Está en la página 1de 11

Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios.

Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

HOMOSOCIALIDAD MASCULINA COMO NÚCLEO DE


RESISTENCIA A LAS POSIBLES TRANSFORMACIONES DE
LA MASCULINIDAD HEGEMÓNICA ISSN 2422-619X

MAURO MORALES BENITEZ * , OMAR BUSTOS PALACIOS * Esta obra está bajo una licencia de
* Universidad Nacional de Córdoba Creative Commons Reconocimiento-
NoComercial 4.0 Internacional
mauroj_m@hotmail.com

Resumen. En este trabajo nos proponemos explorar los sentidos que jóvenes estudiantes de la UNC otorgan a los
espacios que se han dado en llamar Homosocialidad Masculina. La metodología utilizada fue investigación
cualitativa, utilizando como técnica la entrevista semiestructurada. Se entrevistaron veinte estudiantes de diez de
carreras feminizadas y diez de carreras masculinizadas. Se analizaron los datos bajo el método de comparación
constante de Glaser y Strauss utilizando el software Atlas ti. Se comparan las expresiones de varones de
“territorios femeninos” y “territorios masculinos”. Encontramos que son espacios en el que cada par se convierte
en “policía de género”, donde lo femenino es extranjero y sancionado dentro del grupo, en el que además
solamente los varones heterosexuales tienen membresía. Analizamos también la necesidad que expresan los
jóvenes por juntarse con sus pares manifestando cierto temor por perder esa “esencia varonil” que solo puede ser
renovada en este espacio.
Palabras Claves. Masculinidades – Varones – Género – Homosocialidad
Abstract. In this article we propose to explore the meanings that young male students of the National University of
Cordoba grant to the spaces that have been called male homosociality. For this purpose, we performed a
qualitative research, using semi-structured interviews as a technique. Twenty students from ten women's races and
ten men's races were interviewed. The data were analyzed under the Glaser and Strauss constant comparison
method using the Atlas ti software. The expressions of males from "female territories" and "male territories" are
compared. We find that they are spaces in which each pair becomes "gender police", where the feminine is foreign
and sanctioned within the group, in which only heterosexual men also have membership. We also analyze the need
expressed by students to join their peers, expressing some fear of losing that "manly essence" that can only be
renewed in this space.
Keywords. Masculinity – Men – Gender – Homosociality
Enviado.08-11-2018 | Aceptado. 27-12-2018

Homosocialidad masculina es el término usado crea interdependencia y solidaridad entre


para describir la preferencia de los varones por varones, elemento utilizado para mantener y
mantener vínculos sociales con personas de su reafirmar la dominación sobre las mujeres
mismo sexo, a la vez que implica una ausencia (Boffano, 2013). El concepto fue propuesto por
de deseo sexual1. De hecho, se caracteriza por Eve Kosofsky Sedgwick (1985) con analogía al
actividades que facilitan los vínculos afectivos término homosexual, pero a su vez para
entre varones que en nuestra cultura está distinguirlo de éste. La homosocialidad
sostenida por una fuerte homofobia, a su vez masculina refleja una tensión entre el deseo de
instaurar vínculos entre varones y la
1 Este artículo se desprende de un trabajo de permanencia del orden heterosexual como
investigación final de la carrera de Lic. en Psicología
de la UNC, dirigido por la Dra. Rodigou Nocetti Maite régimen político (Andrade, 2001).

