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Módulo 1 Lección 3

INICIO
CUIDAR

ANZUELO
CONTENIDO
OBJETIVO DE LA LECCIÓN
Los jóvenes aprenderán que cuidar de forma genuina a las personas
por las que oramos es el camino por el cual el Evangelio llega de una
manera impactante a sus vidas.

CONEXIÓN
VERSÍCULO CLAVE
Juan 5:1-8; Lucas 7:11-17; Juan 4:4-10; 16-19.

CKECKLIST
1. Un Power Point está disponible para esta lección
2. Elementos para construir una torre: diez vasos descartables,

DECISIÓN
cinco sorbetes, cuatro hojas de papel grueso, una cinta para
pegar ancha (enrollada alrededor de un lápiz)
3. Pizarra o tablero para enumerar ideas prácticas de cómo Cuidar.

DEFINICIÓN DE PALABRAS:
PREGUNTAS

• Compasión (Oxford Languages): “Sentimiento de tristeza que


produce el ver padecer a alguien y que impulsa a aliviar su dolor o
sufrimiento, a remediarlo o a evitarlo.”
• Empatía (Oxford Languages): “Participación afectiva de una
persona en una realidad ajena a ella, generalmente en los
sentimientos de otra persona.”

EVANGELISMO Y MISIONES 3. Cuidar | 1


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Nota del maestro: Divide a los jóvenes en grupos de 4 o 5 si es posible. Entrega a cada grupo los
siguientes materiales para construir una torre: diez vasos descartables, cinco sor-
betes, cuatro hojas de papel grueso, una cinta para pegar ancha (enrollada alrede-
dor de un lápiz). Dales de 3 a 5 minutos para que puedan organizarse. Pon música
de fondo mientras construyen, esto mantendrá una atmósfera agradable. El obje-
tivo del juego: La construcción de la torre en general funciona mejor si comienzas

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con una buena base. Premia al equipo que construya la torre más alta.

Cada equipo debe trabajar para construir la torre más alta con los suministros proporcionados. No se
puede pegar con cinta la torre a otro objeto como una mesa, piso o pared. Tendrán tres minutos para
construir su torre. ¡Preparados, listos, ya!

CONTENIDO
Nota del maestro: Asegúrate de felicitar a cada grupo después de que la torre esté terminada. Haz las
siguientes preguntas y permite que los jóvenes respondan apropiadamente.

F Levanta tu mano si ayudaste a construir una de las torres ¿Qué funcionó bien?
F ¿Qué desafíos enfrentaron y cómo los solucionaron?
F ¿Construyeron la torre lo más alto que pudieron? ¿Por qué sí o por qué no?

CONEXIÓN
F ¿Hubo principios generales de construcción similares entre los equipos con las torres
más altas?

El objetivo de este juego es ayudarte a entender que la construcción de torres generalmente funciona
mejor si comienzas con una buena base. De la misma manera, las conversaciones acerca del evan-
gelio generalmente tienen mayor impacto si construyes una buena base relacional con alguien antes

DECISIÓN
de presentarle el plan de salvación. Ya sea que establezcas esa base relacional en tres minutos, tres
semanas o tres meses, los elementos de «Oración» y «Cuidado» del Círculo de la Causa ayudan a
proporcionar esa base.

Comenzaremos con una oración y discutiremos la segunda parte del Círculo de la Causa: Cuidar. PREGUNTAS

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CONTENIDO DE LA LECCIÓN

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A manera de repaso, en estas últimas semanas hemos estado hablando de «La Causa» y de cómo
Jesús nos está llamando a compartir el mensaje del Evangelio con aquellos que no lo conocen para
que puedan conectarse con Dios. Hemos estado hablando del ejemplo de Jesús al observar su enfo-
que de «orar, cuidar, compartir» al relacionarse con las personas.

La semana pasada nos centramos en la oración. Esta semana, nos estaremos enfocando en el cuidado.

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¿Qué relatos de Jesús en los Evangelios te vienen a la mente al pensar en la importancia del amor y el
cuidado que tuvo por otros durante su vida y ministerio?

Nota del maestro: Permite que los jóvenes respondan. Posibles respuestas: sanar a los enfermos,
alimentar a los hambrientos, perdonar los pecados, morir en la cruz, llorar en

CONTENIDO
Jerusalén, etcétera.

