínculo porque las señales no
verbales son más difíciles de detectar debido a la visión
limitada (Zilliacus et al., 2010). Además, a menudo se
informa que el humor es un factor en el desarrollo de las
relaciones terapéuticas (Morrison y Smith, 2013), y el
retraso en la conexión puede dificultarlo (Tucker, 2012b).
Tucker (2012b) también informó las preocupaciones de los médicos de que
los problemas técnicos, como las conexiones deficientes y los abandonos,
pueden afectar el tiempo de la sesión y provocar retrasos. Los SLP también han
informado preocupaciones sobre la capacidad de manejar el comportamiento
de forma remota, así como que la tecnología puede distraer a los niños (Hines,
Lincoln, Ramsden, Martinovich y Fairweather, 2015; Lincoln et al., 2014; May y
Erickson, 2014; Tucker, 2012b). Las preocupaciones sobre la alianza terapéutica
pueden llevar a actitudes negativas de los médicos sobre la telepráctica y, por lo
tanto, limitar la sostenibilidad del servicio.
Sin embargo, parece que estas actitudes negativas no
continúan una vez que se intenta la telepráctica. En el estudio
de Tucker (2012a), el 63% de los SLP no creía que la relación con
los clientes pudiera establecerse de manera tan eficaz a través
de la telepráctica. Un número similar de encuestados (62%) no
creía que la terapia realizada a través de la telepráctica fuera
tan eficaz como la terapia cara a cara. Sin embargo, muy pocos
de estos participantes (14 /
170) tenía experiencia en la realización de telepráctica (Tucker,
2012a). Por el contrario, los SLP que utilizan la telepráctica
informan que pueden interactuar bien con los clientes a través
de la tecnología y pueden gestionar el comportamiento de
forma adecuada (Bridgman, Block y O'Brian, 2015; Hines et al.,
2015). Una vez que los SLP tienen experiencia en telepráctica, es
más probable que vean la telepráctica como un modelo legítimo
de prestación de servicios, ya que saben que es posible
establecer una buena relación y relacionarse con éxito con los
clientes (Hines et al., 2015; Horowitz, 2013; Simpson & Reid,
2014) y así sostener los servicios de telepráctica. Del mismo
modo, los padres
que la telepráctica facilita a los niños
a menudo informa
compromiso en terapia sesiones (Buen tiempo,
Lincoln y Ramsden, 2016). Padres han informado
que se sientan satisfechos con los servicios prestados por
telepráctica en otras disciplinas como como genético
asesoramiento (Hopper, Buckman, & Edwards,
2011). El hecho de que construir una buena relación o
manejar la conducta a través de la telepráctica no parece
ser difícil, sugiere que la alianza terapéutica construida en la
telepráctica puede ser similar a la alianza terapéutica en la
patología del habla y el lenguaje cara a cara.
La alianza terapéutica no se ha evaluado sistemáticamente
para la telepráctica de patología del habla y el lenguaje; sin
embargo, se ha estudiado en psicología. Simpson y Reid (2014)
revisaron la literatura para
4A. Freckmann y col.
alianza terapéutica durante la videoconferencia en
psicoterapia. Descubrieron que la alianza terapéutica a
través de videoconferencia se calificaba tan bien como
en condiciones cara a cara, incluso cuando la calidad de
imagen o sonido era deficiente. Informaron que los
clientes y terapeutas a menudo olvidaban que estaban
separados físicamente porque estaban "completamente
absortos" (Simpson y Reid, 2014, p. 290) en el proceso
terapéutico. Algunos clientes también informaron que la
videoconferencia les permitió tener un espacio personal
y así sentirse más a gusto con su terapeuta, potenciando
la alianza terapéutica. Los psicoterapeutas también
informaron haber realizado ajustes en su estilo personal
para permitirles expresar empatía de manera más clara
y activa a través de una videoconferencia (Simpson y
Reid, 2014).
Si bien las preocupaciones sobre la relación o la alianza
terapéutica se consideran importantes barreras para la
adopción de la telepráctica (May y Erickson, 2014; Tucker,
2012b), estas preocupaciones no han sido respaldadas en
estudios cualitativos (Hill y Miller, 2012; Hines et al., 2015) .