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


21
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

En este trabajo nos proponemos explorar los adecuados a los estereotipos y roles de género
sentidos que jóvenes estudiantes de la UNC dominantes. Al respecto, se sostiene que existe
otorgan a los espacios que se han dado en un acuerdo en reconocer la concentración de las
llamar Homosocialidad Masculina. El mismo mujeres en aquellas carreras relacionadas con la
continúa el trabajo ya presentado en el número 1 docencia, las ciencias de la salud y las
de este volumen. humanidades; ámbitos que normalmente se
relacionaron de manera estereotipada a las
mujeres, a la vocación de servicios y al cuidado
Metodología
de los otros (Rodigou Nocetti, Blanes, Burijovich y
Domínguez, 2011). En relación a Argentina, De
El presente trabajo se abordó desde una
Filippo, Estebanéz y Kreimer (2000, citados en
metodología de investigación cualitativa. Como
Rodigou Nocetti et al., 2011) expresan que a
menciona Maxwell (1996), dicha metodología
partir de la década del 90’ se observa un cambio
permite la comprensión del significado de los
significativo en el perfil de las preferencias de las
sucesos, acciones y situaciones en las que están
carreras universitarias que varones y mujeres
involucrados los participantes del estudio en
eligen. Con ello, a las Ciencias Sociales, Filosofía
cuestión. Es decir, de qué manera los
y Letras, y Auxiliares de medicina se les sumaron
participantes le dan sentido a acontecimientos y
Psicología, Farmacia, Bioquímica y Odontología
comportamientos y cómo su comprensión
como carreras con alta participación de mujeres.
supone formas de hacer y prácticas sociales.
Aquellas carreras como Ciencias Naturales,
Muestra Derecho y Medicina, tradicionalmente
“masculinizadas”, se convierten en neutras;
En el presente estudio se trabajó con veinte mientras que las carreras de Ingeniería, Ciencias
jóvenes varones estudiantes de la Universidad Exactas, Tecnologías y las Ciencias
Nacional de Córdoba, pertenecientes a Agropecuarias siguen siendo “típicamente
diferentes unidades académicas. Cabe aclarar masculinas”.
que en este proyecto incluimos una dimensión
comparativa entre aquellos jóvenes varones En este punto retomamos algunos de los

estudiantes que cursan sus estudios en carreras supuestos que Rodigou Nocetti y otras (2011)

universitarias “masculinizadas”, y aquellos que exponen en torno a la persistencia de los

estudian carreras universitarias “feminizadas”. “territorios masculinos” y “territorios femeninos”.

Explicitamos que esta comparación surgió a En este sentido se consideró, por un lado, cierta

partir de considerar el fenómeno de predisposición de varones y mujeres para

“segregación horizontal”, que da cuenta del carreras que se “adecuan a su género”; y, por

proceso por el cual varones y mujeres se otro lado, se hizo referencia a los alientos o

concentran en determinados sectores y oficios desalientos que tanto varones como mujeres

que socialmente se consideran como más reciben del medio social y universitario para

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


22
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

desarrollar sus carreras en ciertas áreas de enfoques de las personas entrevistadas.


conocimiento. Además, adherimos al criterio Además, proporciona la posibilidad de clarificar y
estadístico expuesto por las autoras a la hora de realizar un seguimiento de las preguntas y
calificar a una carrera, considerando una respuestas dentro de un marco de interacción
relación 60% - 40% para definir si es una carrera más directo, y ofrece la posibilidad de una mejor
“masculinizada” (en el que caso de que la comprensión de los datos obtenidos.
población estudiantil de la carrera se constituya
por el 60% o más de varones), “feminizada”
Análisis de los datos

(donde el porcentaje de mujeres en la carrera


Para iniciar el proceso, primero llevamos a cabo
sería del 60% o más) o “paritaria” (en caso de
un análisis preliminar de las entrevistas de la
que los porcentajes entre varones y mujeres no
investigación. Durante la misma describimos los
representen estas diferencias).
contextos en los que se realizaron las entrevista,
Por lo anteriormente dicho, se buscó entrevistar quienes fueron los estudiantes que
a estudiantes pertenecientes a carreras entrevistamos, cómo llegamos a ellos, cómo fue
“típicamente femeninas” -Trabajo Social y el discurso que desplegaron a lo largo del
Psicología-; y, por otro lado, estudiantes de las trabajo, sobre qué temas se detuvieron
carreras “típicamente masculinas” -Ingeniería en particularmente para exponer sus posturas, qué
Computación y Agronomía-. Según los datos del frases nos llamaron la atención y cuáles fueron
Anuario Estadístico de la Universidad Nacional los devenires por los que transitó el dialogo
de Córdoba del año 2012, los porcentajes entablado. Vale tener en cuenta que los datos
estudiantiles correspondientes a las carreras recogidos en este análisis preliminar fueron de
seleccionadas de acuerdo al sexo son: 72,4% de trascendental importancia para las posteriores
varones y 27,6% de mujeres, para Ingeniería estepas del trabajo que nos convoca. A
Agronómica; 89% de varones y 11% de mujeres continuación, las entrevistas desgrabadas y
para Ingeniería en Computación, 11,5% de transcriptas fueron sometidas al análisis
varones y 88,5% de mujeres, para Lic. En Trabajo conocido como “Método de Comparación
Social; 21,3% de varones y 78,7% de mujeres, Constante” de Barney Glaser y Anselm Strauss.
para Lic. En Psicología.
En este sentido, y en lo que a nuestro trabajo
respecta, realizamos el análisis cualitativo
Técnicas
mencionado empleando el programa
En el presente trabajo optamos por la entrevista computacional ATLAS.ti como herramienta de
en profundidad como instrumento para el apoyo.
relevamiento de los datos de interés. Según
Valles (2007), el carácter abierto de la entrevista
en profundidad permite la obtención de una gran
riqueza informativa en las palabras y en los

