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1. GENERALIDADES DE LAS OBLIGACIONES FISCALES.

Siempre consideré elemental el tratar lo relativo a la obligación fiscal, antes de


introducirme en otros estudios; pero la perentoriedad de tratar otros temas, me lo
había impedido; hoy pretendo ocuparme de este asunto.
Es ineludible, antes de estudiar cualquier aspecto de las contribuciones, hacer
referencia a la esencia primordial de la obligación que llevan implícita.
Realmente toda contribución implica deber y todo deber, es una obligación. La
antigua definición romana de obligación que expresa, obligatio est juris vinculum
quo necessitate astringirmur alicujus salvedae rei secumdum nostral civitatis
jura1 no debe aceptarse entre nosotros.
La obligación no es un vínculo, sino que produce un vínculo; es decir: el vínculo es
una consecuencia de la obligación. Ese vínculo relaciona al acreedor y al deudor,
por necesidad de la naturaleza de la obligación.
Claro que como consecuencia de toda obligación surge un vínculo; lo que hoy
llamamos el vínculo obligacional, que relaciona al sujeto activo con el sujeto
pasivo; vínculo que se extingue al desaparecer la obligación; pero la obligación no
es el vínculo.
La obligación es un deber; un deber de dar, hacer o no hacer, que tiene el ente
deudor con el acreedor. Así, la obligación fiscal es el deber que el responsable
fiscal tiene en favor del fisco, que es quien tiene el derecho de exigir se cumpla.
No sólo se habla del deber de los sujetos pasivos, pues el enunciado de las
obligaciones fiscales no se agota aludiendo sólo al de pagar contribuciones, ya
que, además de los sujetos pasivos, existen otros responsables fiscales, que la ley
menciona a cada paso.
Por lo anterior, el estudio de la obligación fiscal no puede reducirse a hacer
mención del deber de pagar las contribuciones, ya que existen otras de entidades
que para ello, no necesariamente se observan como sujetos pasivos.
De acuerdo con lo anterior, no se considera adecuado el concepto con que Rojina
Villegas inicia el tomo quinto de su obra, Derecho mexicano, denominado
Obligaciones en el volumen I; concepto que en virtud de su general aceptación por
nuestros estudiosos, se transcribe; dice así el autor: "Tradicionalmente se ha
definido la obligación como un vínculo jurídico por virtud del cual una persona
denominada deudor, se encuentra constreñida jurídicamente a ejecutar algo en
favor de otra persona, llamada acreedor".
La definición transcrita es más deficiente que la dictada por el derecho romano, y
en ella se incurre en otro error; se limita el deber a personas.
Por lo que ve al concepto aportado por el derecho romano, creo que vale la pena
recordar que, en el lenguaje de aquellas gentes, frecuentemente se utilizaban
expresiones influidas por las formas literarias, y una de esas formas era, como
hoy, aludir al efecto mencionando la causa; tradición que nosotros no aceptamos
cuando nos referimos en forma técnica al derecho.
Así que no es de aceptarse que se llame vínculo a lo que es un deber en que se
origina el vínculo.
El otro aspecto que, especialmente en materia fiscal, no es de aceptarse en el
concepto transcrito, es que en esta materia no es necesario hablar de la existencia
de personas, físicas o morales, para hacerlas sujetos pasivos de la obligación,
sino que es suficiente la existencia de un patrimonio, aun sin titular, para
considerar como elemento del mismo, la obligación fiscal.
Para el propósito del estudio de la obligación fiscal, y pienso que, para cualquier
otro, por patrimonio debe entenderse un acervo de bienes y obligaciones
apreciables en dinero, organizados recíprocamente para un propósito, expresado
o no, voluntariamente.
Es de aclararse que el concepto que se critica no es exclusivo del jurista
mexicano, y que al mismo formulo la crítica expresada, porque la falta de la
aclaración del aludido concepto da origen a diversas distorsiones y dificultades en
la explicación de la aplicación de las obligaciones fiscales.
El concepto vertido de patrimonio es del llamado "afectación", que como se
recordará, no implica la existencia de titular, como erróneamente se hace cuando
se alude al llamado "personalidad".
Si para que el fisco pudiese hacer efectivo el crédito fiscal, y aún para que éste
existiese, fuera necesaria la presencia de personas, seguramente que en muchos
