Las juntas (también denominadas fracturas extensionales) son planos de separación en los que no

se ha producido un desplazamiento de cizallamiento o no se ha detectado. Las dos paredes de la

pequeña abertura resultante generalmente permanecen en contacto estrecho (coincidente). Las
articulaciones pueden resultar de la tectónica regional (es decir, las tensiones de compresión
frente a un cinturón montañoso), pliegues (debido a la curvatura del lecho), fallas o liberación de
tensiones internas durante el levantamiento o el enfriamiento. A menudo se forman bajo alta
presión de fluido (es decir, bajo esfuerzo efectivo), perpendicular al esfuerzo principal más
pequeño.

El crecimiento de las juntas está controlado por el espesor de la capa mecánica de la roca
deformada. La apertura de una junta es el espacio entre sus dos paredes medido
perpendicularmente al plano medio. Las aberturas pueden estar abiertas (resultando en una
mejora de la permeabilidad) u ocluidas por cemento mineral (resultando en una reducción de la
permeabilidad). Una articulación con una gran apertura (> pocos mm) es una fisura. Si están
presentes en número suficiente, las juntas abiertas pueden proporcionar una porosidad y
permeabilidad adecuadas, de modo que una roca que de otro modo sería impermeable puede
convertirse en un yacimiento fracturado productivo. En la explotación de canteras, el tamaño de
bloque más grande depende de la frecuencia de las juntas; abundantes fracturas son deseables
para la extracción de grava y roca triturada.

Conjuntos y sistemas de juntas

Las juntas son características ubicuas de las exposiciones de rocas y, a menudo, forman familias de
fracturas rectas a curviplanares, típicamente perpendiculares a los límites de las capas en rocas
sedimentarias. Un conjunto es un grupo de articulaciones con una orientación y morfología
similares. Por lo general, varios conjuntos ocurren en el mismo lugar sin interacción aparente, lo
que da a las exposiciones una apariencia de bloques o fragmentada. Dos o más conjuntos de
articulaciones presentes juntos en una exposición componen un sistema de articulaciones. Los
conjuntos de juntas en los sistemas comúnmente se intersecan en ángulos diedros constantes. Se
conjugan para ángulos diedros de 30 a 60 °, ortogonales cuando el ángulo diedro es de casi 90 °.

Geometría

La geometría de los sistemas de juntas se refiere a la orientación (graficada en estereonets y

diagramas de rosas), la escala, las formas y trayectorias, el espaciado, la apertura, las
intersecciones y terminaciones de las juntas estudiadas. La orientación media y la distribución de
la orientación, el espaciado y la cronología relativa son caracteres generales que se utilizan para
definir conjuntos conjuntos. En este sentido, una observación tridimensional es esencial para
evitar mediciones de muestreo sesgadas debido a simples razones geométricas.
- Las juntas que contienen ropa de cama terminan en la parte superior e inferior de las camas.

- Las uniones sistemáticas se caracterizan por una geometría más o menos plana; tienen trazos
relativamente largos y típicamente forman conjuntos de juntas aproximadamente paralelas y casi
igualmente espaciadas.

- Las juntas no sistemáticas suelen ser cortas, curvas y espaciadas irregularmente. Suelen acabar
contra articulaciones sistemáticas.

Espaciado

Los tamaños y el espaciamiento (la distancia ortogonal promedio entre los planos de fractura
vecinos) son características esenciales de los conjuntos de juntas. En rocas isotrópicas (por
ejemplo, granito), el espaciado de juntas sigue una distribución de frecuencia aproximadamente
logarítmica normal (el número de juntas que ocurren dentro de una unidad de longitud). En rocas
anisotrópicas (estratificadas), el espaciamiento de las juntas difiere según varios parámetros.

Espesor de la cama

Para la misma litología, las juntas están más estrechamente espaciadas en capas más delgadas.
Esto se debe a que la formación de juntas alivia la tensión de tracción en la capa en una distancia
lateral proporcional a la longitud de la junta. Dado que las juntas terminan en los límites de la
capa, que son discontinuidades de la roca, las juntas más largas en capas más gruesas deben
espaciarse con menos frecuencia.

Gran parte del trabajo ha documentado relaciones lineales entre el espaciado promedio de juntas,
D, y el espesor del lecho, T:
Las pendientes α son función de la litología y, por inferencia, de las propiedades mecánicas. Sin
embargo, esta relación lineal podría ser válida para camas de menos de 1,5 m de espesor. La
pendiente puede cambiar para lechos más gruesos. Una curva continua con pendiente positiva y
segunda derivada negativa:

Sin embargo, investigaciones sistemáticas han demostrado que el grosor de las capas intermedias
incompetentes influye en la separación de las fracturas dentro de las capas competentes. El
espaciado es más amplio cuando las capas intermedias son más gruesas que un valor crítico
estimado en aproximadamente 5 cm; a la inversa, las fracturas están más cerca unas de otras
cuando las capas intermedias débiles son más delgadas que 5 cm.

El espaciado escalado con el espesor de la capa se utiliza en el mapeo de contactos litológicos,

particularmente en la interpretación de fotografías aéreas o en el mapeo de superficies de
exposiciones inaccesibles o muy meteorizadas. El espaciado también puede revelar diferencias en
los sistemas articulares en las posiciones de las bisagras y las extremidades en pliegues grandes, o
en diferentes distancias de fallas grandes.
Litología

Las rocas más fuertes y quebradizas tienen juntas más juntas que las rocas más débiles. De manera
similar, las rocas con baja resistencia a la tracción muestran más juntas que las litologías más
rígidas, porque la deformación es la misma en capas de diferentes tipos. Pero se requieren
tensiones más altas para lograr la misma cantidad de tensión en las capas más fuertes. Por lo
tanto, las capas fuertes se fracturan con mayor frecuencia. Sin embargo, esta respuesta es
particularmente sensible a la presión del fluido de poro local.

Posición y tensión estructural

La posición estructural (particularmente dentro de los pliegues) y la magnitud de la tensión

extensional también controlan el espaciado de las articulaciones.