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


23
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

Resultados (Guillermo, estudiante de Ing.


Agronómica)

Espacios de Homosocialidad Masculina El fútbol –“pasión de multitudes”– aparece como


deporte estrella en las lógicas varoniles,
como Reguladores del Género
organizando parte de la vida de los entrevistados
Esta dimensión da cuenta del funcionamiento de en función de este fenómeno, ya que ir a la
estos espacios en tanto (re) productores de las cancha a ver un partido, practicarlo o juntarse a
normas imperantes del género. A su vez, mirar por televisión a su equipo favorito van a
sostenemos que es un lugar propicio para acompañados por una serie de rituales que no
disputarlas, para lo cual buscaremos una mirada son de menor consideración.
crítica del fenómeno que promueva procesos de
La gran mayoría de los varones puede ligar parte
deconstrucción y transformación de las
de su experiencia personal a este deporte, ya
subjetividades masculinas en juego con el
sea como práctica en sí o como un fenómeno
objetivo de lograr mejores y mayores grados de
satélite, que si bien no forma parte de la
equidad de género.
cotidianeidad está ahí dando vueltas. Tal así que
Esta dimensión está compuesta por tres se genera una frontera entre aquellos que
categorías: participan y aquellos que no lo hacen, de este
deporte. Si bien todos los entrevistados lo
a) Tiempos, lugares y actividades compartidas; reconocen como una actividad típicamente
b) Vivencias de satisfacción e insatisfacción; masculina, algunos no gustan de este deporte.
c) “Policías” de género. No es de sorprendernos que sean los varones de
“territorios” femeninos en su mayoría, los que
Tiempos, lugares y actividades compartidas
señalaron este reparo. Sin embargo, tampoco
Esta es una categoría descriptiva que surge de todos los de “territorios” masculinos expresaron
buscar especificar los momentos en que los un fanatismo ciego, aunque la mayoría sea
entrevistados eligen juntarse, en qué sitios lo practicante de ese deporte.
hacen y que prácticas realizan conjuntamente.
Y, si hablás de futbol un tipo no
puede no opinar. Si no te gustan las
Así encontramos que el asado, el fútbol, el carreras y el futbol no son varón. No
alcohol y la “play” son objetos centrales en estos podés ser hombre si no hablas de
minas, de futbol, del bar, de juntarte
espacios, actividades que aparecen como “lo a chupar, esas cosas. (Carlos,
normal”. estudiante de Ing. Agronómica)

Un estudiante de Psicología nombra la


He jugado al futbol, voy al bar, estoy
en grupos de whatsapp, y no más experiencia de “ir de putas”. Cabe mencionar
que eso. Ah, también nos juntamos que es el único en toda la investigación que lo
al asado, al jugar a la play; lo normal.
señala.

