Contexto actual y elecciones federales
anticipadas en Canadá
Ariadna González Martín
Centro de Estudios sobre América
El pasado 7 de septiembre Stephen Harper,
haciendo uso de su prerrogativa como
Primer ministro canadiense, convocó a
elecciones federales anticipadas para el 14
de octubre de 2008. Como justificación para
dicha decisión alegó la necesidad de ir a las
urnas para dirimir los constantes obstáculos
presentados por la oposición en el
Parlamento a su gestión de gobierno.
Según la constitución de Canadá las
próximas elecciones debían celebrase a
fines del 2009. Este hecho ocurrió a pesar
de que en la Casa de los Comunes se
estaba analizando el proyecto de ley C-16,
propuesto por los conservadores, que fija la
fechas de elecciones cada cuatro años, el
tercer lunes de octubre, sujeta a una
anterior disolución del Parlamento.
El Partido Conservador de Canadá (CPC
por sus siglas en Inglés) llegó al gobierno
en enero del 2006 con un mayoría mínima,
aún así ha sido el gobierno con minoría de
mayor longevidad -más de 31 meses-
desde 1920, y la tercera en toda la historia
del país. El Parlamento saliente estaba
conformado por 127 miembros del CPC, 95
del Partido Liberal (LPC), 48 del Bloque
Québécois (BQ), 30 del Nuevo Partido
Demócrata (NDP), 1 del Partido Verde de
Canadá (GPC), 3 independientes, y cuatro
plazas vacantes.
La inesperada situación que se ha
presentado en Canadá, con las elecciones
federales anticipadas, puede explicarse por
la combinación de dos factores: uno de
índole interno, dado que la constitución
permite este tipo manejo político y el otro
externo relacionado con las condiciones
que vive el mundo hoy. Este análisis
pretende hacer una aproximación a la
definición de estos factores, así como
presentar una panorámica del ambiente
político de la campaña.
Sistema político y electoral Canadiense
Canadá es un país federal que funciona
como monarquía constitucional, cuyo
régimen político es la democracia
representativa, el soberano es la reina del
Reino Unido de la Gran Bretaña, que es
oficialmente representada por la
Gobernadora General, Michaelle Jean en
estos momentos, y en cada provincia por
los Gobernadores Provinciales. Estos
cargos son estrictamente simbólicos y
forman parte de la tradición en este tipo de
sistema político.
El gobierno real del país está en manos del
Primer Ministro y del Parlamento, elegidos
por el voto ciudadano. Este último integrado
por dos cámaras: el Senado (105
miembros) nombrados por el Gobernador
General a recomendación del Primer
Ministro y la Cámara de los Comunes (308
miembros).
La constitución establece 5 años como
tiempo máximo entre elecciones excepto en
tiempos de guerra. Pero una elección
puede convocarse de manera anticipada si
el Primer Ministro así lo decide o si el
gobierno es derrotado en una moción de
confianza en la Cámara de los Comunes.
La representación en esta es por distritos
electorales, los cuales otorgan un asiento al
candidato con el mayor número de votos.
Después de cada elección federal, el
partido que obtuvo la mayoría simple de los
representantes en la Cámara, conforma el
Gobierno. El líder del Partido ganador se
convierte en el Primer Ministro y designa los
miembros de su gabinete.
Al mismo tiempo, durante una elección
federal o referéndum nacional, La Oficina
del Jefe Oficial Electoral de Canadá,
también llamada “Elecciones Canadá”
administra todo lo concerniente a estos
procesos. Esta es una institución autónoma
del parlamento que regula desde el gasto
electoral hasta el tiempo de radiodifusión de
cada partido político o candidato
independiente inscrito. Se establece un
límite de gastos electorales a los candidatos
para evitar que los de menos recursos no
tengan acceso a la elección
Contexto político y económico.
La necesidad de las elecciones federales
anticipadas para el Partido Conservador de
Canadá (CPC) es inaplazable, debido a
condiciones estratégicas que se imponen
en este momento. Lograr una mayor
representación en el parlamento que le
permita maniobrar en lo político con mayor
libertad es el primer objetivo de esta
elección.
A su vez en los temas domésticos, la
elección se realizará, antes de la
publicación de las cifras fiscales del tercer
trimestre del año, ya que sus estadísticas
reflejarán un déficit en las cuentas del
gobierno federal, dada las reducciones que
los conservadores adoptaron en los
presupuestos. La disolución del
Parlamento, además puso fin a las a
investigaciones sobre acusaciones de
supuestas ilegalidades cometidas por el
CPC. La más grave promovida por
“Elecciones Canadá” que responsabilizaba
a los conservadores de violar la ley, en su
gasto en las elecciones de 2006.