casos en que es evidente que se ha dado el llamado hecho generador, no se
podría hacer efectivo el derecho a cobrar la contribución relativa.
La reflexión anterior trae aparejado el estudio de la naturaleza del hecho
generador del crédito fiscal, que suele atribuirse a personas.
Como es sabido, el hecho generador es esa situación jurídica o de hecho prevista
para la ley, para que nazca la obligación de pagar la contribución que como
consecuencia de la misma se produzca, y a que se refiere el artículo 6o. de
nuestro Código Fiscal de la Federación. Este punto deseo exponerlo
posteriormente.
Del error de atribuir la obligación a personas, ha surgido otro error de nuestra
legislación fiscal federal; el de exigir la existencia de las mismas para que nazca la
obligación de pagar las contribuciones; y como las entidades federativas siguen
los lineamientos de las leyes fiscales federales para formular las suyas, el error se
repite en estas legislaciones.
El origen del error lo encontramos en el Código Fiscal de la Federación, que en el
artículo primero indica:
Las personas físicas y las morales están obligadas a contribuir para los gastos
públicos conforme a las leyes fiscales respectivas; las disposiciones de este
Código se aplicarán en su defecto y sin perjuicio de lo dispuesto por los tratados
internacionales de que México sea parte. Sólo mediante ley podrá destinarse una
contribución a un gasto público específico.
El error del Código se reitera en las otras leyes del sistema; así la Ley del
Impuesto sobre la Renta, en el artículo lo. dice: "Las personas físicas y las morales
están obligadas al pago del Impuesto sobre la Renta en los siguientes casos";
como en el Código Fiscal y en la Ley del Impuesto sobre la Renta, las otras leyes
fiscales federales, siempre se atribuye la obligación de pagar contribuciones a
personas físicas o morales; circunstancia criticable, pues no es necesaria
personalidad para que haya hecho generador.
1.1 INSCRIPCIÓN Y AVISOS AL REGISTRO FEDERAL DE CONTRIBUYENTES.
Todas las personas físicas o morales que realizan o pretendan realizar actividades
económicas en el país deben inscribirse en el Registro Federal de Contribuyentes
(RFC). Ello les permitirá contar con los medios necesarios para cumplir sus
obligaciones legales para el pago de impuestos. ¿Cuándo se debe presentar el
trámite? En el caso de personas físicas, dentro del mes siguiente al día en que se
tenga la obligación de presentar las declaraciones periódicas, de pago o
informativas, propias o por cuenta de terceros o cuando exista la obligación de
expedir comprobantes fiscales por las actividades que se realicen. Tratándose de
personas morales, la solicitud de inscripción se deberá presentar en el momento
en que se firme su acta o documento constitutivo, a través de fedatario público que
protocolice el instrumento constitutivo de que se trate, incluyendo los casos en que
se constituyan sociedades con motivo de una fusión o escisión. Cuando la
persona moral no se constituya ante fedatario público, dentro del mes siguiente a
aquél en que se realice la firma del contrato o la publicación del decreto o del acto
jurídico que les de origen. No estarán obligados a solicitar su inscripción en el RFC
los socios o accionistas residentes en el extranjero de personas morales
residentes en México, así como los asociados residentes en el extranjero de
asociaciones en participación, siempre que la persona moral o el asociante,
residentes en México, presente ante las autoridades fiscales dentro de los tres
primeros meses siguientes al cierre de cada ejercicio, una relación de los socios,
accionistas o asociados, residentes en el extranjero, en la que se indique su
domicilio, residencia fiscal y número de identificación fiscal. ¿Cómo se tramita la
inscripción al RFC? El trámite para la obtención del RFC se presenta en forma
personal en cualquier Administración Desconcentrada de Servicios al
Contribuyente (ADSC) adscrita al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
También se podrá iniciar el trámite (preinscripción) de manera electrónica a través
del Portal del SAT1 y concluirlo de manera presencial en alguna de las ADSC
previa cita, dentro de los diez días siguientes al envío de la solicitud electrónica.
Todas las personas físicas o morales que realizan o pretendan realizar actividades
económicas en el país deben inscribirse en el Registro Federal de Contribuyentes
