Está en la página 1de 2

FISIOPATOLOGÍA

Los animales con rabia transmiten la infección a través de su saliva, habitualmente


mediante mordedura. Pocas veces, el virus puede entrar a través de una abrasión
cutánea o de las mucosas de los ojos, la nariz o la boca. El virus viaja desde el sitio de
entrada a través de los nódulos periféricos hasta la médula espinal (o hasta el tronco
encefálico cuando se muerde la cara) y luego hasta el cerebro. Luego se propaga desde
el sistema nervioso central a través de los nervios periféricos hacia otras partes del
cuerpo. La afectación de las glándulas salivales y de la mucosa bucal es responsable de la
transmisibilidad.

DIAGNÓSTICO

DIAGNÓSTICO PRE-CLÍNICO

Actualmente, no hay pruebas disponibles que pueden diagnosticar la infección con rabia
inmediatamente después de la exposición sospechosa al virus. Cuando los síntomas
clínicos comienzan a presentar, llega a ser posible diagnosticar rabia con diversas técnicas
diagnósticas.

DIAGNÓSTICO CLÍNICO

El período de incubación después de la exposición al virus de rabia puede variar de tan


poco como una semana más que un año; sin embargo, la mayoría de la gente experimenta
síntomas después de algunos meses.
Sin embargo, el diagnóstico basado en la presentación clínica solamente es difícil; por lo
tanto, varias pruebas son necesarias confirmar el diagnóstico clínico de la rabia en seres
humanos.

Prueba directa del anticuerpo fluorescente

La prueba directa del anticuerpo (DFA) fluorescente descubre los antígenos del virus de
rabia en el tejido cerebral. Esta fue desarrollada en 1958 y ha sido ampliamente utilizada
en animales y seres humanos desde entonces.

La prueba implica el tomar de una biopsia de tejidos afectados, tales como los del cerebro,
que se envían a un laboratorio que se analizará para la presencia de rabia. Esto se hace
con el uso de los anticuerpos fluorescente marcados que se aplican al tejido, seguido por
una observación del efecto fluorescente que permite que los investigadores representen y
que analicen los resultados.

La prueba de DFA puede producir resultados rápidos dentro de algunas horas. Además,
esta prueba es sensible y específica al virus de rabia. Para 95-99% de casos, la prueba de
DFA ofrece una indicación exacta de la presencia de la enfermedad.

Otras técnicas diagnósticas

Las pruebas rápidas directas (IHC) de la inmunoquímica también se validan para tener
sensibilidad y especificidad adecuadas.

Es difícil obtener un diagnóstico exacto de la rabia en animales, pues la sensibilidad a las


pruebas puede variar según el escenario de la infección, del sistema inmune y de las
técnicas de prueba correctas. Las muestras recogidas del tejido cerebral, del tejido de la
piel, de la orina o de la saliva se pueden utilizar para ofrecer la información sobre la
presencia de rabia.

También podría gustarte