Jesús practicaba lo que predicaba


Los relatos que muestran el cuidado de Jesús hacia las personas los encontramos por todas partes en
los Evangelios. Jesús no solo habló de cuidar a los demás, sino que también lo hizo. Esto era algo que
realmente impactaba, ya que las personas religiosas que enseñaban en ese momento no aplicaban

CONEXIÓN
todas las cosas que predicaban. Esto lo observamos, por ejemplo, cuando Jesús decía: “Así que, todo
lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; mas no hagáis conforme a sus obras, porque dicen,
y no hacen.” Mateo 23:3. Una de las cosas más radicales que marcaba un contraste con los líderes de
la época era cómo amaba y cuidaba a las personas. Él no tenía miedo de mostrarse con los «perdedo-
res», los malos, los menospreciados y los quebrantados.

Jesús mostró su cuidado en aquellos por los que nadie se preocupaba.

DECISIÓN
Su cuidado se extendió hacia aquellos que fueron marginados por la multitud «popular y poderosa».
De hecho, esa fue una de las mayores frustraciones de Jesús con el pueblo judío «popular y poderoso»
de aquella época, quienes crearon sus propias reglas religiosas que levantaban barreras que impe-
dían a la gente «común» conectarse con Dios. Estaban utilizando esas reglas para ser duramente crí-
ticos, pero también para intimidar y excluir a las personas. Presta atención a lo que él dijo, “Al oír esto
PREGUNTAS

Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a
justos, sino a pecadores” (Marcos 2:16).

Hoy vamos a ver tres historias donde Jesús muestra Compasión, Empatía y Amor al cuidar a las perso-
nas que lo necesitaban, porque, aunque tu no lo creas, todos necesitamos recibir y dar la compasión,
la empatía y el amor de parte de nuestro Señor en diferentes situaciones de nuestra vida.

Entonces la gran pregunta al ver a Jesús en estas historias es ¿Cómo puedo cuidar a otra persona?

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1. Es necesaria la compasión para poder cuidar
Definición de compasión (Oxford Languages): “Sentimiento de tristeza que produce el ver pade-
cer a alguien y que impulsa a aliviar su dolor o sufrimiento, a remediarlo o a evitarlo.”

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Leer: Juan 5:1-8

Este pasaje es un pasaje extraordinario. Jesús llega a Jerusalén y pasa cerca de un estanque
llamado Bethesda. Allí se encontraban muchos hombres y mujeres con problemas físicos (enfer-
mos, cojos, ciegos y paralíticos) esperando que algo milagroso sucediera para cambiar su estado

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de salud. Esto es interesante. La cantidad de gente que estaba en ese lugar nos habla un poco
del contexto en el cual Jesús vivió. Tal vez no había un hospital central o médicos profesionales
públicos que pudiesen atender a cada uno de los enfermos, los cuales tampoco tenían los recur-
sos necesarios para poder sustentar sus cuidados. Como si esto fuera poco, encima la gente de
la sociedad los ignoraba.

CONTENIDO
Realmente Jesús no llega a este lugar por casualidad, fue para mostrar Su poder y enseñarnos el
ejemplo de compasión.

En el versículo 6 vemos que “Jesús lo vio acostado”. Él vio a este hombre postrado, padeciendo
de dolor, quien no tenía la opción de moverse para entrar en el estanque y ser sanado. Cuando
Jesús lo ve, no lo hace de una manera superficial, sino que mira con ojos de compasión, entris-
teciéndose al ver la situación que la otra persona está viviendo. No solo lo vio, sino que también

CONEXIÓN
buscó saber más de esta persona. Cuando estas pasando frente a una persona enferma o nece-
sitada, ¿cuál es tu reacción? ¿miras para otro lado o lo miras con compasión?

El versículo 6 continúa y dice que Él “supo que llevaba ya mucho tiempo así”. Jesús se preocupó
por saber más acerca de este hombre. El versículo 5 nos informa que hacía 38 años que estaba
enfermo, y esto lo tenía postrado ¿Qué sucede cuando ves a una persona en una situación difícil?
¿Te interesa saber siquiera su nombre, edad, cómo llegó a la situación en la que se encuentra, etc.?

DECISIÓN
Quizás muchos de nosotros todavía no llegamos a los 40 años, o recién los estamos dejando
atrás, pero… ¡Imagínate a este hombre viviendo casi toda su vida acostado, esperando a que
alguien hiciera algo por él!