¿Por qué las juntas están espaciadas uniformemente?

El espaciamiento regular de las articulaciones ha encontrado varias explicaciones, ninguna de las

cuales ha sido establecida como mecanismo probado. Sin embargo, casi todos infieren que las
articulaciones en secuencia. Entre estas hipótesis:

Interacción presión de poros / porosidad

Cuando se forma una junta, fluyen fluidos hacia la fractura y la presión de poro en la roca
adyacente disminuye. El círculo de Mohr local se aleja de la envolvente de falla y no es posible
fractura cerca de la inicial. Otra fractura solo puede formarse más allá del volumen de roca con
una presión de poro reducida. Por tanto, el espaciamiento mínimo depende de la permeabilidad
de la roca. Esta distancia mínima sería el espaciado finito medido de los conjuntos de juntas.

Sombra de estrés

Cuando se forma una junta, alivia la tensión de tracción a cada lado del plano de fractura que se
convierte en una superficie de tensión cero. El estrés se acumula gradualmente desde la fractura
hasta que alcanza el nivel de estrés remoto. La siguiente fractura solo puede formarse más allá del
volumen de roca con un esfuerzo de tracción reducido (la sombra del esfuerzo). Por tanto, el
espaciamiento mínimo depende del ancho de las sombras de tensión y, por tanto, de las
propiedades elásticas de la roca. El espaciado uniforme está regido por sombras de tensión
adyacentes con juntas en el medio. Las sombras de estrés son más grandes para juntas más largas.

Fuerzas entre capas

Cada capa está sometida a fuerzas transmitidas por capas adyacentes. La deformación diferencial
entre capas ejerce tensiones de tracción en las más competentes (un proceso invocado para el
boudinato). El espacio entre juntas está determinado por la longitud de la capa necesaria para
acumular tensiones al nivel de resistencia a la tracción de la litología en cuestión.
Patrones conjuntos

Hay cinco arreglos principales:

- Los juegos paralelos son curvos o rectos

- Los ventiladores se colocan a lo largo de crestas de pliegue o intrusión

- Radiar conjuntos alrededor de los centros de intrusión

- Conjuntos concéntricos alrededor de los centros de intrusión y colapso (cono, anillo o cilíndrico)

- Conjuntos poligonales como columnar o prismáticos.

Juntas maestras

Las juntas que tienen dimensiones que van desde decenas de centímetros a cientos de metros y
distancias repetidas de varios centímetros a decenas de metros se denominan juntas maestras.
Además, la mayoría de las rocas contienen numerosas juntas discretas de menor tamaño y
espaciamiento más estrecho, algunas de ellas, las microjuntas o microfracturas, visibles solo en
una sección delgada bajo el microscopio.

Orientación conjunta

La permeabilidad de un depósito fracturado es a menudo muy anisotrópica porque las juntas

generalmente se forman en conjuntos sub-paralelos. Sin embargo, puede haber más de un
conjunto de fracturas, lo que resulta en una red de fracturas compleja. Por lo tanto, se requiere
conocimiento de la distribución espacial y la orientación de las juntas para optimizar el desarrollo
de los reservorios fracturados.

Las juntas se miden en una estación de muestreo. La técnica tiene como objetivo medir su
orientación y la densidad de fracturas.

- Se dibuja un círculo con un trozo de tiza unido a una cuerda de determinada longitud (r = radio)
sobre una superficie perfectamente expuesta.

- Se mide la orientación (rumbo y buzamiento) y longitud L de cada fractura dentro del círculo,
marcando con la tiza cada fractura medida para evitar la duplicación de datos. Cuando no se
obtienen caídas, como en fotografías, los datos de orientación se presentan en un diagrama de
rosas: se cuentan las juntas en un sector de orientación dado (por ejemplo, dentro de los 10 °). Se
traza una línea radial en la dirección mediana de cada sector. La longitud de la línea indica el
número de uniones que ocurren en el sector correspondiente.

- La densidad de la junta es la longitud acumulada de la fractura sobre el área del círculo:

Tiempo relativo de formación de la articulación

Es probable que las articulaciones de la misma generación tengan la misma orientación. Sin
embargo, las rocas experimentan diferentes regímenes de tensión durante su historia con el
resultado de que varios conjuntos de fracturas se superponen entre sí para producir una red de
fracturas. Las relaciones transversales de diferentes conjuntos de articulaciones permiten
determinar su edad relativa. Se han establecido algunas reglas para ayudar en esta tarea.

- Las juntas tempranas detienen la propagación y modifican la orientación de las posteriores.

- A medida que se desarrollan más conjuntos de juntas en la roca, la modificación de la orientación

de la tensión por las fracturas preexistentes puede resultar en una mala correlación entre la
orientación de las juntas tardías y el campo de tensión regional responsable de su formación.

Las articulaciones más jóvenes deben terminar contra las articulaciones más viejas porque una
fractura de extensión no puede propagarse a través de otra fractura de extensión más antigua. Los
esfuerzos principales se reorientan cerca de una junta temprana, que es una superficie libre
incapaz de soportar un esfuerzo cortante dentro de la roca y, por lo tanto, es un plano principal
del elipsoide de esfuerzos. En consecuencia, las articulaciones posteriores se curvan en una
orientación en ángulo recto con las anteriores a medida que se acercan a ellas y se apoyan en ellas
(relación de apoyo); Por tanto, las articulaciones más jóvenes son más cortas. Esta observación
geométrica plantea un punto de precaución: la orientación de las fracturas secundarias no refleja
directamente el campo de tensión regional.

Anatomía articular

Las juntas normalmente son grietas estériles o fisuras vacías, pero algunas pueden contener
revestimientos. Las venas estrechas con minerales de relleno, comúnmente cuarzo o calcita,
también son fracturas por extensión tratadas como articulaciones.

