UNIVERSIDAD FERMIN TORO

VICE-RECTORADO ACADÉMICO

ESCUELA DE CIENCIAS POLÍTICAS

CONSEJO MUNICIPAL

Autores: Ronald Goncalves

María José Urribarri

María Eugenia Castillo

Docente: Greymar Rea

Nombre de la asignatura: Gerencia Municipal

CABUDARE, MARZO DE 2020

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INTRODUCCIÓN

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Funcionamiento del organismo

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¿Cómo se compara lo establecido en la ley con la realidad?

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 Recomendaciones para mejorar la situación actual del organismo

En principio, como se ha dejado entrever a lo largo del informe, es

necesario señalar que la situación actual del organismo, en gran medida, nace
más del contexto macro que presenta la nación como conjunto que de una
coyuntura meramente intrínseca. La actividad prolongada de los actuales regentes
del Estado ha degenerado en municipios con inexistentes capacidades,
especialmente dada la concentración del poder en el Ejecutivo, y el caso del
organismo que funge como objeto de estudio para esta investigación forma parte
de tal categoría.

No obstante, tras aclarar dicha realidad, así mismo podemos afirmar que,
desde la entidad, es posible llevar a cabalidad una serie de reformas y
modificaciones que pueden auxiliar en la búsqueda de alternativas para desarrollar
efectivamente sus potestades y, simultáneamente, menguar los efectos
colaterales que surgen de la concentración anteriormente subrayada. Así, pues,
nuestras recomendaciones para mejorar la situación actual del organismo son las
siguientes:

1. Realizar un enfático proceso de estudio y evaluación interno, con el objetivo

de transformar la realidad del conjunto para adaptarse a las necesidades
propias y de la vida local.
2. Medrar la organización interna, debido a que es palpable la ausencia de
directrices formales que conduzcan el comportamiento y conductas dentro
del organismo, desembocando en un también evidente desorden entre sus
miembros y respecto al público. Esto también incluye un manejo de la
información más específico y transparente.
3. Establecer una línea más clara de atención al público, siendo más concisos
al momento de instruir a la ciudadanía en lo que a los trámites pertinentes a
la entidad se refiere, paralelamente disponiendo de una comunicación más
directa tanto de cara a lo externo como a lo interno.

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4. Facilitar canales más óptimos de interacción con la ciudadanía de forma
bilateral, concientizando sobre la importancia de la participación activa en
los menesteres municipales por parte de las comunidades.
5. Desarrollar una estrategia de desarrollo local, la cual incentive las
dinámicas económicas tanto pública como privadamente, consultando y
cooperando con los actores alusivos respecto a los mecanismos más
idóneos para ello.
6. Habilitar, de manera íntegramente funcional, los portales web y las redes
sociales para apoyarse en los beneficios del gobierno electrónico,
reduciendo la burocracia de los procedimientos presenciales y facilitando,
asimismo, las propias labores presenciales de los funcionarios.
7. Fortalecer los liderazgos locales que tienen una visión de mediano y largo
plazo, visibilizando y aupando el trabajo de los líderes locales que cuentan
con una visión del municipio en el mediano y largo plazo.
8. Institucionalizar sus relaciones con la comunidad, incentivando la
generación de planes y proyectos donde esta tenga la posibilidad de
participar de forma más activa y determinante.
9. Crear mecanismos eficientes de coordinación e intercambio de información
con los órganos de la administración nacional y regional, que permitan
unificar y coordinar criterios y políticas dentro de la esfera de competencias
que la ley atribuye al municipio, teniendo como fin la desconcentración del
poder pero que, simultáneamente, sea en cooperación con los demás
poderes.
10. Profesionalizar la función pública, en virtud de la cual el ingreso a los
cuadros del servicio público obedezca a criterios de mérito y no a criterios
clientelares, partidistas o grupales.
11. Resolver las insuficiencias originadas por las ineficaces fuentes de
financiamiento, desarrollando una capacidad gerencial por parte de los
órganos municipales que permita el establecimiento de criterios adecuados
para la selección de las inversiones a realizar en el municipio y para la
racionalización del gasto público.

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 12. Implementar una serie de correctivos que sean utilizados para subsanar
fallas organizacionales, producto de servicios sesgados y clientelares, en
aras de sortear los obstáculos de la correcta y virtuosa gestión pública.

CONCLUSIÓN

Cuando hablamos del funcionamiento municipal, al igual que de su

comparación con la ley que le atañe y las recomendaciones que,
consecuentemente, nacen de los vicios que impide su correcto desenvolvimiento,
siempre se hace bajo la premisa de que su realidad está condicionada no solo por
las incapacidades intrínsecas sino, además, por el contexto mayor que se ciñe
sobre su actividad, que es un Estado que ha concentrado el poder en el Ejecutivo
y, por ende, ha dificultado considerablemente las labores de las administraciones
municipales.

No obstante, si bien es un hecho que resulta indispensable tenerlo en

consideración, al mismo tiempo se determina que existe una diversa y
multitudinaria gama de alternativas que darían génesis a una serie de importantes
mejoras dentro del municipio. Entendiendo que específicos parapetos aquí
presentados nacen de coyunturas propias a la entidad analizada y no por
colateralidad del accionar nacional, es posible plantear una serie de directrices
que, al acatarse desde la organización interna, ayuden a soslayar las
contingencias contextuales y den la oportunidad de asumir un rol más protagónico
y eficaz.

Así, pues, exhortaciones como realizar un diagnóstico interno de las

debilidades para saber qué puntos focales atacar, mejorar la organización interna,
desarrollar vías comunicacionales eficaces con la comunidad que aumenten y
agilicen su participación ciudadana, apostar a los beneficios del gobierno
electrónico, entre otras, son soluciones de factible aplicabilidad dentro de las
inmediaciones del municipio, pues corresponden única y exclusivamente a las
competencias y personalidades del mismo. Claro está, ello implica un notable

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compromiso por parte de los involucrados con el objetivo de ejecutar una mejor
administración, siendo este el primer paso primordial a la consecución de
cualquier logro estipulado dentro de la gestión.