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Módulo 9: Obligaciones Civiles y Mercantiles, Títulos y Operaciones de Crédito
Módulo 9: Obligaciones Civiles y Mercantiles, Títulos y Operaciones de Crédito
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Unidad #. Nombre
Sesión #. Nombre
Guía de actividades
Módulo 9
Obligaciones civiles y mercantiles, títulos
y operaciones de crédito
Unidad I
Actos y obligaciones mercantiles
Sesión 3
Contratos en particular
Texto de apoyo
Índice
Presentación.......................................................................................................................................... 3
Arrendamiento financiero ....................................................................................................................... 4
Presentación
Contratos en particular
Fuente: Pixabay
En esta sesión concluirás el estudio de los diferentes contratos mercantiles, recordando que se
entienden por éstos, aquellos celebrados por las partes que se obligan a la realización de un servicio,
la entrega de un objeto o el desarrollo y conclusión de una obra determinada, con base en la
regulación del código en la materia.
Es importante precisar que la forma de los contratos a estudiar a continuación, se regula por el Código
Civil como ley supletoria y demás leyes en la materia mercantil.
Arrendamiento financiero
El arrendamiento financiero es aquel que celebra un empresario con una empresa denominada
arrendadora financiera, consistiendo en la compra de un bien mueble o inmueble para que se lo rente
durante un tiempo determinado. En este contrato, se obliga el arrendatario a pagar a la arrendadora el
precio convenido, fijando una renta por períodos determinados y durante un tiempo fijo, con
fundamento en los artículos del 408 al 418 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.
Tiene su origen en Estados Unidos, por la necesidad de financiamientos, no satisfecha por los créditos
bancarios. Su denominación viene del original en inglés leasing, del verbo to lease (alquilar, rentar). En
México se empieza a utilizar en la década de los 70; en tanto que en Europa se conoce sobre todo en
Alemania, Francia y España desde tiempo anterior (Quevedo, 2008:214).
Este contrato se documenta con pagarés que el arrendatario debe firmar a favor del arrendador por el
importe total de la operación, no pudiendo tener vencimiento posterior al plazo fijado. La suscripción de
estos títulos de crédito, no se consideran como pago de la contra prestación ni de sus parcialidades
Todo lo anterior, con base en el artículo 409 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.
Formal: El arrendamiento debe otorgarse por escrito y de acuerdo al segundo párrafo del artículo
408 de la LGTOC:
Los contratos de arrendamiento financiero deberán otorgarse por escrito y deberán inscribirse en la
Sección Única del Registro Único de Garantías Mobiliarias del Registro Público de Comercio, en el folio
electrónico del arrendador y del arrendatario, a fin de que surta efectos contra tercero, sin perjuicio de
hacerlo en otros registros especiales que las leyes determinen.
Ahora bien, respecto a la clasificación de este tipo de contrato, Quevedo ofrece la siguiente:
Contrato de transporte
Este contrato, en el cual intervienen el porteador, el alquilador y el cargador, en el Código Civil Federal
se indica que dentro del artículo 2646, “que alguno se obliga a transportar, bajo su inmediata dirección
o la de sus dependientes, por tierra, agua o aire, a personas, animales, mercaderías o cualesquiera
otros objetos”. A continuación, se presentan sus características:
Mientras que los porteadores responden del daño causado a las personas por defecto de los
conductores y medios de transporte que empleen. Este defecto se presume siempre que el empresario
no pruebe que el mal aconteció por fuerza mayor o por caso fortuito, los cuales no pueden ser
imputados. Asimismo, los porteadores responden de las omisiones o equivocación que haya en la
remisión de efectos, ya sea que a las personas, animales, mercaderías u objetos no sean enviados en
el viaje estipulado, se hayan mandado a parte distinta de la convenida, así como por los daños
causados derivados del retardo en el viaje, al comenzarlo o durante su curso, a menos también, de
probarse que caso fortuito o fuerza mayor los obligó a ello.
