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148 Mtr@.

oñomla ctá'ic¿ Capítulo La teoria clásicadel ahorro,


A. S. Skinne.,"Say'sL¿w: O¡icins and Cort nf', Economica,t4 (mayo l9ó?),
de h inversióny de la
153-166. tasa de interés
(Un .rudio modé¡node la I¡y dc S¿y).
H. S. EUi5, "Somc Fundamcnid! ¡n thc Tb.ory of V.lo.itf, Auan y tóu¡MI ol
Ecoaoñics,52 (a|ayo l93E), 431-4?2;¡cprodúcido.¡ R.o¿iryt i¡ Moneta,t
rr¡¿o'r, s.lsionad. por ud cor¡i¡é dc la Amcrica¡ Econooic Asn. (Blar¡sbt, La otgria y d€ña¡dá d€ bonos
1 9 5 1 ) ,p é ¡ s .E 9 - 1 2 8 . Elimi¡t¿ciónd6 algunossupu$los r€slrict¡vos
(Un srtlculo que co¡lcnía ¡a discusióDcorv.nciotr¿¡ dc l¡ vcldidad c.!¡ coú Lá tasa d6 interásy sl Dreciod€ los bonog
t¡ota ¡mllitud coño le fuc pdibl.). Ola.l6 y demandade bonos coñ un m6rcádód€ r6v6nta

El úono t l. Irv.?.|ó¡ .n r.l.c¡ór con l. t¡orl¡ cu¡ñlll!üv!


Bot¡ñami€nlodo la l€o.íá c!antitaliva por Wicks€ll
Ahoío Y át€sorañ{€nio

Et dln.ro y h t;. ó. ¡¡t.rtu: lqulltbrlo y d...qult¡b¡lo

Aho.ro, ¡nY.nlór t €mpt.o

r.cro.commi. clá.|c.¡ n¡. ¡pllclclon€. y llmlt¡clon !


Apl¡cacionesd6l modoloclárico
Polllics moñsldriáy liscal en la econom'6clásica
timilác¡onesdal anális¡sclásico

Al principio del Capítulo 4, se enunció la Ley de Say en su forma


más simple: aplicadaa uDa economiaen la que los indiüduos producen
bienesfinales e intercambianel excedentede su propio consumopor los
coÍespondientesexcedent€sde los demás.Para sem€janteeconomía,€s
evidenteque la L€y de Say resultasumamenteadecuada.Desdeentonces,
hemosvenidoconsiderandosi la Ley de Say es afectada.y de qué irodo,
al supon€rformas más realistasde organizacióneconómica.En primer
lugar, preguntábamos qué difererrciaexistía en que Ia geflte usara el di-
nero para el intercambiode bienesen lugar del trueque. La respuesta
clásicaera que, puestoque el dinero servía coino uri simple medio de
cambio que la gente cuerda no deseabacons€rvarpoa amor al mismo,
el dinero no irtroducía ninguna diferencia.Era sencillamenteun "velo"
úas el cual se realizabanlas transacciones, con resultados¡o diferentes
a los del lrueque. Sin duda, Ia cantidad de dlnero deterñinaba el nivel
promediode precios (dadas la producción,el pleno €rnpleoy las deter-
minaotesinslitucionalesde la velocidadentoncesprevalecientes ).
El segundoaspectocuestionablede la Ley de Say era la existenciadel
empleocontratadopor un salario. ¿Quédiferenciahabría en que la ma-
yoríá de la genteno suministraraproductosfinales al mercadosino más
bien servicioslaboúles, que u¡ númerobasta¡te p€qu€ñode emprcsa¡ios

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152 M@¡@cononú cLít¡ca
Ir leoúa clt¡ca d.l ¿ho¡o. d¿ l¿ iav.Bión t d¿ la tata de intetés 153
presarioshac€nlo segu¡rdo(si bien representanuna regula, fracción del
de la obtenciónde dinero prestadoy Ia inversiónresultóde la razonable
ahorro total); la mayoríade los ahorradore¡se decidenpor lo lercero.
proposiciónde que los empresa os no contrae¡ánuna obligaciónde pago
Tendremosmuchoque decir, después,acercade la supuestaincuestio-
de interesesa menosque te¡gan planeadoalglin uso productivopara los
¡able preferenciapor los activosredituabl€ssobre el dinero efecrivo.No
Iondos que consigan€n préstamoies decir, no pagaráninteresespor el
obsta¡te,ésteconstituyer¡n eleme¡to esencialen cualquierversiónde un
solo privil€giode conservardinero inacrivo.La iguatdaddel otorgamie¡to
modelo clásico,Nótese que el supuestoaquí no es que nec€sariamente
y la obte¡ción de préstamosse manter¡íaa travésde las fluctuacionesde
la genteahorra sólo con el fin de obtenerun rendimientode sus ahorros,
las tasasd€ inteaésen el m€¡cado.
ni tañpoco que ahorra en mayor o menor grado si Ia tasa de interéses
más alta o más baja. El supuesroresutra,másbien, que, dada ¡lguna can- Para que Ia tasa d€ interés(i) e¡ el mercadologre equilib¡ar la con-
tidad de ahorro, mi€nrrasproduzcaun r€ndimiento,et m¡smolerá s¡emDre cesióny la obrenciónde préstamos-y, por consigui€Dte, el ahorro (,{)
preferible y lá i¡¡versión(1)- es Decesa¡ioa) que o bien los ahorradoresincrc.
a no percrbirninguno.Tdmbienes !erdadque ta mavo a de los
ment€nsus ahoÍos mientras4ás elevadass€an las tasasde inte¡és,y/o
autoresclásicospen.ab¿nen el ahorro como una función crecientede ta
que los inve¡sionistasdeseenobtener más préstamosmientrasmás bajas
tasa de int€rés,pero eilo €s orro ¡sunto.
scanlas tasasde interés,y ó) que existauna tasa mayor qüe cero con la
Los ernisoresde bonosque puedenser compradospor los ahorradores
cual Ia cantidadahorradaiguale a la cantidadinvefida.r Los economis-
son, por supuesto!los empresa¡iosque d€seanadquirir bienesde cap¡-
tas,en general,suponíanque tanto €l ahorro (préstamode dineao) como
tal con más ¡apidezde lo que les seríaI|osiblecon sus propios ahorros.
Ia inversión (ob¡enciónd€ dine.o en préfsmo) presentabanal menos
Están dispuestosa asumir una obligación a pagar interesesen vista de
que ven la oportunidad(medianleel ¡¡sode los bieDesde caojtal) de lo- ciela elasticidaden male¡ia de inretes€s,y Ia posibilidadde que Ia con"
grar un margende urilidad por encima de rodos sus cosros,inctuvendo dición (b) pr¡dierano cumplirse nunca cüpo en sus mentes.Su visiór
usualdei m€rcadode bonostenia más o menosel aspectode la figura 5-1,
los inleresesa cuyo pago ee obligar,.
Si bien 106economistas,en lo personal,puedental vez haber €nfatizado
El m€rcadode boros provee,así, un medio por el cual el ingresono
gastadopor los aho¡rado¡esno empresariosse traduceen gastode inver- la elasticidadde los interes€sen cualquierade,€stasdos ctüvas,e incll¡so
haber sugeridoque la ot¡a era comp¡etamente inelásticaeD cuanto a in.
sión de los empresarios.Lo que la teoría clásicarenía que decir acerca
tereses(u¡a línea vertical de la figura), se adelantaronexcelentes¡¿zones
de esteme¡cadoera que (evitandociertasirterferencias)funcionabaexac-
de por qué ambos esqu€masmostraba¡¡elasticidaden Ios inte¡eses.Si
tamente como cualquier otro mercado,créando una igualdad entre el
préstamod€ dir¡ero (o compra d€ bonos), que podemossuponerigual al cualquierude ellos tien€ la suficient€elasticidadde intereses,Ia condi-
ción (b) (una inte¡secciónen ¡b en el cuadranteposirivo) está asegura-
ahorro, y la obtenciónde dinero prestado(o venta de bonos), que es po-
da. Ha de qu€dar b¡en claro que los corceprosde ,.prestar,'y .'obte er
sible corsiderar igual a la inversióí. (Podemosignorar aquella parre del
prestado"-como Ios de ahorro e inversiór- se definencomo f¡rios.
ahoro de los empresariosque ellos mismosinvierten,ya que, po. def!
De acuerdocon Ia teoría clásica,la obtenciónd€ fondos en Dféfa-
nición, dicho ahorro y dicha inversiónson iguales). La igualdaddel aho-
mo se llevaa cabocon €l propolirode comprarbienesde caprtal.ün los
rro y el préfamo de dinero surgió de la preferenc¡adel consumidorse¡-
que se logra incrementarla producción en Io futuro, y precisamente,
sato por un l¡¡diniento positivo sobre ningrjn rendimienro;la igualdad
como la mayor utilizacióDde la mano de obra da como resultadoun
producto marginalpositivo pero decreciente,se suponíaque el producto
marginaldel capiraltambiÉndecrecía mientrasmásgrandetue\eIa inver,
sL,d n i'f! de rr$'rñor t=/) sión acumulada.E¡ ta¡ caso, el empresariotomará dinero prestadosólo
hastael punlo en que la productividaddel capjtal así incrementadoiusti
fjque el pago de interesesa la rasavigenreen el mercado.Si baja la tasa
de ¡nterés,sejusrificaentoncesuna mayor inversión.El esqüemade ob¡en-

' l¿ ras d. ¡n1c¡és


d el lncrcadopodria€quitib.¡¡ €l ¡ho¡ro y la inveción ¡un
n h ' c L .ú ¡ L r cp f c \ ¿ m o 5( = 4
FtcuaA5-l u¡a p.ndi..tc.,equivcadá',,
cuardo.l .sqD.Dad.l ahorroap!úráse s¡.ópr. qu. su
pérdietc n.aaiiva fü.s. bd6 que ¡a d.l éqDeh¡ de inv.rsió¡.
ts4 Mactoeconómia clAtica IA teoria c¡dska dA ahato, & ta inv.B¡ón , d. to tua de i^teús
155

ción de fondosen pléstamos(inversión) es pues una función decreciente implica dinguna salvedad al modelo clásico Dresentadoe¡ el caDítulo
de la tasa de interés., antenor. Se gasrarodo el ingreqoganadoen lá producción.euienes ob-
En Io concernienteal esquemadel préstamo(ahorro) de dinero, se (ienen el i¡grcso puedenquizá no gastarlo todo ellos mismos (hasta el
afirmsba que la genteconcedíamayor valor al consumorealizadoen el €xtremo €n que sean ahorradores).Sin embargo,d€bido a que el aho-
presentequ€ al que se deja para el futuro (es decir, demuestrauna prefe- rrador des€¿mantenersus ahorrosen una forma que le produzcaun ren-
renci¡ de dempo positiva),de modo que renunciaráa algunacantidaddel dimie¡to positivo,no conservarádinero ocioso.Siguepues siendo válido
cor¡sumopresente,es decir, ahorrará,sólo si ello habrá de permirirle au- el supueslode la t€o¡ía cuaDtiaarivar€ferentea los saldos mínimos de
mentarsu consumo/rrrro por encimade drchacantidad.cosaque le sérá ce.o; y, debido a qu€ la tasa de inrerésse ajustaráen aquel punto en el
posiblesi per€ib€un rendimientopositivode su ahorro. Además,la gente que alguienmás (un inversionista)deseagastarprecis¿mente la cantidad
aume¡tarála cantidaddel consumoactual a la que re¡uncia (es decir, de dinero que €l aho¡radordecideno gastar,rodo el ingresoobtenidode
incrementarásu ahorro) sólo cuando se ente¡e de qüe puede prestar a Ia generac¡ón de cualquierprgluccionse volveráa gasraren la produc-
una más elevadatasa de interés (para compensarse, así, de¡ sac¡ificiodet ción corrienre:la ofena sigü€creandosu propiademanda.
consumo cor¡ente no incrementado). Esto sigDifica que el esquema En el Capítulo 4 vimos que Ia existenciadel empleocontratadopor
del préstamoesuna función de pendienteascendente de la tasade interés.i un salario (a diferenciadel autoempleo)no invalida necesariame¡teIa
Más adelantetendremosocasiónde examinarel razonamientode los Ley de Say mienrraslos precios y los salarios sean del todo flexibles.
dos últimospát¡afosen una realidadcrítica. Sin embargo.aceptandoesras Conslat¡mosahora que tampocola invalida la exist€nciadel ahorro y de
descripcionesde ambasfuerzas tanto sobre el lado de la ofefa como la inversiófl,en tanlo las rasasde interéssean también totalment€flexi-
sobre el de la dem¿ndadel mercado,para €l ahorro (y el hechode una bles.La primeracondiciónconsientellevar a cabo 'a produccióna Dleno
intersección),pareceevidenrecómo la rasade ir¡terés---{oD libertad para empleotla segundapermireque (al producciónpuedaser compraúaya
fluctuar- necesa¡iamente se efablece¡ía en algún punto en el que el s€acomo articulospara €l consumidoro como bi€nesde caDital,
aho¡ro y la inversiónfueseniguales,pues si la tasa fúera más alta que
dicho punto, el ahorro y el préstamode dinero sobrepaiaríara los fondos
tomadosen préstamoy a la inversión.Algunos ahoÍadores,incapacesde E¡im¡nación de dgunos supuestosrestrictivos
encontrara algüiendispuestoa tomar diDero prestado,y prefiriendoun Est€ argumentose ha conducidoahora bajo supuestosmuy simplifi.
rcndimientob¡jo a no percibir nad¿, origináríanuna baja en la tása de cados.Sería útil sab€r si se obtendríanlos mismos resultadosbaio su-
interés.Si la lasa fuera inferior a la del ¡ivel de equilibrio, los inversio- pu€stosmás realistas,En primer lugar, es posibleque reconozcamos que
nist¡s buscadanun mayor volumende fondosque el que podríansuminis- diferen¡espr€s¡atariostendríanque pagar quizá distintas¡asasde interés
t¡a¡ los ahorradores.La competenciaentre los solicitanresde empréstitos en cr¡alquiermomenlodado en vitud de los diversosgradosde riesgode
provocarlauna elevaciónde la lasa de interes. ¡ncumplimientode pago derivadosde sus .espectivoscontratosde intere-
El nivel de la tasa de equilibrio dependeríade las pendienlesy de ses.¡ PodríamosdenomiDartasa "pura" de interés a aquella tasa que
las posicionesrelativasde los esqu€masdel ahorro y de Ia inversión.No tendria que pagar una firma mercanril que no ofreciesenin$jn riesgo.
habiendocambio en lo demás,mientrasmás ahorrativasea la población. (Pudieraexistiro no semejant€empresa).La tasa reat pagadapor cual-
menor será la tasa de iDterés;y, a mayor producrividadmarginal del quier emp.esadada es pues Ia rasa pura más una prima calculadapara
capi¡al,más alta resultarála tasa de interés.En condicionesde equilibrio, compen.aral presrami\rapor el riesgo especrficode faha de pago que
la tasaseríaigual tanto a la productividadmarginaldel capital como a la asume.Las tasasrealespagadas,así como su dispersióny promedio,pu-
"tasa marginal de la preferenciade oportu
dad (tiempo)". dieranfluctuar con los caprichososjuicios de los prestamistas
e¡ lo tocan-
Si la tasa de interésfluctúa libremen¡e,estableciéndose a cuatquier le a las p¡imas de riesgo.Pero dados los riesgosde incumplimientode
nivel en el que se igual€nel ahorro y la inversión,el acro del ahorro no pago, toda Ia familia de tasasde mercado se moverla pareja, ya fuese
a¡ alza o a la baja, reflejandoasi los cambiosen la tasa,,pura", debido
? La tcorlá de l¡ i¡v.6¡ón aqul apuntad¿ srá d.s4ouada cor Dayo¡ ¿mplitld
.r lor capfulo6 E, lE y 19. . Pu.lro que todavid ,uponeños pri\t¿m6 tomddG ¿ p.rperuidrd,
no exrsre p¡o-
3 La ¡.o.¡a dcl ¡bono aquí süac.ida *¡á t.atáda co¡ úás de1¡Uccn el Capítulo ló. b¡ema €n cur¡¡o al riA8o de in,umplorenro d. pá8o d.l priDcipal.
156 M@to¿cononía cl,^¡ca La teoúa c6ti.a ¿.t ahotua. dc lo ii'eúión t de ta tata d¿ i^t¿tés 1rS1

