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A C C I Ó N P E D A G Ó G I C A, Vol. 12, No.

2 / 2003

La acción tutorial como alternativa para el


desarrollo de la inteligencia emocional de los
alumnos
Mariano Gutiérrez Tapias
Universidad de Valladolid-España / mgutierr@doe.uva.es
Aceptado: Septiembre 2003

Resumen
El autor del presente artículo llevó a cabo durante cinco cursos académicos una investigación en diversos
centros educativos españoles del ámbito rural centrada en la elaboración, aplicación y evaluación de un
modelo propuesto de Acción Tutorial que favoreciese el desarrollo personal y social del alumnado de las
etapas educativas de educación Infantil y Primaria. Dicho modelo, que conlleva la necesidad de una implica-
ción colectiva del profesorado, determinar un tiempo para el desarrollo de las funciones tutoriales previstas y
que cuenta con la participación de las familias de los alumnos, se basa en el desarrollo de actividades
destinadas a favorecer una educación en valores como la responsabilidad, la sinceridad, el diálogo, la
autoestima, la paz, la amistad, el respeto, la cooperación y la importancia de compartir, entre otros. A través
de la puesta en práctica de este modelo de Acción Tutorial se descubren muchos de los fundamentos que
componen la inteligencia emocional cuyos componentes y sus implicaciones educativas el autor se propone
analizar.
Palabras clave: Educación integral, inteligencia emocional, educación en valores, tutoría, Plan de Acción
Tutorial.
***
Abstract
THE TUTORIAL ACTION AS AN ALTERNATIVE FOR THE DEVELOPMENT OF THE EMOTIONAL INTELLIGENCE OF STUDENTS
The author of the present article carried out during five academic courses an investigation in diverse rural
educational centers in Spain focusing on the elaboration, application, and evaluation of a proposed Tutorial
model that would favour the personal and social development of students in preschool and primary school
levels. This model requires both collective involvement of teachers investing time for developing the tutorials
and participation of the students’ family. The model is based on developing activities that foster educational
values such as responsibility, honesty, dialogue, self-esteem, peace, friendship, respect, cooperation and the
importance of sharing, among others. Many of the foundations of the emotional intelligence are present in the
tutorials whose components and educational implications are analyzed in this article.
Key words: Integral education, emotional intelligence, educational values, tutorship, Tutorial.
***
Résumé
L’ACTION DE TUTORAT EN TANT QU’ALTERNATIVE POUR LE DÉVELOPPEMENT DE L’INTELLIGENCE ÉMOTIONNELLE DES ÉLÈVES
L’auteur du présent article a mené à bien une recherche dans divers centres éducatifs espagnols du milieu
rural pendant une période de cinq cours académiques. Elle était centrée sur l’élaboration, l’application et
l’évaluation d’un modèle proposé d’action de tutorat qui favoriserait le développement personnel et social de
l’ensemble des élèves des étapes éducatives de l’éducation infantile et primaire. Le dit modèle engage la
nécessité d’une implication collective du corps professoral, la détermination d’une période pour le développement
des fonctions de tutorat prévues et compte sur la participation des familles des étudiants. Elle se base sur le
déroulement des activités destinées à favoriser une éducation fondée sur des valeurs comme la responsabilité,
la sincérité, le dialogue, l’auto estime, la paix, l’amitié, le respect, la coopération et l’importance de partager. À
travers de la mise en pratique de ce modèle d’action de tutorat, on découvre plusieurs des bases qui composent
l’intelligence émotionnelle. Se sont ces composantes et leurs implications éducatives que l’auteur se propose
d’analyser.
Mots-clés: Éducation intégrale, intelligence émotionnelle, éducation aux valeurs, tutorat, Plan d’Action de
Tutorat.

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I. Introducción factores de desarrollo. A este propósito y a sus


implicaciones educativas dedicaremos las siguien-
Cuando a principios del curso académico 1993- tes líneas.
94 comenzamos a trabajar en algunos centros edu- Para Gallego y otros (1999, p. 27) «El tema es
cativos españoles sobre una propuesta de Acción actual y de gran interés. Tiene consecuencias para
Tutorial, nunca hubiéramos llegado a imaginar la los educadores de todos los niveles, (Shapiro, 1998)
importancia y la trascendencia de las acciones em- desde la educación de niños y jóvenes hasta las apli-
prendidas. Algunas de nuestras líneas de acción se caciones en el trabajo (Weisinger, 1998 y Cooper,
basaban en lo que considerábamos unas respuestas 1997)».
lógicas a unas necesidades concretas y reales
percibidas en algunos centros educativos en los que II. El concepto de Inteligencia Emocio-
trabajábamos desde el ámbito de la orientación es- nal
colar.
La aparición en 1995 en los Estados Unidos de En 1990 Peter Salovey y John Mayer utilizaron
la obra de Daniel Goleman La inteligencia emo- el término «inteligencia emocional» para englobar
cional, cuya primera edición en España data de capacidades como la comprensión de las emocio-
octubre de 1996, que se constituyó en un best seller nes y la compasión.
mundial, en la que dicho autor exponía algunas co- En 1996, Goleman describe la inteligencia emo-
sas tan curiosas como poner al revés los conceptos cional como una forma de interactuar con el mundo
clásicos de éxito, capacidad y talento, en la que la que tiene en cuenta los sentimientos y engloba habi-
supremacía del coeficiente intelectual -tantas veces lidades tales como el control de los impulsos, la
utilizado por los orientadores escolares, y aún usado autoconciencia, la motivación, el entusiasmo, la per-
en la actualidad- como baremo para clasificar a las severancia, la empatía, la agilidad mental..., que con-
personas en más o menos inteligentes había queda- figuran rasgos de carácter como la autodisciplina, la
do ya obsoleta, donde el más listo podía ser el más compasión o el altruismo, indispensables para una
tonto y el más tonto acabar siendo el más listo de- buena y creativa adaptación social.
pendiendo del grado de desarrollo de su inteligencia Desde nuestro modo de ver, el altruismo tiene
emocional, de su capacidad de poner de acuerdo su que ver con la solidaridad, valor que se ha de ser
cabeza y su corazón, de saber reconocer sus emo- trabajado desde los entornos escolares, por lo que
ciones, valorarlas y gobernarlas, y darles el papel decidimos incluirlo en nuestro modelo de Plan de
adecuado en cada situación de la vida con uno mis- Acción Tutorial.
mo y con los demás, hizo que nos interesáramos Gallego y otros (1999) sostienen que:
sobremanera por el contenido de sus propuestas. El aprendizaje emocional está considerado vital
Posteriormente hemos podido llegar a comprobar en algunos movimientos sociales que se están
cómo algunas de ellas estaban íntimamente relacio- desarrollando actualmente. Conocerse a sí mis-
nadas no sólo con nuestras creencias pedagógicas, mo, ser conscientes de las propias emociones,
sino también con la tarea que habíamos comenzado de los motivos o causas de nuestros comporta-
a realizar algún tiempo atrás, lo que había venido a mientos, conocer los posibles móviles emocio-
refrendar en algún sentido la importancia de la ta- nales en la conducta de los demás, son temas
rea que veníamos desarrollando. candentes que cada vez interesan a un mayor
Por dichos motivos, y por la coincidencia de las número de personas. (p.27)
propuestas de Goleman (1996, 1999) con algunas
de nuestras acciones para desarrollar un modelo II.1. Los cinco elementos básicos de la
adecuado de Acción Tutorial que sirviera para el Inteligencia Emocional y sus
desarrollo socio-personal del alumnado con el que implicaciones educativas
estábamos trabajando en esos momentos, creímos
necesario abordar algunos aspectos de la inteligen- Peter Salovey y John Mayer a principios de los
cia emocional íntimamente relacionados con dichos años noventa acuñaron el gráfico nombre de inteli-