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


24
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

Y, el futbol es muy masculino. Los No, “me la corto”. Son re necesarios.


deportes en general, donde haya Por lo menos una juntada cada dos
destreza física. Ahí se excluye a las semanas, se necesita. Son muy
mujeres. También están los espacios buenos momentos. Creo que son
de música, cuando armabas una buenos momentos siempre para
banda era de varones solamente; en cambiar la rutina. (Pedro, estudiante
las salidas, se da eso; los asados de Ing. Agronómica)
con los amigos también es uno de
esos espacios. Además ir a pescar; Un entrevistado de Psicología nos dijo:
no conozco mujer que se vaya a
pescar con amigas jaja. Ah, ir de Y, dicen que los amigos son la
putas también. (Daniel, estudiante familia que uno elige, y acá es así.
de Lic. En Psicología) Con los amigos que somos, hicimos
un grupo re lindo. Estamos re
En cuanto a las frecuencias en que se cómodos, nos sentimos bien, todos.
encuentran estos grupos, se presenta cierta (Leonardo, estudiante de Lic. En
Psicología)
variabilidad entre juntarse dos o tres veces por
semana hasta una vez al mes, con lo que Encontramos que sólo un varón de los

podríamos decir que forma parte de cierta rutina “territorios” masculinos (Ing. en Computación)

compartida. disidente sexual, expresó cierto malestar,


incomodidad e insatisfacción en esos espacios.
Tratamos de jugar al futbol al menos
una vez por semana, una vez cada En realidad ninguno se junta a jugar
quince días comemos un asado y al futbol, pero sí a ver algún partido.
salimos. (Guillermo, estudiante de Además ellos ya lo saben y no tengo
Ing. Agronómica) ningún problema en transparentar
eso [que no le gusta el fútbol], y
Vivencias de satisfacción e insatisfacción tengo otro amigo que está en la
misma, pero si, es como que yo creo
que como varón uno se siente por
En satisfacción/insatisfacción en los EHM
ahí que no le gusta el futbol, excluido
encontramos dieciséis citas, ocho de cada o se siente como raro, porque es una
cuestión de hablar con otra persona,
“territorio”. No obstante dos colaboradores de
esa es tu respuesta y te sentís raro.
Lic. En trabajo social y uno de Ing. En (Sergio, estudiante de Ing. En
computación han expresado su vivencia de Computación)

malestar en estos espacios, las trece En cambio, dos entrevistados de Trabajo social
expresiones restantes los sostienen como expresaron sus vivencias de malestar en estos
primordiales y con alto grado de satisfacción. espacios debido a la obligatoriedad de hablar de
ciertos temas, o de mostrarse estéticamente
Los varones de “territorios” masculinos
acorde a la norma, fenómenos que son
reivindican esos momentos como necesarios y lo
“policiados” por los pares.
viven con una total satisfacción y plenitud, con
mucha carga emocional y afectiva positiva. Nunca me ha pasado creo, al menos
no que me recuerde ahora, si se
Expresan la “necesidad” de romper con la rutina, puede usar como sinónimo de no ser
de distenderse. varón en estos casos, si sos un puto,
creo que no te van a decir no sos un

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


25
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

varón pero te van a decir ah sos un “adecuados” para personas heterosexuales. Es


puto, si lo sufrí al principio cuando
así que dicho requerimiento de significados
era chico con el pelo largo ahí si lo
sufrí un poco son todas las miradas organiza y disciplina los cuerpos constituyendo la
de los pares. (Franco, estudiante de
heteronormatividad (Butler, 1993).
Lic. En Trabajo Social)

Por otra parte, en la subcategoría Amigos y Desde los temas de conversación y la forma de
compañeros de salidas encontramos una hablar hasta la vestimenta, pasando por los
selectividad en los vínculos que establecen, es gustos deportivos y sexuales, todos son
decir, la distinción que realizan en cuanto a la fenómenos que estos grupos se encargan de
calidad de éstos dentro del mismo grupo, vigilar, moderar, regular para que nada
especialmente en lo que hace a la confianza. “femenino” sea filtrado en el espacio, puesto que
También expresan que hay vínculos dependiendo se constituye por exclusión de las mujeres. Y en
lo que se hace o se comparte en común: hay caso de que algo se llegara a colar, los miembros
amigos para salir de noche, otros para hablar de del grupo se encargarán de hacérselo saber
lo que a uno le pasa, etc. estigmatizando al portador de lo extraño,
mediante mecanismos como el chiste, en el que
Quizás el vínculo no sea con todos
igual. Puede que haya más afinidad se ridiculiza al otro. Así pues, la ruptura
entre algunos, puede ser porque han heteronormativa no pasa desapercibida y menos
compartido muchas cosas, o porque
alguno entró más tarde al grupo. aún sin ser castigada en los grupos
Creo que hay vínculos más fuertes y homosociales.
otros más superficiales. (Ricardo,
estudiante de Ing. Agronómica)
El chiste regulador heteronormativo es el nombre
“Policías” de género que decidimos dar a las prácticas en tanto
“bromas” que los pares varones realizan hacia
Los entrevistados se extendieron en gran medida aquellos que no cumplen las expectativas del
sobre los espacios de homosocialidad género. El EHM es un “territorio” que se marca
masculina. Esta extensión y la forma en que con el chiste cuando alguien se aleja de la
describieron su funcionamiento, nos hicieron masculinidad hegemónica. El chiste es
construir esta categoría, ya que todo el espacio entendido por ellos paradójicamente, es decir,
homosocial masculino aparecía como un espacio como una forma de coquetear con la renuncia a
de policiamiento de sus cuerpos generizados.
la hegemonía, a la vez que reafirmándola.