a las alteracionesen Ias condicionesdel espíritu de ahorro o de la pro- gociaun boDo,qué tasaporcentualde rendimiento(.,renta,')sobresu
ductividad. preciod€ compra (duaantesu vigenciaremaoente)se obtendrlacon
Log¡aríamostambién mayor ¡ealismo perñitieodo variacionesen la su adqüis¡c¡ón.
Esta tasai puededeterminarse
r€solviendola siguiente
t¡sa conforme a los diferentesvencimieotosdel p¡éstamo.Sin embargo, ccuaciól(para¡), dadosV, Q, R y t.
aplazaremoshastael Capítulo 21 ruestro análhis dc cste cambio en los
supuestos, €n dondese le verá desempeña¡ ün papel centftl dentro de la ,,_ O O Q Q+R
modernaeconomíamoÍeta¡ia. Asimismo,continr¡aremos(hasta el CaDí- l+' ll i)'
+ ll+D'
tulo l9) suponiendo
1l-ir'
la ausencia de lodo inremediariofinanciero oue ño
sean los bancoscomercialestno exislenbancosde ahor¡o, asociaciones Si t = 1, es decir,el bono expiraen uD año,€l cálculoes relativamente
de ahorro y préstamo,fo¡dos muiualistas,corhpañíasde seguroso fon- sencillo:
dos de pensión,etc.). Sólo entoncessuavizaremos tambiénel suDuestode
¡a existencia de un único ¡ipo de valor: el bono perpetuo.iodemos,
no obstante,intrcducir de inmediatoun mayor realismosuministrandoun 1+'
mercadode reventa,en el que no solamenteseancoñprados y vendidos
bonos de recienteemisión,sino tambiénbonos existentesva con anterio-
ridad. Asr pues,suprimimoset supuesroun tan¡o ridícuto de que los aho-
,, =__v_
Q + R

¡radores"se cas¿n"con los bonos que compran.Despüés,en la siguiente Pero si /> l, los cálculosaritméticosse vuelvenuD tanto cornplicados.
secciónprincipal de estecapírulo,empezáremos a introducir el papetque Sin embargo,se publican 'lablas de bonos" que permiten a cüalquier
jueg¿nlos bancoscomercialesy que lrataremosco¡ afiplitud en los Capí- personadeterminarla i aproximadar€sulrantede cualquie¡combinación
tulos20 y 21. dada de V, Q, R y r, o bien, cuál deberáser et l/ de mercadoeo base
a cualesquierai, O, R y r.
LB t¡s¡ de inte¡és y €l p¡ecio de los boros Existe tambiénotro caso en el cual el cálculo del rendimiento(inte-
rés) y el precio del bono es también muy simple; Dos referimosal bo¡o
Para facilitar nuestroscomentariossob¡e este particular, resuha úlil perp€tuo,para el cual la definición que antes s€ ha dado de / queda
considcra¡con más detenciónla naturalezadel mcrcadode bonosy reco- sinplificada a .
nocer que lo que hemosdescritohasta ahora como variación de la tasa -. o o t=l
dc interéspuedemuy bien describirse,de igual for¡na (y mejor para al-
gunos propósitos), como cambios en el nivel p¡om€dio de los Drecios I Erto pu€déd.m6rr¡r* fácitm.nre,Pa¡a et bo¡o coñolidadod€ l¡ n¿cióD
de los bonos.Para entenderesto. es necesarioque dejemosmuy ciaro lo
que es un bono. Esercialmente,un bono es una promesanegociable(es v - l +9r , / t o, , 1. . , - (lo
+¡/'
, .
deci¡, veodible) de pagar a su tenedor cierta cantidad fija de dinero a
intervalos regdares en lo fuluro (los que se denominan plgos de cupones) Mult¡plicando¡Dbos mieDbrospo. t/(l + i), tcremos
y, eventualmente, a algunafecha fija, una ca¡tidad mayor de dinero (el
prtnclp&l),despuésde lo cual exp¡ra la obtigació¡.. El bono perpetuo - t v - 3
l-¡ (l-¡)' .t rrl 1r,r,",
es un caso especial en el seltido de qü9 promele pagos regulares de cu_
ponesa perpetuidad,pero no ofreceningjn pago del principal. Rerando aro de l¿ ankrio¡ erpresiór pda r/ r li¡hp¡ificando¿Db6 Di€Dbros,
Si suponemosque se prcmeten pagos igualespo. la cantidad O, a
efectuarseanualmenteduaantet años,y finalizandocoo el pago del prin- /\ r _ ll +Jiv/ = - ql +* i_ L( t + D -
cipal R, podemosenloncescalculat, a partir del precio Z al que se ne- Puesloqu. p/(l + i)" s€ co¡vierte €n c!.o, cslo s. simplüica1od¿víamá5 paa
'N. d.l.r. E¡ Méxi@ y en olros pds.! d. hab¡. cspaóote, ¡os b@os eñirdos
por se¡eor¡o eo¡¡mú 3. @¡c.n r¿Eb¡aDcomo obl¡eaaio$.. .. o
tA reotia chj!.i.a.lel ahatto, d¿ la iDe^¡ón t d¿ ta t6a.!c
158 Mocto.conomío cútu¡ca ia¡efts 159

o sea emba.go,aún no hemostrarado de explicarpor qué bonoscon diferentes


venc¡ñ¡enbspsdieraÍ vendercequizá a distintosrendimjertos).
. o
De los comentariosque anteceden,debe resultar obvio que el nivel
de preciosde los bonos y la tasa de interésen el mercadono son dos
En estecaso, si un bono que lleve adheridoun cuñn p€rpetuode ¡50 tenóme¡osseparados.Más bien, €l nivel de preciosde los bono! y et de
se vende en $1,000, el rendimientoes exactamente5 por ciento. (iEsta la tasa en el ñercado son dos fonnas de descib¡ una misma serie rlc h¿-
simplicid6des la razón primordial por la que la mayoría de las descrip- cl¡rr. En muchoscont€xtose3 más sencilloformular una teoría de la tasa
ciones-en los libros de texto- del ñercado de bonos y de la tasa de de interésen términos de cambios€n los precios de Ios bonos que en
i¡terés gustande suponerbonos perpetüos!). términos de cambios en las tasas de inrerés:pero ha de quedai claro
En 16 ¿ctualidadlas tasas de los cuponesque tienen los bonos en que cualquierformulacióne¡ términosde un elementopuede,siÍ embar-
ci¡culaciónvarían de fo¡ma conside¡able,Pe¡o si aodoslos bonos estu- go, traducirseen Érminos del otro_Así, la teo¡ía clásicadel interésexplica
üesen Iibres de riesgo (o si hacemosabsraccióndel riesgo), es evident€ que el nivel de prc.ios de bsnonas es del€rminadopor et esouemaáe la
que, eD cua¡quiertiempo dado, todos los / (cualesquieraque fuesenel demandade tronosde los ahorradores.que es unJ funcirin decrerreare
cupón y el p¡incipal de los bonos) debeían leDde¡a reflejar una sola i del precio de los bonos (y una función crccíentede la tasa de interés)l
uniJorme,pues,de lo contrario,seríamuy ventajosopara los negociadores por el esquemade Ia oferta de bonos de los inversionistas.oue es ura
avezadoson estasoperacionesvender aquellosbonos cuyos p¡ecios re- Í\\nci6n (,edenle de¡ precio d€ los bonos ry una función dec)ec¡ewede
flejaseni más bajas y comprar los que reflejaseDi más el€vadas.Este la tasade interés),y por el "d€speje"del mercadode valores;es decir, la
¡rbilrsje deprimida el precio de los primeros (elevandosus i) y aumen- p¡ridad de las ventasy comprasdeseadas, o del ahorro e inversión.
taía el de los segundos(bajando susi) hastaque todos los V reflejaran
una sola i, a la que, por supuesto,denominaríamos"la" tasa de interés (Xeri¡ J densnd¡ de bonoscon un merc¡do de revente
en el mercado.Obviamenle,cualquieavendedo¡de DD bono naeeo no
puede esperarconsegüirfondos prestadosa una tasa de inleres inferior Cuando reco¡ocemosla existenciade ventas y cor¡pras de valores,
a esta i de mercado,ni tampoco oecesitapagar más (por ajuste de su tanto de los que se enco¡trabanya anteriorm€nteen circulacióncomo
palicular ¡iesgode i¡cumplimi€nto de pago). La prácticaacostumbrada de los de nueva emisión,debemosformular de nuevo esta teoría de Ia
es que fije su tasa de cupón a un nivel tal que el bono pueda venderse tasade ¡n¡e¡ésdiciendoque el nivel de preciosde los bonos €s determi_
inicialmenteal valor de su principal, o muy cercano a éste. En otras nado por Ia ofefa total y dentar'¿a/¿¡¿l de bonos,compr€¡diendoen la
ofena los bonosya exi\t€ntesen crrcr¡lación que ofrecena la lenta lo\
lalabras, hace que 0/R seacasi igual a la I co¡lienle.
Esta práctica€s la ¡azón por la que las tasasde cupones(y, por lo propietariosanteriores,asi como los bonos de nuevaemisiónofrecidosa
tanto, los p¡ecios) de los andguosbonos existenlese¡ el mercado de la venta para financiar nü€vasinversiones;e incluyendoen la demanda
valorcsvalen tanto. Reflejanlas dife¡entesi que prevalecíancuando [ue- de bonos no sólo Ia de los ahorradoresac¿ualessino también Ia de to-
lon vendidos originalme¡te. dos los demás.Esta nu€vaformulacjónno sign¡ficaningunadifereDciaen
El lector-debeestudiarlas tablas de preciosy rendimientosde bonos los supu€stosclásicos.Vearnospor qué.
que s€ publican a diario en el Wall Street lounal o en.l New York Times La oferta corrienl€ d€ bonos se compoÍe dc aque¡]osde reciente
coD el fin de asegurarse de que coñprende con claridad la matemática emis¡ón,que se venden para financiar la inversión,así como de ventas,
de precios y rendimientos y pueda explica¡, a¡ oenos, ¿lgu¡¿i de las ra- por sus actualest€¡edores,de bonos emitidos con ante¡ioridad.Estos
zones por las que bonos dif€rentos se venden a tales precios tan cons¡de- vendedor€s de valoresexist€ntespueder ser consumidores.quienesvenden
rablemeritediversos,c incluso a rendimientosun tanto distintos.o(sin valoresque poseencon el fin dc financiarel desahorro. iA no ,", qu.
en efecrodesahorren. puedencomprarmeno.bonosen cadaperiodo.oiro
. U$ ¡szó¡ no nc¡cioad¡ d .l l.xto 6 l¡ l.g¡lació! filcal, l¡ cu¿l d¡ un tr¡ta' no nece\itanvende' ningunor Su venr¿de vatorerab.orLeel ahorro
mic¡to al i¡r.$o d.rivdo d. boros é1¡t¡le y ¡@16 d¡fcr.Dtc ¡l quc i. obridc corr¡entecleotros consumido¡€sque compranesrosvalores.De exisrir un
d.l i¡¡F.¡o quc riDdcd los bonos f.d.r¡lca; diúilmo, t¡¡t¡ la3 ¡oucis dc c¡pit¡l ¿umenlonelo en el monto de lo que se deja de ahorra¡,su efectose refle_
¡¡or incr.r¡.úto Gd los pr.cios d€ lor bono3 (¡l .calizd* ¡ t¡¡v& dc su vcol¡) dc
oodo dif.r.¡lc .l i!¡¡.s Dor iltcrcs. la¡á en una depresiónde los preciosde los bonos (con un aumentoen las
160 Macrc.co^oñia .láti.a La t.or¡a ctásica .lel ahoüo, de la ive6¡ón r dc ta t6o d¿ iñtet¿s 16l