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gencia emocional para englobar los conceptos de


inteligencia intrapersonal e interpersonal, destacan-
do algunas cualidades como la comprensión de las
«Para nosotros, por ejemplo,
propias emociones y su manejo, la automotivación, previo a la autoconciencia,
la capacidad de saber ponerse en el lugar de las
indicada anteriormente, es
otras personas, la capacidad de controlar las rela-
ciones sociales de forma que se mejore la calidad llegar al autoconocimiento,
de vida. Estas cinco habilidades o competencias tam- que posteriormente permita
bién son recogidas por Goleman (1996, pp. 80-81),
sobre las que cimentara su obra, de la siguiente el desarrollo de la
manera: autoestima»
1. El conocimiento de las propias emociones.
El conocimiento de uno mismo, es decir, la capa-
cidad de reconocer un sentimiento en el momen- tar algunas emociones, pero sí podemos condu-
to mismo que aparece, constituye la piedra an- cir nuestras respuestas emocionales y manejar-
gular de la inteligencia emocional... las de forma inteligente.
2. La capacidad de controlar las emociones. La La automotivación o la capacidad de motivar-
conciencia de uno mismo es una habilidad bási- se a uno mismo para perseguir unos objetivos y
ca que nos permite controlar nuestros sentimien- logros. Los buenos resultados en nuestra vida
tos y adecuarlos al momento... dependen de cualidades como la perseverancia,
3. La capacidad de motivarse a uno mismo. El la confianza en uno mismo y la capacidad de so-
control de la vida emocional y su subordinación breponerse a los malos momentos y derrotas.
a un objetivo resulta esencial para espolear y man- La empatía o la capacidad de reconocer las
tener la atención, la motivación y la creatividad. emociones ajenas, entender lo que otras perso-
El autocontrol emocional –la capacidad de de- nas sienten, así como comprender pensamientos
morar la gratificación y sofocar la impulsividad- y sentimientos que no se hayan expresado
constituye un imponderable que subyace de todo
Las habilidades sociales o la capacidad de
logro...
controlar relaciones sociales manteniendo nues-
4. El reconocimiento de las emociones ajenas.
tra habilidad para crear y manejar relaciones, re-
La empatía, otra capacidad que se asienta en la
conocer conflictos y solucionarlos, encontrar el
conciencia emocional de uno mismo constituye
tono adecuado en cada momento y percibir los
la «habilidad popular» fundamental...
estados de ánimo de los demás.
5. El control de las relaciones. El arte de las re-
Parece evidente –como apuntan los menciona-
laciones se basa, en buena medida, en la habili-
dos autores- que no todas las personas poseen es-
dad para relacionarnos adecuadamente con las
tas competencias y, desde luego, los que las poseen,
emociones ajenas... ,
no las tienen tampoco en el mismo grado. Ahora
Gallego y otros (1999, p.39) retoman las cinco
bien, estas lagunas emocionales pueden remediarse
competencias expuestas por Goleman (1996) reali-
e incluso mejorarse con esfuerzo, sistematicidad y
zando el siguiente enfoque y reformulación sobre
la adquisición de unos hábitos y reacciones emocio-
ellas:
nales adecuados. Y esto es, a nuestro juicio, lo ver-
La autoconciencia o el conocimiento y recono- daderamente importante, lo esperanzador, por lo que
cimiento de las propias emociones. Sólo quien trabajamos.
sabe por qué se siente como se siente, puede Para nosotros, por ejemplo, previo a la
manejar sus emociones, moderarlas y ordenar- autoconciencia, indicada anteriormente, es llegar al
las de manera consciente. autoconocimiento, que posteriormente permita el
El autocontrol o la capacidad de controlar las desarrollo de la autoestima, otro de los valores pro-
emociones y adecuarlas al momento y a las cir- puestos para ser trabajado en el modelo de Plan de
cunstancias. No podemos desconectarnos o evi- Acción Tutorial.