Judith Buttler (1993) nos introduce el concepto Lo agarran para la charla, para la
de performatividad, con el que quiere señalar joda. Pero no me excluirían del
grupo, me agarrarían para la joda,
que para actuar como varones (o como mujeres) como dando a entender mira este no
dentro de nuestra cultura heteropatriarcal se sé, es dudoso. (Esteban, estudiante
de Ing. En Computación)
precisa recurrir al repertorio disponible de
significados que son decodificados como Los gastan a pleno jaja. Lo mismo
que si a un amigo le gusta diseñar

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


26
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

ropa. Si tenés algo femenino seguro tal. El adjetivo “traidor” es colocado a quien
que te lo van a reprimir; te gastan.
rompa con ellos. También podemos pensar que a
(Leonardo, estudiante de Lic. En
Psicología) mayor adherencia a los códigos mayor

Son espacios donde los cuerpos y la vestimenta membrecía se otorga dentro del grupo.

son ordenados, policiados por los pares.


Los códigos suelen ser bastante
valorados entre varones. De más
Y siempre está la charla, siempre te chicos capaz que no tanto, pero de
charlan por una estupidez. Como más grande sí. Para mí es muy
uno se sienta por ejemplo, como importante, todos tienen que tener,
tiene el pie, como agarrás el vaso, todos los hombres y más en grupo
etc. Son pavadas que uno las charla de pertenencia de amigos. Es algo
porque las ve. No es que tiene que fundamental. (Damián, estudiante
ser así pero teniendo confianza uno de Lic. En Psicología)
charla a los demás; le decís:
“culiado, como te vas a sentar así” Dentro de estos códigos, la mujer aparece como
[…] Y, estupideces así siempre las
un “territorio” indisputable, un objeto marcado
charlamos. Creo que tiene que ser
así. Le decís: “no podes poner las por los miembros del grupo.
piernas así. (Marcelo, estudiante de
Ing. Agronómica) Con el tema de las mujeres es donde
más se sienten los códigos. Si
Como mencionábamos al principio, aquellos
alguien está con una chica, vos no
varones “infractores” son los que dentro de este podés ir a cegársela a un amigo.
También con la ex de un amigo, no
espacio rompen con las expectativas de la
podés ir a cegársela. (Damián,
masculinidad hegemónica, y la falta puede ser estudiante de Lic. en Psicología)
sancionada hasta con la expulsión total del Otro rasgo es lo que hemos decidido llamar
grupo. Consultados sobre las consecuencias de “Exclusión de mujeres”, y que expresa las
la ruptura heteronormativa dentro de su grupo características que este escenario grupal indica
homosocial, nos cuentan: como propio de un varón. Consultados sobre que
significaría esto, nuestros colaboradores
Reaccionaría, pero mal, yo creo que,
en realidad, empezaría por ponerle responden:
trabas, de ese ambiente pequeño,
de hablar mal, de empezar a decir Primero que no llevara ninguna mina
esto aquello, de tratarla de boluda a me parece o sea no te van a dejar de
esa persona. (Leandro, estudiante considerar un varón, pero no sé si te
de Lic. En Trabajo Social) van a considerar parte del grupo
después de eso, todos sabemos que
Por otro lado, se piensa que estos grupos de
ese va a ser un encuentro todo de
varones deben cumplir con ciertas normas hombres no va a llevar una chica,
pero también tiene mucho que ver el
heterosexuales, como lo señalábamos arriba,
contexto, ¿no?, de dónde estás.
pero a la vez se espera que los miembros del (Franco, estudiante de Lic. En
Trabajo Social)
grupo adhieran a ciertos “códigos”. Estos
conformarían una condición ineludible, necesaria Las “minas” como un objeto sexual único y
y esencial para que el grupo se constituya como esencial son “propiedades” de los varones. El

