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Karina narra su historia personal. Creció en una familia grande y alegre en la Ciudad de México. Tuvo un buen desempeño académico desde kínder pero sus padres no demostraban afecto y pusieron más atención en su hermana menor cuando nació. Karina se sintió sola pero cuidó a su hermanita. Más tarde entró a la secundaria y le gustaba la escuela, queriendo ser médico militar, pero la falta de apoyo parental la desanimó y dejó la preparatoria.
Karina narra su historia personal. Creció en una familia grande y alegre en la Ciudad de México. Tuvo un buen desempeño académico desde kínder pero sus padres no demostraban afecto y pusieron más atención en su hermana menor cuando nació. Karina se sintió sola pero cuidó a su hermanita. Más tarde entró a la secundaria y le gustaba la escuela, queriendo ser médico militar, pero la falta de apoyo parental la desanimó y dejó la preparatoria.
Karina narra su historia personal. Creció en una familia grande y alegre en la Ciudad de México. Tuvo un buen desempeño académico desde kínder pero sus padres no demostraban afecto y pusieron más atención en su hermana menor cuando nació. Karina se sintió sola pero cuidó a su hermanita. Más tarde entró a la secundaria y le gustaba la escuela, queriendo ser médico militar, pero la falta de apoyo parental la desanimó y dejó la preparatoria.
No me gusta hablar mucho de mi pasado, hay situaciones en mi vida que no
me gustan recordar, pero hoy en día me encuentro estudiando la prepa y es una actividad que tengo que realizar para poder obtener una calificación. Puedo comenzar platicándoles que mi nombre completo es Karina Miguel Santos, nací el 25 de abril de 1989 en lo que antes era el Distrito Federal hoy mejor conocido como la Ciudad de México. En mi niñes siempre fui una niña muy alegre, recuerdo que me encantaba hacer toda clase de manualidades con lo que encontraba a mi paso, no importaba que fuera un cono de papel de baño o una lata de fierro, siempre encontraba algo nuevo que crear. Era chaparrita (lo sigo siendo...) de tez morena claro, de complexión regular, ojos cafés oscuros, risueña con muchos sueños dentro de mi cabeza. Mi familia era grande conformada por mis padres Teresa Santos Cruz y Efraín Miguel Fuentes, ambos originarios del Estado de Oaxaca y mis 4 hermanos, Maricela la mayor quien siempre me cuido, después siguió Jorge, Inés, Luis y yo la más pequeña de la familia Mis padres nos querían mucho, pero que yo recuerde nunca nos lo demostraban, no recuerdo haber escuchado algún día te quiero hija o los quiero hijos, y no porque no nos quisieran ahora entiendo que era por la ignorancia talvez, ellos crecieron en un pueblito en donde desde niños mis abuelitos los enseñaron a trabajar, no tenían tiempo para divertirse. Siempre estaban serios y mi padre era muy enojón, así lo veía yo A los 5 años entre al kínder se llamaba Sor Juana Inés de la Cruz, era una escuela muy pequeña y tenía muy pocos compañeros. Desde ahí ya mostraba una gran inteligencia, aprendí a leer y a contar muy rápido, mi maestra se llamaba Areli la quería mucho porque era muy atenta con todo el grupo, nos quería y nos trataba con mucho amor, rara vez se enojaba. Cuando entre a la primaria todo se me hacía nuevo, eran demasiados niños y de todas las edades no cómo en el kínder en donde solo convivía con niños de mi edad. Cursé muy bien los 6 años de la primaria siempre obteniendo las mejores calificaciones, me sentía tan bien de sacar los mejores promedios, pero triste a la vez porque nunca recibí una felicitación por parte de mis padres, pero en el fondo yo sabía que estaban orgullosos de mí. Cuando estaba cursando el último año de primaria mi madre se volvió a embarazar, y tuvo una niña mi hermana menor Areli, yo estaba feliz porque estaba bien pequeñita parecía un nenuco, pero no me mi magine que a partir de ahí cambiaria todo; la atención de mis padres hacia a mi disminuyó pues ahora solo estaban enfocados en mi hermana, y yo me sentía sola pues mis otros hermanos ya estaban grandes. Yo nunca sentí celos de mi hermanita y hoy en día la amo mucho, ya que yo la cuidé desde chiquita, la bañaba, jugaba con ella, le di mucho amor. A mi hermanita mis padres le daban todo nunca en su cumpleaños le faltaba un pastel o un regalo, cosa que me ponía triste pues a mí y a mis hermanos nunca nos trataron así. Yo seguí con mis estudios entre a la secundaria donde comenzó una nueva etapa de mi vida de la cual tengo recuerdos muy bonitos, fue ahí donde por primera vez me fui de excursión y conocí Cholula, Puebla un lugar hermoso. Mis calificaciones y aprovechamiento escolar se mantenían como en la primaria, me gustaba tanto la escuela que mi sueño siempre fue ser Medico Militar. Yo creí que lo lograría; lo tenía todo para lograrlo. Pero la falta de interés de mis padres hacia a mí me desanimaba mucho, mi hermanita se había convertido en su centro de atención. Pero yo seguía soñando con ser en el futuro alguien en la vida. Después me prepare y realice mi examen para la preparatoria, pero me salí en el primer semestre eran tantos los materiales que pedían que mi padre en ocasiones se enjaba porque no queria comprarlos.aque decidi salirme y de alguna forma cumplir mis sueños, v