tasasde interés) a medida que se Ileven al mercadoun mayor número he originado que su ahorro se desvíede la iDversión.Compro desDués
de los antiguosvalores,del mismo modo que ocufriría ante una reduc- unaemisiónque erimo esrá\ubvaluada. y que quizápueda..i ,nu nu.uu
ción en el ¡horro positivo. EI hechodel desahorro,o un cambio en su emisión,en cuyo caso los ahorrcs desviadosson recanalizadoshacia la r
cuántíá,no interfierecoDla igualdaden el mercadode ahorro e invcrs¡ón. inversión.También,si se rrala de una antigra emisión.el vendedor,qui€n
El ahorro neto (ahorro positivo menosel dcsahorro) se ñantienc igual apafentemcntela considerabasobrcvaluada,ti.ne fondos para jnvertir
a la inversióna travésde la variación€¡ la tasa de interes. en una n¡r€vaemisióno para ponerlosen ¡nanosde algún otro tenedorde
Otros vendedores de antiguos valores en circulación pueden ser em- valores,quien a su vez puedecomprar una nuevaemisión,y así sucesiva-
presasque los hayan venido consenandocomo uD foodo financiero'que mente. Resumiendo, nien¡ns nadíe que haya si¿lo un tenedot de valores
les producíaingresosy que ahora necesitan¡ecursospara ampliar sus in- desee,en cambio,conseryardinelo inactívo,.e rnaDrendrá el sasto total.
ventarios, hqcor frente a crecientes nóminas o reemplazar equipo gastado. Dado que suponemosque ningüna persona sensaraque porleariqueza
Las ventasde estosvaloresfinancianla inversión(e¡ invent¡.ios de pro- prefer¡ráel dinero ocioso a un ahorro que produzcarendimieniopositi-
ductosterminados,materiasprimas o paoducció¡en proceso,o bien, en vo, las ventasde segundamáio no c.ean ningún problema;es decir, ¡la
planta y equipo)exactamente como Io hacenl¿s ventasde nuevasemisio- oferta de talesbonoscrea su propia dernandaly ello es verdadaun cuan-
n€s.Un aumentongto en las ventas,por las empresasñerca¡tiles, de sus do el volumen de ventas d€ segundamano pueda p¡ovocar una reduc-
carteras de rese¡vasfir¡ancieras deprimen los precios de los bonos (con el ción en el volumende las nuevasemisiones.El ahorro e inversiónfrescos
consiguienteincrementoen las tasasde interés) de la misma maneraque podrían ambosincluso ser reducidosa cero y, no obstante,fluir al mer-
cualquierotro métodode financiamieltode i¡versión adicional.Debemos cado un impor¡antemoümiento de valoresya exis¡entescomb¡nadocon
reconocer,por supuesto,que precisamente así como algu¡os negociosne- un sustancialvolumende lransaccionesde bonos corrientes.
cesitanrccu¡r¡r a susfondosde ¡eservavefldiendoparte o todos los valo- Podríamosconsid€rartodavía otras fuenresprivadasde demandau
res que los iDtegran,otros negociospuedenesta¡ comprandovalores no ofefa de bonos, pero todas ellas con €l mismo efecro.Mientras nunca
derivadosdel ahorro corriente sino er rglación con,la reduccióntempo- .se prefiera el dinero sobre la riqueza que produzcaun rendimiento.
la
ral de la ilrversiónen inventarioso en bienesde capital (cod reservaspara existenciade un m€rcadod€ valoresemitidoscon anlerioridad,igual que
depreciaciónsuperioresa los desembolsos para reemplazot.No sólo esne- el propio hecho del ahorro, pareceno reque¡ir ¡¡nguna salvedadya s€a
cesarioconsiderarne¡o el ahorro (ahorro positivo menos"desahorro"), d€ Ia teoríacuanrirativa o de la Ley de Say.EI dineroque se ha a en
sino €mbién la inversiór. Una vez más, no hay razón por ]a que los pre- ci¡culaciónse mueve lotalmenle,y a una pauta pr€decible,en la com_
cios fluctuan¡esde los bonos (tasasde interés) no deban conservar'la pra d€ b¡enes.El valor monetário de la producciónro¡al es igual a Ia
paridaddel aho[o n€to con la inversiónnera. exisrenciad€ dinero mul plicada por Ia velocidad;y el volümenfisico de
Ot¡o volumenmuy importantede ventasy comprasde "segundamano" la producciónse mantieneal nir€l de p¡eno empleo.'
es aportado por los iídividuos (o negocios) cuyas opiniones respecto a las Si aumentael espírituahorrativode la población,es decir, si se debi_
primasd€ íesgo sobreemisionesespecíficas difieren de Ia opinión general Iita su deseode gastarel ingresoen ¡a p¡oducc¡óncorri€nte,el alza en el
del me¡cado. Si yo soy tenedor de un valor qüe el me.cado valúa en grado precio de los tronos,o sea, la reducción€n la tasa de interés(que Io pri-
elevado (precie alto igual a baja prima de riesgo), pero que yo considero
más ar¡iesgadoqüe otra emisión incluso ñás barata, lo vendeféy com- I Sin duda,un auñe¡toer .l votuhc¡ dc 16 r¡rsaccio¡é de
praré otro, Puedetener lugar un grá¡ volumen de tales trsnsaccionesal s.eurd¡ maro co¡
va¡or6püed.requ€.i.quizálá .x¡t nciad. saldosde ef€clivour ¡¿¡ro máyores
moverselos tenedoresindividualesde valores.desdeesasemisionesoue €n m¿n6 de lG ¡€s6i¿dor€s. En oÍás patábr¡..alsúndindo c\rra qucd¿';mo.
v¡li¿do en l¡ med'ac,on d. op.'aciond purarhcnre f,nsnci.¡ar el¿r¿n¡G arí lar
creen que el mercadosobrevalúa,hacia aquellasque consider¿nsubva-
lüas de in¡erés y r.duciéndos. Ia i¡v.Bión r.tacion¡da con €t ¡horo, Eie probt.má
lu¿dasen ese mismo mercado,Pero es evidenteque este tipo de oper¿- arajo s.an atc¡ción dc tos l@r¡zanr.s mon.tarisld i fi..s d. 16 ¿nos 20 y prin,
cionesno puedeinfluir en el nivel generalde preciosde los bonos(aunque c,p,o\ d€ lo5 10. Srn lmbargo. r€ hi¿o no¡¿r qu. ta orsani¿acior Oc ro¡ mérclOo,
sí afectafla a la estructura de los precios de los mismos), pues decir que el fl¡¡n(refo! p.rmrxa et mar.Jo d. rremendo volum.n.s de rfans¿ccionG bllrsétil.,
"mercado" sobrevalúa uD valor cor sa¡d6 de ef€c¡ivo ñ¡y Fqueños (ta ..velocidad de t¿ ci.cul¿lió¡ finarciérr,,
del qu€ soy pose€dor es sug€rir que al- er¡ e¡¡8ér¡dM.nré €¡.vada), D€ .sra ñánera, 16 m.rcados d€ vator.s ¿bsorbíáD
guien más está dispuestoa pagar un precio mayor que el que yo consi- muy poco .n m¡r.r'a dc fddoG. Inctuso .n et caso d€ qu€ ater¡D6 fondos fu.sen
dero apropiado.S€ Io vendo. Supongamos que se trata de un ahorrador; absorb¡dG .¡ Br. lorDa, .tlo ¡o c¡uerí¡ ro<t¿ví¿ n¡ngún pro-btcma si 16 p;;i;;
'je ¡c b¡.¡s y *rvicio6 fu.rm fl.xibt.s por cor¡¡p¡.lo (haci¿ ta baja).
162 M ac I o¿coñoñ ia c I¡Lsica Ia teotía clitica .l.l aho-o, d¿ la i^v¿^ih t de l¿ t6o .1. inta¿t 163

mero automáticamente provoca) desalentará€l deseoa ahorrar y at¡¡erá meros economistasen i¡troduci¡ el modemo conceptode la demanda
inverciónadicional.Entonces,la tasa de inte.és d€scenderáhastaque se agregadade b¡enesy servicios,y, en el proceso,en convertir la teoaía
.estaureel volumeí anterior de la demanda.Si se debilita el iucentivoa cuantitativaen una doct¡ina más útil y comprer¡sible.Wicksell destacó
gastar en inversiónpara nuevasinstrlacioncs,Ia caída resuhante€n la que los economistasaceptanuna cxplicaciónpara los preciosindiüduales
Irecuenciade nu€vasemisionesde valores hará desccndcrlas tasts d€ (en la teo¡ía macroecoüómica)cn ténninos de ofefa y demanda.Así,
interéshastaque se haya compensadola caídapotenciald€l gasto.Al me- afimiaba, si los economistasd€seanudliza. la cantidad de didero para
nos, estosso¡ los resultadosque parece¡ lógicossi suponemosque nadie explicarel nivel generalde precios (que es sólo €l p¡omediode todos los
estádispuestoa acumularefectivoimproductivo. precios individuales), entoncesdeben demostrar de algrjn inodo cómo
entran los cambiosde M en la determinaciónya seade la oferta o de la
EL AHORRO Y LA INVERSION EN RELACION demandade bienes. Su propio análisis señaló de qué modo los cam-
CON LA TEORIA CUANTTTATIVA bios en M afectabana la demandade bienes,y, si bien no hizo ninguna
modificación de las conclushn* de la teoía cuantitativa,su análisis
De todo esto deducimosque la existenciadel ahorro e ioversión,e márcó un considerableavancehacia el de Keynesy el de los mac¡o€co-
inclusode un rnercadode valoresque come¡ciatanto con valoresde nueva oomistasque le siguieron.
emisióncomo con valores aDteriormenteexist€ntes,no altera la natura_ Wicksell preguntabacómo ocurrían precisamentelos cambiosen la
lez¡ del equilibrio úacroeconómico,ni tañpoco modifica las cor¡clusiooes ofela de dioero. Un impo¡tantecamino es a través de los cambiosen
de un análisisestadlsticocomp¿rativo(siempre que, por supucsto,oa- el volumen de préstamosconcedidospor los bancos comercialesa los
die deseeconservarsaldosociososde ef€ctivo), No obstante,la concep- negocios.Supongamos que los ba¡cos comercialesno necesitanmantener
ción de cómo se manlieneel equilibrio y cóño la econoñía se muevede aeservas igualesa sus depósitosy, así, puedencrea. "dine:o ¡uevo" para
una posiciónde equilibrio a otra condición,puedeahora versemuy alte- prestarlo a lás fimas mercantiles,Si los negociosno sólo toman prés-
rada. Consideramos, por ejemplo,qué sucede€uandoaumentala cantidad tamos (para financiar la inversión) d€ los fondos provistospor los aho-
de dinero.Si la demandade dine¡o es una fracción constantedel ingteso ñadores sino tamb¡éndinero nuevo, entonceshabrá un¿ demandaagfe-
moDetario,es decir, si es constanteIa velocidad del ing¡eso,no podrá gada de bienes (y de recursospara producir éstos) que excederáa la
hab€r equilibrio hast¿que el agregsdores¡rltánfede multiplicarprecio Por oferta, Todos los recursosfueron totalmenteempleadosantesen producir
cantidad,PY, se hayaincrementadoen la ñisma proPorciónque la deman- bieoespara Ios consurnidores y bienesde capital, Si se suma una nueva
da mon€taria,quizáa trdvésde un alza en los precios,sr¡pooiendo salarios demandade inversiónque no correspondaa ni¡$in ahorro añadido(es de-
y
monetariosflexibles un previo equilibrio de pleno empleo.(El aumento cir, cüalquierr€ducciónen la demandade los consuúidores),la deman-
de P)z será, por supuesto,íntegramenteel r€sultadode un P más ele_ da total de bi€nes y de factoreq productivos excederáa Ia oferta, lo
vado sin ¡ingúd cambio en Y, y P y W se habrán elevadoen la misma que provocará el alz€ en los precios. Esta es la rszón de por qué, y cómo,
p¡oporción). Con lodo, esta nueva versiónde Ia teoría cuantilativacon- un aumentoen M conducea un increme¡to en P, Es así como Wicksell
templa que los cambiosen M producensu priocipal impacto en los Pre- relacionóun cambioen M con un cambio eo l¡ demandade bienesy ser-
cios más bier¡-al¡¿vár del merca¡lode captaler y de las tasasde ¡nterés v¡c¡osy, por consiguiente, en los preciosd€ los mismos,
qüe a travésdel gastodi¡ec¡o,en bienesy servicios,de los nuevossaldos
por qui€nesquiera que los posean,

Relinami€nfo de ls teoús cusntit¡dv¡ por Wicksell

En el desaflollo de este planteamiento,enconttaremosútil referirnos


a los comentariosdel economistasueco,K¡ut Wicksell,suno de los Pri_

3 véáseK. Wicks€rl, tr¿d.(Lo.dres:


Lec,ur.son Potitico)E ¿¡o¿t, L. Robbins,
y Kesa¡ Paul,1914),vo¡.I¡, esp.¡ág3.159-20E(Pub¡icdiótorisinal
Roulledse
Ft(¡uM 12
164 Maerc.conoñú.1¿sica La leat¡a cr¡tsi.a det ohofto, de ta
invetsión r de la ,.¡a de iüet¿s
165
En la figura 5-2 se ilustra una versión simplificadadel anális¡sde
una elevaciónde los satariosmonetarios,
Wicksell.En estafigura, ,4 es la curva de la oferta del ahorro e / es el
€squemade la ioversiónoriginat.En j", Ias sumasahorradase invertjdas
son iguales.Si ahorase muevehacia// el esquemade ta inversión,la rasa
de equilibrio(Wickse Ia i¡amóIa..rasanaturat")se e¡evaa i,. SuDon_
i{:jrll j::üi$x!j r*i:rj*i ru;rx,",J#f
xl
'' -o- deroserec'os
';";;;
l:.
gamos.sin embargo.
:;:,'"""";#':"J ':"Íi::iff"," ü;
que los bancossarisfacenIa demandaádicion;tde
fondos a la antiguatasa de mercado.r'", o a una lasa sólo liseramente
superior.Io cxal es muy probabteque suceda.pueqtos banór ry en
"..:Tli:::J::l
;:tii";',i
tT1Iiffi ::,,T*,1:ii,l:;:::"1
1'".;
paficular los bancosindividualesen un sistema)no rienenforma de ;aber
cuál es la "tasa natural". Como una consecuencia de los préstamoscon_
:fi':"i1i""#li:.r":.:#.tr;:f
iiii"!illiiJüfl r""Í"#.,;
opinjón.deWicksell.esta s¡ru¿cionera Ia
normal Sin .rllUurgo,poaerno"
cedido\,se incremenra la canlidadde dineroa la velocidad MN., EI au_ ver rarnbiéncómo podríanlos bancos
mentoen la d€mandade inve¡sión(a medidaque los pr€sratarios roma
el dinero nuevo) r€presenta
galtan
un incremento¡¡etode Ia demandatoial de
bjenes,ya.que no ha habido u¡ra reducciónequival€nreen la demanda rf
i"j-t,:';1.'"".1ffi
jl'
*i;:rin"rffi .{T:i1'trT:
de los consumidores laumenloen el ahorro).El exced€nre
da sobrela ofefa elevalos preciosde los bienesy servicios.
de la deman_
;j"jJ":"f,
l. iílji,."l,tl,,llli,T.fi
H::' il;ilf ; : ;il;
¿Hastaqué grado y duranle cuánro tiempo subirán los precios?En ""ff
radot €n ¿pocasposteriores,de deDósiros