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


27
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

patriarcado se basa en relaciones que cuántos goles es capaz de hacer en un partido


establecen los varones entre sí, en el que se de fútbol, y que ventajas trae el último auto
erige una interdependencia que les permite lanzado al mercado.
controlar a las mujeres. Dentro de esta macro-
estructura, se impone con fuerza la
Conclusiones
heterosexualidad rechazando la
homosexualidad. A su vez estas sexualidades se
Se hizo evidente la separación de los “territorios”
construyen de manera compleja entrelazadas
masculinos y femeninos al indagar sobre los
con la raza, la clase y la institución familiar
espacios que habitan los varones. Los
(Martínez, 2006).
entrevistados de “territorios” masculinos

Y bueno, esto de los deportes, del sostuvieron que es hasta necesaria esta
futbol, estar con minas, estar con separación por género, ya que consolidaría una
muchas minas o hablar de minas, y
no es de varón escuchar especie de “esencia” que tenemos al nacer.
determinada música tener ciertas Señalan que las diferencias se deben mantener,
actitudes que se yo. (Sergio,
estudiante de Ing. En Computación) como así también la realización de actividades
que suponen “naturales” entre uno y otro sexo.
Todo EHM se puede definir, como decíamos al
Un destino ineludible. Aquellos que
comienzo, como un escenario en que por
problematizaron esta separación fueron los
naturaleza se encuentra conformado por una
varones de “territorios” femeninos, discutiendo
exclusividad varonil, todo lo relativo a las
el binarismo sexual y los procesos de
mujeres o la femineidad es expulsado del grupo,
socialización genérica que limitan subjetividades,
ellas están prohibidas. La presencia de estos
expresando que, tarde o temprano, las personas
fenómenos “extranjeros” es castigada, llegando
de uno u otro sexo acaban por juntarse.
inclusive a la expulsión total del integrante
Poniendo en cuestión, de esta manera, el cerco
“dudoso”. Se podría pensar en que esto se debe
socializador que la institución familiar, aunque
a un miedo de una pérdida de cierta esencia que
no la única, se encarga de instalar.
debe renovarse frecuentemente, como una
licencia otorgada por los pares miembros del Los espacios de homosocialidad son generados y
espacio. habitados mayormente por los varones de
“territorios” masculinos. Las actividades que
Para ser parte de un grupo homosocial, el varón
sobresalen son el asado, el juego de la play, “la
debe entrar con una credencial de
previa” en salidas con el consumo de alcohol, y
heterosexualidad, sólo así puede ser miembro
el fútbol.
efectivo. Y nos referimos a la heterosexualidad
hegemónica, aquella que adhiere a todos los Encontramos que estos lugares sociales
mandatos del género masculino. Es decir, debe aparecen como núcleos de resistencia a las
comentar sobre sus conquistas de mujeres, posibles transformaciones de los mandatos de la

