Hoy día las personas se casan, se separan y vuelven y se casan pensando que en

esa nueva oportunidad lograrán la felicidad; sin embargo, ¿que entienden las
parejas por felicidad?, ¿Que cree cada uno de los miembros de la relación por
felicidad?... ese es realmente el problema, en muchas ocasiones las personas
tienden a creer que la felicidad es un estado de confort en el cual solo se
experimenta la sensación de tranquilidad y estabilidad de forma permanente; y
como cada cual construye su concepto de felicidad y niegan la oportunidad de
enfrentarse a retos dentro de lo que creemos estado de confort y tendemos a
destruir la construcción de familia construida en poco tiempo, poco trabajo y poco
compromiso.

La destrucción de la estructura familiar ante las primeras adversidades

básicamente sucede porque no existe la concepción de la felicidad construida,
hecha por medio de la dedicación, el amor y la fe. Por eso es importante encontrar
motivos de amor en la comunicación y la emoción, por medio de la dedicación en la
comunicación y por medio de la fe en Dios y la familia.