1- Además de las características físicas, ¿qué otras señales nos permiten reconocer

la existencia de una disglosia?

➢ Defectos para articular fonemas
➢ No logran conseguir una correcta pronunciación
➢ Repeticiones de palabras
➢ Problemas cognitivos (bajo rendimiento en las escuelas)
➢ Dificultades en la lectoescritura
➢ Pueden mostrarse desinteresados en establecer una conversación (timidez)

2- ¿Crees tú que para rehabilitar la disglosia es necesario hacer un trabajo

interdisciplinar? Justifica tu respuesta
Si. El objetivo es mejorar la calidad de vida y la integración social del niño, por lo que
esto conlleva una intervención amplia que puedan abordar los problemas de lenguaje,
deficiencias que se asocian a este, cirugías en algunos casos, un abordaje psicológico,
entre otros.
3- ¿Cuáles orientaciones y recomendaciones le darías a la familia de un niño con
disglosia?
➢ El primer paso sin duda es acudir al especialista para que valore la dificultad
exacta que tiene el niño o la niña y que de este modo se pueda pensar un
tratamiento correcto.
➢ Continuar el trabajo en casa con las orientaciones del especialista
➢ Evitar conductas de sobreprotección o te rechazo
➢ Potenciar y estimular sus capacidades
➢ Reforzar sus logros
➢ Escuchar de forma activa
➢ Prestar atención, es recomendable establecer contacto visual durante la
conversación. El familiar debe atender a la conversación y no intentar hacer
varias cosas a la vez.
➢ En caso de no entender lo que dice, hacérselo saber. Manifestar interés en
comprender lo que le cuenta.
➢ Hablarle normal, no más despacio ni con frases simplificadas
➢ Darle más tiempo para expresarse y ser paciente: no anticiparse, no hablar por él
ni prolongar en exceso este tiempo.
4- ¿Cuáles sugerencias para aplicar en el ámbito escolar, les realizarías al maestro
del niño?
➢ Crear un ambiente afectivo y estimulador:
➢ La maestra debe tratar de no corregir al niño cuando habla mal, mucho menos
delante de los demás, sino que debe propiciar un momento y lugar apropiado
para la corrección.
➢ Si el niño preguntara sobre su problema, no le deberá ocultar el tipo de defecto
que tiene, pero cuidando de no despertar el sentimiento de inferioridad. Esto
requiere tacto y paciencia
➢ Cuando el niño habla se le debe escuchar con paciencia, sin hacer observaciones
sobre su forma de hablar, tratando más bien de comprender lo que quiere decir.
➢ Cuando el niño reacciona en forma crítica y catastrófica como consecuencia de
la burla de los compañeros sobre su defecto, la maestra deberá enfrentarlo
tomando medidas.
➢ En ausencia del niño, la maestra deberá hablar con sus compañeros de clase, con
el propósito de que comprendan el problema que tiene el niño. Aquí debe
enfatizar sobre la noción de que todos tenemos defectos e, incluso, hacer que
cada niño razone y exponga cuál es su defecto, comenzando por la maestra
misma y explicar que a nadie le gusta que alguien se burle de un defecto que uno
tiene y del cual no es culpable.
➢ La maestra deberá estar alerta para evitar que el niño utilice su defecto como
pretexto para no estudiar o no rendir suficientemente en la escuela.
➢ Comunicación y relación continua con las familias