Superficies conjuntas
Las juntas estériles se caracterizan por roturas limpias, granulares y dentadas. Son estructuras
concoidales, es decir, superficies irregulares con convexidades y concavidades de bajo relieve
(como las de una concha de almeja) que no siguen ningún plano natural de separación. Tales
estructuras se ven típicamente cuando se fractura un material amorfo (vidrio, pedernal, obsidiana,
etc.). Asimismo, algunas superficies de las juntas muestran delicados adornos que se dividen en
dos grupos: marcas plumosas, el tipo más común y marcas de nervaduras. La preservación de
estas delicadas características especifica que la articulación no es una fractura por cizallamiento.

Estructuras plumosas

Las estructuras plumosas son agregados de ondulaciones suaves y curvilíneas (las marcas de
hackle) que irradian desde el punto donde se originó la articulación y se abren en abanico hacia
afuera desde una línea axial generalmente recta, más raramente curvada, que luego se asemeja a
la forma y la huella de una pluma. El origen comúnmente es alguna heterogeneidad de la roca,
como ondulaciones en los planos de los estratos o inclusiones (concreciones, nódulos, clastos,
fósiles, etc.) en los lechos. Los hackles suelen ser muy finos cerca del origen de la articulación,
mientras que el relieve diferencial puede amplificarse longitudinalmente hacia el margen de la
articulación (la franja). Los hackles divergen bruscamente en ángulos de aproximadamente 30 °
desde el eje central, curvándose gradualmente a ángulos de aproximadamente 70 ° cerca de los
márgenes de la superficie articular. La escala de los patrones plumosos parece depender del
tamaño de grano de la roca.

Marcas de costillas

Las marcas de nervaduras forman una serie de cambios o rampas regulares, concéntricos y
arqueados en la orientación de la superficie de la articulación, dando cúspides, formas de onda o
crestas o surcos redondeados. La zona central de las estrías (el espejo) suele ser circular o elíptica.
Las líneas de Wallner son similares a las costillas pero ocurren como uno o dos conjuntos oblicuos
a los pelos.
Las marcas de nervadura representan cambios en la dirección de la fractura a medida que cambia
el campo de tensión. Los experimentos han demostrado que aquellos que son de perfil sinusoidal
y suaves en sus crestas registran la ubicación en la que disminuye la velocidad de propagación de
las fracturas de propagación relativamente rápida que atraviesan un material sólido (el campo de
tensión está vibrando). Las marcas de nervadura fuertemente asimétricas, con crestas afiladas y
que ocasionalmente se desvían del paralelismo (marcas de detención) se asocian con una lenta
propagación de grietas. Son terminaciones de juntas antiguas, que mapean detenciones
temporales sucesivas del frente de la grieta durante el crecimiento repetido de la grieta en
condiciones recurrentes de carga / descarga.

Interpretación

Las marcas plumosas y de nervaduras pueden superponerse en un plano de articulación y

generalmente son ortogonales entre sí. Tales características delicadas se entrelazan en las caras
opuestas de las juntas y esto impide el movimiento de cizallamiento (por lo tanto, las juntas son
fracturas de modo 1 paralelas al plano () 12; σσ). Las marcas plumosas y de las costillas son una
expresión directa de la trayectoria de la articulación porque los bordes de la fractura se tuercen e
inclinan constantemente a medida que avanzan. Los ejes de la pluma se desarrollan paralelos a la
dirección de propagación principal, comúnmente paralelos al lecho. Las consideraciones en la
mecánica de fracturas lineales sugieren que estas estructuras superficiales están controladas por
la velocidad de fractura y / o la intensidad de la tensión. Se ha medido que la velocidad de
propagación promedio es la mitad de la velocidad del sonido. Los experimentos sugieren además
que las velocidades de propagación de las grietas con ornamentación plumosa pueden exceder la
mitad de la velocidad del sonido.
Contenido conjunto - Depósitos secundarios

Los depósitos secundarios a lo largo de las juntas son dilatacionales, si el material de la veta ocupa
espacio entre las dos superficies de fractura originales, o no dilatacionales si el material de la veta
ocupa el espacio disponible mediante el reemplazo de la roca original fuera de las dos superficies
de fractura originales.

En la práctica de la ingeniería, la mineralogía y la textura de las vetas es importante porque las

juntas con diferentes rellenos pueden tener diferentes propiedades mecánicas que rigen el
almacenamiento y el flujo de fluidos. Luego, la fractura conserva un cierto grado de cohesión o
resistencia a la tracción. En particular, si una fractura se propaga con la suficiente lentitud, la
curación puede seguir el ritmo de la propagación.

Terminación de juntas y bordes

En sus bordes, las superficies de las articulaciones se dividen y se retuercen en pequeñas fracturas
fuera del plano oblicuas (típicamente a 5-25 °) y en échelon a la articulación principal. Estas caras
de la franja pueden tener individualmente patrones plumosos secundarios casi ortogonales a la
dirección de propagación de la articulación principal. Se conectan mediante enlaces curvos o
angulares. Las caras de los flecos se pueden segmentar mediante pequeños pasos de flecos
paralelos al eje de la articulación. Terminación conjunta con o sin cambio de orientación.
Ramificarse y apoyarse contra otra articulación son otras descripciones comunes.

Mecánica de unión

Una clasificación genética de las articulaciones se ha basado en el tamaño del desplazamiento

imperceptible inferido relacionado con los tres ejes principales de tensión de una región. Si el
desplazamiento total es normal a la superficie de la fractura, se trata de una articulación dilatante
o de extensión (fractura de modo 1). Si el componente cortante tiene algún valor finito, pero
insignificante, la fractura llamada junta cortante es realmente una falla (fractura de modos 2 y 3),
teniendo en cuenta que el componente cortante puede haberse acumulado después de la
formación de una junta dilatante anterior.
Juntas de extensión

La mecánica de fracturas elásticas lineales predice que la orientación de las juntas dilatantes
(fracturas genuinas de modo 1) en una roca relativamente isótropa está controlada por el campo
de tensión remota en el momento de la propagación de la fractura: las juntas son planos abiertos
paralelos al esfuerzo de compresión máximo 1σ y perpendiculares la dirección de la tensión
principal mínima σ3. En otras palabras, se forman en el plano que contiene σ1 y σ2. De lo
contrario, habría un esfuerzo cortante y un desplazamiento cortante finito correspondiente en el
plano de la articulación. Los experimentos triaxiales en rocas isotrópicas frágiles confirmaron esta
consideración teórica. Por lo tanto, los conjuntos de articulaciones regionalmente consistentes se
toman como sustitutos efectivos de las trayectorias de tensión durante el crecimiento de la
articulación: las uniones lineales y paralelas relativamente poco espaciadas sugieren que las
trayectorias de tensión principales regionales son rectilíneas y permanecen paralelas a través del
área fracturada; alternativamente, las orientaciones complejas de las articulaciones están
relacionadas con la variabilidad de la trayectoria de la tensión.