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«El término autoconciencia o tos sociales y personales se pueden, o mejor dicho,


se deben educar. Y es ahí donde adquiere su impor-
conciencia emocional puede
tancia el desarrollo de la investigación que llevamos
entenderse, como ya se ha a cabo.
visto, como la capacidad de Según Gallego y otros (1999):
reconocer nuestras emociones En numerosas ocasiones los educadores se
y el modo en que éstas afectan encuentran con las siguientes situaciones en
a nuestras acciones: su jóvenes y niños:

adquisición precisa de unos Afrontamiento inefectivo de los problemas.

requisitos que, por supuesto, Patrones actitudinales y conductuales poco

pueden ser aprendidos...» apropiados


Dificultades para mantener relaciones inter
e intrapersonales.
Consideramos que el desarrollo de esos aspec-
tos, algunos de ellos valores evidentes, son funda- Existencia de etiquetados y de
mentales para el desarrollo socio-personal de la per- estigmatización.
sona y del alumno, si nos referimos a los contextos Búsqueda de gratificaciones inmediatas y
educativos. Por ello, compartimos la idea de Galle- dificultades para demorarlas y esperar. (pp.
go y otros (1999) cuando afirman que: 39-40)
En este sentido, el compromiso educativo se Nuestra experiencia en las aulas sirve para co-
basa en potenciar los recursos y habilidades de rroborar dichas consideraciones, por lo que propo-
los niños y jóvenes, facilitando y guiando su de- nemos la necesidad de romper con ellas, llevando a
sarrollo emocional para su inserción en los di- cabo en los centros educativos acciones encamina-
ferentes escenarios en los que se desenvuelve das al desarrollo de esta inteligencia emocional a
su vida. Esta tarea se debe entender en un sen- través de un trabajo sistemático de educación en
tido amplio, es decir, en potenciar las habilida- valores a través de la acción tutorial del profesora-
des, actitudes y destrezas intelectuales y emo- do.
cionales. (pp.39-40) En este mismo sentido, los autores citados indi-
Nos surgen estos interrogantes: ¿No es esta can que:
acaso, la tarea que debe de abordar la escuela que La responsabilidad de los profesionales de la
pretenda una educación integral de la persona? En- educación, así como la de los padres, está en
tonces..., ¿Por qué no plantearnos para ello la alter- procurar la adquisición y desarrollo de estas
nativa que nos ofrece la Acción Tutorial?, ¿Por qué habilidades emocionales cuanto antes en niños
no considerar la importancia de realizar un buen Plan y jóvenes. Pero, para ello, es indispensable que
de Acción Tutorial en los centros educativos como los adultos ya las posean. (p.40)
procedimiento para conseguir dicha finalidad? Analizaremos seguidamente cada uno de los fac-
Si, como parece, los niños y jóvenes crecen y se tores de la inteligencia emocional.
desarrollan en la medida en que disponen de recur-
sos personales y sociales para afrontar las dificulta- II.1.1. La autoconciencia
des y los obstáculos que les surgen, nos pregunta-
mos, ¿por qué no intentar que sean competentes El término autoconciencia o conciencia emocio-
emocionalmente para afrontar de un modo efectivo nal puede entenderse, como ya se ha visto, como la
las demandas y dificultades, para amortiguar el im- capacidad de reconocer nuestras emociones y el
pacto de las adversidades y para tener mayor con- modo en que éstas afectan a nuestras acciones: su
trol sobre las emociones que afectan a su vida? Ello adquisición precisa de unos requisitos que, por su-
se nos presenta nuevamente como una hipótesis de puesto, pueden ser aprendidos:
trabajo, cuya importancia radica en el hecho de que Reconocer qué tipo de emociones sentimos y por
todos los aspectos de la competencia emocional es- qué
trechamente ligados con el desarrollo de los aspec-

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Comprender la vinculación existente entre pen- niños y jóvenes observen y reflexionen sobre las
samientos, sentimientos, palabras y acciones. emociones y sobre sus resultados, de manera que
Saber de qué modo nuestros sentimientos influ- éstos aprendan sus ventajas y sus dificultades ya
yen sobre la toma de decisiones que hacemos. que, aunque en ocasiones algunas de ellas puedan
llegar a ser frustrantes, obtendrán beneficios para
Expresar adecuadamente nuestras emociones
siempre. Para esta tarea, que no es precisamente
para poder interiorizarlas.
sencilla, es necesario que el educador tenga una clara
Si los anteriores son requisitos para la adquisi-
conciencia de sí mismo y de sus procesos emocio-
ción plena de una conciencia emocional, no pode-
nales, ya que el modelo de comportamiento emocio-
mos olvidar la existencia de dos aspectos claves para
nal que manifieste será un acontecimiento determi-
ello, como son:
nante que influirá en el aprendizaje emocional de
1. La importancia de una valoración adecuada de
sus alumnos.
nosotros mismos, para lo que es preciso conocer
nuestras posibilidades y limitaciones, nuestros
II.1.2. El autocontrol
puntos fuertes y nuestros puntos débiles.
2. La necesidad de confiar en nuestras propias ca-
El autocontrol, o dominio de las propias emocio-
pacidades, valores personales y sociales, así como
nes y sentimientos, implica la posesión de una serie
en los objetivos que nos proponemos.
de habilidades que permiten a la persona hacerse
cargo de las situaciones, reaccionar ante los acon-
II.1.1.1. Implicaciones educativas de la autoconciencia
tecimientos y decidir entre varias alternativas posi-
bles.
Reiteramos una vez más que esta capacidad de
En este sentido, conviene conocer que cuatro ti-
autoconocimiento se puede enseñar. El profesor, en
pos fundamentales de emociones que se deben
la vertiente de tutor, de educador que venimos de-
aprender a controlar si lo que se pretende es en-
fendiendo, se convierte en un elemento clave para
frentarse a las diversas situaciones que se plantean
que los niños y jóvenes sean capaces de prestar aten-
a lo largo de nuestra existencia, nos referimos al
ción a sus propias emociones y aprendan a percibir-
enfado o irritación, la ansiedad o preocupación,
las.
el estrés y a la tristeza o depresión ordinaria.
Las emociones que una persona puede experi-
mentar, y por tanto percibir, a lo largo de su vida son
II.1.2.1. Implicaciones educativas del autocontrol
infinitas. Tras la percepción viene la interiorización
de las mismas, lo que lleva a la emisión de una serie
En el medio escolar el autocontrol se manifiesta
de juicios valorativos.
en saber superar los bloqueos emocionales que cier-
Para Gallego y otros (1999):
tas situaciones pueden ocasionar. Tal es el caso, por
Estos juicios valorativos se basan en criterios
ejemplo, de la ansiedad que produce la llegada de la
que han ido incorporando a lo largo de su histo-
época de exámenes para los alumnos, o la tensión
ria personal y social, básicamente a través de
para un profesor de tener que comunicar a la fami-
tres procedimientos:
lia de un alumno los problemas que éste viene mani-
La propia reflexión sobre sus sentimientos y
festando últimamente en clase, ante la hostilidad de
emociones y los resultados de las mismas. algunos alumnos, padres y colegas, etc.
Las reacciones emocionales positivas o ne- La observación y percepción de nuestras emo-
gativas que personas significativas manifies- ciones en estas situaciones influyen en el proceso
tan hacia su actitud. posterior de afrontamiento y, del mismo modo, la
La enseñanza directa del proceso de forma en cómo afrontemos estas situaciones, de
autorreflexión e interiorización de emociones. forma controlada o descontrolada, estará influido por
(p. 55) nuestras emociones y sentimientos.
Consideramos que en todos los aspectos men- Por suerte, parece ser que el autocontrol puede
cionados debe intervenir el educador haciendo que ser enseñado y aprendido, por lo que debido a la

