Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Masturbación Masculina
Cuando un varón llega a la adolescencia empieza a atravesar importantes
cambios en sus emociones.
La conciencia sexual se acentúa e intenta liberar la tensión erótica mediante la
masturbación, esto se acentúa cuando no tiene pareja.
Muchos hombres continúan masturbándose durante toda su vida, incluso
cuando mantienen relaciones con otra persona. Según diversos estudios, un
94% de hombres se han masturbado alguna vez hasta llegar al orgasmo.
Mediante la experiencia personal se aprenden las técnicas y ritmos que dan
mejor resultado.
De esta forma el hombre conoce sus respuestas y se puede anticipar al orgasmo.
El uso de lubricantes reduce la fricción y puede hacer que aumente el placer.
¿Cómo masturbar a un hombre?
La masturbación es de gran ayuda para que las personas mayores alcancen la
erección.
Con suaves caricias puedes llegar a alcanzar el orgasmo, pero el pene también
admite una estimulación con menos sutileza.
Rodea el cuerpo del pene con la mano y mueve la piel arriba y abajo rítmicamente,
la velocidad, duración del movimiento y la presión a ejercer depende de cada
persona, coméntalo con tu pareja para que te indique lo más adecuado.
El frenillo, zona justo debajo del glande con el pene erecto, puede resultar muy
estimulante.
A medida que tu pareja va llegando al orgasmo aumenta la velocidad de los
movimientos.
Tras la eyaculación el glande se vuelve muy sensible por lo que hay que dejar de
apretar.
Estimulación de los testículos
Para casi todos los hombres es muy relajante que les acaricien los testículos, eso sí,
siempre con suavidad.
Coge el pene con la mano y usa la otra para cubrir y recorrer los testículos y
acariciar la zona entre los testículos y el ano. Esta zona es muy sensible. El escroto
(bolsa que contiene los testículos) es como si fueran los labios exteriores de la mujer,
por eso aunque las caricias y los besos produzcan sensaciones muy agradables, no es
probable que desemboquen en un orgasmo.
Masturbación Mutua
La masturbación es para muchas personas la primera actividad sexual. Con ella descubrimos
nuestros sentimientos eróticos y aprendemos a no avergonzarnos de ellos ni de nuestros
genitales.
La masturbación tiene muchos aspectos positivos y ayuda a quien la practica: proporciona
satisfacción sexual a personas que no consiguen encontrar pareja, es una solución para los
adolescentes con ansias irreprimibles de sexo y evita embarazos no deseados. También es un
buen remedio para las personas separadas y para las parejas, cuando uno de los dos está
enfermo, cuando a uno no le apetece hacer el amor, cuando no se consigue alcanzar el orgasmo
mediante la penetración y como juego erótico para compartir con nuestro amado/a.
Los chicos se masturban, solos o en grupo; lenta o rápidamente; en una postura o en otra, pero
el caso es que los chicos se masturban.
Pero ¿y las chicas? Siempre se consideró que la masturbación era cosa de hombres. De hecho
aún hoy parece seguir siéndolo. Apenas se habla de masturbación femenina.
¿Qué hay de malo en procurarse placer a una misma? Nada. Nada de lo que avergonzarse,
nada de lo que sentirse culpable. Masturbarse debería considerarse algo natural, algo primordial
que forma parte de nuestras vidas, exactamente igual que comer o dormir. Hay muchas razones
para autosatisfacerse, aunque luego no se lo cuentes a nadie. Básicamente es liberador,
divertido y sano, muy sano (hasta la O.M.S. ensalza sus virtudes). Otras razones entre muchas:
- Para aprender a sentirte cómodo/a en tu piel.
- Para descubrir lo que más te gusta.
- Porque es la mejor escuela.
- Para probar cosas nuevas (luego, si quieres, ya las harás con alguien).
- Porque no tienes pareja.
- Para aumentar tu libido. El sexo llama al sexo.
- Porque la gente que lo hace tiene una vida sexual más larga.
Conclusiones.
La masturbación es la forma más sencilla de obtener placer sexual,
ya que no hace falta nada ni nadie para conseguirlo (la propia
persona tiene todo lo necesario para conseguir placer).
La masturbación, hoy en día, es considerada como un elemento importante en el aprendizaje
sexual, no existiendo evidencia científica que permita hablar de trastornos físicos como
consecuencia.
Antes se consideraba a la masturbación como una práctica enteramente masculina, pero es
evidente que la mujer también la ha utilizado. En esta nota solo tratamos de desmitificar a la
masturbación y que pueda ser usada como un maravilloso recurso en su futura vida sexual.