guía para escuchar lo desconocido / lo no escuchado ACCIÓN 1: Escuchar el sonido de una lavadora.
Leer “Escuchar las estrellas” en el ciclo de
algodón de la lavadora. ESCUCHAR LAS ESTRELLAS.
Hacer nuevos conocidos: escuchar para
aprender sus métodos para alcanzar el éxito. (19 de noviembre 1952, Sagitario) Hemos vivido acá por un tiempo Tercer piso, vista bonita pero sin jardín. Siempre me ha molestado esto, no tener jardín. Y las estrellas, particularmente con los bichos y los niños. Ellos son mayores ahora pero aún lo son. Después vino la avalancha de lodo, de repente, no sé de dónde. Pero lo largo y corto de esto es que ahora estamos en la planta baja. No más estrellas, no más arrastrar el mercado, no más carga de carritos y niños pesados arriba y abajo de tres tramos de escalones. Solo una linda entrada en la planta baja, y por supuesto el jardín ahora es nuestro. A veces podemos escuchar los ruidos de abajo. Gritos y golpes, destrozos de muebles contra los muros y el techo sin duda. Lo tratamos de ignorar. Yo estoy segura de que va a parar eventualmente. El lodo se está secando, nosotros hemos sembrado semillas, para el verano debe convertirse en un césped verde lindo para jugar.
Pregunta 1: ¿En qué piso vives?
Leer “Moralidad de lo invisible” MORALIDAD DE LO INVISIBLE.
El sonido, como material y como concepto, ilumina los
procesos de lo no visto del mundo y nos invita a ver cosas con una luz diferente. Escuchar, nosotros accedemos a la posibilidad del mundo desde la posibilidad del tiempo y la posibilidad del espacio, participando en la pluralidad de la realidad y retando la actual singularidad que se presenta. La movilidad invisible del sonido informa, incita esta exploración e invita al escucha a entrar entre pedazos de posibilidades para entender la construcción heterogénea de lo real y participar en su reconstrucción: crear un mundo de espacio-tiempo de posibilidades efímeras y hacerlo contar dentro de las nociones actuales de la actualidad. La moralidad del compromiso sonoro de la moralidad de lo invisible. Esto no produce la totalidad de la imagen, y tampoco cumple los códigos normativos preexistentes, pero responde a la demanda de lo oscuro cuando nosotros hemos perdido nuestro anclaje en cosas visuales y reglas, y somos obligados a suspender nuestros hábitos y valores, para escuchar y así ver la pluralidad compleja de lo real como posibilidades simultáneas que incluye también lo imposible: lo que no tiene parte en la actual singularidad; y esto nos hace reconsiderar también nuestra parte. ACCIÓN 2: Abre la ventana y haz un sonido de ‘cuckoo’
Leer el siguiente el siguiente extracto de
“¿Estamos mirando un reloj del fin del mundo acercándose a la medianoche o simplemente mirando por la ventana de la cocina? vi (hablando por un micrófono) Nosotros hemos visto conejos y solo los estamos siguiendo, porque han ido por un hoyo debajo de un árbol. Nosotros solo vamos a ver si podemos ver el hoyo del conejo. Nosotros no queremos asustarlos. Nosotros solo queremos ver el conejo, ver donde viven. Fantástico, ahí, ¡mira! Es como los agujeros de los árboles… No es fantástico, ¡fantástico! Qué vista… Bueno, dejémoslos ser… No, es una ardilla Pero sobre todo veo conejos Yo acabo de descubrir otro hueco Ahí veo, sí, viste otro De ahí viene Una madriguera, un laberinto Estos son los mejores avistamientos de todos los tiempos (habla por un micrófono) Esto es muy emocionante Nosotros estamos caminando sobre una red… Mira el periquito. Míralos a ellos, sentados en la tierra, caminando sobre la tierra Periquitos del cuello anillado, una paloma torcaz, conejos Nosotros estamos caminando sobre su… a lo largo del techo de sus madrigueras Ellos pueden oírnos probablemente revoloteando en el techo Por eso es que todos se han ido Todos ellos están escondidos, se fueron por sus hoyos (habla por el micrófono) Y nosotros estamos dejando el sonido del pájaro carpintero Un sonido distante del pájaro carpintero Me pregunto qué son esas jorobas El lugar de los conejos Es increíble, este es un momento memorable, un área memorable, ¿no te parece? Esta es tierra fértil… (habla por un micrófono) Pequeña área, no más grande que… cuatro canchas de tenis. Fértil. Pregunta 2: ¿De qué estás excluida/o? - ¿Cuál es tu historia?