Hasta donde sabemos, la relación nunca se ha estudiado
cuantitativamente en la patología del habla y el lenguaje, ni
se ha investigado la alianza terapéutica en la telepráctica
con niños en ninguna disciplina. Por lo tanto, hay poca
evidencia disponible para guiar las decisiones clínicas de los
SLP sobre la telepráctica y su impacto potencial en la alianza
terapéutica. En el documento de posición de ASHA sobre la
telepráctica (ASHA, 2015), se establece que los servicios
prestados a través de la telepráctica deben ser de la misma
calidad que los prestados en persona. Sin emabargo, Es
difícil determinar con la evidencia actual si la terapia
proporcionada a través de la telepráctica es igual a la
terapia cara a cara en términos de la calidad de la relación
terapéutica. Por tanto, los objetivos de este estudio fueron:
(a) investigar la validez aparente de una medida de
alianza terapéutica para la patología pediátrica del habla
y el lenguaje; (b) para determinar si existe una diferencia
entre la alianza terapéutica informada por los SLP que
realizan sesiones cara a cara, en comparación con los
SLP que realizan telepráctica; y (c) determinar si existe
una diferencia en las calificaciones de confianza con la
tecnología entre la telepráctica y los SLP cara a cara.
Método
Reclutamiento de participantes
El estudio recibió la autorización ética del comité de ética de investigación
humana de la Universidad de Sydney (2015/015). Los participantes fueron
reclutados a través de Twitter y anuncios por correo electrónico a
organizaciones no gubernamentales y consultorios privados que se sabe
que realizan telepráctica. Los participantes también fueron reclutados a
través del correo electrónico de exalumnos de la Universidad de Sydney.
lista de distribucion. Todas las invitaciones contenían un
enlace electrónico a la encuesta en línea y la
participación fue anónima. La hoja de información del
participante se proporcionó al comienzo de la encuesta,
y se pidió a los participantes que dieran su
consentimiento para continuar con el cuestionario. No
se dieron incentivos a los SLP que aceptaron participar.
Los SLP eran elegibles para participar si estaban practicando
actualmente con un número de casos pediátricos. Los SLP con
experiencia en telepráctica solo eran elegibles para informar
sobre clientes de telepráctica, y los SLP que solo tenían
experiencia en la prestación de terapia cara a cara solo podían
informar sobre clientes cara a cara. Los SLP en el grupo cara a
cara se incluyeron solo si no habían intentado previamente la
telepráctica, para minimizar el sesgo potencial de los
encuestados dentro de cada grupo.
Materiales
Se eligió una encuesta en línea por su facilidad de uso,
rentabilidad y para permitir una mayor distribución. La
encuesta fue diseñada y administrada a través de
SurveyMonkey. A cada participante se le hicieron 10
preguntas sobre detalles demográficos, cuatro preguntas
sobre la cantidad de casos de telepráctica y la tecnología
utilizada (solo para los SLP de telepráctica), dos preguntas
sobre la comodidad con tecnología familiar y desconocida, y
una pregunta sobre su percepción de qué tan bien el TASC-r
se ajustaba a su comprensión de la relación.
Los SLP informaron sobre sus percepciones de la
relación con hasta tres clientes de entre 5 y 12 años. Los
niños tenían que haber completado de tres a cinco sesiones
con ese SLP. Medir la alianza terapéutica después de tres a
cinco sesiones es una característica común de la
investigación que utiliza el TASC-r (Abrishami y Warren,
2013; Accurso et al., 2013; Shirk, Gudmundsen, Kaplinski y
McMakin, 2008; Zandberg et al.,
2015) para controlar las posibles variaciones en la alianza
terapéutica a lo largo del tiempo. Para cada niño sobre el que se
informó, los SLP completaron el TASC-r, así como una pregunta
sobre su percepción de la relación general con ese cliente
(medida en una escala Likert de cuatro puntos).
