Yokoi Kenji en esta conferencia dictada en un colegio de secundaria de Colombia, igual

que en su conferencia "Deja de ser pobre ¿por qué?" de manera coloquial vuelve a dejar
mensajes de superación personal invitándonos a reflexionar sobre nuestro accionar y
nuestras creencias, si bien está dirigido a un público joven puede servir para todas
aquellas personas que pretenden quedase en su zona de confort. Dentro de su
conferencia nos permite reflexionar sobre los sentimientos de debilidad, el miedo, la
vergüenza, la ira, la culpa y la desesperanza. Primeramente nos habla sobre la
aceptación, física y moral que debemos tener, aceptar quienes somos realmente,
enfrentando nuestra propia realidad, condiciones físicas y de carácter que nos llevan a
ser quienes somos, habla con ejemplos sobre uno de los principales enemigos que
tenemos dentro de nosotros, esa parte que busca trasladar las culpas de otros, tratar de
que otras personas o situaciones asuman las cosas con las que estamos inconformes y
nuestra falta de progreso, esas personas o situaciones a quienes podemos depositar lo
malo que nos pasa; no asumir las responsabilidades nos deja sin el carácter ni
templanza para enfrentar la vida, dice que debemos tomar las riendas de la vida y dejar
de quejarse aferrándonos a vivir en una historia de sufrimiento ya que esto además de
no permitirnos progresar nos hace envejecer dentro del fracaso y amargura sin asumir
que estamos protagonizando nuestras propias vidas; claro está que no debemos
quedarnos en asumir simplemente, también se debe trabajar en todas las falencias que
podamos reconocer de esta manera podemos seguir enfrentando a otros enemigos
importantes dentro de nuestras vidas como es el orgullo, un sentimiento que todos
tenemos, nos dice de lo importante que es saber reconocerlo para sacarlo de nuestras
vidas, trabajando todos los días para limpiarlo, este sentimiento se esconde y quiere
confundirse con la humildad o dignidad; por eso es tan difícil reconocerlo, este enemigo
es tan peligroso que nos detiene y no permite pedir ayuda y nuevas oportunidades, a
veces perdemos a seres queridos y cosas importantes por no saber expresar que tenemos
sentimientos de dolor y desesperación escondiéndolo detrás de una falsa y exagerada
dureza o a veces detrás de la vergüenza que son nada más que orgullo solapado.
También con una historia personal sobre haber nadado para llegar a una isla y verse
perdido en medio del océano, nos hace pensar sobre la desesperanza, otro sentimiento
que es un enemigo al que también debemos enfrentarlo y desterrarlo, los pensamientos
negativos son los más difíciles de desechar, pero debemos trabajar para tener el
sentimiento contrario, la esperanza, estar seguros que todos los momentos difíciles que
enfrentamos por más complicados que parezcan tienen solución por imposible que
parezca.