-,".m¡;ihm:" j::il;i:::;
lar¡to Ia f¿sad€ mercadose mantengapor debajode la tasaüatural con_
tinuaráhabiendoun excedentede la demandaagregadade bienessobre l{!ilt'#','"$
"t?.!:HT:::::':: ji
"i:'il*:l' iffi::"1..i:
..;Tilt.
{i{i:
¡a oferla, y )os preciossubirán_Unicamentecuandolos bancosdeien de
preslar) cesela creaciónde drnerc fral vez porquecada bancohaya 11,".",,11,,::
cr€adoya todo el "dinero nuevo,'que consideresegurocrear) se deteo-
drá la inflación, pues entoncesla lasa de mercadose mov€rá al atza
[i.T"1Í,;il,{ "Í1"i::"ffi,.#ili.:**:i*
}i"*r::
para igualar a la tasa narurat y la inversiónse compens¡ráde nuevo es,e,iempo.'a
dem¿nda
#i:;::"T: ;:":: ;'i:'*i :1*',";aDuran,e
(en parte por algunaexparsióndel aho¡ro, si ésre¡espondea la rasade
'nterés,y el resto,a travésde atgunareducciónen el ritmo de invers¡ó¡).
¿Hastadónde habrán subido tos p¡ecios?Necesariamente
*h'::*.n:x*r,i#,:jr,fun:;; i,
ii*::T
*"",. i,ü:*
deben ha_
berseelevadoen la nisma proporciónque la oferrade dinero,pues.de lo "i"i,'"'v"i"
:,:"J:'i:i:JJ'l:il::.,i1;'l",iiTi.l,iiilÍ,ie"
contrario,exisliriansaldosinaclivos conrrata \oluntadde ,us poseedo_
res, ¡o que,en cambio,deprimiríaia lasa de int€réspor debaiode ta rasa ":;,"il'jt';"5:.ÍJ
nalural.obligando asi a que conrinu¡rata inflación. f:il-"!::i'&il:i"'::"n"i::,¿J,..
Los salariosmonerarios.desdelu€go,debenhaberseetev¡dolambién
en estamismapropo¡ció¡r.Mi€ntraslos salariosse manruvierana ta zae¿ ],?ff:i::*:,;.;"-,"J,:ffiil';:1
il","L'iL:lü'iiTT:
o" pleno empteo,los empresários,
armadoscon djnero riu€vo,
del aumentoen los precios.los empresários rendrianun incenriropaia :::",],_bl:
incrementarel empleo.Dado que no habránde lenersetrabaiadoresadi-
c¡onalgs,el excosode la d€mandalabora¡d€be,tarde o i€mDrano.causar
:,:':.:lTjj:fl
:j::,if:"::,:::H:ltl:::Í,ff
H::,"j..."::."".i
tes de la ofer¡ade meioresprecio,.
Sr e.tablecemos
cienosptausibles
"¡"':,Xffi;oras
actitudes
deros
c**';¡-"','ro'
e Si ros atcneDos
a núerrosupúesro ;'lJ.iJ":#"T#::
d. únasotacl¿s€de valorbürtuit,tosba¡cos
ádquúüán bonos a Ia lasa MN, ád€nás de las comprA que rc¿tian l@ ahorradores
é la snlerior ra!¿ ¿¡,r. Si lor bancor no (oñprcr¿¡, enroDq Ia ¿um.ntjd¿ ofe a
d e b o n 6 d e s i n j r ü j o i p r e r i o r d e 6 1 0 \ , ( e l e v ¿ r i at a \ r a s d e I n r ¿ r e J rh a ¡ d e l tif ",i'*il*,[H:,"
i:f
¡;4,,,*Nl;::;ni:Tii""'ft
.qu;valenrede ¡,. Debc obr€rtcBe qu. ,l e ¡ ,on ftujo\. MN. o re¿ et Incrementode
ia oierta moúerar¡o.óeca¿riaoe¡re !e .¡prcaa bobréD cono un fluio,
ií^Í'"KÍ:^í;:i"¡'i.#itfl j 1":*ii#r;:.::i:,i;ii**
166 Ma.e.coaoñta .lüica La kot¡a clóti.a del ahoro, ¿t¿ló inv.úión, de la tasad¿ tnt¿t¿, 161
mo. A e$te prcceso se le denomina rho¡.o obtig¡do. En vista de tos
T€nemosaquí otro €jemplode Ia dif€renciaentre tas identidades
mayorespreciosy sin mejola en sus ingresos,Ios consumidores s€ ven con_
tablesy las condicionesde equilibrio.Sabemos,de acuerdo
paecisados a consumiamenos,Pe¡o Wicksejl pudo d¿rsecuentade que con el Ca_
piru¡o 2. que el ahorro efectivoy la inversióndeben
estoera sólo una desviaciónremporat.puesIa venrade b¡enesy recursor ser igualesen rodo
nempo.para et proposjro d€ €ra rde¡ridad,et áhorrose definesi¡npte_
a preciosmás albs crea auromáticamenre un iDgresomoneta¡ioadicional mentecomo et ingresom€noset consumo.pero si hablamosde
por el mismo monto del alza en los precios.Los co¡sumido¡eswelven aho¡ro
deseadoo intentado,at qu€ consideramos aquí como una fu¡ción de la
ahora al mercadocon ingresosmonetariosque, en el agregado,se ban tasa de i e¡és,podemoscreer que difiere de la inversiód.
€levadoen la mismaproporciónque Ios precios.No ha variado su posl- Sin embargo,
cuando ello ocurre así, €l ahorro real difiere d€l ahorro deseado,y
ción dc ingresoreal: cualquiercosa que anteshabíandeseadoconsumir, ios
ahorradorestratan de €timiDaresra dife¡€ncia.Sóto cuando
aú¡ deseanconsumirlay el aume¡ltoen sus ingiesosmon€tariosles Der- el aúo¡ro
real y el ahorrodeseado seaniguales. habráuna situación a..q"lfiUo.
mite pagar preciosmás ahos.Así pues.el alza inicial en tos precioi no ue acuerdocon Ios supuesroLdeWicksell. ello ocurría exclusñamente
€liminó la demandaexceden¡€.exceproduranr€et lapso €nrre el pago
que ta rasade mercadoy ta na¡uraleran iguales:€s dec¡r,
de los precios más altos y la colsiguienterealizaciónde ingresos'ml cuandotos bancosno creabanni suprimtán
netariostambién más elevados.A menosque ta fuenre de ta demanda dinero.
excedenteseaelirninád¿(por ej€mplo,a trávésde ün alza en Ia tasade
interésa su nivel natüral,lo que reducirála demandata¡to de consumo Abor¡o y ,teso.¡miento
como de inv€rsión),el incrementoen los preciospued€acumularse indefi- La.inkgración det ¿nálisisdet ahoÍo. invers¡ón
nidame¡te. (Esta nociór de una "espiral" ioflacionada,que provee su . y ¡asade interéscon
er anarrnsd€t dinero y nivel de preciosarroja rambiénnueva
p¡opio combustibleeD forma de iogresosmonetarioscada vez mayoaes, lu7 sobreIa
cuestióndel atesoramiento, señaladobrevementeen el Capítulo 4. En
es un elementoirbponanteen el modemo análisisde la inflación).
el contextomás sirnplede la reoriacuandtativa,el utesoru.iento
\ryicksellvio tambiénla condicióninversade que, si,sc desar¡olauna fu" t.a-
tado como un reriro direclo d€ demandade bienesy servicios;
demandaagregrdainsüficientecomo ¡esultadode un dlscensoen la in- ahora se
pued€tomar en cuentacomo un cambioen Iá preterenc;a
verciónssociadaal ahor¡o,que no es corregi¿to de tos poseedo-
po¡ una correspondiente res de riquezaen Io tocantea ta composiciónde su" uhorror, '
baja en la t¿sade interés,la consiguienre calda de sala¡iosy preciosno 5upongamos que ¡osdueñosde riquezadesarrollanun deseo(sin
corregirá la insuficienciaen la demanda,s¡lvo de momento.Dueslos im_
ponar.cuanrrracjonal puedaestoparecer)de güarda¡dineroen tez de
itgresosmonetariosy los preciosde los bienes,asf como ¡os cosiossata-
aoqurrrrbonos-es dec¡r, de ¡teso¡ür.No <ótopuedendejar
.iales,hab¡án decrecidotodos en la misma proporción.La insuficiencia de comprar
nuevos,bonoscon su ahorro presente,sino que les es posible
de demandapersistiú hastaque auñenie o bien el consuño real o la de_ verter al
mercadode bonos toda o parte d€ su tenenciaactual
mand¡ de inversión.Esto requie¡e(dadoslos esquemas de ahorroy de in- de valores,fruto
de su ahorro pasado.Esre acro ademásde r€duci¡ Ia
v€rsión) que los bancoscesende absorberfondos; es decir, que dejen dem¡nrla cor¡ien.
te de bonos en e¡ m€rcado (los nuevosahorros ya no
de ñá¡tener la tasade mercadopor encimadel nivel natural, fluyen al mer-
cado de bonos) se eleva su oferra. Desciend€nlos precios
Debemosente¡Cerpuesque los cuadrosde aho¡¡o y de inversiónen de los bonos
y aum€nta ¡, reducién¿oseta inyerión retatiya at ahofto (en
el diagramawickse¡lianoesrándefinidosen rérminosr¿ales.En ta fisu- el sentido
de inversióny ahorro deseados).L¿ baja de Ia demanda
¡a 5-2, el car¡bio d€l cuadrode la inversión,de.t a l, produce ta r". J a agregaaaáe
brenesam€nazadesempleo, el cual conducea u¡a deflaciónde ios salatios
cualquie¡tasa de interésinferior a i,) uns ,,brechainfláciona¡ia"e¡ el
monelariosy de los precios.La deflación prosegüirámientras
ñqcado de bienes.El aumento¡esultantecn los prcciosoo eliminala bre- continúe
el a¡eso¡amiento_ AI c€sa. éste,los precioshabrán bajado cn ta misma
chs po¡que deja sin modificación los cuad¡os dc / e 1. Si rieoe lusar la proporc¡o¡ en que haya dismiDuidola v€locidad.por
inveBión añádida.I, - /0. a través dc una desviaciónde bieoesl re- supuesto,Ios pre_
cros perman€cerán erroncesa su nivel más bajo, at que se a¡ustanüm_
culsos, cl ahorro efcctivo (quc tiene qüc 6er igual a l¡ invcnión), por
bién los ingresos.
supueslo,tambiénse increment6rá.(Es cl .,¡horfo obligado",o consumo
Si algünarazón,igüalm€nteilógica,conduteraen esre¡nstante
fficrificado, a quc aotes nos hemos referido), pero el üoüo deseadoo al des_
atesoramre¡to, se invedía ei proceso.La demandade bonosse compor_
i¡tentado queda co¡Do se muestaaen cl cuadro del ahorro.
dria ahora no sólo del ahorro siro rambiénde los saldos
inactivoi de
168 Macroecononia clátic¿ lA t.o,ia.lósica d.t ¿horro. de ta iñtca,on ) d. ta,asa a. ú¡ct., 169
dinero, cuyosposeedores desearíanal momentoconverrirlosen uoa for- inversión.Cada una de estasdemandasfue concebidacon elasticidad
ma de iqueza que rindiera interes€s.La tasa de interésen el mercado de las lasas de interés: a más baja tasa de inrerés,mayor d€manda
s€ deprimiríapor debajode la rasanaruraty, hienlras ello sucediese. de
una rnversron,y una más grandedemandade los consumidores(esta
demandaagregadaexcedente última
haríasubi¡ los satariosy los pr€rios.Cuando racae<-por supuesto.ufla merare€\posicióndet conceprode que cl ahoÍo
se detuvieseel d€satesoramiento, la tasa de interósretornaríaa su nivel oepend€en torma negarivade Ia tasa de inrerésj. Fuerzasseparadasin_
"natural" y los precios
dejaríande sübir, manteniéndose. no obslánte.a fluyen en el volume¡ de las dechionesde inversióny de gasto de con_
su nivel más elevado.Una vez más, es a travésdel mercadode capitales sumo: por un lado, €l cúmulo de factoresresumidosen el conceptode la
y de la tasa de int€résque et atesoramiento o desateso¡amiento afecthn productividadmarginaldel capital; en el otro caso,los factores
al nivel de precios. sociales
e institucionalesque d€terminanet gado de lrugalidadde la población.
Si bien este conceptodel par€l y mecanismodel atesorami€ntoy rero una sotaflendasujetariaes¡asdos fuerzas.drandobalanceadamente,
_
desat¿sorar¡iento no explica la ramn de por qué éstoshan de ocurrir, y evi(aríasu desboque o lentirup.E\ra riefldaseríauna rasade inLerés
Ia €xpos¡cióndel problemainvita a buscarposjblesexplicacion€s, de
inclu, libre flucluacron. S¡ hubie¡aun-aumento en algünode lo, dos comDo_
yendo algünasque veremosen un capíruloposterior. nentesde la demanda,el alza r€suhanteen la tasa de interés podría
La t€oría cuanlitativasinpl€ había descrito a tos individuoscomo impedir cualquierincrem€ntoen la demandaagregadamedia¡te ei cam"
eligiendo€ntregastarsusingresosa medidaque los percibí¿no acumutar bio de ambosele¡nenros de la ¡¡isma y, en el proceso,desviandoalgunos
dinero efectivo (y, por supuesro,debido a que €ran juiciosos,nunca recursos,desd€Ia sarisfacción de la demaDdaque no hubies€aume;tado,
€scogianlo segündo).La versiónmás so¡isticadade Wicksellnos permile hacia ia demandaqu€ sí se hubi€seincrementado.Si cualquierade los
planteardos decisiones separadas:I) ¿cuántodebo gastary cuántoaho_ dos tipos de demandatuvies€un d€sce¡so,la ¡esulrant€dectinaciónen
tftr'l y 2\ ¿eaqué forma -efectivo o valores- debo manrenermis l¿ tasade.inrerés€srimularíaa arnbasy desviaríarecursoshacia aquella
aho¡ros acumulados(tanto el aho¡¡o que estoy realiza¡do actuatmer¡te qu€ no hubies€experim€ntado baja.
como la acumulaciónde rodasmk decis;ones pasadasdc aho¡ro)? Estas Si, no obsente,por cualquiermotivo (en particular Ia expansióno
dosdelerminaciones no sehallandesdeluego,del rodo descon€ctadas enrre contracciónd€ la ofefa de dinero por parte de los bancos), ia tasa de
sj, como no Io estántampocolos actospor vinud de los cualesse llevan rnteresse vieseimpedidapara cumplir su función regutadora,la demarda
a cabo talesdecisiones. Si d€jo de ahorrar,gastanalo un s¿ldoacumulado agregada{€l consumomás la inv€rsión) se alteraría,provocandoinfla-
de efectivoocioso,estoyde igüal forma desat€sorando. por orra Darte.los ción o deflación€n el proceso,
cambiosen alguDosfaclores {por ejemplo. mi mayor temor i inceni_
dumb.e acercade la futüra situacióneconómica)Dodrían¡fectar simut_