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


28
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

masculinidad hegemónica. De ahí que Los varones del grupo homosocial, en la


mayormente quienes más a gusto se sintieron al demarcación de las fronteras sobre las que está
interior de estos, hayan expuestos significados permitido moverse, sancionan a la
esencialistas sobre el “ser/hacerse varón”; y son homosexualidad como el límite en la definición
mayormente aquellos que en su elección de de los varones. De ahí, quienes más representan
carrera también “adhieren” a la masculinidad los significados que circulan en los espacios de
referente. Por el contrario, son los estudiantes de homosocialidad, expusieron actitudes
territorios “femeninos”, aunque no todos, y un homofóbicas, con diversos grados de odio y
sólo varón de “territorio” masculino, disidente violencia.
sexual, quienes expresaron ciertas vivencias de
Como contracara a lo anterior, encontramos que
malestar en estos espacios.
quienes menos adhieren o disfrutan estos
Por otro lado, nos llamó curiosamente la espacios de homosocialidad son quienes, en
atención la selectividad que los varones hacen líneas generales, sostienen maneras alternativas
en sus vínculos con otros varones en estos de vivir sus masculinidades. Los entrevistados a
espacios. La expresión de ciertas emociones, los que referimos sostienen la importancia de
como la tristeza y el afecto, están prohibidas reconocer múltiples maneras de vivir la
para ellos. No obstante, manifiestan la expresión masculinidad y la necesidad de no jerarquizar
de estas al hacerlo con “ciertos” varones entre ellas. Señalaron que no podemos hablar de
elegidos en función de sus expectativas una forma de ser varón, en tanto se trata de una
personales. Señalan saber quiénes están “para construcción cultural que inevitablemente
la joda” y quienes son “amigos de verdad”. expone diferencias. Al respecto, ser/hacerse
varón es relativo al contexto social del que se
Quienes habitan estos espacios de
hable; entendiendo que no son los mismos
homosocialidad masculina deben hacerlo con
significados en un espacio universitario como
una credencial de heterosexualidad, renovable y
Trabajo Social, que en un pueblo. Entendemos
emitida sólo por el grupo de pertenencia. La
que la constante problematización de las
función de estos espacios como reguladores de
construcciones genéricas existente en la carrera
género puede evidenciarse en las sanciones
de Trabajo Social, explica los cuestionamientos
aplicadas sobre aquellos varones que no
que se evidencian en tal unidad académica. Para
cumplen con las expectativas que el grupo
éstos, ser varón implica reconocerse como tales,
conforma. Es una especie de “castigo” que
al margen de las pautas socio-culturales que se
consistiría en la expulsión o alejamiento del
reproducen.
“infractor”. El grupo actúa policiando los cuerpos,
vestimenta, actitudes, emociones, prácticas y
deseos de sus miembros.