Ve por una caminata en la calle y lee “El valor
de un sonido fluido” en voz alta mientras te mueves por ahí: -El valor de un sonido fluido
Para Étienne Balibar, la piedra angular de la actividad
política es la tensión de la igualdad, el tirón entre la libertad y la igualdad, que es un lugar de conflicto que permite y llama a la participación, y además representa la política como una posibilidad de lo político: donde la ruptura sucede y la transformación puede ocurrir; donde lo excluído puede encontrar una voz y hacerlos a ellos contar y en donde la inclusión puede ser pluralizada. El neoliberalismo capital neutraliza esta tensión y permite el conflicto insignificante, banal en la luz de un flujo indiferente de cosas y gente reducida al propósito de la utilidad económica y su valor. En su esfera de cosas, bienes, gente, límites e identidades, adquieren movimiento. Esto está en el fluir pero no son fluidos. Esto no tiene el poder de transformar y ser transformativo. Estas cosas no son cosas como la concepción de las cosas que hacen sonido, para ser escuchadas y para contribuir a la composición plural de la actualidad. De lo contrario, estas están reducidas a la articulación del fluir armonizado que ni siquiera es una discusión audible. Por lo tanto, éstos no son sujetos autodeterminación se agencia, pero definen identidades por la medición de su utilidad. Balibar llama esto dentro del desarrollo de una nueva ética del cuidado propio, en donde los individuos tienen que moralizar su propia conducta sometiéndose al criterio de maximización de la utilidad o la productividad de su individualidad. El resultado es una individualidad negativa y una comunidad negativa o lo que Balibar llama ‘la fase oscura de la ética’, donde la solidaridad y la seguridad social son desmantelados y los sujetos quedan desafiliados de la comunidad para vivir como emprendedores de sus propias circunstancias. Entiendo esto como una fluidez negativa, una fluidez ligada a la dicotomía entre pertenencia fija, coaccionada y huida desesperada. Como ésta no tiene agencia autónoma pero representa una movilidad reactiva dependiendo de lo que se mueva o lo que permanece quieto. En contraste, el fluir y la naturaleza predicativa del sonido, su agencia transformadora y potencial imaginario, puede contribuir a la crítica de su emprendimiento precario y su atención a la exclusión interna y externa. Investigando la movilidad capitalista a través de la sensibilidad sonora que nos puede dar acceso a una dinámica coercitiva de su fuerza y al fluir homogéneo y por ende obligarnos a interrumpir el monocordio de el neoliberalismo y hacerlo sonar como una polifonía: ‘compuesto de diferencias, formadas por el cruce visible y por los límites invisibles’. ACCIÓN 3: Gire un perno 10 veces hacia la derecha y 10 veces hacia la izquierda. Escuche atentamente el apriete y desatornillado del espacio entre el perno y el tornillo.
Pregunta 3: ¿A quién y qué estás excluyendo?
Leer el poema de la poesía del Talibán.
-Poema ¿Quién soy yo? ¿Qué estoy haciendo? ¿Cómo llegué acá? No hay una casa o amor para mi; No tengo hogar, no tengo patria. No tengo un lugar en este mundo; Ellos no me dejan descansar. Hay tiros disparados, y pólvora acá, Una lluvia de balas. ¿Entonces a dónde debería ir? No hay un lugar para mi en este mundo. Yo tenía una de mi padre y de mi abuelo, En donde conocí la felicidad, Mi amada y yo viviría ahí. Esos eran tiempos hermosos; Nosotros nos sacrificaríamos por los otros. Pero de repente un visitante llegó; Le permití quedarse por dos días, Pero después de estos dos días, El visitante se convirtió en el anfitrión. Él me dijo, ‘Tu llegaste hoy’. Najibullah Akrami Acuéstate en el piso, estira los brazos al aire y lee ‘Un nuevo dios para un mundo posible’
-Un nuevo dios para un mundo posible
Ningún mundo sonoro posible ni la fluidez negativa de la
persona y la materialidad de un contexto neoliberal puede basarse en principios morales preexistentes, emociones compartidas, o dios. Los mandamientos, reglas códigos culturales o el poder no se adhiere a la movilidad invisible del sonido y tampoco a salvaguardar los territorios de pertenencia e identidad en el capitalismo transnacional. La realidad tautológica del neoliberalismo evita la ética convencional de solidaridad y sociabilidad. La frase de Balibar ‘El lado oscuro de la ética’ reconoce una desincorporación del individuo de la práctica del contrato social, donde las nociones de solidaridad y seguridad son negociadas por el conflicto de diferentes intereses. En su lugar viene un derecho humanitario no basado en identidades positivas y la negociación de las diferencias, pero controlando y unificando lo heterogéneo (el desempleado jóven, el migrante, la mujer, el homosexual) en un múltiplo impar, en el que cuentan los no contados, pero de manera crucial no pueden hacerse contar, no pueden hacer oír sus voces y, por lo tanto, no se les permite participar y hacer que esa participación genere impacto en la realidad de lo actual, que sigue siendo la posibilidad tautológica de la realidad, cuyo dios es el flujo neoliberal y cuya ética sigue el código moral de En otras palabras, los derechos humanitarios del capitalismo global describen los derechos post-morales y post-éticos de una absoluta posibilidad, que inscribe esos derechos sobre su imagen e impide la inscripción de cualquier otra cosa. ACCIÓN 4: Grita tu nombre una y otra vez en el fondo de una taza o vaso hasta que sientas el borde apretado alrededor de tu boca. ACCIÓN 5: Escucha el murmullo del hub de internet