táneamenlea ambasdecisioneslque yo debieraahorrar más y convertir, EL DINERO Y LA TASA DE TNTERES:
de bonosa efec¡ivo,mis ahorrospresentes EQUILIBRIO Y DESEQUILIBRIO
y pasados).Asimismo,puede
ser que alguienque conservesüsahor¡osen forma de efecrivoestésome- La teoría clásicadet interéspresertadaal principio de este capítulo
tido a u¡a mayo¡ tentaciónde desahorrar;se evita el tiemDo.esfuer¿o se expresabaen las tres €cuacion€ssiguientes:
y posiblesmolesti.sde convertirprimero en efectivoalgín valor del que
sea tenedor.Si¡ embargo,no existc ningunarelaciór n€cesariaentre el (l) A = A(i)
aboüo y el atesoramiento. Puedo ahorrar sin arcsorar,aresorarsin aho- (2) I=IIü
rrar, o bien, incluso ahor¡ary desatesora¡, o atesorary desahoftar,por (3)
lo talto, para el efecto del análisis,constituyeuna r¡ed¡da nás útil el
separarl¿s decisionesde ahoro y atesoramiento. La teoría cuant¡tativa. La ecuac¡ón(l) es Ia func¡óndet ahorro, la (2) es Ia función d€
un tanto más lofisdcada,nos permitehacerexacta,hente Ia in_
esro. version.y la t3¡ es Ia condiciond€ equilibrioen et mercado
El análisisde Wicksellcontrjbuyóno sólo a estaseparación, de capira_
s¡noque l€s. tn esta relación.el equilibrio en et mercadode capitates.a rravés
también nos dio, segúnse ha destacadoantes,una teoría rudimentaria de.la variaciónde j, aseguraba que el flujo d€l ahorro si igualaranece,
de la dema¡da agregadade bienes.Esta demandacomDr€ndedos Drin- sa¡ramente con et flujo de la invelsión.Sin embargo,esta foi¡nulaciónse
cipalesdivisiones: la demandade los consumidoresv la demanda¿e ofv'da de Ia conrribucrónde Wicks€U,la cual d;osr¡aba lus ¡n¡ei¿o_
170 Macra¿conon¡a c|¿ricd La teotia clótico ¿el ahona, ¿e ]d inv¿rs¡óa , de Io t6a d. int.¡ét
t7l
cionesenl.feel alorro y Ia inversión,et dinero,ta decisión€ntre conser_
es la de que, si los requerimi€ntosde efeclivopara transacciones (mpy)
var di¡ero o poseerbonos,la tasa de interésy el ¡ivel de p¡ecios.po-
etceclena las teneÍcias realesde dinero, ¡a gente se convertirá e¡ deman-
demosincorporar las inrerpretaciones de Wicksell si reemplazamos Ia dante_de fondos en el mcrcadode capitales;tomará prestado,pe¡o ¡o t
condici6nde e,juilibriot3) po¡ rr¡ leoria de Ia tasa de ¡nterds, como para finesde inversióo,o bi€n, v€nderásüs¡ctual€srenencias de;ntjsuos
se apreciaen la ecuación(3a).
valores.o retendraen efectivordeja¡áde presta atgunapane de su
(3a) A+DH+'M=I allono coni€nte.Todos estosactos,como es lógico, deprirnin los pre-
cios de los bonos (originan el alza de las tasasde interés).
en do¡de AM os la tasa de adición a la of€ta de din€ro y DH rcore- Las ecuacion€s (1), (2), (3a) y (4) Io atgunava¡iantede l¿ (4)l
sen¡ael 'desa(esorár¡ienro". o rea. ta rasade urc de saldosen efeciivo conlituyen lo que a menudose denominareo¡íade los ,,fondospresta-
para comprar valores. (Si .!M es negariva,mu€stra una disrniÍució¡ bles". de la rasade int€rés.El enfoquede los fondosprestabl€sa ia tasa
en el circulantemoneta¡io;si D¡1es negativa,sugiereatesoramiento, esde_ dr inrerésy su diferencia con.€rrorplanreamienlos h; sido duranremu_
cir, un aumentoen los satdosde efectivo).EI significadode la ecuación cho rrempoluenrede gran confu\ión. t¿nlo en ta reoriaeconómicacomo
(3a) es como siguei la ofe¡ta de fo¡dos at mercadode cáDiiaies(o la €n €l entendimi€ntopúblico. Esta confusiónes innecesa¡ia.aunque es
demandade bonosrconsrade tres paÍe!: ahorrocorrienri,¡, ¿esare- bas¡¡ntefácil comprender cómo re ha desarrollado. Una oar¡eimoor-
soramientoD¡1, y cualquier aumentoen ¡a ofefa de dinero lM. La rantede 1adificultadse oflginapor ta falrade claridaden lo referente
suma de estas t¡es füentes de fo¡dos (dernandade boDos) debe ser a exrsrencias y flujos (inconv€ni€nteqüe entorpecer¡uchasde las discu-
igual a,l, o sea,la demandade fondos (oferta de botros).La tasá sionesdel p¡oblema); €l otro punto fu¡damenrales no distinsuir entre
de interésdebeajusrarse paradespejaret mercado,estoesl suponemos que las condrc¡óne, de equihbrioy desequi¡ibrio.
los p¡eciosde los bonos se ajustan librementepara encontrarel nivel El modelomodificado, ecuaciones (1), (2), (3a) y (4), conti€ne
al cuat Ia ofena es jgüata Ia demanda. puestoque / e / se e¡Dresan ocho-variables:A, I, i, DH, p, y, M y jM. S¡ suponemosque y (junto
como (digamos,t¿rasanuales, lM y D¡l debenrambi." *, ffr;.r..- Son W/P y N J €tá ya determinadapor la oferta y la demandade mano
rüentes,expresados como tasasanuales. d€ obra, y que tanto M como lM son parámetrosque se definen eo
La teoría cuanritativaafirma que la genteno conserva¡ápo¡ su vo- baseá polrric¿,. el númerode variabte( se reduce¿ cinco.peroet sistema
lunladsaldosde dineroj¿¿rr¡or (esroe\, saldosen eycesoa Ia) necesi- es rncleterminado; existen cinco variables desconocidasv sólo cuatro
dadesde las trar,s¡cciones ..desaresoramiento,'
) . Así pues,et tiere lusar
sólo cuando la gentese encuenrracon satdosrealesde efecrivoM ia- Podemosnorar tambiénque ésreno es un sis¡emade equilibrio. La
yoresque la dema¡dacorrientepara transacciones mpf. Se suponequel e{uación(3a) permiteque,,{ seadesiguala 1. pero si,4 Ío es igual a 1,
en¡oncesal8ünosahorradoreso .ciertos inversionistas,o smbos, deben
(4) DH=h(M -mPY) r¡>0 senrirseins¿risfechoso sorprendidor,pues sabemosque el ahoÍo v la
inversiónrealesdeben s€r igualesy, si hay divergenciaenrre el ahorro
La cantidadentre parénresisen el s€gu¡domiembro de la ecuación(4)
y ¡a inversióndeseados o inrentados,algunosdeseoso planess€ ven frus_
es, por supues¡o, J¿lradif€renciaentre dos magnjtudesde existencia,la tmdos. En la descripc;óDque Wicks€ll hace del p.oceso,por ejeñplo,
existenciareal y la exhrenciadeseada,o necesitada,de dinero. La cons- en tanto 1€xcedaa,4, esraráorurri€ndoun.,ahorro obligado"; los con_
iaDt€l¡ sir¡rplemenreconvierteestaexistenciaen u¡a di¡¡ens;ónde riem- sumidoresestaránt¡atándode inc¡em€ntarsu consumo,lo que conducirá
po.10La in&rp¡etaciónde la ecuación(4) cuando hay ,,atesoramienro"
a cambiossubsigüien¡es sin Iimite.
ro Es decir, si cl erc€den1cde la lenenci¿¡eal de Para que el sist€mase luelva de{ehinado, puedeuno restaurar€l
di¡ero, sobre ta deseada,.¡ atsú¡
phto del tieñpo cs de nil oitlones_€xis1euna d€ña¡da exÚa de bonG de carácter de equil¡brio det modelo añadiendouna ecuaciónque defjna
$¡ nltes
d€ nillones por unidád dc lienpo (¡qu.jla e¡ la qu. se ¿xpresa¡ otos ftujos co- el €quilibrio.Podía ser ta ecuación(3):
r¡ie¡r.s). En coossu.¡cE,,i tos f,ut6 det anoro, d. ¡a i¡rabrdn y d. ta c;s,ron
0e dr¡ero \e.xpresu $bre un- base di5na. un vator d. O,O5pa¡a,, 5isnrf.ca ¿ A = l
que t/20 dcl exc€dente,o sea, $50 ñillones, fluiría al De¡cádo dc bonos en !n
dtu, baci.odo subir .l precio d. 16 bo.d. Si tanro M cooo upy no sufrie.on combinaciónde (3a) y (3) suge¡iríapues que, e¡ equilib¡io,
¡irgún c¡Ebio, lo aDr..ior co¡¡ilua¡iá iDd€fi¡idu.úr.. __La
LM + DH = 0. Fr decir, cualquie. creación de dincro ie compenia exac_
Mactoccononio clásica La t¿ot@ clótica d.l ahoaa, d¿ ¡a i\rerc¡óh y
d. lo te de iñt.ré, 173
lamenteen Ia misma proporcióna travésdej atesoramiento(voiuntario
¡ant€,se pued€const¡l¡irun sistemadirámico de ecuaciones
que Io ¡bar_
o intentado).Pero es rambiéneviden¡eque el equilibriorequiere,además, que, si bien no lo irtentaremosaquí.1r
qüe DH y AM seancada una igual a cero. Sustituyendo DH por ttt e¡
la e€uación(4) y reordenandolos rérminos,nos da
AIIORRO, INVERSION Y EMPLEO
M+lM=mPY
C+itut" + vjmosqft si los satariosfu(. r inftexibtes.podían
En equitibrio, el miembro d€ la derechaes constantea rravés del ^_.-!1a
€sraD rza6ea un nivetdemasiado etevadoparau,:¡ condr(iónd; pteno
tiempo;por consiguient€,
del mismomodolo seráel de la ¡zquierda,to que empleo,dada ¡a cantidadde dinero. En ese caso, l, te.rría
cuantiiativa
significaque AM debe ser cero en uDa condiciónde equitib¡io.La ecua- no.:" una reoriade preciossino en ,"" , .,i, a.1,"i"._
ción (4) se reduce,por Io tanto, a ::,:"1y:1.r,.
cron. una reduccrónen la oferta monerariacrearíadesempleoy
una baja
en_la_produccrón: un aumentolenla ofena monetana.
(4a) cu¿ndoya exis_
oera oesempteo. conducirlaa una ñayor producciónanlesque a precios
más altos solamente.
o sea,la ecuaciónde l¿ teo¡ía cuantirativa.
La introducciónde salariosi¡nexibtes en el cuadro wickselliano
No debe sorprendemosest€ resultado,pues el análisjsde wicksell lo
conlrerte,de una t€oría de pr€ciosbasadaen el ahono_inversión,
difería de la sencillateoría cuantitativasólo en el procesopor el que se e¡ una
teoría_ de produccióncimentadaen e¡ ahorro_inversión. partiendode un
lograbansusfesultados,no en susresulradosmismos.En equitibtio,pa'?
Wicksell, los pr€ciosson proporcionales¿ ¡¿ 6¡.¡u ñonetaria, l ambos "9. preno empleo-suponsarnos qu€ se dereriorantar opofiu_
::j,ll!]i",
nroades de inversión.
son constadtes€n e¡ tiempo. En equiübrio,ni Ios saldoi monetariosflu- Si dectinasede inmediatoIa tasade inrerésen el
m€¡cado(esto es. que se e¡evaran¡os preciosde los
y€n al mercadode capitalesni taúpoco se necesitaincrementarlos saldos bonos) hastaalcan_
zar e¡ nrvetde ¡á nuevalasanaturatmásbaia,se manlendria
en efectivopara financiarun volumencreci€ntede transacciones. ta demanda
agregada. D€c¡ecería et_ahorrores decir.s; incrementaria
Sifl embargo,efa solución(para converir nuestrosisremafofmal €n a *"r"rn"],
y ra tasamas bája tambienesrimutaria ta inv€rsión.pero si tos bancos
un sistema€stálicoo de equilibrio) pierderodo et beneficiode tas nota-
impidies€nel atza €n Ios preciosde los toros, vend¡endo
bles observaciones de Wicksett.La í¡nica,forma de incorporaresrasad, valoresde sus
prop¡ascarreras(y r€duciendoasí la of€rta monetaria),
ve¡tenciases construirun modelo explícitamenre dinámjco.No obstant€, a preciossólo
tig€ramenlemis ahos que ante\ lpero no lo basranre
no puedeserúnicamente un modelodinámicode determin¿ción de tasasde alror como oara
reflejarra nueva..¡a\anatural.j, descende a ta inversrónsin ninqtin
iDterós;debeser un modelodinárnicode la economíacompletaal mac¡o-
aumentocompensatoriodel consumo.Declinaríael gasto
nivel. Hacerlo exige el planteamientode varios supuestosadicionales roral de ;n_
sumo más la inversión.
acercadel componamienro,en desequilibrio,de ahorradores(consumi-
" wickse suponiasatariosy preciosmuy flex¡-
dores), inversionistas, productoresy trabajadores.Reducir rodo esto a .,^_a:i,:9o.
D_res. no. oclrr¡a9"0'9o oue
un jLregode ecr¡aciones d€s€mpteo- en su análisis.exceptoai una cta.e muy
no esfácil. Si puedelograrse,tenemosentoncesun fransrrona.Los preciosbajabanran rápidamenre
modelo dináñico qüe nos relara no sólo el efectofinal de un desplaza- como la ofena de dinel
ro y.ra d€rnandade Ia producciónrotal en rérminos
mientodel €quilibrio sino tambiénnos mueska to que ocurr€ en et pro- mofletarios.La dec¡¡_
c€so:cuántotier¡po loma y qué patrón de tiemposiguen,mientrasian¡o. inversiónse_niveraba sracia<a ro que deberíamos trsmar,
lI'li:" ]"
por análogra.._consumo
las distirtasvariables.Además,debeobservarse que son Dosibiesmucho! obl¡gado.,.ya que la baja en los preciosocurría
con anricrpación ¿ Ia reducción de Io: ingr€sos monerarioi.
de talesmodelosdinámicor.rodoselloscon la misna soluc,ón de equF Fl consumo
erec¡¡vo, en rerm¡nosreales,aumenraba tanto como decfinaba
Iibrio, pero con diferentesparronesy secuencias cronológicas.Cada mo- la inre¡_
sron,pero, debidoa que el cuadrodel ahorro d€seado
delo correspondea alguna serje particular de supr¡estosacercade los o intentadono se
intervalos y del comportamienro,en condicionesde desequil;brio.de r'.,ExÉro
Ios trabajadores,empresarios. consumidores y bancos.Et esfecificomo- ".:ü,itT
wri6 ñodct6 cxpticir¡o.nr. dinaDiG

