El Lenguaje y la Discriminación

Desde el inicio de los tiempos o de los individuos se ha determinado la

necesidad de cada uno de ellos para comunicarse con el otro, es decir, que desde
los tiempos más remotos como seres humanos nos hemos visto en la obligación
de desarrollar distintos sistema de códigos o signos, que nos permitan expresar a
través de su empleo, cada sentimiento, idea o pensamiento que queremos
compartir con otra persona; esto se ha logrado a través de lo que se conoce como
el lenguaje, siendo el mismo considerado como cualquier sistema de signos o
señales que te permite entender determinados asuntos o transmitir un mensaje
propio.

Sin embargo debido a la multiplicación de los seres humanos y a las

grandes distancias que pueden existir entre un territorio y otro, nos ha llevado a
que el lenguaje pueda ser diferente dependiendo del territorio o lugar donde nos
encontremos; lo que ha creado grupos de personas que comparten un mismo
idioma pero un lenguaje diferente de un territorio a otro sea vecino o cercano; un
ejemplo de ello en nuestro país Venezuela, seria la diferencia que existe en el
lenguaje que se emplea en el territorio Capital (Caracas) a diferencia del lenguaje
que se utiliza en el territorio del Estado Zulia, siendo esto evidencia de que aun
cuando se habla del mismo idioma se pueden presentar distintos tipos de
lenguajes que se tornan propios del territorio o zona determinadas.

Bajo esta misma idea empieza a surgir el recelo que puede existir entre
estos grupos de personas por causa de su lenguaje; lo que quiere decir, que se
ha evidenciado que estas particulares pueden causar tratos diferentes, malos e
incluso crueles a una persona por simplemente formar parte de un lenguaje
distinto al propio, esta descripción corresponde directamente a lo que hoy
conocemos como “la discriminación”; la misma se considera como el rechazo a
una persona o grupo de personas por causa de un color de piel, ideales,
comportamiento o por el territorio donde habita. En este caso en particular
enfocamos la discriminación por causa del lenguaje que se emplea. Tomando en
cuenta esto, es sencillo comprender que es una situación que vemos a diario y
que generalmente se da en nuestro alrededor. Cuando ofendemos a través de
palabras a una persona porque simplemente tenga un acento distinto al nuestro,
estamos hablando de discriminación por lenguaje; esta situación la vemos
constantemente desde los colegios hasta las grandes urbanizaciones, por
ejemplo, cuando un niño se burla de un zuliano porque dice palabras distintas a
las suyas como “que Molleja” o “verticale”, para expresar un sentimiento de
molestia se habla de una discriminación por lenguaje, ya que el niño está
expresando rechazo y además ofendiendo a otro solo por su forma sistema de
códigos o dialecto que maneja, destacando que el lenguaje además es algo que
se desarrolla en base al territorio donde nacemos o crecemos.

Dejando claro esto la discriminación por lenguaje puede ser una situación
bastante peligrosa, no solo porque la discriminación sea algo malo, sino que
además es penado por la ley en muchos países o considerada como algo
totalmente ilegal, basándose en que la misma nace de la discriminación por raza u
origen nacional que son prohibidas en diferentes leyes ya establecidas. Además
de ello el rechazo por causa del lenguaje resulta peligrosa, porque no solo causa
daño a quien la emplea (generando sentimientos de odio y rechazo por un
individuo como el), sino también a quien recibe la discriminación u ofensa (ya que
puede generar situaciones como daños psicológicos irreversible, que pueden
causar que una persona cometa daños físicos graves en contra de quien lo ofende
e incluso contra su propia vida); considerando esto uno de los peligros más
grandes que surgen de la discriminación por lenguaje. Sin embargo, existen caso
donde las personas por motivo de discriminación por lenguaje no logran obtener
empleos o entrar a diferentes sitios tanto públicos como privados aunque cuenten
con mucha reparación, por el simple hecho de que su forma de expresarse o su
lenguaje o es el común o propio de ese territorio; esto sucede mucho actualmente
con los venezolanos fuera de nuestro país, ya que se está viviendo mucho el
rechazo por el simple hecho de ser venezolano, entonces al llegar a un territorio
distinto al nuestro con el solo hecho de expresarnos muchas veces somos
rechazados, ofendidos en incluso maltratados, sin que esas personas se toman la
tarea siquiera de conocer la personalidad o intensión de cada individuo
independientemente de lenguaje.

Muchas veces este tipo de rechazo no da no solo por la presencia de un

vocabulario determinado o especifico, sino que incluso cuando existen casos
donde aun hablando el mismo lenguaje se da este rechazo por el simple hecho de
utilizar mal ciertos rasgos gramaticales o acentos errados, lo directamente lleva a
el individuo que lo empleo a un estado de exclusión por parte de una persona e
incluso toda una sociedad. Esto es evidencia de que el lenguaje no solo nos
permite comunicarnos con otros y comprender mensajes externos, sino que más
allá de esto el lenguaje nos ayuda a congeniar o congraciar con otras personas y
en muchos casos por motivo de discriminación por lenguaje, también a ser
rechazos por el sistema de códigos con el que nos desarrollamos por causa del
territorio donde crecemos, mismo que determina directamente el lenguaje que
empleamos o maneamos. Por eso es muy importante entender que la
discriminación sea por lenguaje o por cualquier otra causa está mal y que no
conlleva a ninguna dirección más que el fracaso o la pérdida total del humanismo
de una persona, situación que no genera ningún beneficio positivo a un individuo
sino todo lo contrario.