La Sociedad Anónima, es la sociedad mercantil por excelencia, esta se rige en lo
general por el Capítulo Quinto de la Ley General de Sociedades Mercantiles de México (en adelante LGSM). Las sociedades anónimas (a diferencia de las Cooperativas, las Sociedades de Producción Rural, entre otras) se deben constituir, ya sea ante un Notario Público, un Corredor Público o bien mediante suscripción pública (atendiendo a lo establecido por la Ley del Mercado de Valores). Durante esta constitución, a la que se denomina Asamblea General Constitutiva, se comprobará la suscripción y pago del capital Social, así como la designación de los funcionarios que administraran y vigilarán la sociedad. Constitución de una sociedad anónima Para conformar o constituir una sociedad anónima debe hacerse una escritura pública con sus denominados estatutos, tal como lo contemple el código de comercio de cada país. Una sociedad anónima se conforma con tres órganos:
la junta general de accionistas o asamblea general de socios;
la administración de la sociedad, y el consejo de vigilancia.