.;:#$:"..:L*'.ü:$,:1ii:l.J
d. der.rminaró¡ d. raa3 dc
delo dinárnico,implícitoen la propiadescripciónde Wicksell,del proc€so
i¡flacionarioo deflacionario,es en realidadbas¡antecompticado.No obs- rFil:&iii{1i!"**":'
j¿fi:. o'"'o ¡;'t¡'"- a";ii "i ii-iiái'Z,i
?i'.:}';":'-'lj'l!l!,.o
114 Moto.cüoñ¡o cl'ásica Ia t¿otía cLl¡ica del ahano, ¿e ta ¡ñyerc¡ón y
d¿ la t6a d. iñt¿té, 175
desviabaa la izqui€.da, continuabael ercedentedel ahorro sobre la (r) A = A(i)
inversión,y las presionesdeflacionarias no desapa¡eclan (bastaque la tasá
de interésdescendiese a su más bajo ¡ivel "natural"). (2) I = I(i)
Si l'o bajaran los salariosy los precios,manteniéndose demasiado (3)
elevadala t63a de interés, la caída de la derDar¡dar¡looetar¡¡agrega- A = I
da se convertiríatambiénen un notable descensode Ia demandareal ecuaciónl5). descriraeo gen€ralcomo uná frnc¡ón ¡greg¡d¡
agregada.Dc hecho los trabajadoresquedaríansin ocupacióny se redu- __-Ia
prodücc¡on,acasose concibamejor como un simp,e de l¡
enuncia¿o,cas¡em_
cirla el ingresotanto real como mooetario,¿Teñemos entoncesuna espirsl prnco, de una retaciónpositiv¡ observadaenrre Ia pro(ucción
coDtinuamente descendent€, esta vez d€ la produccióny del empleo,€n sFegada
y el empleo Dado que el empleo€s et único
argumerto¿e l¿ iuric;¿n
lugar de los precios?¿Seconviertenlas cspiralesw¡cksellia¡asde precios, €r mismoparccesugerirque ta exisrencia
por virtud de Ia delicadacondiciónde los salarios,en espiralesd€ em- :.e_producoón. de capitaty de
producrivosson fijos. to que resrringiríala apricición
p¡eo o ingresoreal? ll:.'jr':l* der
moo€ro.bren.s€a at anál¡sis
a coto plazot€n qu€et capiralpuedetomaF
Wickselly los demásar¡toresclásicosno trataronde respondera esta se como se da esercialment€),o al de una economía
pregünta.Quizá no hayan c¡eído que los salariosy los prec¡osfueran €stacionariaen Ia
que la.inversiónnetay et ahorro.€n pr;nedio.
se convie(en€n cero.
en realidaddel todo flexibles;pero no intentaronanalizarmuy específica 5rn embargo.esta limitación no impide de suyo que usemos
o clararncntelo qüe ocurrirla si los salariosno declioasen.Si lo hubieran un modelo
como estepara cie¡tasctasesde arálisis a más la¡go plazo,
siempreque
hccho con el esplritudel análisisde wicks€ll de la demandaagegada, supong¡mosun cambio ascendente en la función Ai pioaucciOna traves
següroque habríaÍ hecho alg¡¡nosinteresantes dcscubrimie¡tos,y uno del.t|empo.con €t fin de represenrar los efectoscon,brnadosd€ la acumu,
de los primerostal vez habría sido "la funciónkeynesi¡nadel consumo". ¡acronde cap¡taty del cambiolecnológrco. La ecuación(ó) describela
Y, con la funcióndel consumo,habríavenidola teoríade que la demanda oemandade manode obra como una funcióndel \afario
real; no obs_
ag¡egadadeterminano (o no sólo) el nivel de precios,sino más bieD ¡ante. es m€jor pensaren dicha función como un enunciado
(o también) la producciónr€al. empírico
aproximadod€ una relaciónobservada.Aunque ros
€conomrstas c¡ásicos
supon¡anque la demandade mano de obra €sratu inu".sa."nte
uso"iaáa
MACRoECoN0MIA CLASICA: SUS AFLICACIONES con salario monetarioy de forma directa asociadaco¡
.el el nivel de
Y LIMITACIONES visro que no €xiste ninsuna presunciónreórica
fl.:::": lT:: obtisada
oe que rat d€baser et caso.Ls ecuación( 7) describ€la ofertade
ma; de
Estc capítuloy el que antecedehar descdto una teoría clásicadel oDra¡amDren como una funciónde¡ salarioreal,si bien con una o€D-
empl€o, de la produccióny de los precios.Tal vez resulteút¡l jüntar dienreinciena.La ecLración r8).es la condiciónpr".i "qu,ilut..".l
los distintoshilos de esateoría en una sola formulaciónsintetiada. mercado y se suponeque se alcanzaun equilibrio,esro
Los elementosbásicosde estateoríaclásicapuede¡condensarse en las -laborat: es. oue
er nrvetcÉt satarrorea¡ subeo baja hara el grado "n qr" .ca
nec"rriio
ocho ecuaciones siguientes: par¿rograrto. La ecuaclonr4al d€fineet €quilibrioen tinenciasmoneta-
¡ias: la of€rla d€ din€ro resuka iguat a ta cantidad
(5) Y = F(N) para lleva. a cabo las t¡ansacciones,
Oe Oine.o r"queriJa
Esta es la teoría cuantitativadel
(6) "=(#) di¡e.o Dadas M y tn, y la y ld€terminadapor las
(8)1,._laecuación
(4a) derermina
et nivelde precios.
describeel ahorrodeseadoo intentadocomo una
r_" ""r""lii
ecuaciones¡5¡ a ü
?ii
función (que se suoone
crec¡enre)d€ ta ¡asa de irrerés. La ecuación(2) .nuestiá
(7) , =,|w\ Ia i ;JJ;;
como una runción (que se suponedecreciente)d€
Í:T-19": 1""":"0:
ra rasa de Interas.La ecuación(3, formula ta cond¡ción
de equilibno
(8) en el merc-adode c¿pirales:el ahorro planeadoes igual
a la iriversión
praneada.suponrendoqu€ ex¡ta ral equilibrio,
ésredetermiDala tasade
(4a) rnreres,asr como las canddadesa¡oradas e invenidas.
r76 M¿üo¿conoñío tLttic¿ La Eot¡a clAí.a del ahoüo, de Ia iavasióa
! de M t6a d¿ i^t¿t¿s t17
Estemodeloclásicoes un sistemad€ ocho ecuaciones con ocho incós- crón. aumen¡anlecuaciones (2) y {t)1. Esa mayor producción
niras(Y. W, P, N. L, A,I e i). Conriene venoerseloto a preciosmás bajos_ecuación ouede
rrescond;c¡ones de equ¡tibri;
*(8), (4á) y (3)- que implican t.es,,prccios": 'y, p e i. Bajo tos taal. En el nueuoequiii-
o¡1oeventual,Ios salariosmoneta¡ioshabrán declinado
más que los.Dre- r
supuestoscstablecidospo¡ los economistasc¡ásicos,todas estascorü! cros, de-modo que el salario reat será inf€rior,
con¿tct¡n in'jispensiii"
cioncs d€ equilibrio puedencumplirsesimulráneamente: es un sistema pararlna mayor.producción y empteo.Et Ehorro.Ia inversión Ia r¡sa
de equilibdo. El desempleono r€presentaun probtemadentro de este oe ¡nterésno sutrirán a¡reraciones i
sistema.En condicion€sde equi¡ibrio,todo el desempleoes votuntario. O bien. supong¿\€que
Mientrasel sistemaaicanceel equilibrio sin dilación,el desempleoes tar .¡unctonoe produccrón hay crecimienroa rravesde un carnbiocn la
de formaqueocasiona un incremenro en la deman_
sólo un dessjustelemporal. @. G de obra a cadavatotde w p. En equitibrio.
.malro habráaumen-
radoel.salarioreal,y lo mismoel empteo.
si la ofeta de rnanode obra
Apllc¡cion€s del modelo cll¡ico $ u¡a¡runc,oncrec¡enre del salij¡o reali de to con(rario.no sucederáasí.
E orqrnano.srn emba¡go,se rncremenrará ta producción,. de esremodo,
Si cste modelo clásicoes una desc¡ipciónrazonabtemcnre precisadc ", Et.que tos sararios monerarros tensan un alza, se
Ia economla,podcmosusarlopara pronosticaret efcctode posibtcscam- r€duzcano l'*'g' ig¡¡aldep€ndede ta elasticidadque
:".1i:il
_sigar¡ ofrár" Ir. ¡ui"¡á-
bios o para explicarel efectode las modificac¡ones actualesen elementos nes de produccióny ofena de maflo de obra,
así como del valor de n.
especlficosdel sistema.Procedemospues en nuestroanálisissuponi€ndo en menor proporciónque tos precios,.s deci¡, el
un equilibrio inicial; d$pués t¡astomamosel equilibrio con un solo l":::,:,-.-"-yi*1*:,
saranor€at aumentaráoecesar¡ame¡re',
cambio hipo!ético,encontramosel nuevoequilib¡io y por fin €valuamos Si ranto la oferta de mano de obra como su productividad
e¡ cambioneto eo las demásvariablesdel sistema.Esre es el mérodode . s€ elevan
a ra.vez ocurre con regutaridad€n una economíacreciente),
estáticacoñparativa. En el presentecapírulo y en €l anterior se han _(como
produccióncrecepor ambasrazones.Si €l la
salario .""1 uurn"nt" o áír'mil
comentadoalgunosimpotantes ¡esultadosestáticoscomparativospara el nuye.ello dependede si la oferrade manode obru,"
¡n"r.."nt" "on rn¿,
sistemaclásico,los cualespodemosresumircomo sigue,lsuponemosaquí o-m_enorrapidez :u ividad. pero, en cuatquierade los casos,
las versionestradicionalesde las ecuaciones(5) y (6)1. naor¡ de de\cender ,que .product
et nivet de precios.Esra rendenciaa ta declinación
Dado un equilibrio inicial en el orcdelq, supongamosque aumeota oe ¡os preciosen una economíacr€ciente(a menosque
la ofe¡la rnoneiaria.La ecuación (4a) deid de tene¡ validez. Existen la oferra mone_
taria cr€zcaconvenicnrenente)ha sido *"f¡rrn"¿"
" .*"¿. ."_.r"ii,
saldosmonetariosjndeseables, lo que conducea una mayor d€¡nardade economías.El ¡mpactode la deflación oriAjnada
en esta fuente, sobr;
la p¡oduccióny, a sü vez, de servicioslaborales.Se elevanlos satarios Iosdeudores,se ha descritoen ocas¡ones como la fuentede movimientos
monetar¡os,así como los precios,Eve¡tualmente,el incrementadonivel políticos"populistas"en el occident€am€
cano duranteel sigloxlx.
de preciosrestaurael equilibrio en la ecuación(4a), y u¡ alza propor- que aumenrata productividad.arginat ae
cional en el salario monerariomantienela igualdadentre Ia oferla y la ,- ,::ljP"T* íu ;n,"rsiOn,
rmremenrando así ta funciónde producción. Et equitibrio de ta ecuación
d€r¡andade mano de obra (al salario real, empleoy p¡oducc¡óninicia- ,r¡ ex¡geentonces una másalta ra<ade interés. a ta vezque inversión y
les). Sólo los salrrios monetariosy los precioshabrán variado, ambos r!ás elevádos.Sin embargo,rodar tas demásuariabtes
en Ia mismaproporciónque el cambio en Ia ofera monetarja.Esta pre- :hor.ro
rar. ¡a p¡oouccrón ren oanicu-
y et empleo)conlinúan\in ningrincambio,
dicción.en rerminosgenerales, aunoueta
es claramentecongruentecon la experien- mmposicionde ta pro,luccidndebe habersedesviáo
un ,;";;;; il;..
cia de las economiasrealesa lo largo de muchossiglos,contándose desde .:"*.. a bienesde capita¡. A menudo.tos economisras
Ia "revoluciónde precios"ocürrida en Europa en €t siglo xvr, cuandoel 9:
"":, otra_torma de esreaspecro
han em_
l':*9 det anátisis ctá<ico para€xpticar.
oro del nu€vo mündo fluyó al viejo cor¡tinenre,hasta cualqu¡e¡ade tas por qemplo, las flucruacionescíclicas€n
las ¡asasde i¡te¡is, o las ten_
num€rosas"demostraciones" de Milton Friedmande que la inflaciónde deociasa largo piazo,o bien las diferenciasinternac¡onales
EstadosUnidosen la décadade los 70 "encaja"por completoen la expl! e¡ los niveies
de las tasasde interés.
caciónde la teoría cuanritativa.
t2 Si l¿ of.rr¡ dc h¿no
Supongaoosque aumenla Ia oferta.de mano de obra. Ello origina d. obra fu6. ¡o bdrer€ d
la baja del salario monetario.El empleo,y por consiguienrcla produc- .;xir;,:"",:l*ff
;;j.::x,."*.j",*;{,;i ,:iilTTfi
.i:.i:"i",.j,:i,#,il
17E Mrcto.conoñid clótica I¿ tcot'ú .Lúsica.!.t atóno, ¿. la iav.rrióa ¿t¿ta trra
, tu ¡nt¿r¿s 179
Resultapuesevidenteque un requisitoesencialdel modeloes la flexi_ S":.t" ul_1.respüestadel todo pasiva por parre det sistemabancario
bilidad de los salariosmo¡€tadosy su te¡denciaa disminuir sin límite ( ve¡Bea wrcksell,por ejemplo),la flexibilidad
de los salar¡osmonetsrios
cadavezque existcdesempleo(o a elevarsesin límite cuandola demanda podría tem€n!e proveersi€mpreunatomplera y automáticaacción r
.eviden
de manode obra excedea la oferta). Sin estacondición,los resultadosdel correcüvapara et d€semDleo.
sistemason muy diferentes.E¡ particular,como ya se ha hechonotar, sin Sin ernbargo,mucho¡ t¡aladistasen Ia tradición clásica
r€conocían
salariosflexiblesel desempleoes posible.Los nivelesde la producción
real y d.l cmpleo depe¡¡denpu€s,parcialmente,de la ofena de dioero ajüsresobre€t n¡vetde los satariosmone|arios,ciertamenre
d$pués d€ la
La rigidez de los preciosen cualquierpart€ del sistemapodría tah_ expenenciabritánicaen la décadadc los 20 o de la €xperi.rr;ia;;
I;;
bién pareceralterar los resultados.Supongamos, Por ejenplo, que los EstadosUnidos a parlf, de lg2i. La n€cesidadae tn "¡o"t"
en Ios "uia_
preciosde la producc;ónson inflexiblesa la baja Part¡eodode un equi_ .ios_y en los pr€cios,aum€n!ándolos o reduciéndolos,pod¡ía limitaKe
lib¡io i¡icial, un inc¡ementoen la produccióny en el empleo (reflejando d€ forrnasensibte medianre un{potiricamone¡aria que impidiese at sis_
una mayor oferta de mano de obr¡, o un aumentoen su p.oductividad) rema.Dancano lnterferiren el procesoahoÍo-inversió¡,ya iuesecreando
sela entoncesimposible,puestoqu€ los saldosde efectivopara transac- o retimndo dinero, bien €n respuera a carnbiosen I".
J"i
;-p"";o;;
ciones,requeridospara el man€jo de una producciónincre¡nentadaal anorro o de.ra rnvers¡ón. o con indcpendenciad€ los mism;s. Las refor-
antiguonivel de precios,excederíaD a la existenciáactualde dinero. Sin mas en ross$temasbancarios.incluyendola creaciónde
bancoscentrales
embargo,si las cuotasde los sala os monetariosfuesenflexibles a la oato e¡ conrrol de¡ Sobjerno.tuüe¡on esreimporranleobjerivo.
El n¿r,-
baja, en respuestaal desempleo,es difícil imaginar cómo los Precios tend.a M eshble imp.diría que los bancoso ta ofena
de áinero causasen
podían permanecerrígidosdürantemucho tiempo en tal situación. proDr€m¿r, o qu€ tas vari¿ciones en tásprop€nsiones det ahoro o en las
De modo simila¡, una tasa de interésrígida podría imp€dir el equili- perspect,var de Ia inversiónexigicsen,a su vez,cambiosen los salarios
v
brio en el mercadode capitales.Si se elevarao se m¿¡tuvierademasiado en los prec¡os.ya tueraen Ia direccióninflac¡onariao er
Ia deflacionaria
"atesoramiento"
ata la tasade intefés,como resultado,por ejemplo,dql sin.embarso.voia.iones contntados ?n M pa.3 esta_
o de una contracciónde la oferla mone¡ariaen el sistemabancario,el ::11i
oxrzar l.*.1.1".
tos satanosy tos preciosconrra lo.i ef€crosde los
camúiosen la
ahorro excederísa la demandade inversió¡,y los salariosy los pr€.ios ofera de m¿node obra o en !u produclividad.o conrra
modrficaciones en
baiaían sir límite, en tanto la tasa de i¡terés s€ mantuvi€raPor encima ra oemanoade drneropor patu det público.como
resuhadod€ los cam_
de su equilibrio. Descendiendocon rapidez y en grado suficiente,los Dros en tas dererminantesinstitucionalesd€ la v€lo€idad
o del ar€so_
salariosfleibles podríaniopedir, sin embargo,que estedesequilibrioeí el rami€nto infundado, o de¡ consiguienredesaresoramienro.
Una pofiiica
mercadode capitalesgenerasedesempleo. No cab€ duda de que, mien- monerariagübernamenral podría as€gurar¡alescambiossegúnse hicies€
úas la tasade interésse mantuviesedemasiadoel€vada,el sistema,en su n€cesario.La potf¡ca moneraria.€n resumen.era vista
como ufl útil
conjunlo,no estaríaen equilibrio,pueslos salariosy los p¡eciostendían jnstrumenlopa¡a ev¡tarla
necesidadd€ ftuduacron€sen pre€rosy satarios
que continuar descendiendo. Unicamentesi los salariosfueran rígidos y, asi manlen€rta €rabitidad det nivel de precios
"casi conira ta i¡úlacióno
(o incluso fijos", de modo que t¡o pudierandeclinar con bastante
rapidez), Ío po¿hra manlenerseel Plenoempleo. S¡n embargo,no sólo €xistía€l hechode qüe Ia inflación
_ o ta defla-
ción fu€ran en sí obj€tabtes.La n€cesidadd; deflación
.." ,,ry pio-
Polltic¡ mor¡etsrh y liscll en ls €conomí¡ cltísic¡ bableque rambiénimpticasedesempteo a causade ta reconocidadificuitad
y r€nÍlud para tograr a,ustesreductivosen los
salarios.podría eütarce
Así pues,es correctodecir que Ia rigidezde los salarioses la causa medianre.u¡aadecüadaporíticamonetariaque impidie_
del desempleo,y la única causareconocidae¡¡ el sistemaclásico.Bien ::,:.:^lT::1.T"nec€s¡dad
:.:":lql", de deflaciónto de una deflacióndemasiadoráoi_
sea q.uela necestdarlde reducción de salarios para mantener el emPleose oa). r sr se hubjeradesaÍollado d€sempleodebido que
a lus cuotasie
derivedel crecimientode la fuer¿ade trabajo o de cambiostecnológicos, saranos eran demas¡adoelevadas,un aumento €n ¡¿
siempre podria
o de algún ef€ctoinfolt¡nado en el camPomonetario(at€soramientoo remediarlo.No es pu€sde sorpr€nd€rque mr"hos ".onornistus
en ia ua_
contraccióndel dinero), o bien que su fuente original radiqueen un in_ ._'1']." empezarana ver la polirjca mone(ariacono
:]:::".. una impor_
creñento del ahorro o en una disminucióndel deseode invertir y que ran¡ey pode¡osah€rramientad€ interv€ncióngub€mam€ntal para el man-
1E0 Ma.rc..oaonia clásica
La teo.ía cl'n'ico det ahúrc, d¿ ta i^eüsiói , d¿ lo tdt d¿ i^tet¿s lE1