El pasaje sigue su desarrollo y nos muestra a Jesús sanando a este hombre. Él le pregunta al
PREGUNTAS

hombre lo que más anhelaba escuchar “¿Quieres ser sano?” ¡Wow! ¡Qué pregunta era esta!
¿acaso Jesús no veía a esta persona? Claro que quería ser sanado, pero el Señor establece una
conversación, y le muestra que para Dios no hay nada imposible.

¡Que gran ejemplo nos deja el Señor Jesús! Hoy puede ser el día donde decidas cuidar con com-
pasión, mirando a las personas; no ignorándolas sino conociéndolas, buscando establecer una
conversación y ayudarla de una manera práctica.

La compasión es parte del cuidar. No solo se trata de conocer la persona, mirarla y saber cómo
se encuentra; también se trata de tener Empatía.

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2. Es necesaria la empatía para poder cuidar
Definición de empatía (Oxford Languages): “Participación afectiva de una persona en una reali-
dad ajena a ella, generalmente en los sentimientos de otra persona.”

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Leer: Lucas 7:11-17

El diccionario expositivo de palabras del NT W. E. Vine describe la palabra compasión en el ori-


ginal como “ser movido en las entrañas de uno.” Esto es interesante. Tal vez estarás pensando
que vamos a hablar nuevamente de la compasión, pero no, quiero que pensemos juntos en la

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definición de empatía y la descripción original de la palabra compadecer.

Dijimos que la empatía es una participación afectiva en lo que la otra persona siente y, en cam-
bio, compadecer significa que las entrañas de uno se mueven. Esto no es por un dolor de estó-
mago, sino que habla acerca de ese sentimiento profundo que nos mueve las entrañas al sentir
lo que el otro siente.

CONTENIDO
Esto es lo que le sucedió a Jesús en el momento que vio a la mujer con tanta necesidad, la única
compañía directa que tenía había muerto y se encontraba sin ninguna esperanza. Es más, siem-
pre escuchamos que es natural que un hijo despida a su madre, pero qué difícil es cuando sucede
al revés. Por si esto fuera poco, este era su único hijo y ella era una mujer viuda. Su esposo había
muerto, no sabemos si hace mucho o poco tiempo, pero lo que sí sabemos es que la muerte de
su hijo no era la primera que había tenido que enfrentar. Qué dolorosa situación, ¿verdad? Pero

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Cristo estaba allí viéndola con empatía.

A pesar de que había muchas personas siguiéndole, Él se acerca a la mujer, la ve, siente su dolor,
y le dice: ¡NO LLORES!

¡Qué consuelo extraordinario trae la voz de Jesús en tiempos de tristeza! Y no solo le dice no
llores, sino que hace un milagro increíble: toca el féretro y le dice al joven: levántate, y él se

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incorporó al instante.

El versículo nos dice que los hombres que llevaban el féretro se detuvieron, esto es porque ellos
creían que al tocar el ataúd que contenía un muerto producía contaminación. Sin embargo, Jesús
muestra que ese joven puesto en el ataúd abierto, envuelto con especias y lienzos listo para ser
sepultado, no llegaría a la tumba, sino que volvería a la vida.
PREGUNTAS

¿Qué nos sucede por dentro cuando vemos a alguien sufrir? ¿vemos lo que la persona está sin-
tiendo al punto tal que también podemos sentirnos de la misma manera? ¿realmente soy capaz
de ponerme en sus zapatos y sentir su dolor? Qué desafío tenemos hoy al escuchar estas histo-
rias… primero a tener compasión de la condición de las personas, pero también a ser empáticos
con los sentimientos de los demás para poder cuidar.

En último lugar veremos que:

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3. Es necesario el amor para poder cuidar
Leer: Juan 4:4-10; 16-19

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Jesús tuvo una conversación profunda, escuchando, dejando de lado los PREJUICIOS para per-
donar a esta persona que necesitaba salvación.

Tal vez ya conoces este pasaje de la Biblia. Vamos a observar el amor de Jesús en la manera en
que se condujo con la mujer.

En primer lugar, el amor deja de lado los prejuicios. Quizás muchos pensaban, ¿por qué Jesús

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quiere pasar por Samaria? Era sabido que los religiosos de ese tiempo hacían un camino más lar-
go para no pasar por esa ciudad. A Jesús no le importó lo que los demás podrían llegar a pensar
de su “reputación”, porque Jesús sabía que allí había una mujer que necesitaba amor real.