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importancia que presenta para el desarrollo del II.1.3.1. Implicaciones educativas de la motivación
alumnado, debe convertirse en un objetivo pedagó-
gico en el sentido de que implica asumir responsabi- No podemos dejar de citar en estos momentos
lidad, determinar secuencias de acciones y generar que la educación, antes y ahora, parece más intere-
previsiones, al mismo tiempo que es un medio nece- sada en cultivar cerebros que la voluntad de los alum-
sario para lograr la autonomía. nos. Del mismo modo, cualquier profesional de la
Según Gallego y otros (1999), «Por ello es im- enseñanza estará de acuerdo en que la falta moti-
prescindible seleccionar técnicas y elaborar estra- vación en los alumnos es un problema con el que se
tegias para generar en niños, jóvenes y educadores encuentran muchas veces en su trabajo. Saber cómo
modos de control de las propias emociones y redu- motivar a los alumnos, qué aspectos son necesarios
cir así su vulnerabilidad a condiciones externas e tener en cuenta para conseguir que el proceso de
internas.» (p. 79) enseñanza-aprendizaje sea mucho más eficaz se
Apuntamos que algunas de las técnicas para la convierten a veces en la pregunta del millón.
mejora del autocontrol las encontramos en la reso- Somos sobradamente conscientes de que, como
lución de problemas, la reestructuración responsables de la tarea educativa, tenemos que
cognitiva y en el entrenamiento asertivo. desarrollar los aspectos intelectuales de nuestros
alumnos, desarrollar los contenidos que aparecen en
II.1.3. La automotivación los libros, pero al mismo tiempo tampoco olvidarnos
de otros muchos aspectos que son tanto o más úti-
El término motivación hace referencia a toda una les para la vida; nos estamos refiriendo al hecho de
serie de motivos, móviles o alicientes que hacen que aprender a luchar ante la adversidad, a ser persis-
una persona se esfuerce por conseguir sus objeti- tentes en el esfuerzo, a luchar por conseguir las
vos. Términos como fuerza de voluntad, perseve- metas personales y esforzarse por conseguir la obra
rancia, espíritu combativo y amor propio tienen que bien hecha.
ver con él. En muchas ocasiones, según exponen Gallego y
Coincidimos con Goleman (1996) en que en la otros (1999):
medida en que estemos motivados por el entusias- Dentro de los ambientes académicos se admi-
mo y el gusto en lo que hacemos –o incluso por un ra más al alumno «inteligente» que al trabaja-
grado óptimo de ansiedad- los convertiremos en dor, constante, voluntarioso, lo cual obliga a los
excelentes estímulos para el logro. menos «inteligentes» a huir de las situaciones
Parece ser que en la motivación intervienen fac- que ponen de manifiesto esa inferioridad y a re-
tores internos y externos y, a su vez, puede ser re- currir a la apatía e indiferencia hacia el aprendi-
gulada por el ambiente o auto-regulada por la propia zaje. Es necesario que comencemos a hacer un
persona. Se trata de uno de los procesos psicológi- replanteamiento de los valores que queremos
cos más investigado a lo largo de la historia por la inculcar en nuestros alumnos, empezando por
Psicología. entender el constructo de «inteligencia» como
En la motivación intervienen algunos factores algo más que la capacidad de memorizar fácil-
fundamentales: mente, de obtener buenas notas o de tener un
El motivo que nos mueve a actuar. CI superior a 100. Hay que ampliar este
constructo considerando la importancia de otros
Las atribuciones que damos a nuestros éxitos o
factores como las emociones y la motivación
fracasos.
para desenvolvernos con éxito en la vida. (p.120)
La capacidad para asumir las consecuencias de
Sabemos que la confianza y la seguridad que ten-
las acciones y de los resultados conseguidos.
gan los alumnos en sí mismos y en sus capacidades,
El grado de iniciativa y optimismo para afrontar así como sus propias expectativas, van a influir en
los hechos y superar los contratiempos. su rendimiento, tanto de forma positiva como nega-
tiva. Los educadores pueden ayudar mucho a des-
montar ciertos sentimientos de inferioridad que a