Leer ‘Éticas de la escucha’ (extracto editado):
-Éticas de la escucha
Recientemente estuve fuera, en otro país. Se veía y se
escuchaba no tan diferente a este, con calles, árboles, casas, gente y sus perros. La gente tenía ojos, orejas y bocas, justo como nosotros. Ellos miraron, escucharon y hablaron como nosotros lo hacemos. Pero dado que no pude reconocer lo que había escuchado en el ambiente acústico a mi alrededor por la forma en la que hablaban al respecto tuve que asumir que lo escucharon todo de manera muy diferente. Su enfoque estaba en el proceso y en la noción de la existencia como el hacer, lo que significaba que lo que estaba descrito era el movimiento, el presente hacer del ser, no su totalidad material ni el conglomerado de las pasadas ocurrencias y los logros. Este enfoque en el proceso privilegiado y que fue privilegiado por el oído, que desvió el ojo del material sobre la cosa: sobre las posibilidades que propone como cosa, como objeto existente en el tiempo. El material de este mundo, mientras lo veo y lo escucho de la misma manera como en casa, fue claramente apreciado de una manera completamente diferente por la población indígena. Y entonces era diferente: su materialidad, su estado y lo que podría hacer y habilitar en términos de comprensión, imaginación y el propósito eran muy diferentes. La consideración resultante de valor y realidad fue completamente diferente, y así aunque fuera de este mundo se veía y sonaba como el nuestro, el pensamiento que manifiesta la capa invisible de sus procesos y resultados en el sentido de la Esto es difícil de imaginar, difícil de describir, pero entendí que sus ojos vieron movimiento desenfocado. Parecido al mirar una fotografía tomada en velocidad lenta, ellos vieron movimiento confuso que tuvo definición por el sonido. Pero esta definición no se preocupó por el tamaño, locación, contorno o distancia, pero fue la definición fluida de su posibilidad: lo que se proponía ser en este momento, produciendo su propia situación contingente. Por tanto, lo que quedó claro es que su audición de definición no tiene que ver con dimensionar, con ordenar lo escuchado en una jerarquía de valor de uso de la identidad, ni de colocarlo en un espacio preestablecido. Mas bien, escuchar reformula la definición como una actividad contingente de definir, de dibujar la cosa en la fragilidad de los que podía ser continuamente en lugar de lo que muestra permanentemente. Mi anfitrión se burló de mí cuando les dije de mi cansancio de tratar de ver y escuchar el mundo como ellos. Se burlaron de mi deseo de situarme, mis miedos de perderme, mi necesidad de dominar el objeto para conocerme a mi mismo. Ellos replicaron cuán difícil debe ser tener el ojo, más que como un movimiento que vaga libremente, capturado por el objeto inmóvil, para ser empujado contra él todo el tiempo; tener que tener una posición contra otra forma más que disfrutar la sin-forma compartida. Ellos sintieron que debe ser una carga poseer cosas, tenerlas o quererlas, cuando tu Pregunta 5: ¿En qué estás incluído?
Pararse en una silla y leer ‘Éticas de lo
inaudible’ -Éticas de lo inaudible
Mientras que la desincorporación neoliberal de los
derechos sociales ignora la tensión entre igualdad y libertad en la que se basa la actividad política como posibilidad de la política, el sonido hace que esta tensión sea sensible y pensable, e invita a participar también a aquellos que no tienen parte como 'una parte de todos en absoluto'. Para esta ‘parte de todos en absoluto’, ser realmente parte de todos, esto necesito incluir también lo inaudible: lo que por razones fisiológicas, culturales, ideológicas y sociopolíticas, no podemos y no queremos escuchar. Así, una vez que estamos en sintonía con lo invisible y practicamos la escucha como la negociación de diferencias móviles y posibilidades invisibles, necesitamos prestar nuestro oído a lo que todavía permanece inaudible: aquellos 'que no tienen parte', las voces borradas y sobre-escuchadas, que no pueden contar en la constitución de una actualidad o de sus Lo inaudible es lo posible imposible de este mundo. Es su horizonte sociopolítico más allá del cual pretendemos no ver nada ni siquiera cuando empezamos a escuchar un murmullo. Las éticas de esto inaudible es una ética de la práctica, la práctica de la escucha de lo que suena también pero nosotros no queremos oír, para dar acceso a la esfera de la influencia. ACCIÓN 6: Tomar un pasaporte cerca al oído y escuchar cuando pasas las hojas.
Pregunta 6: ¿Estás escuchando lo inaudible?
ACCIÓN 7: Poner tu oído contra una ventana y escuchar lo que sea que esté afuera.
Leer ‘Geometría Fractal’ de la Cristalografía
sobre lo escuchado afuera: -Geometría Fractal (extracto)
Los fractales son bien enredados
mucho para decirlo: la longitud de cualquiera línea costera depende de la longitud que tenga una regla. Un veraneante perdido que pasea a lo largo de las patrullas de la playa una espacial brecha entre dimensiones ACCIÓN 8: Poner la boca contra la ventana y tratar de decir Hola