tenimiento tanto de precios razonablementeestablescomo del pleto el gastoprivado de inversión(y/o aumenbndoel ahorro pdvado) en el
empleo.Por o|ra par¡€, los primeroseconomistas clás¡cosno encontra- el gasto del gobierÍo. Los bonos
mismo grado en qu€ se incrementase
ban ningunautilidad en la política fiscal con relación a los problemas
del gobierno tendríar que competir con los bonos eñitidos por los in-
del desempleoo de Ia inflación, ni tampocosus aclualesdescendienlcs versionistas privados, en la captacióndel ahorro disponible,forzando
intelectuales. precios (con elevaciónde las tasasde interés) para
así la baja d€ los
El instrumentotípico de 1a política monetaria (en Estados Uni-
sofocarcualquieraumentoneto en Ia demanda,Sólo en caso de que el
dos) es 1¿ comp¡a o venta de valoresen el mercadoabie¡to d€l banco gastoincrementadod€l gobiernofuesefinanciadocon la creaciónde di-
central.Cuandoel banco centralcompra valoaesen el mercadoabierF,
nero nuevo (poniendoa trabajar la impresorade billetes o vendi€ndo
lo hace con el público no bancario,incremcntandoasl las rcncnc¡asdc
nuevosbo¡os de gobierno al banco ccntral o a la banca privada que
dinero en manosdel público, o bien los adquierea un banco,en cuyo
contasecon excedentes de reservas)existiríaun aumentoneto en la de-
caso se aumentanlas reservasdel banco en cuestión,permitiéndole(es y
mandade bienes de mano de qbra;peroello seriautilizarl¿s finanzas
de esperarse)ampliar suspréstamosa los negocioso compr¡r valorer .n (d€
del gobiemo manera torpe €r-nn€c¿sada)como t n instrumenrcde Ia
el mercadoabierlo,con lo que tarnbiénse lográ incrementarlás tenencias política ,nonehia, esto €s. como un medio para elevaf la ofefa de
de dincro en el público.Si el banco cenlral vendebonosen el mercado
direro. Se obtendríaexactamenteel mkmo €l€cto a travésd€ compras
abierlo, o bien los pone a la venta al público,absorbiendoalgunaparre
de bonos €n el mcrcado abierto por el banco cent¡al (el infrumento
de Ia oferta monetadadel mismo, o los vende a un banco comercial,
convencioñald€ la política monetaria). Por €ste medio, puede incre_
absorbierdoreservasde ést€,obligándoloo induciéndoloa reducir sus
mentarsela oferta d€ din€ro, pero sin ninguna desviaciónde recursos
demásp¡éstamose inversionesy, en cons€cuencia, Ias tenenciasde d¡ne-
del uso público privado.
ro del públ;co.Por estey oros medios,ün bancocentralpuedecontrolar,
Diio el economistaR. G. Hawtreyen 1925,comentandoacercade las
dentro de límilesbastanteesrechos,la cantidadde dineroen circulación.
propuestasde gastosen obras públicaspara aliviar el desempleoen In"
La polí¡ica fiscal, por lo contrario, implica alteracionesen el gasto
glaterra:
del gobiernopor bi€nesy servicios,o cambiosen el nivet de las tasasde
impuestos.A dife¡enciade Ia política monetaria,estasm€didasimplic¿n ''Aqui pues 6tá la vi.lud r.¡l de Ia propudta, si lás ¡uevs obms tpúblicasl so!
alteracioÍeser la propia demandadi-rectadel eobiernode bien€sy ser- financiad¡s mediá¡te ¡a creación d€ créd¡os bancariG, éstG prove€rár .npl.o
vicios (er¡ el renglón de desembolsos),o un impacto direcro sobre l¿ ad'conal.. Pcro enror.e\ el mnño (azon"mi.nlo d.muesüa que !ra crca.ión
dernandapivada de bienesy servicios(en el renglónde los impuestos). dc crédno quc ño s€a ¿comp¿ñadade ninsú¡ gaslo.n obras pública3 podría ser
La polltica monctariaopera rnenosdirectamente,afectandoen primer isu¡lm€¡¡. .ficaz cn el sum¡nis¡¡od. empleo, Ld obras pública son rólo €l fra8.
m.nro ile un ritual, conv.¡ient. para la sc¡t. quc dsea decif qu. 4tá h¿ciendo
término sólo a la ofela y d€mandanelas de préstamoso valores.No also, p.ro irrclcvanr. cn cualqui.r ot.o aspeclo,Btimul¿r una €xp¿nsió¡ d.l c.édilo
obstante,a pesarde su acciónmás direct¡, los economist¿s clásicoscon- res{lr¡ se¡er¡ln.nl€ d.úsiádo fác¡l. valcG. para lal objeto d€ lá coo$ücción de
"
siderabanque Ia políticafiscal no tenía cabidaer el arsenalde medidas c6l(M obras Dúblics .s coóo ince¡diar lá csa para asa¡ el Grdo 13
esiabilizadoras, salvo que pudiera tal vez, incidentalo indir€ctamente,
servir como instruDentode Ia política monet¡ria. Uno de los m¿)orercambiosefecluados por el modernopensamiento
Para ilustrar el caso,supongamos que bubiesedesempleocomo resul- macroeconómico es la considerabl€alteraciónde las fuDcionesco¡cedidas
tado de una incr€m€rtadafuerza laboral y una rigidez €n los salarios anteriormentea la política mon€la¡iay fiscal. Hoy en día, se reconocen
que impidiesela apropiadad€clinacrónde los precios. Podrian existir los efectosmonetarios.y aún se sigueconsiderandoimportantela política
proPuestas de un auñerto en el gastoguber¡¡amental para c¡ear trabajos monetaria.igral o mayor énfasisse concedea las medidasfiscalesen el
para los d€sempleados, Los economistas clásicosargumer¡taban que ello logo de la eshbilización€conómica(o, si se empleade forma inadecua_
seríafútil o redundante,Si estenuevogastofuesefinanciadocon úayores da, como factor de inestabilid¿d).Ello ocurre aun en el casode que Ias
irnpuestos,€l gasto privado de los causantesse reduciría en ¡a misma medidasfiscalesse utilicen en una forma que no produzcaefecto,directo
proporciónen que se elevaseel gasto gub€rnamental(se suponía). S¡ o ¡ndirecto,en la canddadde diDero.
fuesefinanciadocon la venta de bonos al público,se afirmabaque ello
únicamenteocasionaríael alza en las tasasde interés.mensuandoasí 'r 'Pubri. E1p€nditur€úd lh. D.d.nd fo. L^bñ". Econoñica.5 (ma.@ 1925),
182 Macto¿.onoñta clúno La tcotía .Lisi.a del aho o, de la ¡nve^¡óñ
, de ta te d. ¡nte¿, 1E3
Limilsclonec de¡ üálisis c¡Ásico p€culiaridad€s "institucionaleJ'
de las economiasf€ales,que a vecesse
des{ribencomo imponiendoobsráculos..artificiale} a Ia ,lena comoe_
No cabeduda de que el modetoclásicocapturarazonablem€¡te bien tenciay a los preciostibremenre flexibler,puedenserde heiho.en c;eiro .
variosaspectosgen€rales sentrdo,una respu€sta "natüral"
del mecanismomacroeconómico de las actual€s al cambio,a la incetidumbre,a Ia infor_
economíasy ofrecealgunasrecetasrelevant€spara las polílicaspúblic¡s. macjón imp€rf€ctao a los cosrosde la movilidad. La existenciamisma
Por olm parte,es fácil dar Dumerosos ejemplosde pronosricaciones, par- d€ los gobier¡os,asi como algüflosaspectoscas¡ ¡revjtabl€sde su fun-
tie¡do del modelo,que son imperfectas;po¡ ejemplo,que el desempleo cronamiento,invalidan también ci€rtos resultadosde la teoría clásica.
es, cuando mucho, un fenómenotemporal de ajust€ de un equilibrio a Necesitamos una teoría macro€conómica que comprendatodos estosele-
otro. O que la política fiscat {digamos.el gasto defic¡rariod; liempor mentosdel "mundo real".
cleSuear¡) no tier¡eefectosobreel enpleo o sobreel nivel d€ Drecios.a Las modilicaciones d€ la macroeconomía ctásicaqr¡es€ requierenpara
no s€r que incidenratmenr€ attereM. Es evidenreque un defensorde la que suslimitacionesseantomadasen cuentaexigenmuchosrefinamientos
macroeconomia clásicapodrá arSumenlarque inctusoIas Uamadasfa as y alte¡acionesde los elemeflró:y r€lacionesya esp€cíficamente conteni_
de pro¡osticacióndel shtema clásico son del todo comDariblescon el dos en el modeloclásicopreseniadocon anterioridad.De hecho.reouie-
mismo en el sen¡idode que deben reflej¿r Ia inexisrenciade salarios, ren mas que €ro Una vez que hagamoscaso omiso de atsunosde los
precrosy/o tssssde inrerésapropiadamente flexibles.Además.las Dredic_ supuesror que dieronat modetosur singutares propieddde; clásicar,¡e
c¡onesdel sisremaclásicose cumptiriansi sólo se eliminasentos numero_ welven imporranres\roa seried€ relacionespor completonuevasy dife_
sosobstáculos"afificiales" que estorbaüla libre comp€rencia. como son rentes,para la comprensiónd€l funcionam¡entode las €conomíasdel
los sindicalos.la legis¡ación de Ios salariosmínimos,e'l monooolioindus_ mundo r€al. Un claro ej€rnploIo constiruy€la,,fu¡ción de consumo,,.
¡rial. €lc. Sin embargo.el hecho es que el mundo en que vi"imos esrá Vientr¿sconcluyamor que ta produccion y €t ingresoeslánsiemDre
plagadode talesobstáculos"artificialeJ', muchosde los cual€srepresen_ -v r
necesariamenre a nivelesde plenoemp¡eo.sed de escasoinrerés no
tan característtcas muy p€rsis(enrerde las economíasrcale. r i¡sunos tendránrngunarmporlancia pracricasaberqué garos ae consumáry
de ellos se consideranque realizanimporlanresfuncion€ssoc;ui.. ó, "n d€ ahorro) habian erado a niletes de produccióne ingreso inferiorei
¡odo caso,qü€ gozande poderosoapoyopotítico). para bien o para mat, a¡ d€ pleno empleo.Pero una \e? qu€ se exctuyeta inevirabit¡daddel
la mayoríade elloscontinuaránexistiendoy podemosargiijr que necesira- pleno €mpleo,la relaciófldel gastocon el ingresod€l consum¡dordeb€
mos una teorla aconómicaque describacoD mayorprechióncómo operan convertirse,y se co¡vierte, en una pieza fundame[hl d€ la construcción
las economiasrealesde nuesrrosdías ) que aconsejelas disrinrasfórmas de la t€o.ia macroeconómica_
en que puedenevi¡arseo mitiga¡selas desafo¡tunadas consecuencjas que Una forma de d€scribnlas numerosasmodific¡cion€sv amDliaciones
a menudoresültan,cu¿lquieraque seala causa, det modelocl;\ico. que se requreren para hác€rloúril, consis¡e en decir
Pero las fallas de la teoría clásicapuede¡ ser de hechoconsider¿bte- el mod€loclásicop€rmanec€básicamente cor¡ecto en su descripción
_-que
men¿emás seriasque su hipór€sisde que nir¡gjn obstáculo..aftificiat,, del sistemamacroeconómico en pleno equitiüio (a corto pta.or,\. pero
interfiereen Ia pleña flexibilidad de todos los precios,salariosy tasas
de int€rés,pues'.csposible que sucedaque ex¡st¿notros aspectosmly r¡ sr úrda áquí ¡a cond¡crón ? co o pt¿@. p¡ra
r.co¡d¡rnq .t hecho dc que,
¡mportantesy por completoinevitablese¡ loda econonía reat oue imDi. . n l ¿ n t o . l . q u i l i b ' i o \ i s n i f r q u cq u . A - I > O t t n o h a y n a d a € r I ¡ d p . c i f i c . .
dán el cumplimicnto de los resuhados <'ón d€r ñodeto qu. ¡mpidá aro), eu,¡irá a<uñutación dct c¡pir¡r. ori¡in¿ndo.
clásicos,aun con la absoluraau_
senciade ref¡enamie¡tos,,artificiales"a la competencia y a la flexibjlidad quez¿_
daviacio.6 .n ¡as flrcio¡.s dc produeión . i;cr.nenr;
d€ 16 consuñidor.s, cuy¡s coN€cuenciascs csi scsuro qu. alte.¡.á¡.t futuro
de ri-
de¡recios. Estosaspectospüedense¡ inherentesa tan imponantescarac_ e q u . l . b r i oé , ¿ ' r o / / ¿ z ¿ d . t s ¡ ¡ € n a . S r n . m b a r s o .
,¿ que dilha ácumutacidn e(
terísticasde las economíasreal€scomo el continuo cambio en la tec- Inr€nrlKdte.a ti¿v$ d. rua¡qui.r.sp5cro de tr.mpo moderád,ncnr€ corro. podeño\
. r n o r ¿ ¡r u c . r e c r o \ y . f e ¡ u a r n u c r r o ¿ n ¿ l , s ¡c n b a \ . a t v r p u . n o d e q u c
nología,en los gustosde los consumidores, en la ofeta de manod€ obra, ex,sre¡resla fu¡cior.s dc producciór r ¡iqucz¿ y quc no suf.cn ca;bios. Esto úo
re d¡n por
etc.; la incertidumbre;Ia imperfectainformación(y los cosrosde obtene. nos rmprd. qc. coño !n .fec¡o h.m6 hecho. .oñpar.mos to, cquitibrios
a corro
informaciónmenosimperf€cta);los cosrosy limiracionesde la libre mo- pú@ .oñ'¡rrando pfriodo. má¡ p¡otongado.. a (rav¿s dc t6 cu.l6
ts fu¡.ion*
oe pr@uccrony 'rquc¿a e\p€rimentd nodri¡cacioncscono resutlado¡.nr,€ orras
vilidad de los factoresproducrivos;o el becho de que la genreaprenda .a d. qu. ,,1= / > 0. Sin .mb¡,so. sc ha rrábdo como .\osenos
co-
y recuercle y, por lo tanto, desarrolleexpectativ¿s, .sro5 cam.
Incluso muchasde las en pcnodc nás larsos cuando. at menor .n pa .. ,on .ndoSenos
184 Macrc.conoñia cltuica L4 tcotio dáska d.l ahoüo, de la ¡nv¿ttióh , ¿te to ,úa de ¡nt.rcs
1t5
que muchasde las verdade¡asparticularidades de las economí¿sdel mun- de la p¡opia polírica mon.tai.)l ¿CDálcscree qu. son los puntos débil€s dc.sla
doreal (taD¡olas "atificiales" como las "inho.entes")acrúanDaravolver
demasiadolentos los ajustesque Ilevanat cooplero equitibri;. Ne€esira- 5. En ¿l 'oodelo clásico", un aüo.rto e. la ofcna (por.¡ci¡¡) de diú€.o crc&
mos pues una mac.oeconomíade "desequilibrio"o de .'equilibrio par-
¿) Utilic€ diac.ámas cü¡da<t6añ€¡¡. rilutadoc pda r.pr.s.¡l¡¡ cl m¿cro.quit!
cial". Es cierto que determi¡ado número de las modificacioneso am- brio clárico dcl cmp¡.o, produ(i6n, satario ¡€a¡. sata.¡o ñon.ra¡io, nivél de
pl;acionesd€l nodelo clásico,que más adelantecomentaremos, Dodrían pr.ci6, ahoÍo . invc6ión lolat.s y Ia raa <t. m¡.r6.
tal vezdescribirse.iSualmenre. comoel componamienro ten unas¡ruación ó) LBr€ €n fo.má tabula! Ia d¡r.cciór d.t.feto (irdic¿do por +, _, o 0)
de desequilibrio)de ur¡ simplemodeloclásico,o bien, como el comporta- sb.c cada ü!a dc l¡s ocho va.i¡bl.s añ1es €nuo.radas, producido po¡ lG s!
gr¡c¡¡.s cáñbios. ocúrri.¡do cartauno d. cllos s.parad6d.rt. (y rods lás d¿úás
m;ento (en equilibrio) de un sistemaampliadoo modificadoy, en conse-
condicio¡.s p€rmucci..do isuatcs):
cuencia,no clásico.Cor¡ todo, in¿roducimos estosnuevosetementossin l) un auoc¡to cr la oierra d. oa¡o de obr!
co¡cedei gran alencióna esta impofante pero un ta¡to €nigmáticadis- 2) un¿ duFlicación de la ol.rra norcla.iá
tinción,volvi€ndoal asuntosólo cuandohayansido debidamenre ubicados l) u¡¡ ocjora .n ¡a ¡.cnología\
en el modeloampliadola mayor partede los elementos. 4i Iá acumulacióndc capit¿¡