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veces presentan los alumnos mediante la descom- o sentimientos y la habilidad para detectar las de los
posición del trabajo en metas más asequibles, ofre- demás.
cer una retroalimentación adecuada ante el trabajo Esta capacidad que permite a las personas sa-
realizado, así como ayudándoles a reconstruir de- ber lo que sienten los demás tiene su origen en la
terminados procesos de su pensamiento negativo que más tierna infancia. Está demostrado que incluso
tienen sobre sí los alumnos. los bebés son capaces de experimentar sentimien-
Estamos plenamente de acuerdo con Gardner tos de empatía, pero es a partir de los dos años y
(1998), psicólogo que desarrolló la teoría de la inte- medio cuando los niños comienzan a diferenciar sus
ligencia múltiple, cuando considera que una forma sentimientos de los de los demás. Ahora bien, no
más saludable de enseñar es considerar el estado todos los niños manifiestan del mismo modo su ca-
de flujo y los estados de ánimo positivos que lo ca- pacidad de experimentar las emociones ajenas; pa-
racterizan, principalmente porque la motivación surge rece ser que el grado de empatía de un niño está
desde dentro de la persona y no por amenazas o las muy directamente relacionado con la educación que
promesas de recompensas. Que un alumno consiga reciben de los padres y de las personas que estén a
el estado de flujo significa que está comprometido su cuidado. Al mismo tiempo, se puede afirmar que
con la tarea adecuada a sus capacidades y expec- la empatía puede ser producto del aprendizaje, ya
tativas. Cuando los alumnos se sienten desbordados que la forma en que los niños observan e interpre-
por las tareas o aburridos es cuando surgen los pro- tan cómo otras personas reaccionan ante los senti-
blemas emocionales, conductuales y de aprendiza- mientos de los demás, les sirve de modelo para el
je. aprendizaje de respuestas empáticas.
En palabras del propio Goleman (1996): «Tratar Sirvan a modo de conclusión inicial las conside-
de que el aprendizaje se realice a través del flujo raciones realizadas por Gallego y otros (1999) cuando
constituye una forma más humana, más natural y indican:
probablemente más eficaz de poner las emociones Que las manifestaciones empáticas aparecen
al servicio de la educación». (p. 161) Hacerlo así en la más tierna infancia y su desarrollo depen-
significa fomentar el aprendizaje más placentero, un de en gran parte de la educación emocional que
aprendizaje que no resulta angustioso ni tampoco brinden los padres o personas cercanas al niño,
aburrido. ya sea mediante intervenciones conscientes e
Nos parece que estas palabras encierran un intencionales (toma de conciencia del daño que
modelo ideal de entender la educación en general, y puede provocar una acción) o inconscientes
en especial la de los alumnos con diversas dificulta- (aprendizaje vicario)». (p. 147)
des de aprendizaje o con necesidades educativas Es evidente que algunas de esas «personas cer-
especiales, con los que tanto nos identificamos los canas» también se encuentran en la escuela y que
que en algún momento nos hemos dedicado a la ese tipo de intervenciones «conscientes» e «inten-
orientación escolar. cionadas» se pueden desarrollar igualmente en di-
cho contexto, bien a través del planteamiento indivi-
II.1.4. La empatía dual de cada profesor, bien a partir del planteamien-
to colectivo del profesorado que compone cada cen-
La empatía aparece en los primeros estadios de tro escolar. Para nosotros el planteamiento realiza-
desarrollo de la persona como una especie de imita- do desde un adecuado Plan de Acción Tutorial pue-
ción de las emociones ajenas. Se trata de una espe- de ser uno de los medios más adecuados para con-
cie de vivenciación de las sensaciones de los demás seguirlo.
lo que permite compartirlas al comprenderlas me- Ahora bien, en la mayoría de los casos sabemos
jor. Este proceso que permite la interiorización de lo que sienten los demás aunque no lleguen a decír-
las emociones de los otros se basa en la toma de noslo verbalmente, debido a que las manifestacio-
conciencia de uno mismo. Es decir, existe una re- nes de un estado emocional determinado se extien-
lación directamente proporcional entre el grado de den por todo nuestro cuerpo (tono de voz, expresión
toma de conciencia de nuestras propias emociones facial, tensión muscular, posturas corporales...). La

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capacidad de reconocer estas formas de comuni- rechazo que pueden estar sintiendo. Esta «sintoni-
cación no verbal exige el conocimiento de compe- zación» con los sentimientos de nuestros alumnos
tencias emocionales como la autoconciencia y el no significa que estemos de acuerdo con ellos sino,
autocontrol. Sin éstas, difícilmente podremos lle- simplemente que les comprendemos y que estamos
gara sintonizar con el estado de ánimo de otras per- dispuestos a ayudarles dentro de nuestras posibili-
sonas. La cuestión es entonces, si es posible ense- dades. ¿No es esto acaso lo que tiene que hacer un
ñar esto en la escuela desde la más tierna infancia tutor que se precie de serlo?
como ya apuntamos (Gutiérrez Tapias, 1999), o bien, En estos casos será imprescindible que el profe-
si existen al menos unos pasos intermedios para al- sor tenga capacidad de autoconocimiento y de
canzar dicha finalidad. El modelo de Acción Tutorial autocontrol. Si esto es básico, entonces habrá que
por nosotros desarrollado demostró contribuir a di- comenzar por trabajar el autoconocimiento y la
cha finalidad. autoestima de nuestros alumnos. A través de nues-
Por otra parte, hay que considerar la escucha tras investigaciones hemos podido comprobar que
como uno de los factores fundamentales de la el proceso será más eficaz si presenta un carácter
empatía. La habilidad de saber escuchar bien, es colectivo como es el caso, por ejemplo, de un Plan
decir, de escuchar con comprensión o de Acción Tutorial en el que se implique todo el pro-
empáticamente, es una de las habilidades más pre- fesorado de un centro educativo.
ciadas y también más difíciles de conseguir. Este Lo anterior no significa ni mucho menos que en
tipo de escucha al que nos referimos implica estar ocasiones el profesor no tenga que llamar la aten-
emocional y mentalmente abiertos a nuestro interlo- ción de sus alumnos, corregirles, contradecirles y
cutor. La cuestión clave quizá sea cómo aprender a hacerles ver sus equivocaciones y errores, ello for-
escuchar activamente y cómo demostrarlo a las ma parte de la interacción y del «juego educativo».
personas que nos rodean. Somos conscientes de la Por otra parte, no debemos olvidar que el profesor
existencia de una serie de estrategias que ayudan a debe servir de modelo a sus alumnos.
adquirir y desarrollar esta importantísima habilidad,
ahora bien, nuestra propuesta radica en trabajar de II.1.5. Las habilidades sociales
manera sistemática el valor del diálogo con los alum-
nos a través de una serie de actividades programa- No existe una definición universalmente válida
das desde la Acción Tutorial. de habilidades sociales aún a pesar de ser una te-
mática ampliamente estudiada por su importancia
II.1.4.1. Implicaciones educativas de la empatía para el desarrollo de las relaciones interpersonales.
Los autores destacan que la dificultad de establecer
El análisis anterior nos debe haber servido para una definición universal de este concepto se encuen-
considerar a la empatía como la base de todas las tra en el carácter de dependencia que tienen del
interacciones sociales. La capacidad de asumir el contexto. Para Paula Pérez (1998):
punto de vista de otro y la sensibilidad hacia los sen- Esta falta de acuerdo se atribuye a que la con-
timientos de los demás son manifestaciones ducta socialmente competente no constituye un
empáticas que aparecen en la infancia y cuyo desa- rasgo unitario ni generalizado, sino que está
rrollo posterior depende, en gran medida, de la edu- determinada situacionalmente; es decir, en fun-
cación. Para nosotros esto es básico, y es por lo que ción de las características de la situación, de su
venimos a considerar la importancia de una acción particularidad, se pondrán en práctica unas de-
educativa encaminada a tal finalidad. terminadas conductas u otras. (p. 144/2)
Creemos que todo profesor que sepa escuchar Asertividad, habilidades interpersonales e inteli-
activamente las emociones y sentimientos de sus gencia social son otras denominaciones que se em-
alumnos, será capaz de entender los motivos de los plean para hacer referencia tanto al término com-
mismos y, al mismo tiempo, les estará demostrando petencia social como habilidades sociales.
que reconoce el impacto emocional que les produce En un esfuerzo por dar una definición del térmi-
un problema, los apuros por los que está pasando, la no habilidades sociales, Caballo (1993) manifiesta
tristeza de los fracasos, la alegría de los éxitos, el que:

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A C C I Ó N P E D A G Ó G I C A, Vol. 12, No. 2 / 2003

Son ese conjunto de conductas emitidas por un «En el contexto escolar se producen
individuo en un contexto interpersonal que ex-
numerosas interacciones entre los
presa los sentimientos, actitudes, deseos, opi-
niones o derechos de ese individuo de un modo propios alumnos y entre éstos y los
adecuado a la situación, respetando esas con- profesores. Esto conlleva la necesidad
ductas en los demás, y que generalmente re-
de establecer una convivencia
suelve los problemas inmediatos de la situa-
ción mientras minimiza la probabilidad de futu-
saludable y eficaz para poder disfrutar
ros problemas. (p. 6) de las relaciones con los demás y poder
No obstante, en lo que parece existir cierto aprender en un clima positivo de
acuerdo entre los estudiosos del tema es en delimi-
comunicación».
tar los rasgos más relevantes que caracterizan la
competencia social como son:
- Comportamientos manifiestos Es evidente que ser socialmente competente pro-
- La orientación a objetivos porciona gratificaciones personales, las cuales, a su
- La flexibilidad situacional vez, tienen que venir derivadas de percibir nuestra
- El carácter cultural. capacidad de desarrollar determinadas habilidades
Este último aspecto hace referencia a que las de manera eficaz (autoeficacia), de considerarnos
habilidades sociales están sujetas a normas sociales capaces de dominar nuestros sentimientos
y morales propias del contexto socio-cultural en el (autocontrol) y de desarrollar relaciones fructíferas
que tienen lugar. Por ejemplo, la capacidad de ex- (empatía). Sin duda, este autorreforzamiento o
presar sentimientos es un requisito imprescindible autoafirmación, genera pensamientos positivos que
en las relaciones interpersonales, pero de igual im- llevan a aumentar la autoestima y que, a su vez,
portancia es saber cuándo y cómo expresarlos. La repercute en nuestra competencia social.
importancia de entrenar a los alumnos en estos as- Por la importancia que este aspecto representa
pectos representa una posibilidad más que tiene la para el desarrollo socio-personal del alumnado, el
escuela para desarrollar los ámbitos socio-persona- profesorado con el que hemos venido trabajando
les de los mismos. Algunas de las actividades lleva- consideró mayoritariamente la necesidad de traba-
das a cabo mediante el modelo de Plan de Acción jar la autoestima como valor a través de la acción
Tutorial que proponemos estaban relacionadas con tutorial bajo un planteamiento colectivo, integrado
esta expresión de sentimientos. en un Plan de Acción Tutorial de centro.
En definitiva, la competencia social está relacio-
nada con la capacidad de mantener interacciones II.1.5.1. Implicaciones educativas de las habilidades
sociales, con el desenvolvimiento social sin dificul- sociales.
tades y con el control de las reglas del juego social.
¿No es éste acaso uno de los objetivos pretendidos En el contexto escolar se producen numerosas
por la educación en general y que se manifiesta en interacciones entre los propios alumnos y entre és-
el espíritu de la L.O.G.S.E., y ahora en el de la tos y los profesores. Esto conlleva la necesidad de
L.O.C.E., en el caso de España? establecer una convivencia saludable y eficaz para
Sin duda alguna, la clave para el éxito social ra- poder disfrutar de las relaciones con los demás y
dica en trabajar las relaciones interpersonales. Es poder aprender en un clima positivo de comunica-
obvio que uno de los objetivos de la escuela es el ción.
logro de una adaptación social eficaz de los alum- Según Gallego y otros (1999):
nos. Y si además se planteara en términos de éxito La ausencia de competencia social en la edad
social, ¿qué ventajas tendría para el alumno y para escolar se ha relacionado con conductas pro-
la sociedad en general? Es éste, sin duda, un cami- blemáticas tales como el abandono escolar, el
no que la escuela debe comenzar a emprender de bajo rendimiento, la delincuencia juvenil y las
manera rigurosa, que para nosotros significa hacer- conductas delictivas. Asimismo, una adecuada
lo de manera planificada y sistemática. competencia social en la edad escolar se ha

