Durante el desarrollo de nuestra vida cotidiana, podemos notar cierta cantidad de
personas que presentan algún problema de movilidad reducida, donde una gran parte son adultos mayores. Actualmente, en nuestro país 5 de cada 10 personas con alguna discapacidad son adultos mayores, y dentro de este grupo, el 67.5% tiene un problema de movilidad reducida. Además, de acuerdo con lo obtenido en la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID), en nuestro país habitan 15.4 millones de adultos mayores (personas que superan los 60 años), donde de esta cantidad, 1.7 millones viven solos. Estos datos nos llevan a analizar este problema, así como todos los posibles obstáculos o problemas que puedan presentar estas personas para desarrollar actividades básicas dentro de su hogar. Lo cual, nos lleva a plantear un proyecto de un sistema domótico que permita ayudar a este grupo de personas, partiendo de la siguiente pregunta: ¿Qué sensores, actuadores o protocolos domóticos deben implementarse para idear un sistema capaz de facilitar la vida diaria de este grupo de personas, así como aumentar su seguridad?