No solo dejó de lado los prejuicios al pasar por Samaria, también lo hizo al hablar con esta mujer
y pedirle agua. Esto era algo sorprendente para esta mujer. Ella le dice: ¿Cómo tú, siendo judío,

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me pides a mí de beber, que soy mujer samaritana? La pregunta clave aquí es ¿Cómo? ¿Cómo te
vas a acercar a esta persona? ¿Cómo vas a pasar por Samaria? ¿Cómo vas a ayudar a ese necesi-
tado? ¿Cómo puede ser que busque ayudar a tal o cual persona que nunca cambia? El proceder
de Cristo causaba impacto en las personas porque tenía como base el amor que cambia vidas.

El amor que Jesús tuvo hacia nosotros es un amor que se demuestra con hechos y no solamente
con sentimientos.

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En segundo lugar, el amor escucha a las personas. Jesús se detuvo a hablar y escuchar su histo-
ria, al punto tal que le hace una pregunta que toca una fibra sensible de la vida de esta mujer,
pero ella es sincera, y Jesús termina demostrando que Él era el Mesías, el enviado de Dios.

Y simplemente este concepto de que el amor escucha nos tiene que llevar a pensar ¿Cuántas
veces le preguntamos el nombre a las personas que nos piden dinero en la calle? ¿Cuántas veces

DECISIÓN
tenemos una conversación con una persona que nos trae un pedido a casa? ¿Cuánto sabemos de
nuestros vecinos o compañeros de trabajo? El Señor nos dejó un claro ejemplo de que el amor
escucha, y lo hace de una manera intencional, buscando establecer una relación, para luego
compartir el Evangelio.

Jesús estableció las bases del cuidado para compartir el Evangelio, lo hizo con compasión por
PREGUNTAS

las personas al ver su estado físico, con empatía al entender y sentir el dolor emocional de los
demás, pero también al mostrar amor dejando los prejuicios y escuchando a las personas.

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CONEXIÓN

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Seamos realmente prácticos durante unos minutos y hagamos una lluvia de ideas sobre cómo llevar
a cabo esto en nuestras vidas al pensar en las personas de nuestro Círculo de la Causa que buscamos
cuidar con el amor de Cristo.

Nota del maestro: Usa una pizarra o algo visible para registrar una lista de las respuestas de tus jóve-
nes a la siguiente pregunta. A continuación, se enumeran varias posibles respues-

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tas para ayudar a que las ideas fluyan si es necesario.

¿De qué maneras podemos demostrar que cuidamos a los demás esta semana? [Posibles respuestas:
tiempo, ayuda, oídos que escuchan, obsequios, notas, buenas obras, defender a alguien que está
siendo intimidado, sentarse con alguien en el almuerzo, ofrecernos para orar, etcétera.]

CONTENIDO
A veces, puedes tener amigos que están luchando con cosas que son realmente complicadas. Si están
sufriendo, comparte sus cargas y trata de llevarlos hacia Aquél que puede ayudarlos.

No lo olvides: cuidar de forma genuina a las personas por las que oramos es el camino por el cual el
Evangelio llega de una manera impactante a la vida de las personas.

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DECISIÓN

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Ahora que has escuchado esta lección, ¿ves cómo Jesús se interesó por los demás? ¿Entiendes la
necesidad que tenemos como hijos de Dios de cuidar con compasión, empatía y amor a las personas
que nos rodean?

Luego de pasar por la oración, debemos practicar el cuidado a las personas que nos rodean. Este es el
segundo paso en el Círculo de la Causa que nos llevará a establecer las bases para que otros reciban

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el mensaje del Evangelio.

Te animo a que puedas utilizar algunas de las ideas establecidas por el grupo y ponerlas en práctica
con una persona que te rodea en tu círculo de influencia diaria, ya sea la universidad, el trabajo, o
tu vecindario.

CONTENIDO
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DECISIÓN
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PREGUNTAS DE DISCUSIÓN
para “Una charla y un café con amigos” - semana posterior a la reunión

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1 ¿Qué estamos haciendo para saber las necesidades de los demás y tener compasión?

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2 ¿Cómo podemos desarrollar un corazón que tenga empatía por lo que lo demás sienten?

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3 Haz una lista de las personas por las cuales estás orando, y piensa cómo puedes cuidarlas
en esta semana mostrando compasión, empatía y amor.

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