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[ L A A C C I Ó N T U TO R I A L C O M O A LT E R N AT I VA PA R A E L . . . ]

relacionado con el buen rendimiento académi- Las habilidades sociales se han considerado como
co y la popularidad de las personas entre sus parte del currículum oculto; además, hay que te-
iguales. (p. 206) ner en cuenta que aunque el profesor no se com-
Debemos de considerar la importancia de las prometa específicamente a su enseñanza, ya hemos
anteriores afirmaciones, así como las implicaciones visto que sirve de modelo y de referente a sus alum-
que tienen para la acción educativa que es preciso nos. Ahora bien, el mero aprendizaje por observa-
desarrollar. ción o imitación de modelos no es suficiente, es ne-
Según dichos autores, algunos de los problemas cesaria una intencionalidad para que se aprendan
existentes en la escuela que se paliarían con la en- los comportamientos sociales efectivos y para que
señanza–aprendizaje de las habilidades sociales son: se depuren o afiancen los ya adquiridos. Esta pre-
sometimiento al grupo de iguales, agresividad, hosti- tendida intencionalidad, así como un planteamiento
lidad de los alumnos, inseguridad, dificultades para de carácter colectivo desde los centros educativos,
hablar y responder, intolerancia a las críticas, pro- son aspectos básicos para que cualquier propuesta
blemas de aprendizaje por la baja autoestima, inca- de trabajo que se realice al respecto sea realmente
pacidad de expresar sentimientos o emociones en eficaz.
algunos alumnos, soledad, depresión, desmotivación
hacia los estudios, etc. III. La necesidad de trabajar la Inteligen-
Continúan manifestando que, todos estos proble- cia Emocional
mas son una fuente de preocupación para los profe-
sionales de la educación y tienen como elemento
común la dificultad de desenvolverse en las III.1. En la sociedad en general
interacciones que se producen en el contexto esco-
lar y tanto su prevención como su tratamiento po- Si por algo se caracteriza en estos momentos la
drían abordarse con el entrenamiento de habilida- sociedad en la que vivimos es, precisamente, por el
des sociales eficaces. Sin embargo, la implantación brutal desarrollo tecnológico que se está producien-
de las técnicas o recursos que potencien la compe- do; un cambio que, sin embargo, no está sirviendo
tencia social no ha sido algo que, de manera especí- para compensar las grandes desigualdades sociales
fica y sistemática entre a formar parte del currícu- existentes en todo el planeta.
lum escolar y se ha dejado a la buena voluntad de Por ello, coincidimos con Gallego y otros (1999)
los profesores. De acuerdo con ello, creemos que cuando señalan que:
es preciso actuar y, para nosotros, todo lo anterior Si bien resulta alentador el progreso de la hu-
tiene que ver con la educación en valores que es manidad en los aspectos tecnológicos, también
preciso favorecer desde la escuela en general, y vemos con tristeza y preocupación que en mu-
desde la Acción Tutorial en particular. Es por ello chos países se producen alarmantes situacio-
que consideramos que el modelo de Plan de Acción nes que demuestran que existe descomposi-
Tutorial propuesto pudiera ser eficaz para ello. ción social, violencia y degradación de los seres
Parece necesario, por tanto, un cambio de plan- humanos (...) y que nos hacen pensar en la co-
teamiento en este sentido, ya que desde los centros herencia que existe entre lo que proclamamos
escolares se puede, y se debe, promover la compe- como valores universales y lo que efectivamen-
tencia social de los alumnos y, como consecuencia, te hacemos. (p. 269)
desarrollar la salud mental y prevenir los problemas En este mismo sentido, nos ahorraremos por ex-
emocionales y sociales futuros. Estos aspectos pre- tensas, las múltiples referencias que podríamos rea-
ventivos bien pudieran ser llevados a cabo desde los lizar sobre las reciente guerra en Irak.
primeros momentos de la escolaridad a través de
actividades encaminadas a desarrollar en el III.2. En los centros educativos
alumnado el diálogo, la convivencia, la toleran-
cia, la responsabilidad, en definitiva, los valores La escuela es un reflejo de la sociedad. Por ello,
contemplados en nuestra propuesta de trabajo. muchos de los acontecimientos sociales que se pro-

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ducen en el ámbito local, nacional o internacional casi la mitad de nuestras vidas. (p. 270 )
tienen su eco en las correspondientes instituciones Las anteriores consideraciones no son otra cosa
educativas. Como es sabido, muchas de las campa- que un canto a la esperanza y una manera de alen-
ñas alentadas desde los más curiosos ámbitos y tar en el sistema educativo, así como en los centros
estamentos de nuestra sociedad son puestas en educativos, la necesidad de una conciencia genera-
marcha en los contextos escolares desde la óptica lizada y de poner en práctica algunas experiencias
de la prevención. Ello nos hace pensar que las insti- relacionadas con los ámbitos de desarrollo personal
tuciones educativas en su conjunto, son considera- y social de las personas en general, y de los alum-
das desde la propia sociedad como un ámbito ideal nos en particular, entre las cuales incluimos las em-
para el desarrollo de ciertos aspectos divulgativos. prendidas por nosotros a partir de la elaboración y
Si esto es así, ¿por qué no hacer lo mismo con cues- desarrollo de un modelo de Acción Tutorial que sir-
tiones que tienen que ver con una formación de ca- va, entre otras cosas, para dar respuestas a algunas
rácter más integral de la persona y del alumno que de las necesidades expuestas anteriormente.
además contribuya al desarrollo de una convivencia
más pacífica entre los escolares de dichos centros III.3. Las ventajas de educar la Inteligencia
educativos?, ¿por qué no experimentar algunos pro- Emocional en la escuela
gramas que capaciten a nuestros alumnos para ser
más dialogantes, más tolerantes, menos violentos y, En una entrevista concedida por Goleman («Da-
por qué no, más democráticos? niel Goleman»,1999) a la Revista El País Semanal,
Sólo con echar una simple mirada a las páginas ante una pregunta realizada sobre lo que puede ha-
de los periódicos, o poner algo de atención al conte- cer la sociedad para paliar la violencia doméstica
nido de algunos informativos de la radio y de la T.V., que tanto preocupa en España en estos momentos,
podemos comprobar el extremado grado de violen- éste manifestaba que si a los niños se les enseñara
cia que existe en nuestra sociedad manifestado en desde el colegio, las bases de la inteligencia emo-
todos los ámbitos, incluido el escolar; tal es el caso cional, aprenderían a controlar mejor la ira, a resol-
por ejemplo de la marginación que sufren algunos ver los desacuerdos de forma pacífica, a comuni-
seres en todo el planeta; la gran desigualdad social; carse mejor. También las mujeres se comunicarían
las dificultades por las que atraviesan los inmigrantes mejor y se establecería una relación más serena en
cuando buscan oportunidades de trabajar en otros la pareja, aumentaría la capacidad de resolver dife-
países diferentes al suyo, etc. Por ello, no podemos rencias y los conflictos sin recurrir a la violencia.
dejar de hacer una referencia a las ideas de Gallego Pero es preciso enseñar esas cosas desde peque-
y otros (1999) cuando se detienen en el análisis de ños, de forma que, cuando lleguen a adultos, ese
algunos de los acontecimientos sociales más rele- problema ya no exista. Además, la enseñanza de los
vantes, y cuando exponen que: principios de la inteligencia emocional en la escuela,
El panorama descrito y los nuevos datos que con la misma importancia que las matemáticas o el
vemos día a día hablan de grandes cambios lenguaje, supone muchos otros beneficios para la
que descubren a su vez carencias y nuevas ne- sociedad: menos depresiones, menos trastornos
cesidades, y parte importante de estas respues- alimentarios, menos alcoholismo, menos problemas.
tas a las necesidades emergentes deben sur- Goleman (1999) considera incluso que la población
gir de la educación emocional de niños adoles- penal disminuiría en un 50% si desde la escuela se
centes que les forme para la vida en una socie- enseñara la inteligencia emocional.
dad cambiante y en permanente crisis. Esta nue- Sobre las ventajas que tendría un niño educado
va educación tiene que atraer a las personas en una escuela que aplique la enseñanza emocional
con una vigorosa campaña de «vuelta al cole de sobre una que no lo haga, Goleman (1999) expone
las emociones», una reescolarización de la in- que cuando se habla de la escuela y de la vida, hay
teligencia emocional, que impregne toda la vida un error común, que es el de creer que lo que se
social y que especialmente incida en la vida es- aprende en la primera es lo que se necesita para
colar y laboral, que es el lugar donde pasamos salir adelante en la segunda. De hecho, es frecuen-