El patrón de las articulaciones dilatantes es comúnmente en forma de T, la articulación más joven

linda con la más vieja. Sin embargo, dada la anisotropía adecuada de la resistencia a la tracción, es
posible obtener juntas normales a σ2 o incluso a σ1.

Juntas híbridas

Las juntas híbridas muestran componentes tanto de extensión como de corte. Se interpretan
como superficies de falla iniciadas en la transición de falla por tracción a falla por cortante. Se
forman cuando el círculo de tensión toca la envolvente de falla (Griffith) en el lado de tracción
(tensiones normales negativas) del diagrama de Mohr. Los ángulos diedros entre las fracturas
híbridas conjugadas suelen ser más pequeños que entre las fracturas por cizallamiento (fallas).

Juntas de corte

Este término es desafortunado y ambiguo porque las juntas de corte en realidad son pequeñas
fallas. Las "juntas de corte" conjugadas generalmente definen formas X, Y o V. La bisectriz aguda
de estas formas es paralela a σ1, a menos que estos patrones representen fracturas transversales
o contiguas no relacionadas.

Inicio y origen conjunto

La observación geológica indica que las uniones se inician en los "defectos" de la roca, como
fósiles, clastos, porfiroclastos, cavidades, etc. Las inclusiones duras y blandas perturban el campo
de tensión remoto, por lo que son sitios de nucleación de las articulaciones de tres maneras:

- Amplificación de una pequeña tensión remota de modo que la magnitud del esfuerzo de tracción
local en la falla exceda la resistencia a tracción de la roca;

- Conversión de compresión remota en tensión local.

- Tensión local por presión de poros.

Amplificación de tensión remota

La razón es que los defectos tienen propiedades elásticas diferentes a las de la roca. Para tales
condiciones, la mecánica de la fractura considera una inclusión circular y una constante k, la
relación módulo de corte elástico de la roca / módulo de corte elástico de la inclusión. La roca y la
inclusión tienen la misma proporción de Poisson. Una tensión remota 3rσ induce una tensión
uniforme 3iσ dentro de la inclusión:

Conversión de compresión en tensión

Los experimentos de compresión han demostrado que los defectos pueden inducir tensiones de
tracción locales. Por ejemplo, para un pequeño ángulo de contacto del grano, 2φ, la tensión gσ en
el centro del grano es de tracción:

En ambos casos, el cambio de signo muestra que la compresión remota se convierte en una
tensión local. Dado que los esfuerzos de compresión son grandes en la corteza terrestre y la
resistencia a la tracción de la roca es pequeña, esta conversión proporciona un mecanismo
atractivo para la iniciación de la unión.
El argumento de Griffith también ha demostrado que el deslizamiento de las paredes de una grieta
elíptica inclinada a la compresión remota induce tensiones de tracción en sus extremos (grietas en
las alas a mayor escala).

Estrés de tensión debido a la presión de poro

Las presiones de los fluidos que superan la tensión remota mínima de compresión producen
tensiones de tracción mayores que la resistencia a la tracción de la roca, en particular en los
extremos de las cavidades elípticas y las microfisuras. Debido a que la concentración de tensión
aumenta con la longitud de la junta (efecto de la relación de aspecto), la velocidad de propagación
de la punta aumenta a medida que las juntas crecen y puede propagarse siempre que se
mantenga la presión de fluido adecuada (hasta un valor límite).

Propagación de la punta

Las fracturas pueden alargarse en una dirección paralela a su plano inicial (penetración del
material huésped) o pueden desviarse de la orientación inicial de la fractura (refracción y
deflexión). La propagación puede verse interrumpida por discontinuidades preexistentes, como las
superficies de las camas. Este último puede ser un sitio de pasos de salto, donde dos fracturas
paralelas, no coplanares, fueron inicialmente compensadas en el momento de su formación.

Profundidad máxima de formación

Suponiendo que 1σ es vertical cerca de la superficie de la Tierra, es el peso de las rocas disminuido
por la presión de poro fP. La presión de poro se expresa comúnmente por la relación de presión
del fluido fPgzλ = ρ. Por lo tanto, 1σ se puede expresar en función de la profundidad zy la densidad
de la roca ρ como:
Descarga de juntas

Las rocas poseen propiedades elásticas estrechamente relacionadas con las medidas en el
laboratorio. En ambientes no orogénicos, la elevación y la exhumación dan lugar a cambios en las
tensiones horizontales y verticales, que pueden superar la resistencia a la tracción de las rocas. En
particular, la presión de confinamiento hidrostática se libera durante la descompresión y las rocas
enterradas tienden a expandirse radialmente. Sin embargo, las diferencias de compresibilidad
entre litologías adyacentes y granos minerales de diferente orientación o composición
desencadenan tensiones desviadoras locales. Estas tensiones locales no hidrostáticas generadas
por la descompresión son tales que las dos tensiones principales σ2 y σ3 pueden ser extensibles
por encima de una profundidad crítica.

Articulaciones de hoja (exfoliación)

La erosión alivia la tensión vertical, que debe acercarse a una atmósfera, pero la tensión lateral (al
menos la presión litostática) no se reduce proporcionalmente. Por lo tanto, el estado de tensión se
vuelve no hidrostático y la tensión vertical se convierte en tensión principal mínima σ3 de modo
que las juntas se forman aproximadamente paralelas a la superficie de la tierra. Las juntas
dilatantes formadas durante la erosión de rocas homogéneas como el granito, son sub-paralelas a
la topografía, y esta orientación da como resultado conjuntos de juntas planas, curvas y grandes
denominadas laminado o estructura laminada. El espacio entre las juntas de las láminas aumenta
con la profundidad, hasta 50-100 m. Las juntas de chapa más profundas tienen un radio de
curvatura más grande.