(RFC). Ello les permitirá contar con los medios necesarios para cumplir sus
obligaciones legales para el pago de impuestos. ¿Cuándo se debe presentar el
trámite? En el caso de personas físicas, dentro del mes siguiente al día en que se
tenga la obligación de presentar las declaraciones periódicas, de pago o
informativas, propias o por cuenta de terceros o cuando exista la obligación de
expedir comprobantes fiscales por las actividades que se realicen. Tratándose de
personas morales, la solicitud de inscripción se deberá presentar en el momento
en que se firme su acta o documento constitutivo, a través de fedatario público que
protocolice el instrumento constitutivo de que se trate, incluyendo los casos en que
se constituyan sociedades con motivo de una fusión o escisión. Cuando la
persona moral no se constituya ante fedatario público, dentro del mes siguiente a
aquél en que se realice la firma del contrato o la publicación del decreto o del acto
jurídico que les de origen. No estarán obligados a solicitar su inscripción en el RFC
los socios o accionistas residentes en el extranjero de personas morales
residentes en México, así como los asociados residentes en el extranjero de
asociaciones en participación, siempre que la persona moral o el asociante,
residentes en México, presente ante las autoridades fiscales dentro de los tres
primeros meses siguientes al cierre de cada ejercicio, una relación de los socios,
accionistas o asociados, residentes en el extranjero, en la que se indique su
domicilio, residencia fiscal y número de identificación fiscal. ¿Cómo se tramita la
inscripción al RFC? El trámite para la obtención del RFC se presenta en forma
personal en cualquier Administración Desconcentrada de Servicios al
Contribuyente (ADSC) adscrita al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
También se podrá iniciar el trámite (preinscripción) de manera electrónica a través
del Portal del SAT1 y concluirlo de manera presencial en alguna de las ADSC
previa cita, dentro de los diez días siguientes al envío de la solicitud electrónica.
Régimen de Asalariados.
Son las personas que perciben salarios y demás prestaciones, procedentes de un
trabajo personal subordinado a disposición de un empleador, su declaración solo
es anual.
Régimen de honorarios (Servicios profesionales).
En este régimen se registran las personas que obtengan ingresos por prestar
servicios profesionales de manera independiente (no como asalariados) a
empresas, dependencias de gobierno o personas físicas en general, por ejemplo:
contadores, arquitectos, abogados, médicos, dentistas, ingenieros, entre otros.
Régimen de Arrendamiento de inmuebles. A este régimen se registrarán las
personas que obtienen ingresos por otorgar en renta o alquiler bienes inmuebles
como son: casa habitación, departamento habitacional, edificios, locales
comerciales, bodegas entre otros. Régimen de Actividades Empresariales. Para
este régimen es obligación registrarse, las personas que realicen actividades
comerciales, industriales, de autotransporte, agrícolas, ganaderas, de pesca o
silvícolas, ejemplos: Talleres mecánicos, imprentas, restaurantes, fondas,
cafeterías, cocinas económicas, cantinas, bares, tiendas de abarrotes,
misceláneas, minisúper, escuelas, preescolar, guarderías, ferreterías,
refaccionarias, artesanos, entre otros. Para tributar en este régimen, no se
establece por parte del SAT, un límite de ingresos. Régimen de incorporación
fiscal. En este régimen se podrán registrar las personas físicas que realicen
actividades empresariales, que vendan bienes o presten servicios para los que no
se requiera un título profesional para efectuarlos. También serán participes de este
régimen, las personas que aparte de realizar las actividades antes señaladas,
obtengan ingresos por sueldos y salarios, asimilados a salarios o ingresos por
interés. Podrán ser contribuyentes de este régimen siempre y cuando, el total de
los ingresos obtenidos por los conceptos antes mencionados, no supere los dos
millones de pesos al año.
1.2. Orientar a las personas físicas con respecto a sus obligaciones y deducciones
fiscales de acuerdo con la normatividad vigente.
Régimen de Asalariados
Estas personas del Régimen de Asalariados tienen diversas obligaciones ante el
SAT, las cuales, mencionaremos algunas en los siguientes puntos:

