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EL CONOCIMIENTO EN ALZADA DE LA IMPUGNACIÓN COMO GARANTÍA DE

CERTEZA JUDICIAL:

Debemos considerar que para poder dar una explicación concreta sobre el tema que
queremos abordar primero se debe desligar el título definiendo y explicando cada una
de sus variantes, empezando por, ¿qué es una garantía? En término general en
derecho, la garantía es un tipo de mecanismo que nos asegura el cumplimiento de una
obligación y así proteger nuestros derechos, ya sea de una o ambas partes dentro de
una relación comercial o jurídica. Si no existieran estas garantías muchas
transacciones no se llevarían a cabo o sería muy difícil de que estas existieran puesto
que alguna de las partes sabe que correría el riesgo de sufrir alguna pérdida de bienes
sin tener alguna seguridad que lo proteja.
En el debido proceso se brindan garantías, que se refieren a que deben ser cumplidos
con todas las condiciones que aseguren la adecuada defensa de las partes en base a
sus derechos, es decir, se asegura que a las partes se les brinda la oportunidad de ser
escuchados por un juez competente, pueden proponer sus medios de prueba,
interponer los recursos que conforme a derecho sean adecuados a la situación y que al
momento de concluirse todas las etapas del proceso se dicte una sentencia razonable
y justa conforme a derecho.
También podemos encontrar la garantía del juez natural que es el que viene a
conformar una garantía de independencia e imparcialidad, puesto que, establece que el
juez debe estar previamente establecido y tener la competencia para conocer del
asunto y este conocimiento debe estar libre de intereses y prejuicios.
Lo resuelto por el juzgador debe tener base sobre la “sana critica razonada”, ¿por qué?
Porque como primer lugar el juez no debe tener interés propio dentro del proceso por
ninguna de las partes que puedan afectar su imparcialidad y por ende perjudique su
decisión o desacredite la misma; se debe tener la certeza que está el juez está siendo
imparcial, puesto que, la certeza es el conocimiento claro y la seguridad factual que se
tiene como garantía de un enunciado, es por esto que, podemos decir que al
observarse en el debido proceso y en el cumplimiento de las garantías contenidas en la
legislación brinda la seguridad que el juez resuelve en base a lo dicho protegiendo a las
partes dentro del proceso.
Antes de integrarnos al tema en general debemos dejar claro cuál es la facultad que
tiene un juzgador para conocer un proceso tanto en jurisdicción como en competencia.
Jurisdicción:
La jurisdicción es la potestad que posee el Estado de aplicar, por medio de los
tribunales y jueces, el derecho al caso en concreto con el fin de satisfacer las
pretensiones de los gobernados en una controversia, resolviendo ésta de manera
definitiva e irrevocable.
Uno de los principales rasgos de la potestad jurisdiccional es su carácter irrevocable y
definitivo, capaz de producir en la actuación del derecho lo que técnicamente se
denomina cosa juzgada.
Esta cuenta con principios fundamentales que la caracterizan como única, indivisible e
indelegable. También cuenta con cinco elementos que son:
 Notio: que se refiere a la facultad que tiene el juez de conocer un asunto
determinado.
 Vocatio: que es la facultad que posee el juez de llamar a las partes para que
comparezcan a juicio.
 Iudicium: es la facultad de juzgar y resolver el asunto que se está tratando
dentro de un proceso.
 Coertio: se refiere al poder coercitivo que tiene el juez para obligar a las partes y
hacer que se cumpla lo resuelto.
 Executio: que es la facultar que tiene el juez de ejecutar una sentencia como un
tipo de conclusión que resuelve el asunto dentro de dicho proceso.

Competencia:
La competencia es el ámbito sobre el que un órgano ejerce su potestad jurisdiccional.
La jurisdicción no se reparte, pero sí cabe repartir las materias; la actividad procesal y
el territorio en el que se ejerce la jurisdicción.
La competencia es el límite que tiene la jurisdicción para resolver las pretensiones.
La competencia es el conjunto de pretensiones sobre las que un órgano jurisdiccional
ejerce su jurisdicción, con referencia al órgano jurisdiccional que es la facultad de
ejercer su función con relación a pretensiones determinada, y con referencia a las
partes es tanto el derecho de que sus pretensiones y resistencias sean conocidas por
un órgano determinado, como el deber de someterse al mismo.
La competencia se determina de acuerdo con: el territorio, la cuantía, la materia, el
turno y de grado.
Los órganos jurisdiccionales se encuentran organizados atendiendo a la jurisdicción y
competencia que se ejerce, la Ley del Organismo Judicial los distribuye de la siguiente
forma:
 Corte Suprema de Justicia y sus Cámaras.
 Corte de Apelación.
 Sala de la Niñez y Adolescencia.
 Tribunal de lo Contencioso Administrativo.
 Tribunal de Segunda Instancia de Cuentas.
 Juzgado de Primera Instancia.
 Juzgados de la Niñez y de la Adolescencia y de Adolescentes
 en Conflicto con la Ley Penal y Juzgados de Control de
 Ejecución de Medidas.
 Juzgado de Paz o Menores.
 Los demás que establezca la ley.

¿A qué nos referimos con el recurso de alzada? La “alzada” es un recurso de carácter


administrativo por medio del cual se busca que un órgano administrativo revise un
dictado o una resolución realizada por otro órgano que es dependiente jerárquicamente
de él, con el fin que enmiende dicha resolución conforme a derecho el acto que el
órgano inferior ya realizó, esto quiere decir que, es un medio de impugnación de los
actos administrativos que no ponen fin a la vía administrativa, es decir, que este
recurso solo puede ser interpuesto a resoluciones que NO agoten la vía administrativa,
y resoluciones que son dictados por un órgano que se somete a un órgano superior
jerárquico.
Los medios de impugnación pueden considerarse como un medio de control, que
permite a las partes oponerse a las resoluciones judiciales cuando estas les producen
algún agravio, estos cumplen una doble función, en primer lugar, sirven para poder
corregir errores que se pudieran haber cometido dentro del proceso y en segundo lugar
contribuyen a lograr la recta aplicación del derecho a un caso concreto.
Deberá ser un juez distinto al que conoció y resolvió el asunto que se estaba tratando,
este nuevo juez es el encargado de verificar que la resolución esté pegada a derecho
con el fin de confirmar si la resolución está bien dictada o debe modificarla para que
esta no violente ningún derecho de las partes, a lo cual, es lo que se quiere llegar con
la certeza judicial que se explicó anteriormente.
Dentro de la distribución de órganos que ejercen la jurisdicción se encuentran los
órganos de “segunda instancia”, que en Guatemala se conocen como “Salas de
Apelaciones”, todo depende del tipo de impugnación que se está presentando.

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