El formulario de terapeutas TASC-r (Shirk et al., 2011;
Shirk & Saiz, 1992) fue adaptado para su uso en
patología del habla y el lenguaje. Como se ha hecho en
otros estudios (Accurso et al., 2013), la redacción de
TASC-r se modificó ligeramente (por ejemplo, '' paciente
'' cambió a '' cliente '' y '' problemas '' cambió a '' habla y
comunicación dificultades '') para garantizar la
idoneidad para un contexto de patología del habla y el
lenguaje. El TASC-r ha sido previamente adaptado para
otras disciplinas y para otros lenguajes sin afectar su
validez (Kronmüller et al., 2003; Ormhaug et al., 2014). El
TASC-r modificado en este estudio demostró altos
niveles de consistencia interna (alfa de Cronbach¼0,887).
La encuesta tardó entre tres y 15 minutos en
completarse, según la cantidad de clientes informados y
se completó en una sola sesión. Antes de la distribución,
se puso a prueba el diseño de la encuesta
 Desafiando el supuesto de la relación en la telepráctica5

para asegurar que la progresión de la encuesta fuera lógica y fácil de Cuadro I.Datos demográficos de los participantes por método de prestación de servicios.

seguir. Telepráctica Cara a cara

Demografía de los participantes n (%) * n (%) *

Análisis SLP 14 (45,4) 17 (54,9)

Clientes informados sobre 21 (38,2) 34 (61,8)
Las respuestas de la encuesta se ingresaron en una hoja País de práctica
Australia 13 (41,9) 12 (38,7)
de cálculo segura de Microsoft Excel. Los ítems de TASC-
Hong Kong 4 (12,9) 1 (3,2)
r se calificaron de 1 a 4, con los ítems 2, 5, 7, 8 y 11 Canadá 1 (3,2) 0
anotados al revés de acuerdo con las instrucciones del Lugar de trabajo**
Practica privada 4 (12,9) 7 (22,6)
autor (Accurso, comunicación personal, 20 de mayo de
ONG 9 (29,0) 5 (16,1)
2015), lo que arroja una puntuación total (máximo 48, Hospital 1 (3,2) 1 (3,2)
mínimo 12 ) extraídos de la suma de los 12 elementos. Centro de salud comunitario 1 (3,2) 1 (3,2)
Organización gubernamental 0 1 (3,2)
Los datos se analizaron con IBM SPSS (versión 21). La
Escuela publica 0 5 (16,1)
información demográfica se analizó mediante recuentos Escuela privada 0 1 (3,2)
de frecuencia y se comparó entre modelos de prestación Otro 2 (6,5) 4 (12,9)
Género
de servicios (telepráctica y condiciones presenciales). Los
Mujer 11 (35,4) 13 (41,9)
datos no identificados recopilados de los SLP sobre sus Masculino 1 (3,2) 6 (19,4)
clientes impidieron el análisis de las puntuaciones TASC- Carga de casos ***

Pediátrico
r por edad, diagnóstico o ubicación. Para investigar la
Discurso 13 (41,9) 16 (51,6)
validez aparente del TASC-r para la patología del habla y Idioma 13 (41,9) 15 (48,4)
el lenguaje, se calcularon las correlaciones tau-b de Fluidez 6 (19,4) 11 (35,5)
Discapacidad / AAC 5 (16,1) 8 (25,8)
Kendall entre los puntajes totales de TASC-r y las
Voz 4 (12,9) 7 (22,6)
calificaciones generales de la relación de los Tragar 1 (3,2) 1 (3,2)
encuestados con cada cliente. Adulto
Discurso 7 (22,6) 3 (9,7)
Idioma 2 (6,5) 1 (3,2)
Fluidez 2 (6,5) 3 (9,7)
Discapacidad / AAC 2 (6,5) 2 (6,5)
Resultados Voz 3 (9,7) 3 (9,7)
Tragar 3 (9,7) 3 (9,7)
37 participantes intentaron realizar la encuesta en línea y el Distancia M (SD)
Años de edad) 23 - 64 33,1 (9,9)
86,5% la completó (norte¼32). Se excluyeron los datos de
Años practicando 1 - 42 9,6 (10,6)
los participantes que no completaron completamente la
*% de toda la cohorte.
encuesta (norte¼5). Las puntuaciones totales de TASC-r y la * * Total4100% como lugares algunos Participantes informó múltiple
percepción general de los resultados de la relación se de trabajo.