Tan pronto como se libera la tensión en la dirección vertical σ3, la σ2 original se convierte en la
mayor tensión de tracción. Cuando la resistencia a la tracción se excede una vez más, se formará
un conjunto de fracturas de extensión perpendiculares al conjunto original, generalmente algo
menos desarrollado que el primero. La cantidad de expansión que se espera de la liberación de la
tensión almacenada como consecuencia del entierro está indicada por los valores de la
compresibilidad de las rocas, la relación entre el cambio de volumen y el cambio de presión.

Juntas paralelas y contenidas en camas

Los cambios de presión de 2 kbar, correspondientes a cambios de profundidad de unos 6 km,

provocan cambios de volumen que van desde un pequeño porcentaje hasta unas pocas décimas
de porcentaje. Si tales cambios de volumen se logran principalmente por extensión vertical, y si
esta extensión ocurre lo suficientemente rápido, pueden formarse articulaciones dilatantes
horizontales. La separación de las juntas paralelas de la cama también está relacionada con la
descarga.

Las articulaciones de descompresión también pueden formarse verticalmente. Por lo general, se

apoyan en los límites de las capas y disecan las rocas en capas en elementos en bloque. Tales
juntas que contienen ropa de cama exhiben un espaciado diferente de una cama a otra, lo que
probablemente refleja diferencias en la compresibilidad entre diferentes capas.

En rocas homogéneas e isotrópicas como el granito y la arenisca, las juntas horizontales y

verticales disecan las rocas en elementos casi cúbicos. La intemperie a lo largo de estas
articulaciones puede provocar un redondeo extremo, lo que resulta en rocas.

Articulaciones debidas a cambios de volumen no descompresivos

A escala regional, varios tipos de rocas se yuxtaponen en capas u otras configuraciones. Cuando
estos se enfrían, se establecerán tensiones desviatóricas locales dentro de ellos debido a las
diferencias en los coeficientes de contracción térmica entre diferentes unidades de roca y granos
minerales en contacto. El estrés no hidrostático local generado por el enfriamiento es
particularmente importante en la formación de juntas en rocas magmáticas. La deformación
regional puede impulsar transferencias de material que dan lugar localmente a cambios de
volumen significativos.

Articulaciones estilolíticas

Las juntas estilolíticas tienen un perfil de diente de sierra característico y una forma cónica
interdigitante en tres dimensiones. Los "dientes" entrelazados son normales u oblicuos a la
superficie de la articulación. Las juntas estilolíticas son superficies a lo largo de las cuales se ha
eliminado material rocoso relativamente soluble mediante disolución química inducida por
presión para acomodar la manteca. El acortamiento es paralelo a la dirección de los dientes. La
disolución se desencadena por la concentración de estrés en el contacto entre los granos. En la
junta quedaron acumulados residuos relativamente insolubles (arcilla, óxidos de hierro, etc.). Este
mecanismo de deformación se llama solución a presión. Las estilolitas son particularmente
comunes en la piedra caliza.

Suponiendo que las juntas estilolíticas se inician como planos planos y no se propagan fuera del
plano, sus amplitudes representan una estimación mínima de la cantidad de acortamiento
(compactación) que ha ocurrido. Suponiendo que el material insoluble se distribuyó inicialmente
de manera uniforme en la roca y que no hubo contaminación por los fluidos en circulación, el
espesor del residuo insoluble a lo largo de una junta estilolítica sería proporcional a la cantidad de
material disuelto y, por lo tanto, sería proporcional al desplazamiento del acortamiento a través la
articulación estilolítica. Debido a este modo de desplazamientos algunos autores los denominan
fracturas anticracks o modo 4 (modo de cierre).

Juntas de columna

Las juntas columnares son más prominentes en los umbrales basálticos y los flujos de lava. Forman
una red tridimensional de fracturas interconectadas que diseccionan la roca en unidades
poligonales largas y espectaculares (comúnmente columnas de cinco o seis lados). Los conjuntos
de juntas normales de columna menores segmentan las columnas a lo largo de su longitud y
generalmente terminan en las juntas delimitadoras de columnas. La contracción térmica durante
el enfriamiento hace que estos conjuntos de juntas normales y delimitadores de columnas se
formen y se propaguen perpendicularmente a las isotermas.

No se produce estrés si cambia la temperatura de un cuerpo homogéneo, isotrópico y sin

restricciones. Las tensiones surgen si se impide que el cuerpo se expanda o contraiga, o si hay una
distribución desigual de la temperatura, como es el caso de la parte superior fría al fondo cálido de
un flujo de lava. Una junta comienza a formarse cuando las tensiones locales son iguales o superan
la resistencia a la tracción de la roca (hasta 485 MPa para el basalto). La fractura alivia las
tensiones térmicas a lo largo de los lados de la junta, perpendicular al plano de fractura, pero
concentra las tensiones en su punta. Las fracturas delimitadoras de columnas se propagan en la
dirección del gradiente térmico, siguiéndolo a medida que se mueve a través de la lava que se
enfría desde el exterior frío hasta la lava más caliente. Así, las fracturas crecen por la adición
sucesiva de nuevos segmentos a los anteriores.