 Deberás iniciar el proceso con la inscripción en el RFC (Registro Federal de


Contribuyentes).
 Mantener siempre actualizada la información en el RFC.
 Los asalariados deberán hacer su declaración anual.

Entregar al patrón tu acta de nacimiento para que te inscriba en el RFC, si ya


estas
inscrito, deberás de proporcionar tu RFC.

 Informar a tu patrón antes de que te haga el primer pago si tienes otro


trabajo, esto con el fin de que no se aplique nuevamente el subsidio al
empleo.
 Solicitar la constancia de percepciones y retenciones y proporcionarla a tu
nuevo patrón
 Régimen de honorarios (Servicios profesionales).

1.3 REQUISITOS DE LOS COMPROBANTES FISCALES


Requisitos de los CFDI para Personas Físicas
Faltando cada vez menos para que los CFDI sean obligatorios el SAT ha aflojado
un poco con los requerimientos necesarios para los in-experimentados en el tema:

Las personas físicas con obligación de facturar únicamente requieren de su RFC


y firma electrónica avanzada (Fiel) o e.firma. No requieren el sello digital (las
personas morales sí).
Existirá un Sistema de Registro Fiscal, a través de la web del SAT, para que los
contribuyentes del régimen de incorporación y las personas físicas con actividad
empresarial, tendrán la posibilidad de registrar sus ingresos y egresos cada día.
Requisitos de la Factura Electrónica (CFDI)Los CFDI deberán cumplir con:

Clave del RFC de quien los expida

Régimen Fiscal en que tributen conforme a la Ley del ISR

Domicilio del local o establecimiento en el que se expidan las Facturas


Electrónicas

Número de folio

Sello digital del contribuyente que lo expide

Lugar y fecha de expedición

Clave del RFC de la persona a favor de quien se expida

Cantidad, unidad de medida y clase de los bienes, mercancías o descripción del


servicio o del uso o goce que amparen

Valor unitario consignado en número

Importe total en número o en letra

Forma de pago: una sola exhibición o en parcialidades.

Cuando proceda, se indicará el monto de los impuestos trasladados, desglosados


por tasa de impuesto y, en su caso, el monto de los impuestos retenidos.

Forma en que se realizó el pago (efectivo, transferencia electrónica de fondos,


cheque nominativos o tarjeta de débito, de crédito, de servicio o monedero
electrónico que autorice el Servicio de Administración Tributaria).
Número y fecha del documento aduanero, tratándose de ventas de primera mano
de mercancías de importación. Adicionales a ello, deberán cumplir con la
Resolución Miscelánea Fiscal vigente:

Código de barras generadoras.

Número de serie del CSD del emisor y del SAT.

Las leyendas: “Este documento es una representación impresa de un CFDI” o


“Este documento es una representación impresa de un Comprobante Fiscal Digital
a través de Internet".

Referencia bancaria o número de cheque

Fecha y hora de emisión y certificación de la Factura Electrónica (CFDI)

Cadena original del complemento de certificación digital del SAT.

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