trazaron en un diagrama de dispersión y se identificó un
valor atípico obvio. Este participante logró una puntuación
total TASC-r de 38 (que indica una alianza terapéutica
"buena"), sin embargo, calificó la relación general con este
cliente como "muy mala". De todas las respuestas, este
valor atípico tuvo la correlación más baja entre estas dos
medidas. También se excluyeron todas las demás
puntuaciones TASC-r de este participante, ya que no estaba
claro si el participante entendía la medida o el sistema de
calificación. Los datos restantes de un total de 31 SLP
aportaron información sobre la alianza terapéutica con 55
niños. La información demográfica sobre los SLP
participantes y sus clientes se puede encontrar en la Tabla I.
Los 31 encuestados trabajaron con poblaciones diversas en una
variedad de lugares de trabajo (Tabla I). El lugar de trabajo más común en
general fueron las organizaciones no gubernamentales (45,2%,norte¼14);
este era también el lugar de trabajo más común para los SLP de
telepráctica. Esto puede haber sido influenciado por las estrategias de
contratación, ya que la contratación se dirigió directamente a
organizaciones conocidas por los investigadores. Los SLP cara a cara
proporcionaban con mayor frecuencia servicios a áreas metropolitanas
(población4100.000), (45,2%, norte¼14) y
Los SLP de telepráctica prestaron servicios con mayor
frecuencia a centros rurales (71,4%, norte¼10). La mayoría
* * * Total 4100% ya que la mayoría de los participantes informaron múltiples áreas de
práctica en su carga de casos.
similar para los grupos de telepráctica y cara a cara. Los SLP
que usaban la telepráctica tenían un número de casos más
amplio en general, con más SLP de telepráctica que
brindaban servicios a adultos que los SLP cara a cara (Tabla
I). En este estudio, sin embargo, solo informaron sobre la
relación con sus clientes pediátricos.
Había una amplia gama de tecnologías de
videoconferencia utilizadas por los SLP que prestan
servicios a través de la telepráctica. Con mucho, la
tecnología más utilizada (64,3%,
fue Skype.
norte¼9), seguido de
Ir a la reunión (42,9%,norte¼6) y Adobe
Conectar (35,7%, norte¼5). La mayoría de los SLP que realizaban
telepráctica utilizaban dos o más tecnologías para proporcionar
servicios a los clientes (71,4%,norte¼10).
Validez aparente de TASC-r
Se encontró una relación positiva significativa y fuerte entre
los puntajes totales de TASC-r de los participantes y sus
calificaciones generales de simpatía con cada niño (r¼0,601,
pag50,01). En general, el 83,9% de los SLP (norte¼26) estuvo de

de los SLP tenían un número de casos que incluía niños con acuerdo en que el TASC-r encajaba con su comprensión de la

retraso / trastorno del habla (93,5%,norte¼29). Esto era relación.

6A. Freckmann y col.
Doce SLP respondieron una pregunta abierta con
respecto a su percepción del TASC-r, y esto también
indicó una fuerte relación entre la comprensión de la
relación entre los SLP y el TASC-r. Seis médicos fueron
positivos en sus comentarios. Un SLP comentó: "Vi que
las palabras 'aliado' y las preguntas relacionadas con la
actitud del cliente hacia el trabajo con el médico para
resolver sus problemas cotidianos de habla /
comunicación encajaban bien con mi comprensión de la
'alianza terapéutica'". Otro SLP comentó que estaba de
acuerdo con el TASC-r pero quería más preguntas
relacionadas con la perseverancia del niño con tareas
difíciles. Tres SLP comentaron que pensaban que las
preguntas excluían la idea de una buena relación con los
padres / cuidadores como equipo, y creían que este era
un aspecto importante del proceso de terapia.
Curiosamente, todos estos SLP llevaban a cabo
telepráctica, y dos señalaron que brindaban más
"entrenamiento" a las familias para la comunicación
compleja de la discapacidad y, por lo tanto, en estos
contextos, la característica más importante de la
relación era entre ellos y la familia. Un SLP comentó que
no sentían que entendieran el término, y otro pensó que
el concepto de alianza terapéutica era "menos
amigable" que la idea de simpatía.