La propagación ocurre cuando la concentración de esfuerzos en la punta de la fractura es mayor o

igual que la resistencia a la tracción de la roca. El crecimiento de la fractura cesa cuando existe una
tensión térmica insuficiente para la propagación o cuando la tasa de deformación es demasiado
baja para superar la relajación viscosa de la tensión donde la punta de la fractura está cerca del
frente de enfriamiento, que es la transición entre lo frío, quebradizo y lo cálido, viscoso o lava
viscoelástica.
Tres patrones de juntas son comunes a muchos flujos de lava enfriados en los que las isotermas
(por lo tanto, las tensiones térmicas) son esencialmente horizontales. La parte inferior, llamada
columnata, contiene columnas verticales regulares. La zona central, aproximadamente elíptica,
denominada entablamento, a menudo ubicada ligeramente por debajo del centro de flujo,
muestra columnas torcidas irregulares que expresan un enfriamiento convectivo rápido. La zona
superior puede ser regularmente columnar (columnata superior), toscamente columnar
(pseudocolumnar) o voluminosa. Esta distribución puede reflejar el hecho de que la velocidad de
enfriamiento por conducción controla el espaciado de las juntas: el enfriamiento rápido conduce a
columnas estrechas cuyo diámetro aumenta hacia adentro desde los márgenes del flujo.

La unión también ocurre en rocas ígneas intrusivas porque se contraen más que la roca rural más
fría. Como ocurre con las lavas, las tensiones térmicas surgen porque la contracción térmica de la
roca intrusiva no es gratuita. El movimiento hacia abajo de la roca rural suprayacente acomoda la
contracción vertical. Si el límite entre la roca ígnea y las rocas campestres permanece coherente,
entonces se deben desarrollar estructuras de compresión en la roca campestre o estructuras
extensionales deben desarrollarse en el magma de enfriamiento para acomodar su contracción
horizontal.

Grietas de barro

Las grietas de lodo relacionadas con la desecación en los sedimentos son patrones poligonales,
idealmente hexagonales, similares en muchos aspectos a la unión columnar. El crecimiento
incremental de las juntas de desecación es cinemáticamente similar a las juntas de enfriamiento,
pero no se conoce bien la naturaleza del crecimiento de las juntas debido a la pérdida de agua en
las rocas estratificadas. La morfología de la grieta está influenciada por gradientes de secado con
gradientes fuertes que tienen un fuerte efecto de orientación. El tamaño de los polígonos y el
ancho y profundidad de las grietas dependen del grosor de la capa de barro húmedo.

¿Por qué hexagonal? Esta simetría es una regla geométrica simple. Si la roca es perfectamente
homogénea y el secado (o enfriamiento) también es perfectamente uniforme, los centros de
contracción se distribuyen por igual. La distancia entre todos los centros es igual, lo que en planta
produce 6 círculos tangentes entre sí y centrados en un círculo imbricado. Las juntas se desarrollan
ortogonales a las tensiones de tracción, que son iguales de centro a centro. Los hexágonos se
producen en estas condiciones ideales.
Articulaciones por deformación regional.

Muchas uniones, y en particular las que atraviesan diferentes litologías, están relacionadas
directamente con pliegues producidos por deformaciones regionales. Los pliegues pueden ser
rasgos pronunciados o deformaciones regionales hacia arriba o hacia abajo apenas perceptibles.
De hecho, una causa concebible de la unión regional es la flexión muy suave de las placas
litosféricas que se espera cuando una placa cambia de latitud y, por lo tanto, su radio de
curvatura. Las juntas geométricamente relacionadas con los pliegues pueden originarse durante el
plegado. En ese caso, pueden reflejar cierta elongación de las rocas, a menudo paralelas a las
líneas de las bisagras. Si se producen después del plegado, su orientación debe tenerse en cuenta
por la anisotropía mecánica de la roca plegada.

Venas

Las venas son fracturas dilatadas llenas de fibras cristalinas orientadas o depósitos minerales no
orientados (típicamente cuarzo, calcita o carbonatos). Dichas cristalizaciones secundarias se han
transportado y luego se han depositado o precipitado a lo largo de la fractura a partir de
soluciones en condiciones favorables de temperatura y presión. Por tanto, las venas se toman
como evidencia del movimiento de fluidos a lo largo de las fracturas. Ocurren en rocas de todo
tipo y grados metamórficos con espesores desde menos de un milímetro hasta varios metros. Han
acomodado una extensión cuya cantidad es igual al espacio que ocupan, a menos que haya
disolución de la pared durante la circulación inicial de fluidos.

Los cristales masivos no fibrosos generalmente crecen en cavidades abiertas y las propias venas
pueden contener espacios abiertos en los que crecen las terminaciones de los cristales euédricos.
A veces se les llama vena de fundición defectuosa

Las vetas mineralizadas ocasionalmente contienen concentraciones económicamente importantes

de metales u otros elementos útiles en los depósitos de mineral. También es importante destacar
que a menudo contienen material datable.
Las venas son fracturas selladas, por lo que hay evidencia de una permeabilidad reducida. También
fortalecen la roca y restauran la continuidad a través de la fractura. Si la veta es más débil que la
roca huésped, la fractura repetida se localiza en la veta o en la interfaz de la roca; a la inversa, el
agrietamiento renovado tiende a ocurrir en la roca circundante si el material de la veta es más
fuerte que la roca. Luego, cada vena refleja un solo evento de fractura, que se conoce como
mecanismo de salto de grieta. Los grupos de venas constituyen una matriz de venas.

Venas de tensión

Descripción; definición

Los cortes de tensión y las venas son fracturas rellenas de modo 1 formadas en respuesta a
presiones tectónicas y de poros combinadas. Estos últimos han sido lo suficientemente altos para
permitir una tensión mínima efectiva de tracción 3σeff normal al plano de fractura. La cohesión
del sistema veta-roca determina dónde ocurren nuevas fracturas:

- Las fracturas curadas restauran la resistencia mecánica de los sistemas en los que las vetas
cementadas tienden a permanecer selladas y ocurren nuevas fracturas en la roca huésped.

- Las fracturas débiles localizan la ruptura posterior y crecen en cada evento de agrietamiento.

Minerales de fibra

Los minerales de relleno alargados cristalizan mientras la vena se abre, con el eje largo de las
fibras siguiendo la dirección de extensión incremental. Por lo tanto, las fibras minerales siguen la
trayectoria de apertura y documentan la formación de la fractura por tensión. La naturaleza
mineral de estas fibras apunta a condiciones diagenéticas o metamórficas y composiciones fluidas.

Se utilizan tres tipos de estructura interna para relacionar la forma y orientación de las venas con
la orientación de la deformación:

- Las fibras no deformadas son perpendiculares al margen de las venas puramente extensionales.