REFERENCIASSELECCIONADAS
PREGUNTAS DE REPASO
K- \Nicr*|, L.ctut¿s oi politicat E.oñoñt (t.adu@iótr dc L. Robbi¡s) (Rouf€dse
l. y Kc3ar Paul, ¡934), vol, II,.sp. páss. 159-206.
¿lnvalida a la Ley de Sáy Ia .x¡slenci¡ d.l attoro y de lá inversió.? ¿por
(I¡t.s.¡.ión, de w¡cks.¡!, dc la r€o¡ía cuanrn¡tiva con €l ahoro, la inv.ció¡
2. Explique breven.ntc p!¡ó con p.ecisiód cada uro de los sjsuienlesDa..s de y ¡a lasa d. i¡r..és).
W. L. Sñn¡, Mon.t¡ry Th€ories ot rhe Rate of Inrc.€sl: A Dy¡amic A¡atysk",
¿) la tda ralural de int..és y su dife¡ercia con Ia rasa de irtcr& cD el mcrcado R.v¡e|' ol Eco.onics aad sr¿,irrtr, ¡10 (f.brcro de 1956), 15"21.
ó) ahorro oblisado, a dif..€ncia d.l ahoro Dlan.¿do (Ei.úplo dc una r.o.ia dináñica dct i¡r€fés, ¡.lcni.ndo la tisa con la formuls.
.) ¡horo, €¡ oposic¡ó¡ a atesoramie¡ro
l. El nodc¡o clásico mac.cconóDico p.et€¡¡de deñosrrar qu. Ia ¿coroolá J. M. Kcyn.s, The Cen.ru¡ Theory ol Eñ?toyñ¿nt, tntercst, anrt Mo¡¿l (Harcoürr.
ti.¡d. siemp¡e ¿ datrlcne. !n eqüilibrio comtai¡bfe con et .ñpl.o comptero d. Braa, 1916), Caplulo l:r,
lodos los reaBos productivos. En p¡.ridlar: (IdrÚpretación y crfica de Keyrcs de la reori¡ ctásica trel inieré6).
¿) "Uoa r.ducción en la denárda de 16 consumidorcs,como rsul¡¿do dc ut
ñayo¡ dcsco dc ahor¿., no debe cre¡r ri¡g1n problcEa dc insuficiencia dc
deñanda.s¡ea¿d¡", D€rall€ claramentc po¡ qué, y cuÁts *¡ía¡ 16 efecrG
dc un nayor de*o de ahor¡¡r, sobrc el valo¡ d..quilibrio de c¡da pri¡cipal
vúiáb¡e ¡¡acr@coúómica.
á) "Un auñ.¡to en l¿ ofefta de úa¡o de obr¡ ro pu.de ens¡dd¡ar deempl@
P.rmandi¿'. Explique cuidadosancnl. por qué, y cüál s¡i¿.l .faro d. u¡a
of.ra increñeq¡Adadc maúo dc obra sob¡c cl va¡or de eqüilibrio d. cada varia-
bl. dacroeconómica.
.) "Un¡ .li.¡tinuciór d. la ofc¡ta ño¡c!¡ria ro producúá dls.opl.o . Erpliquc
con cldid¿d por qué, y cuál se.ía cl cfeto de tal disDi¡uciór de M sobre
el válor d€ equilib.io de cádá la¡iable m¡q@conódica.
d) Etr el c6o (c), supons¡nos que las cuoras del satario moner¡rio ruese¡
rísidas, ¿Cuál s$í¡ cnioncg cl efcclo d€ lal disminució. de lá of.ra úo¡ctaria
sob.c €l v¿lor d. equilibrió d. cad¡ va.iabl. ñac.oeco¡ómic.?
(Al co¡rcsiá. 16 pre8unt6 {a) a (d), sin dDda c¡coDrrará úril v¡te$€ <rcdiá.
g¡amd, cn cuyo caso aesrires. d. lilular¡os cuidadosdÉnre).
4, Mánifi€re ¿por qué un econooistá en lá r.adicióDctásicapudie¡¿ tst vc2 cr.€r
que ll pollica monet¿¡iaes una inpo.ta¡ie y poderGa hcüámicnla dc sr¡b¡tiación
y que, €n cambic, la poli i.! fi,.al cs Lrn medi. i1€ticaz (.xccDto cono inrrumento

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