Alianza terapéutica en condiciones presenciales y de
telepráctica
El grupo de telepráctica informó sobre una mediana de uno
cliente (SD¼0.8) y el presencial reportado sobre
una mediana de dos clientes (DE La diferencia en ¼grupo
0,9).
el número de clientes reportan ted en
entre los dos grupos fue (pag¼0,118). no significativo
El puntaje promedio de TASC-r sobre ambas cosas
38,9 de un total posible de 48. Esto indica un alto nivel de
relación general, como lo indican las puntuaciones en el
cuartil superior (es decir, 37–48) (Zandberg et al. 2015). No
hubo diferencias significativas en las puntuaciones de TASC-
r para las condiciones de telepráctica y cara a cara.
(pag¼0,961) (Tabla II).
Confianza y comodidad con la tecnología
Allí no hubo diferencia significativa
ya sea cara a cara o los SLP de telepráctica confían
dencia con cada día software y tecnología
¼
(pag0,414) o su comodidad con
software y tecnologíapag0,780). En¼ambos
Cuadro II. Resultados de las Escalas de la Alianza Terapéutica para Niños -
Revisado (TASC-r) por método de prestación de servicios.
TASC-r * TASC-r *
M (SD) mediana
Telepráctica (norte¼21) 38,4 (7,8) 40
Cara a cara (norte¼3) 39,2 (5,9) 40
* Puntuación sumada de TASC-r, rango posible de 12 a 48.
modelos de prestación de servicios, la mayoría de los SLP se
sentían seguros con la tecnología familiar (95,6%,
norte¼29) y cómodo con tecnología desconocida (87,1%,
norte¼27).
Discusión
En este estudio, nuestro objetivo fue validar una medida
cuantitativa de la alianza terapéutica para la patología del
habla y el lenguaje, así como determinar si había una
diferencia en la alianza terapéutica informada entre la
telepráctica y la prestación de servicios tradicionales cara a
cara con clientes pediátricos. También se investigó la
comodidad de los SLP con la tecnología para determinar si
esto difería entre los modelos de prestación de servicios.
Los resultados indicaron que no hubo diferencias
significativas en las puntuaciones de TASC-r y, por lo tanto,
en la alianza terapéutica entre los SLP, independientemente
de su modelo de prestación de servicios. Tampoco hubo
diferencias significativas en la comodidad de los SLP con la
tecnología, ya sea en entornos cara a cara o de telepráctica.
La alta y significativa correlación entre las puntuaciones de
TASC-r y las medidas generales de simpatía de los SLP indica
que la TASC-r modificada puede tener potencial para su uso en
patología del habla y el lenguaje. La estrecha correlación entre
las opiniones generales de los SLP sobre la relación con sus
clientes y las puntuaciones totales de TASC-r demuestran que la
herramienta se alinea estrechamente con las opiniones de los
SLP sobre la relación y la alianza. Los SLP informaron que se
sentían cómodos con la herramienta, los elementos utilizados y
lo que medía.
Los dos grupos de SLP estudiados eran heterogéneos en
cuanto a número de casos y entorno, pero eran muy similares
en puntuaciones tanto para la alianza terapéutica como para la
comodidad con la tecnología. Esto indica que se pueden
grupos fue desarrollar altos niveles de alianza terapéutica
independientemente del número de casos, el entorno y el modo
de prestación de servicios. Este hallazgo es consistente con la
experiencia de otros profesionales de la salud, como los
psicólogos (Simpson & Reid, 2014).
Aunque este estudio es una investigación preliminar de la
relación en la patología del habla y el lenguaje, estos hallazgos
pueden ayudar a tranquilizar a los SLP sobre la telepráctica y las
preocupaciones sobre su impacto en la relación (Hill y Miller,
2012; May y Erickson, 2014; Simpson y Reid, 2014) . Este estudio
Entre
proporciona evidencia directa de que las relaciones que se
desarrollan en línea a través de videoconferencias son similares
a las que se desarrollan cara a cara. La falta de diferencias
desconocido
significativas entre los modelos de prestación de servicios
también demuestra
equivalencia de cuidado en relación con la compenetración. a
Equivalencia la atención estándar ha sido señalado por SPA
ASHA y como importante para la telepráctica
(ASHA, 2016; SPA, 2014).