- Las fibras no deformadas (rectas) en las venas de corte son oblicuas al margen de la vena de
acuerdo con el componente de corte paralelo a las paredes de la vena durante la apertura de la
vena.
- Los cristales fibrosos a menudo crecen en un ángulo alto con respecto a la pared de la vena en
forma curva, sin que la red se doble, lo que indica que la forma curva es una característica de
crecimiento.

Las fibras originalmente curvadas (no están deformadas) registran un componente de rotación
durante la dirección de apertura de la fractura. Indican que la dirección de apertura cambió
durante la formación de la vena.

Se identifican tres tipos de dirección de crecimiento de los cristales de veta en relación con la roca
de la pared:

- El crecimiento sintaxial (hacia adentro) agrega material a lo largo del centro de la vena. Las fibras
crecen desde la pared en continuidad óptica con granos minerales de la misma composición en la
roca huésped. La cristalización se interpreta como un crecimiento progresivo de la pared al centro
durante la apertura de la vena, en la dirección de apertura. Las fibras que se extienden desde
paredes opuestas se encuentran en una sutura medial (a veces en un lado) donde hay una
discontinuidad tanto estructural como óptica. El plano medial es el plano de fractura donde se
produce el agrietamiento sucesivo, pero la separación de las fibras se sella continuamente con
material nuevo agregado a lo largo del centro de la vena desde sus dos lados. Esto indica que la
sutura medial sigue teniendo la fuerza tensional más débil del sistema vena-roca.

- El crecimiento antitaxial (hacia afuera) agrega material a lo largo de la pared de la vena. Esto
ocurre cuando el mineral de fibra está ausente o es poco común en la roca huésped. Cristales
fibrosos únicos corren de pared a pared y han crecido hacia afuera desde la zona media de la veta,
que puede contener inclusiones de roca de pared. Esto implica que hay dos planos de fractura /
crecimiento, entre la vena y las dos paredes. Continuamente se agrega nuevo material a lo largo
de las paredes de la veta. Esta característica sugiere que la adhesión a lo largo de la interfaz roca-
veta es más débil que la fuerza tensional en masa.
- El crecimiento ataxial se refiere a las venas debido a la apertura y sellado repetidos de los planos
de fractura, que saltan posiciones dentro de la vena en crecimiento. Las fibras son cristales
estirados (microboudinaged). Tales estructuras sugieren que el material de la veta tiene la fuerza
tensional más débil del sistema veta-roca.

Mecanismo de sellado de grietas

Bandas lineales de inclusiones sólidas regularmente orientadas y espaciadas paralelas a la pared

de la vena, a través de fibras minerales, sugieren microfractura repetida de las fibras a lo largo de
su longitud seguida de la deposición de un crecimiento excesivo ópticamente continuo que cura la
fractura: el mecanismo de sellado de grietas. Cada evento de microfractura registra una etapa
incremental de apertura de la vena. El crecimiento conserva las inclusiones que indican fracturas
repetidas.

Diques

Las venas rellenas de roca se clasifican como diques.

Más comúnmente, los diques son fracturas llenas de magma.

También hay dos tipos de fracturas llenas de sedimentos:

Los diques clásticos intrusivos contienen sedimentos fluidizados o brechados que se han inyectado
hidráulicamente en las fracturas del sedimento suprayacente. La inyección se debe a la alta
presión de poro en los sedimentos fuente no consolidados. Los diques clásticos suelen utilizar
patrones de unión.

Los diques neptunianos representan el relleno de sedimentos, desde arriba, de fracturas abiertas
que pueden penetrar por inmersión en las capas. Los diques neptunianos también suelen coincidir
con los patrones de las articulaciones.

Articulaciones y venas en relación con otras estructuras.

Los conjuntos de fracturas a menudo tienen relaciones geométricas consistentes con otras
orientaciones estructurales.

Regiones tabulares

En sedimentos planos que han sufrido poca o ninguna deformación, las juntas más prominentes
suelen ser verticales y exhiben una marcada consistencia en sus patrones de orientación. La
interpretación de estos sistemas de juntas casi ortogonales a las capas rara vez conduce a
conclusiones inequívocas con respecto al historial de tensiones o deformaciones del área
estudiada. Sin embargo, tales patrones son comunes en los promontorios de los cinturones
montañosos, lo que sugiere que partes de la corteza superior están sujetas a campos de tensión
rectilíneos.

Regiones plegadas

Las juntas son a menudo parte de la deformación en regiones donde las rocas se han plegado.
Aunque las juntas normalmente son casi perpendiculares a la ropa de cama, comúnmente se
forman en un patrón predecible con respecto a las tendencias de las bisagras.
- Las juntas longitudinales son aproximadamente paralelas a los ejes del pliegue y a menudo se
abanican alrededor del pliegue.

- Las juntas transversales son aproximadamente perpendiculares a los ejes de plegado. Son
comunes e indican extensión de eje paralelo.

- Las uniones diagonales generalmente ocurren en conjuntos conjugados pareados oblicuos a los
ejes de pliegue, más o menos simétricamente dispuestos con referencia a las uniones
longitudinales y transversales.

- Las juntas de golpe son paralelas al golpe de los planos axiales del pliegue, mientras que las
juntas de golpe transversal cortan el plano axial.

La orientación y la intensidad relativa de la fractura dentro de las estructuras plegadas se pueden

predecir mediante la curvatura gaussiana o el análisis del historial de tensiones. La curvatura
gaussiana es el producto (K) de las curvaturas principales (k1 y k2), que siguen las tendencias de
los principales ejes de deformación (X y Z). Las fracturas extensionales estarán paralelas a una de
las curvaturas principales, dependiendo del campo de tensión que formó el pliegue. La intensidad
de la fractura es proporcional al grado de curvatura (flexión) de los estratos.

