SER DOCENTE ES IGUAL A TENER LA OPORTUNIDAD DE TRANSFORMAR

IDEAS

Si me hubieran preguntado muchos años atrás sobre si podría ser capaz de ser profesora, lo

más seguro es que respondiera negativamente, esa percepción cambió cuando me enfrenté a las

únicas experiencias como docente que he tenido. En la universidad no enseñan un método o

técnica para enfrentarse por primera vez a un grupo de estudiantes entre los 8 y 10 años. Por

fortuna, el trabajo en equipo brinda la oportunidad de compartir inquietudes, inseguridades y

experiencias de las que el docente se puede apropiar para construir sus estrategias.

En la actualidad, desearía tener la oportunidad de compartir con colegas ideas para la

ejecución de los procesos de enseñanza aprendizaje. Así como también tener la oportunidad de

escuchar de la voz de los estudiantes sus inquietudes, intereses y motivaciones para cumplir y

alcanzar sus metas. Considerando que ser docente es un compromiso que requiere no solo

enseñar temáticas distintas a los estudiantes, también es aprender de cada experiencia de la vida.

Cada vez que se adquiere esta responsabilidad se tiene la oportunidad de llegar a la mente de los

estudiantes para que inicien una transformación en su vida personal y social.

Considerando que ser docente no se trata solamente de asistir a diario a un aula de clases a

dictar un contenido a un grupo de estudiantes, también es asumir retos que consisten en

acumular conocimiento tanto académico como didáctico, suficientes para imaginar el modo

adecuado para aplicarlos en el ambiente de aprendizaje. Es por ello que la creación de ambientes

de aprendizaje propicios para el intercambio de ideas permitirá a los estudiantes ser conscientes

de la importancia de su educación y de compartir con sus pares experiencias de vida.

 Ser docente también es ser consciente que se trabaja con seres humanos con sentimientos,

valores y virtudes, por tanto, cada acción que se ejecute, positiva o negativa, tiene repercusión en

los estudiantes. Un docente debe ser reflexivo acerca de la labor que tiene en la sociedad y con

base en ello demostrar valores éticos, carisma, confianza, porque después de todo hay una

interacción entre individuos, porque está claro que los estudiantes aprenden de las personas con

que les caen bien y es un punto indiscutible que a todos los seres humanos les gusta estar

rodeados de la gente que confía en ellos y en las que se pueda confiar.

Ser parte de un programa que se preocupa por la equidad en la educación en Colombia,

permitiría a esta aspirante estimular y fortalecer su vocación de servicio, de brindar herramientas

a los estudiantes que les contribuyan a descubrir su espíritu de liderazgo, creer en la justicia

social mediante procesos pedagógicos en los que se es consciente del papel del individuo en la

sociedad. Además se le permitiría a la docente la posibilidad de aportar con proyectos de aula

basados en fortalecer competencias y habilidades en lectura y escritura, mediante la creación de

talleres de literatura y escritura creativa, clubes de lectura en los que los estudiantes podrán

explorar sus capacidades en este aspecto.

POR:

KETTY LÓPEZ CERVANTES