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


29
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

Referencias Kimmel, M. (1992). La producción teórica sobre la


Masculinidad: nuevos aportes, en Astelarra J.
Birgin H. de Barbieri T. Gomáriz E. Kimmel M.
Amuchástegui, Ana (2006). ¿Masculinidad(es)?: los Lagarde M. Valdéz A Fin de Siglo. Género y
riesgos de una categoría en construcción, en Cambio Civilizatorio. (pp. 129-138). Santiago
Gloria Careaga y Salvador Cruz (coords.), de Chile. Ed. ISIS.
Debates sobre masculinidades. Poder, Maffía, D. (2005). El contrato moral. Carrió E. y Maffía
desarrollo, políticas públicas y ciudadanía, D. (comps), Búsquedas de sentido para una
México: PUEG/UNAM. nueva política, Instituto Hannah Arendt.
Andrade, X. (2001). Homosocialidad, disciplina y Buenos Aires. Paidós.
venganza. En Andrade X. y Herrera G. (Ed.) Manzelli, H. (2006). Sobre los significados de ser
Masculinidades en Ecuador, (pp. 115-138) Hombre en varones jóvenes en el área
Quito, Ecuador. Flacso. metropolitana de Buenos Aires. Estudios
Badinter, E. (1993). XY La identidad Masculina. feministas, 14, 219-242.
Buenos Aires. Grupo editorial Norma. Martín, S. (2007). Los estudios de la masculinidad. En
Boffano, A. (2013). De Hombre a hombre: La jerga en Meri Torras (ed.), Cuerpo e identidad.
rima cockney. Discurso en entornos sociales. Barcelona: Ediciones. UAB.
Universitat Pompeu Fabra. Barcelona. Maxwel, J. (1996). Própositos: ¿Por qué hace este
Bonino Méndez, L. (1996). La Identidad Masculina a estudio?. Qualitative Research Design an
debate, teorías y prácticas sobre el malestar de interactive Approach. pp. 14-24
los varones. Olavarría, J. Parrini, R. (2000). Masculinidad/es,
http://www.luisbonino.com/PUBLI01.html. Identidades, Sexualidades y Familia. I
Burin, M. (2004). “Construcción de la subjetividad Encuentro de estudios de Masculinidades. Red
masculina”. En Burin M. Meler I. (Eds) Varones. de Masculinidades. Santiago de Chile
Género y Subjetividad Masculina. (pp. 123- Olavarría J., Valdéz, T. (1997). “Masculinidad/es.
148) Buenos Aires. Ed Paidós. Poder y Crisis”. Ediciones de las Mujeres N°24.
Butler, J. (2006). El género en disputa. El feminismo y Santiago de Chile. Ed ISIS.
la Subversión de la identidad. Buenos Aires. Paulín, H. Arce, M. López, J. Mandrile, V. Martinengo, V
Ed. Paidós. Rebollo, S. Tomasini, M. (2012). Psicología
Carabaña J., Lamo de Espinosa E. (1978). “La Teoría Social Crítica. En Paulín H (comp.) Teorías e
Social del Interaccionismo Simbólico”. Revista Intervención en Psicología Social (pp. 47-36).
Española de Investigaciones Sociológicas N°1. Córdoba. Ed. UNC.
http://dialnet.unirioja.es/buscar/documentos? Quiróz, F., Pineda Duque, J. (2009). Subjetividad,
querysDismax.DOCUMENTAL_TODO=la+te identidad y Violencia: Masculinidades
oria+social+del+interaccionismo+simbolico. encrucijadas. Universitas Humanística, 67, 81-
Ciriza, A. (2007). “Apuntes para una Crítica Feminista 103.
de los Atolladeros del Género”. Estudios de Rodigou Nocetti, M., Puché, I., Gutiérrez, M., Miño, N.,
Filosofía Práctica e Histórica de las Ideas. Del Río, P., Rambeaud, R., Sarache Laje, P.
Revista anual de la Unidad de Historiografía e (2012). Construccionismo en Psicología Social.
Historia de las Ideas. INCIHUSA, 9, 23-41. En Paulín H. (comp.) Teorías e Intervención en
Mendoza, Argentina. Psicología Social. (pp. 25-36). Córdoba. Ed.
Connel, R. W. (1997). La organización social de la UNC.
masculinidad. En. Olavarría, J., Valdés, T. (Eds). Rodigou Nocetti, M., Blanes, P., Burijovich, J.,
Masculinidad/es. Poder y crisis (pp 31-48). Domínguez, A. (2011). Trabajar en la
Ediciones de las Mujeres N°24. Santiago de Universidad (Des) Igualdades de Género por
Chile. Ed ISIS. Transformar. Córdoba, Argentina. Ed.
Gilmore, David D. (1994). Hacerse hombre: Universidad Nacional de Córdoba.
concepciones culturales de la masculinidad. Vallés, M.S. (2007): Técnicas cualitativas de
Barcelona, Paidós. Investigación Social: reflexión metodológica y
Guash Andreu, O. (2008). Los varones en perspectiva práctica profesional. Madrid. Ed. Síntesis.
de género. Teorías y experiencias de Vásquez del Águila, E. (2013). Hacerse hombre:
discriminación”. México. Asparkta, 19, 29-38. algunas reflexiones desde las masculinidades.
Hernández, O. (2008). Debates y Aportes en los Política y Sociedad, 50, 817-835.
estudios sobre Masculinidades en México. Viveros Vigoya, M. (2007). Teorías Feministas y
Relaciones, 116, 231-256. Estudios sobre Varones y Masculinidades.
Huberman, H. & Tufró, L. (2012). Masculinidades Dilemas y desafíos recientes. La manzana de
Plurales: Reflexionar en clave de géneros. la discordia, 4, 21-32.
Buenos Aires: Trama. West, C. Zimmerman, D. (1999). “Haciendo Género”
en Navarro, M. y Stimpson, C. (comp.)

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


30
Mauro Morales Benítez y Omar Bustos Palacios. Homosocialidad masculina
como núcleo de resistencia a las posibles transformaciones de la masculinidad hegemónica

Sexualidad, género y roles sexuales. Bs. As.:


Fondo De Cultura económica.

{PSOCIAL} | vol. 4 | nro. 2 | 2018 | pp. 21-31


31

También podría gustarte