TASC-r * Los comentarios abiertos de los participantes
distancia indicaron que algunos SLP ven la relación y la alianza
20–48 terapéutica como algo más que una simple relación
21–48 bidireccional entre el SLP y su cliente. Algunos SLP
señalaron que las familias y la escuela

Los entornos también juegan un papel importante en la
facilitación de la terapia, por lo que el desarrollo de una alianza
terapéutica con estas partes es fundamental. Este factor fue
especialmente destacado por los SLP que trataron a niños con
necesidades complejas de comunicación a través de la
telepráctica, ya que informaron que es la familia la que brinda la
terapia al cliente. Se requiere más investigación para
determinar cómo factores como las relaciones entre el médico,
el cuidador y el niño trabajan juntos para formar una alianza
terapéutica general tanto en el ámbito presencial como en el de
la telepráctica. Esto puede ser particularmente importante en la
telepráctica, donde los médicos pueden trabajar más
activamente con los cuidadores para entrenarlos en la
implementación de estrategias de terapia (Hines et al.,
2015).
En la evaluación de la alianza terapéutica, es
importante investigar las perspectivas de una variedad
de partes interesadas, por ejemplo, el niño y su familia.
Junto a las formas de niño y terapeuta TASC-r, existen
otras variaciones como el TASCP para padres y
cuidadores (Accurso et al., 2013) y el TASCA para
adolescentes (Zandberg et al., 2015). Estos, cuando se
usan en combinación, permitirían una mayor
investigación de los múltiples factores que afectan el
desarrollo de la alianza terapéutica en la patología del
habla y el lenguaje. Además, la literatura sobre alianzas
terapéuticas a menudo describe el elemento "vínculo"
como que tiene una relación mayor que los elementos
"tarea" y "meta" con el resultado (Horowitz, 2013;
Morrison & Smith, 2013; Simpson & Reid , 2014).
Se necesitan más análisis psicométricos para confirmar
la validez de la TASC-r en patología del habla y el lenguaje.
Hasta el momento, no existen puntuaciones normativas
para el TASC-r en ninguna disciplina. Los datos normativos
en patología del habla y el lenguaje permitirían utilizar el
TASC-r para evaluar la calidad de la relación en una mayor
variedad de variables, como la edad del cliente, las
plataformas tecnológicas utilizadas y los entornos de la
terapia. El estudio adicional del uso de TASC-r en la
telepráctica puede ser útil para investigar el papel de la
familia y la idoneidad de determinados grupos de clientes
para la telepráctica. Por ejemplo, los niños con trastorno del
espectro autista pueden construir una mejor relación a
través de la telepráctica, ya que pueden permanecer en un
entorno familiar y la tecnología puede aumentar la
participación (Boisvert, 2012).
Hasta donde sabemos, esta es la primera vez que el TASC-r
se ha utilizado para investigar la alianza terapéutica en un
entorno de telepráctica para cualquier disciplina. Como
resultado, nuestros hallazgos preliminares pueden ayudar a
proporcionar un conjunto básico de datos comparativos para la
telepráctica. Preocupaciones por la alianza terapéutica
y captación de La telepráctica no es exclusiva de la
habla-lenguaje patología (Simpson & Reid, el TASC-r
2014), y por tanto, puede tener potencial
para respaldar las evaluaciones de los servicios de telepráctica en todas
las disciplinas.
Desafiando el supuesto de la relación en la telepráctica7
Aunque nuestros resultados indicaron que la alianza
terapéutica, medida por el TASC-r, es similar en los
modos de administración cara a cara y telepráctica, es
probable que se desarrolle de manera diferente en estos
entornos. Los investigadores han descubierto que es
probable que existan diferencias cualitativas en la
alianza terapéutica en la telepráctica, por ejemplo,
adaptaciones al lenguaje corporal para compensar una
visión de cabeza y hombros (Hines et al., 2015; Horowitz,
2013; Simpson y Reid, 2014). De manera similar, los SLP
en el estudio de Hines et al. (2015) informaron que los
SLP planificaron y administraron sus sesiones de
manera diferente para desarrollar una relación a través
de la telepráctica. La investigación adicional podría
investigar qué estrategias utilizan los SLP para fomentar
y desarrollar una alianza terapéutica sólida en varios
entornos y con diversos tipos de clientes, tanto cara a
cara como a través de la telepráctica.
