Se juega moviendo los

peones, que pueden

capturarse entre sí.

Meta: llegar con la mayor

cantidad de peones que se
pueda al otro lado.
Se juega moviendo los
peones, que pueden
capturarse entre sí.

Cuando un peón llega al otro

extremo, se convierte en la
pieza que originalmente
ocupa esa casilla

Meta: Capturar 6 peones.

Se juega moviendo los
caballos, que pueden
capturarse normalmente
entre sí.

Meta: llegar hasta el extremo

opuesto con uno de sus
caballos.
Se juega moviendo los alfiles y
capturando las monedas en orden
del 1 al 6.

Las monedas están boca abajo al

comenzar el juego. Si al llegar a
ella no corresponde al número
correcto, se vuelve a dejar boca
abajo.

Meta: tomar las 6 monedas antes

que mi adversario.
Obligado a comer, cualquier
pieza que pueda comer otra
del contrario esta obligado a
hacerlo.

Meta: Quedarse sin piezas.

Se integra el azar al juego clásico.
Cada jugador deberá sacar una
carta que le indicará que pieza
mover. Se comienza realizando
cuatro jugadas libres de peón por
jugador

Meta: Comerse al rey del oponente.

Se juega un ajedrez “normal”
pero cada uno tendrá cierto(s)
objetivo(s) que cumplir.

Meta: Al cumplir los objetivos

y se termina la partida.
Cada jugador mueve su caballo
intentando capturar una de las
letras que se encuentran sobre
el tablero. Cada letra tiene su
respectivo puntaje, el que se
hará válido sólo si integra una
palabra.

Meta: Llegar a la cantidad de

puntos predeterminada
El tablero comienza vacío, y cada
jugador va incorporando una pieza a su
turno Luego comienzan a mover
respetando los movimientos de las
piezas de ajedrez.

Meta: colocar 4 piezas en línea, sea esta

vertical, horizontal o diagonal, o formar
entre ellas un cuadrado de dos casillas
de lado.

Las tarjetas secretas permiten a cada jugador

poseer un objetivo extra, desconocido para
el rival.
Se juega una partida “normal”,
pero sin reyes

El objetivo del juego es alcanzar

21 puntos contabilizando las
piezas atrapadas por su valor
“teórico” (Dama 9, Torre 5,
Caballo y Alfil 3, Peón 1)

El que se pasa… ¡pierde!

En un tablero con dos filas
menos, se juega a la variante del
ajedrez que se desee.
Se puede jugar clásico, come
come, ajedrez con cartas,
etcétera.

También se puede implementar

una modalidad “random” de
ubicación inicial de las piezas.
Cada jugador le asigna a su
contrincante una casilla la
cual será la puerta al recreo
en su territorio y con el
movimiento de las piezas
salen al recreo.

Meta: Sacar todas las piezas

al “recreo”.
Se juega por equipos.

Todos los jugadores de blancas de un

lado de la mesa, cada uno con su
tablero.

A medida que avanza el juego, el

coordinador anuncia “Tornado” y
todos los jugadores se pasan a la silla
de su derecha.

Cuando un jugador da mate, hace

ganar a su equipo.
De 2 a 4 jugadores, cada uno con un
caballo

A su turno, los caballos mueven

intentando comer monedas.

El que come la de menor valor,

mueve nuevamente.

Gana el que llega a la cantidad de

puntos que se predetermine.
Se juega una partida “normal”, en
la que los jugadores tienen como
objetivo introducir sus piezas en
el “arco” rival.
Al hacer un gol la partida
recomienza.

Meta: Hacer “goles” llevando

piezas al arco contrario
comprendido en las 4 casillas
centrales.
La consigna es ir comiendo las frutas
moviendo la pieza con su movimiento
correspondiente.

Es válido para jugar con cualquiera de

las piezas.

Se puede agregar obstáculos.