UNIVERSIDAD DE SUCRE

SILENCIO ADMINISTRATIVO

NATALIA MARIA GARCIA MESTRA

DERECHO V

DERECHO ADMINISTRATIVO

RAFAEL CESPEDES SALGADO

SINCELEJO- SUCRE

2020
Las peticiones que sean elevadas por parte de los ciudadanos a las entidades
públicas, deben ser contestadas en un término legal previamente establecido y
resolviendo de fondo la consulta efectuada, por tal razón es necesario que el
Estado tome las medidas necesarias que permitan el libre ejercicio de este
derecho. Teniendo esto en cuenta, el silencio administrativo entendido en
palabras generales se puede decir que es el hecho en el cual un ciudadano le
solicita algo a la administración publica y esta no responde, por ejemplo,
solicitar un derecho de petición a la alcaldía municipal y que estos nunca den
respuesta ni positiva ni negativa; esto lo podemos encontrar en la ley 1437 de
2011 específicamente en el capítulo VII. Además de esto también se tiene que
el silencio administrativo se divide en silencio administrativo positivo y
silencio administrativo negativo, los cuales se encuentran especificados en la
misma ley.
Se puede deducir que la intención que tiene el legislador al regular esta figura
jurídica es dar respuesta a favor del ciudadano afectado debido a la falta de
respuesta de la administración, es decir, si la administración no resuelve el
procedimiento administrativo solicitado, tenemos que incumplió la obligación
de resolver y a raíz de esto la ley le da un sentido estimatorio o desestimatorio
a esa falta de respuesta al derecho solicitado.
¿Qué quiere decir esto? Aquí es cuando hablamos de silencio administrativo
positivo y negativo. Nos referimos al primero también como estimatorio, y lo
encontramos previsto en el articulo 84 de la Ley anteriormente mencionada:
“Solamente en los casos expresamente previstos en disposiciones legales
especiales, el silencio de la administración equivale a decisión positiva. Los
términos para que se entienda producida la decisión positiva presunta
comienzan a contarse a partir del día en que se presentó la petición o recurso”
En la misma ley encontramos en su artículo 83 explicado el silencio
administrativo negativo al disponer que, una vez presentada la petición, si han
transcurrido tres meses sin que se haya notificado la decisión que la resuelve,
se entenderá que la respuesta es negativa. Si la ley señala un plazo superior a
los tres meses anteriormente mencionados para resolver dicha petición sin que
esta haya sido decidida, el silencio administrativo se produce a partir de un
mes contado a partir de la fecha en que debió ser tomada la decisión, de tal
forma se puede observar en la Ley 1437 que en caso de conformarse el
silencio administrativo negativo, esto no genera una exoneración de
responsabilidad a las autoridades, tampoco las exime del deber de decidir
sobre la petición inicial a menos que el interesado haya hecho uso de los
recursos contra el acto o que habiendo acudido a la jurisdicción de lo
contencioso administrativo se haya notificado auto admisorio de la demanda.
En Colombia la regla general dice que el silencio administrativo es negativo
pero existen ciertos casos que la ley había previsto que señalan que puede ser
positivo a favor del ciudadano solicitante, los términos en este caso son
contados a partir del día en que se presentó la petición o recurso pero también
es posible que este acto pueda ser objeto de revocatoria directa, por parte de
las mismas autoridades que los hayan proferido o sus superiores jerárquicos,
como lo dispone el artículo 93 de la Ley 1437.
Haciendo una búsqueda se encontró con la Sentencia 00219 del 2018 del
Consejo de Estado, con la consejera ponente Stella Carvajal; la sentencia de
segunda instancia tuvo sus hechos en el 2011 la dirección de rentas e ingresos
de la secretaria del Tolima expidió un requerimiento en el que propuso
modificar a Bavaria las liquidaciones privadas del consumo de cervezas,
sifones y mezclas que correspondieran a cuatro meses del año. La sala se
pronunció al respecto: “En relación con el silencio administrativo positivo, la
Sala ha señalado que se trata de un fenómeno en virtud del cual la ley
contempla que, en determinados casos, la falta de decisión de la
Administración frente a peticiones o recursos elevados por los administrados,
tiene un efecto que puede ser negativo o positivo”. La demanda se contesto de
la siguiente manera:
“Inexistencia de vulneración de principios constitucionales y legales, por
cuanto el Departamento del Tolima no trasgredió los derechos fundamentales
invocados por la actora, pues el actuar de la Administración se rigió por el
marco jurídico que rige la materia”
«Interpretación errónea de la norma», al considerar que la demanda presentada
por Bavaria S.A. carece de fundamentos legales que sustenten la nulidad de
los actos demandados.
«Falta de presupuestos esenciales para la configuración del silencio
administrativo positivo» pues, en su sentir, la petición “se respondió dentro
del término legal y en la dirección del domicilio de la empresa registrada por
última vez”. Además, la contribuyente no adelantó el procedimiento
establecido por el artículo 85 de la Ley 1437 de 2011, para invocar el silencio
administrativo positivo.
Hasta este momento hemos desarrollado el silencio administrativo que ha
denominado la doctrina y la jurisprudencia como silencio administrativo
sustancial, para referirse al que se origina por petición inicial al presentarse
derecho de petición en interés particular. ahora vamos a desarrollar el silencio
administrativo procesal que lo identifica la jurisprudencia y la doctrina, como
aquel que se produce como materialización del ejercicio del autocontrol en la
presentación de recursos en el procedimiento administrativo, y en el término
de dos meses no se ha recibido notificación que defina o estudie de fondo el
recurso contra el acto administrativo propiamente dicho o contra un acto
presunto. El silencio administrativo procesal igualmente opera como forma
general un efecto negativo, y solo se produce positivamente cuando en forma
expresa exista norma que lo contemple, aplicación de taxatividad y del
principio de legalidad. El silencio procesal administrativo, al igual que lo
explicado en el silencio sustancial, su efecto depende de la voluntad o potestad
del interesado, se parte que vencido el termino se produce el silencio
administrativo negativo, este tiene abierta la posibilidad de acudir ante el
aparato jurisdiccional por vía de la acción de nulidad y restablecimiento del
derecho, pero puede optar por esperar la decisión, la administración mantiene
la competencia, como deber para pronunciarse sobre el recurso mientras no se
haya iniciado.