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te que los que sacaban las mejoras notas del colegio lo de Acción Tutorial por nosotros propuesto se pue-
o el instituto, luego tienen carreras profesionales den llegar a trabajar algunos de los aspectos indica-
mediocres. Y el motivo es que muchos carecen de dos por Goleman (1996, 1999) para el desarrollo de
inteligencia emocional. Así que un estudiante al que las habilidades que conducen al desarrollo de la in-
se le hayan impartido tanto los aspectos académi- teligencia emocional.
cos como los aspectos emocionales, estará mucho Si, como afirman Gallego y otros (1999): «Es
mejor preparado para el trabajo y para la vida que durante estos tempranos años es cuando se asien-
otro que haya ido a un colegio tradicional académi- tan los rudimentos de la inteligencia emocional, aun-
co. que éstos sigan modelándose durante todo el perio-
do escolar. Y estas capacidades, son el fundamento
IV. La Acción Tutorial como alternativa esencial de todo aprendizaje...» (p.239); entonces
para desarrollo de la inteligencia Emo- no podemos estar perdiendo el tiempo y debemos
cional emplear desde los centros educativos cualquier opor-
tunidad así como cualquier medio que tengamos en
Goleman (1999) recomienda insertar programas nuestras manos para conseguirlo, aún a pesar de
destinados al desarrollo de las habilidades emocio- que sabemos y reconocemos que el papel que juega
nales, habilidades cognitivas y habilidades la familia de los alumnos en este proceso de cons-
conductuales en el currículum para que fueran real- trucción personal y social es fundamental.
mente eficaces. Desde luego, compartimos esa afir-
mación y esa necesidad.
Ahora bien, reconocemos que su inclusión en el
mismo requiere de un importante ejercicio de
concienciación por parte del profesorado, así como
Caballo, V. E. (1993). Manual de evaluación y entrenamiento
el desarrollo real y efectivo de procesos de planifi-
en las habilidades sociales. Madrid: Siglo XXI.
cación y programación comunes, al objeto de que Goleman, D. (1999, marzo 7). El defensor de las emociones. El
tales habilidades queden reflejadas explícitamente País Semanal, pp. 100-1003.
en dichas programaciones y se pongan en práctica Gallego, D. y Otros (1999). Implicaciones educativas de la
durante el proceso de enseñanza-aprendizaje. inteligencia emocional. Madrid: UNED.
No obstante, consideramos que el desarrollo Gardner, H. (1998). Las inteligencias múltiples. Barcelona:
Paidós.
efectivo de las habilidades que conducen al desa-
Goleman, D. (1996). La inteligencia emocional. Madrid: Kairós.
rrollo de la inteligencia emocional requieren de un Goleman, D. (1999). La práctica de la inteligencia emocional.
tiempo y un espacio propios, y una dedicación a las Madrid: Kairós.
mismas de forma consciente y planificada por parte Gutiérrez Tapias, M. (1999). Educar en valores: una necesidad
del profesorado. Sabemos por otra parte que en la desde la más tierna infancia. Revista de Pedagogía de
escuela se sigue poniendo el énfasis en los aspectos Magisterio Español, 10.573, 10-13.
Paula Pérez, I. (1998). Las habilidades sociales en el marco de
cognitivos del aprendizaje, descuidando los conteni-
la orientación psicopedagógica. En Álvarez, M. y Bisquerra,
dos socioafectivos. Por dichos motivos, así como
R. (Coord.) (1996). Manual de Orientación y Tutoría (pp.
por la importancia que tienen trabajar los citados 144/1-144/26). Barcelona: Praxis.
aspectos en los contextos escolares para que el de- Shapiro, L. E. (1998). La inteligencia emocional en los niños.
sarrollo integral de los alumnos sea una realidad, Barcelona: Grupo Zeta.
proponemos también la función tutorial como una
vía apta para ello, aunque no sea nuestra intención,
ni mucho menos, proponerla como el camino exclu-
sivo para el desarrollo de dichas habilidades. Tan
sólo lo hacemos como una alternativa complemen-
taria a la vía curricular. Se trata de una propuesta
en la que venimos creyendo y trabajando desde hace
tiempo. Estamos seguros de que mediante el mode-

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