Regiones con fallas

Las juntas asociadas con fallas pueden ser anteriores a las fallas y por lo tanto no tienen
necesariamente una relación genética con las fallas, aparte de un eventual control sobre la
orientación de los planos de falla. Las juntas adyacentes a fallas ocurren comúnmente con un
conjunto paralelo a los planos de falla y otro oblicuo a ellos, cualquiera que sea el tipo de falla. La
densidad de juntas aumenta junto a la falla.

En échelon y venas sigmoideas

Las puntas de las venas pequeñas con forma de lente (cortes de tensión) se propagan en una
dirección perpendicular a la extensión principal incremental. Las venas en échelon son planas,
espaciadas regularmente y paralelas entre sí en una disposición superpuesta o escalonada. Cada
veta es relativamente corta, pero en conjunto forman una zona de cizallamiento frágil lineal
delimitada por dos superficies envolventes paralelas que no son de material. El rumbo de las vetas
individuales es oblicuo a la zona lineal como un todo, que se interpreta como una zona de falla
potencial discreta. Las vetas en échelon están inclinadas contra la sensación de cizallamiento de
acuerdo con el inicio de las fracturas de extensión normales a la extensión incremental dentro de
la zona de falla. Las vetas de solución de presión subortogonales a las vetas son comunes en la
roca adyacente.

Dado que los cortes de tensión se inician como incrementos tempranos de deformación frágil, la
alineación de las venas en échelon es paralela a una posible fractura por cizallamiento inicialmente
segmentada en juntas o venas dilatantes paralelas y alineadas oblicuamente. Las venas y las
fracturas asociadas se unen y forman una zona de falla más grande durante una mayor
deformación.

Las venas en échelon se vuelven sigmoidales (es decir, en forma de S o Z) cuando la parte central
de la veta (junto con los puentes de roca en el medio) ha girado mientras la vena se alargaba
durante la deformación.

Cualquier nuevo incremento de alargamiento de la vena o apertura de nuevas venas sigue las
direcciones de deformación principal incremental (alargamiento paralelo a la compresión máxima
del campo lejano, apertura paralela a la extensión). El sentido de rotación de la parte central de la
veta con respecto a las puntas indica el sentido de cizallamiento.
Se identifican dos tipos geométricos de matrices conjugadas:

- Pares conjugados de matrices en échelon donde las porciones no distorsionadas de las venas en
ambas matrices son paralelas; la longitud de las fracturas en extensión biseca el ángulo agudo
entre las posibles fracturas por cizallamiento conjugado.

- Pares conjugados de matrices en échelon donde las porciones no distorsionadas de las venas en
una matriz no son paralelas a las porciones no distorsionadas de las venas en la otra matriz. En ese
caso, el par es divergente si las venas de ambas matrices divergen hacia la intersección del par
conjugado; a la inversa, el par conjugado es convergente.

Cortaduras por tensión y estilolitas "anticrack"

Los límites de las venas se alejan unos de otros a medida que la vena se abre. Por el contrario, las
superficies de una articulación estilolítica se acercan entre sí a medida que se forma, lo que originó
el nombre de “anticrack”. Los cortes de tensión y estilolitas emparejados pueden ocurrir como
fracturas pinnadas en lados opuestos de fallas pequeñas, en particular en las extremidades de
planos de deslizamiento menores. Las direcciones de apertura y cierre ayudan a definir la
dirección de deslizamiento.

Articulaciones pinnadas

Las uniones pinnadas están dispuestas en diagonal, a menudo en un arreglo escalonado en la

vecindad inmediata del plano de falla. Se cruzan con el plano de falla asociado normal al vector de
deslizamiento y subtienden un ángulo agudo con él que se cierra en la dirección del movimiento
relativo de los bloques que contienen las juntas. Dependiendo de su orientación con respecto al
movimiento relativo del bloque de falla, pueden ser juntas de corte o tensión. Las fracturas
pinnadas pueden formarse tanto antes como durante el deslizamiento en la falla asociada. Se han
producido en experimentos con una amplia variedad de materiales.

Cuerpos intrusivos

Los sistemas de juntas en rocas ígneas pueden resultar de tensiones establecidas durante el
enfriamiento de la masa rocosa dentro o fuera de un campo de tensión regional. Estos sistemas de
juntas pueden ser bastante diferentes de los sistemas de juntas de las rocas circundantes.

Fracturas primarias de rocas plutónicas

Los sistemas de fracturas primarias (sistemas de articulaciones primarias) de rocas plutónicas son
vetas dilatantes y diques directamente asociados con el emplazamiento y con el tejido de flujo de
los cuerpos plutónicos. Comúnmente son venas de diferenciados ígneos (aplita a pegmatita) y
venas recubiertas por minerales hidrotermales y deutericos. Se han identificado cuatro sistemas
principales y, de manera incómoda, se les dio los mismos nombres que los sistemas conjuntos en
sedimentos deformados.

- Las juntas transversales son consistentemente normales a la línea y el plano de flujo, se

consideran fracturas de extensión estándar y muchas llevan empastes de venas (magmáticos y
minerales)

- Las juntas longitudinales (juntas en S) son casi siempre venas de inmersión pronunciadas
paralelas a las líneas de flujo y ortogonales a los planos de flujo.

- Las juntas planas (o juntas de estiramiento) son paralelas a los planos de flujo. A menudo se
limitan a las partes superiores de las intrusiones.
- Las juntas diagonales (o juntas marginales) forman ángulos diedros agudos con las juntas
transversales. Son venas empinadas oblicuas a las líneas de flujo y ortogonales a oblicuas a los
planos de flujo.

Las articulaciones frágiles paralelas a las articulaciones primarias suelen estar simétricamente
relacionadas con los contactos del cuerpo, lo que sugiere un origen durante el emplazamiento y el
enfriamiento.

Los diques a menudo forman conjuntos y enjambres asociados con cuerpos plutónicos. La
inyección a lo largo de las articulaciones es su principal modo de ubicación. Por lo tanto, sirven
para delinear el patrón de falla asociado con la intrusión.

Los diques radiantes son comunes alrededor de los cuellos volcánicos y las intrusiones de poca
profundidad (hipabissal). Los diques de anillo y las láminas de cono son concéntricos alrededor de
un centro intrusivo.