2004) y puede ayudar a determinar si las perspectivas de
comunicación de los médicos se reflejan en las interacciones en
línea. Dicha información ayudaría a asegurar que los SLP estén
adecuadamente preparados para la telepráctica y podría
informar el desarrollo de paquetes de capacitación.
Los SLP de telepráctica y cara a cara no difirieron en sus
niveles de comodidad y confianza con la tecnología. Esto
puede deberse a los altos niveles de confianza de los SLP en
la tecnología en general, ya que el uso de software como
Skype se vuelve más frecuente en la sociedad cotidiana. Sin
embargo, también es posible que los SLP que solo se
dedican a la práctica presencial sean menos conscientes de
los límites de su conocimiento tecnológico. Por el contrario,
los SLP de telepráctica pueden restar importancia a su
comodidad y confianza con la tecnología, ya que son más
conscientes de sus limitaciones.
A pesar de estas advertencias, nuestros resultados sugieren
que la comodidad y la confianza con la tecnología no es un
factor importante que influya en la voluntad de los SLP de
adoptar la telepráctica. Es posible que la adopción de la
telepráctica no se facilite simplemente porque un SLP es una
persona centrada en la tecnología. Más bien, Hines et al. (2015)
encontraron que fue a través de los médicos que intentaron la
telepráctica y aprendieron a usar sus habilidades existentes en
un nuevo entorno que apoyó el cambio de actitudes hacia la
telepráctica. Los cambios en la educación significan que, cada
vez más, los estudiantes de salud afines tienen experiencia
directa con la tecnología de la información y la comunicación a
medida que se amplían las oportunidades para el aprendizaje
en línea. Sin embargo, a pesar de que los estudiantes pueden
reportar un fuerte conocimiento y habilidades con el uso de la
tecnología, aún necesitan apoyo para transferir estas
habilidades a contextos profesionales (Lam et al.,
2016). Por lo tanto, la educación destinada a apoyar la
transición de los SLP a la telepráctica no debe centrarse
únicamente en la tecnología, sino en la capacidad de
transferir habilidades clínicas del entorno presencial a
un entorno en línea (Hines et al., 2015).
8A. Freckmann y col.
Limitaciones
Hubo algunas limitaciones en este estudio. En general, el
tamaño de la muestra fue pequeño. Los SLP pudieron elegir
a qué clientes calificaron su alianza terapéutica. Por lo
tanto, es posible que algunos hayan elegido
deliberadamente clientes con los que creían que tenían una
relación más fuerte o más débil. Intentamos minimizar este
sesgo mediante el diseño comparativo, pero el sesgo de
esta fuente no pudo eliminarse por completo. Otra
limitación es que este estudio no obtuvo información sobre
el entorno de la terapia para cada cliente. Nuestro estudio
no investigó los factores que pueden facilitar o dificultar la
comunicación, por ejemplo, realizar una telepráctica en una
oficina silenciosa en lugar de ruidosa. Tampoco pudimos
analizar la información de TASC-r por grupo de clientes, por
ejemplo, la edad, el diagnóstico y la ubicación de los
clientes, y cómo esto puede haber afectado sus
puntuaciones de alianza terapéutica. Estas pueden ser áreas
de investigación futura.
Conclusiones
Este estudio proporciona evidencia preliminar de la validez
aparente del TASC-r para su uso en la investigación de la alianza
terapéutica en patología del habla y el lenguaje. Tampoco
demostró diferencias significativas entre la alianza terapéutica
informada por los médicos desarrollada a través de la
telepráctica y en entornos cara a cara. Nuestros hallazgos
sugieren que las preocupaciones con respecto a la alianza
terapéutica en la telepráctica pueden carecer de fundamento.
Nuestros resultados también demostraron que los SLP que
ofrecen telepráctica y sesiones de terapia cara a cara informan
niveles similares de comodidad con la tecnología. Se requiere
investigación futura para identificar cómo los patólogos del
habla desarrollan una relación dentro de la telepráctica.
Declaración de interés
Los autores reportan ningún conflicto de intereses. Los
autores son los únicos responsables del contenido y la
redacción del artículo.
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