En el orden externo la urgencia de las
elecciones se relaciona, principalmente, con
la difícil situación económica que atraviesa
el mundo, resultado de la crisis en Estados
Unidos, los cual tendrá determinado
impacto en Canadá y el CPC podría salir
afectado de esa situación, lo que lo pondría
en un escenario más difícil ante unos
comicios en el 2009. De ganar en octubre
los conservadores tendrían un posible
margen de 5 años antes de unas nuevas
elecciones. En resumen en estos
momentos los conservadores tienen
mejores probabilidades de ganar, en lugar
de esperar a ser forzados a celebrar
comicios por la oposición con un voto de
desconfianza en la Camara de los comunes
en tiempos en que la economía canadiense
pudiera estar en condiciones desfavorables
por sus vínculos con la debilitada economía
estadounidense.
Si bien las instituciones financieras
canadienses están en una situación mucho
mejor que la de sus contrapartes
estadounidenses, los efectos de la crisis se
harán sentir a partir en el sector de las
materias primas, motor principal de la
economía canadiense, el cual podría
deprimirse ante una disminución de la
demanda estadounidense y mundial.
Al mismo tiempo las elecciones en Estados
Unidos constituyen un reto para los
conservadores canadienses ante la
probable victoria de una administración
demócrata la cual podría traer
contratiempos al CPC, dada su afiliación
política neoconservadora, por lo cual
constituye una necesidad para ellos su
consolidación en el gobierno.
Campaña electoral.
Según datos de Elecciones Canadá se han
inscrito para las elecciones: el Partido
Conservador de Canadá, el Partido Liberal
de Canadá, el Nuevo Partido Democrático,
el Partido Verde de Canadá, el Bloque
Québécois, el Primer Partido de Terranova
y Labrador, la Animal Alliance Environment
Voters, el Partido de Canadá y 5
candidatos independientes. Los cinco
primeros los únicos con verdadera
representación nacional y posibilidades de
llegar al parlamento.
Las encuestadoras dan como favorito a los
conservadores que se han mantenido en el
primer lugar de las encuestas unos 10
puntos por encima de los liberales. Las
últimas cifras publicadas dan al CPC con
38% de las intenciones de voto, el Partido
Liberal (LPC) con 25%, el Nuevo Partido
Demócrata (NDP) con 18%, el Partido
Verde (GPC) con 10% y por último Bloque
Québécois (BQ) con un 8%.
Es de esperar que el Partido Conservador
mantenga el control de las provincias de
Alberta, Saskatchewan y Manitoba donde
tiene su voto duro. Mientras los liberales
conservan su tradicional área de influencia
en las provincias del Atlántico. Aún así los
conservadores han ido ganado apoyo en
Ontario, Québec y en la Columbia Británica,
territorios que van a decidir al ganador de
las elecciones.
En este sentido los conservadores han
basado su campaña en promesas de
disminución de aranceles, como el
impuesto por el consumo de diesel y el de
los bienes al consumidor. El líder del
Partido es Stephen Harper, actual primer
ministro.
Los liberales han presentado un plan
llamado “Cambio Verde” un programa
nacional para combatir el cambio climático y
crear una economía sustentable, proponen
un impuesto sobre las emisiones de
carbono, de estimulo a la industria y a las
tecnologías limpias. Su líder Stéphane Dion
ha recibido duras críticas a partir del
cuestionamiento de su capacidad de
liderazgo, así que el pretendido plan para
aumentar la recaudación de impuestos, no
da garantías claras de reducción de las
emisiones de gases efecto invernadero.
Este plan resulta un peligro para el Partido
Verde, dado que polariza la política
ambiental lo que podría restarle apoyo a su
programa.
El NDP de tendencia social demócrata
centra sus críticas a las políticas de los
conservadores. Ha planteado restaurar los
financiamientos para los grupos femeninos.
Su líder Jack Layton presentó un ambicioso
plan para revitalizar el sector de la salud.
Esta campaña puede dividir el voto entre
este partido y los liberales lo cual podría
darle mayores posibilidades a los
conservadores.
Por último el Bloque Quebecois ha perdido
relevancia en estas elecciones y su
situación se ha agravado después que
varios de sus ex parlamentarios han
manifestado abiertamente su apoyo al
Partido Conservador. El BQ solamente
hace campaña en la provincia de Québec
pero se las ha arreglado para mantener un
promedio de 40 legisladores en las últimas
Legislaturas. Su líder es Gilles Duceppe.
Consideraciones finales
Hay que tener en cuenta que Canadá al
tener elecciones de distrito, el interés local
podría primar por encima del interés
nacional y esa condición dificulta el
pronóstico de las elecciones. Pero ninguno
de los partidos, hasta el momento, ha
presentado una propuesta alternativa a los
Conservadores que contemple la reducción
de impuestos, elemento que resulta
esencial para atraer el voto. Si bien los
conservadores mantienen el favoritismo, no
se puede afirmar que ganarán una mayoría
amplia en el Parlamento. En cualquier caso
lo más probable es que esta fuerza política
triunfe, pero mantenga su condición de
gobierno de minoría.