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EL MÉTODO TRANSCEND

En una sola página

Premisa Básica I Siguiendo el pensamiento hindú, recuerda: Conflicto el Destructor y Conflicto el


Creador; el conflicto como una fuente de violencia y el conflicto como una fuente
de desarrollo. El trabajador de conflictos tiene un tercer rol: el del Preservador,
hay que transformar el conflicto, evitar la violencia y alentar el desarrollo.

Premisa Básica II Siguiendo el pensamiento budista, recuerda: el origen es co-dependiente, todo


crece unido en una causalidad mutua. Los conflictos no tienen ni principio ni fin y
todos compartimos la responsabilidad; ningún actor por sí mismo (por ejemplo los
hombres de Estado) carga con toda la responsabilidad (monopolio) y ningún
actor, por sí mismo, carga con toda la culpa.

Premisa Básica III Siguiendo el pensamiento cristiano, recuerda: la responsabilidad de la


transformación del conflicto yace en los individuos. Es su responsabilidad el
actuar para promover la paz y no la violencia en sus decisiones individuales.
También, del pensamiento cristiano hay que recordar el principio de la esperanza.

Premisa Básica IV Siguiendo el pensamiento daoísta, recuerda: todo es yin y yang, bueno y malo.
Existe una alta probabilidad de que la acción escogida también tenga
consecuencias negativas y de que la acción no-escogida tenga consecuencias
positivas; de ahí la necesidad de que haya reversibilidad, de hacer sólo lo que
pueda deshacerse.

Premisa Básica V Siguiendo el pensamiento islámico, recuerda: existe una gran fuerza que deriva
de entregarse juntos a una meta común, incluyendo la responsabilidad concreta
de buscar el bienestar de todos.

Premisa Básica VI Siguiendo el pensamiento judaico, recuerda: la verdad yace menos en una
fórmula verbal y más en el diálogo para llegar a tal fórmula; el diálogo no tiene
principio ni fin.

Estos puntos de las religiones del mundo han inspirado los siguientes procesos:

1. Mapear la formación del conflicto: todas las partes, todas las metas y todos los asuntos;
2. Incorporar a las partes olvidadas que tienen intereses importantes en el conflicto;
3. Tener, por separado, diálogos sumamente empáticos con todas las partes;
4. Cada trabajador de conflictos se puede especializar en una parte del conflicto;
5. Identificar, en estos diálogos, las metas aceptables de todas las partes;
6. Incorporar metas olvidadas que puedan abrir nuevas perspectivas;
7. Llegar a metas abarcadoras que sean aceptables para todas las partes;
8. Llegar a formulaciones breves y evocativas de las metas;
9. Ayudar a definir las tareas de todas las partes teniendo en mente la meta;
 desarraigar el conflicto de donde estaba...
 arraigándolo en algún otro lado;
 incorporar a las partes y a las metas olvidadas;
10. Verificar cómo el alcanzar la meta general puede hacer que se logren los objetivos de las partes;
11. Ayudar a las partes a reunirse “en la mesa” para un proceso autosustentable;
12. Retirarse del conflicto, avanzar al siguiente, estando disponible para consultas.

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