Escritos Paula Gonzalez Bravo - Poeta Inconclusa y Noctámbula

También podría gustarte

Está en la página 1de 5

Compilación claramente no acabada...

(Paula González Bravo, poeta inconclusa)

I
La mujer. Seda
Locura,
espesa dulzura
Paciencia.

Ella espera como esperan las piedras.

Mujer; conjunto de muertes exactas


De placeres conspicuos
La fémina indiferente excita.

Mujer; pausa entre lo espectral y lo esquivo


Pliegue humedecido de una entrepierna agradecida
Favor no solícito
Bengala de los tiempos.

Las olas del mar pertenecen a sus caderas


Fértiles y anchas
Pechos colgantes como racimos de uvas dulces
Triste caminar de madre cansada.

II
Apertura
Si abren el pozo que es mi cuerpo
ahí, bien al fondo, aún soy niña.
la débil barcaza que me mantiene a flote
yerra en el océano

Desnudez
Mi pena es grande como un océano de acero
mis tripas hieden a vómito agonizante

el viento hace temblar las mareas


el manto tras las tinieblas se corre y expone más y más negrura y frío.
Tinieblas, terror. Miedo profundo.
soledad absoluta
silencio que empaña los ojos.

dolor.

dolor punzante de lágrimas que se enconan en mis poros


piel ajada, carroña sintiente.
los monstruos están detrás de la cortina
mis pechos adoloridos
simientes estériles de leche maternal invisible y derramada
punzón oscuro que despedaza mi piel y se ríe de mi lamento.

consolando
Cómo quisiera yo abrir un espacio con mis uñas y sacar la podredumbre de tu garganta
darte mi voz, darte mis idiomas, darte mi cuerpo para que no agonices al tragar.
Soplar tu cerebro, o donde quiera que se esconda ese monstruo, y devolverte la vida que se nos va por
una acequia negra y pestilente...
tu dolor es el mío
tu pena es la mía
dame tu dolor que yo lo llevo sobre los hombros
tal como tú me llevaste.
Sufro cada pinchazo, cada cosa que recuerdas no haber hecho
Abriría tus senos y sacaría con los dientes cada trozo de carne muerta.
Te doy mis ojos chuecos para que veas colores, te regalo mis entrañas, mis años que vienen, mis
pasos...

Esa pena negra


lúgubre, oscura como la niebla
pestilente
me mira de soslayo
asomándose en la esquina de la puerta
la escondo,
debajo del vestido
¡tengo tanto miedo!
¿cómo puedo aliviar el dolor de un muerto?

No estoy muerta
Tengo mucosa viva, compacta, infecta.
El vientre hinchado
Las manos amarradas

Esas pieles
Esos bolsos de cuerpos
se pudren
Bajo tierra
Exorcizo mis miedos
Escribiendo mis penas

Él
Duerme obligado
En un camarote de cemento
Huesos verdosos
Orbitas de ojos sin relleno

Esa cuerda
Aún
le asfixia
Hiede
Se pudre
Su rostro desencajado
Sus falanges negruzcas
pestañas apretadas

Esa otra,
Es polvo,
Pedazo de pasto
O una araña desplomada
Llevada por el viento

III
¿Pa' qué sangra mi matriz desierta?
¿y pa' qué encona de sangre mis vísceras y solloza coágulos infectos?
¡¿pa' qué?!

¿pa' qué llora sangre y acalambra mis pasos?

¿pa' qué ilusiona a la puerta estrecha prometiéndole historias después de la muerte?


¿pa' qué excita a la carne y la ensucia?

¿y pa' qué el deseo hirviente anhelando simiente fértil y olorosa?

IV
Hoy desmantelada de sus ropas y de sus jugos
Una grieta sin luz se muestra en mi bajo vientre
Tan yo, tan mí, tan esto…tan qué…

Muralla de cemento. Ventana cochina justo enfrente


Calor húmedo. Niebla
yo apenas puedo abrir mis ojos color tiempo.

Me perdí en algún lado, en algún momento;


Por aquí, por allá, por ahí, por donde…

La tinta de mi pluma es lágrima


es rastro seco de lo estéril de este, ese y aquel momento
Me niego, me niego, me niego.

¿es posible sentir miedo cuando se escribe?


el sentir tan real, devastador y aplastante
Sangro. Sangro profusamente. Sangro lágrimas y lloro aguas.
Niego a quien quiere salir y está enrejada entre mares.
Mares, mares me marean
Absoluto relativo de poesía barata y volátil.

Mi deseo es animal, obsceno, puro y malsano.


Podría morder y sacarte un pedazo de piel
Te masticaría sin piedad, me emborracharía de tus sabores.

Ven,
Insértate en mí.
Ven acá.
Adentro
Empuja hasta el fondo
Rasga mi cérvix inútil
Tómame.

Tócame.

Bésame y atragántame con tu lengua


bestia hambrienta de mis sabores
Juego impúdico de una mano experta
carne jugosa en la boca
piel sudorosa y ardiente

Tócame con suciedad


hazme presa de tu aliento

Muérdeme, despedázame;
hazme tan tuya que mi cuerpo ya no exista y se evapore.
Fluidos, sudor, gemidos

Huéleme

Copúlame con afán indómito


Clávate en la humedad vaporosa de mi entrepierna

Por favor,
bebe el zumo ligeramente pegajoso de mi sexo
Come la miel que mana de todos mis labios
Embebe mis pezones en saliva

Quiero lamer la punta de tus dedos mientras gimo en tu oreja.

Poros ardiendo, te siento,


Dentro, profundo, intenso, insondable,
Penétrame muy hondo.
Excávame dulcemente.
Derriba mi puente y mi puerta.

Rodeo tu carne con mis ansias


Se contrae mi sexo palpitante

Poséeme.
Exprimo tus jugos al viento
Te aprieto, te beso.
Te poseo.

Te libero.
(PGB, compilación 2021)

También podría gustarte