Por otra parte, los porteadores no son responsables de las cosas que no se les entreguen a ellos, sino
a sus cocheros, marineros, remeros o dependientes, que no estén autorizados para recibirlas. Sin
embargo, la responsabilidad de todas las infracciones que durante el transporte se cometa, de leyes o
reglamentos fiscales o de policía, será del conductor y no de los pasajeros ni de los dueños de las
cosas conducidas, a no ser que la falta haya sido cometida por estas personas lo anterior sólo cuando
tuviere culpa; pero lo será siempre de la indemnización de los daños y perjuicios, conforme a las
prescripciones relativas.
Contrato de seguro
Este contrato es aquel en el que una empresa aseguradora “se obliga, mediante una prima, a resarcir
un daño o a pagar una suma de dinero al verificarse la eventualidad prevista en el contrato”, conforme
al artículo primero de la Ley sobre el Contrato de Seguro. Sus características son las siguientes:
Por otra parte, sobre la organización, operación y funcionamiento de los seguros, se contempla el
siguiente artículo de la Ley de Instituciones de Seguros y de Finanzas:
ARTÍCULO 25.- Las autorizaciones para organizarse, operar y funcionar como Institución de Seguros o
Sociedad Mutualista, se referirán a una o más de las siguientes operaciones y ramos de seguro:
I. Vida;
II. Accidentes y enfermedades, en alguno o algunos de los ramos siguientes:
a) Accidentes personales;
b) Gastos médicos, y
c) Salud, y
III. Daños, en alguno o algunos de los ramos siguientes:
El seguro se puede contratar por cuenta propia o por cuenta de otro, con o sin la designación del
tercero asegurado. El seguro por cuenta de un tercero obliga a aseguradora aún, cuando el tercero
ratifique después del siniestro. La renovación tácita del contrato en ningún caso excederá de un año.
Los seguros inician su vigencia, atendiendo a la Ley Sobre el Contrato de Seguro y dependiendo de la
clase de riesgo que se proteja para que surtan efectos probatorios contra el asegurado, será
indispensable que estén escrito o impresos en caracteres fácilmente legibles.
A grandes rasgos se puede mencionar que en este contrato, el asegurado se obliga a declarar por
escrito todos los hechos que conozca en un cuestionario relativo al riesgo que se pretende adquirir por
la aseguradora.
Al ser un contrato formal, se hace constar por escrito en una póliza que servirá para probar su
existencia, haciendo constar los derechos y obligaciones de las partes.
El contratante deberá pagar una prima, misma que vencerá salvo pacto en contrario, en el momento
de la celebración del contrato. Las primas ulteriores a la del primer periodo se entenderán vencidas al
comienzo y no al fin de cada nuevo periodo. Las primas pueden pagarse fraccionadas cuando así lo
disponga la ley de la materia y cada parcialidad vencerá al comienzo del periodo que comprenda.
Tiempo compartido
Este contrato es definido por artículo 64 del Código de Comercio de la siguiente manera:
Artículo 64.- La prestación del servicio de tiempo compartido, independientemente del nombre o de la
forma que se dé al acto jurídico correspondiente, consiste en poner a disposición de una persona o grupo
de personas, el uso, goce y demás derechos que se convengan sobre un bien o parte del mismo, en una
unidad variable dentro de una clase determinada, por períodos previamente convenidos, mediante el
pago de alguna cantidad, sin que, en el caso de inmuebles, se transmita el dominio de éstos.
Con el contrato de compraventa. En el contrato que nos ocupa no hay translación de dominio.
Respecto del contrato de arrendamiento. No es una renta lo que se paga.
Contrato de condominio. El usuario no es titular.
Contrato de copropiedad. Son cousuarios y no copropietarios.
Con el contrate de hospedaje. Si no usa el inmueble, se puede permitir que alguien lo use.
Contrato de organización innominado, no translativo de dominio.
Contrato sui generis, sólo por el uso y por cierto tiempo (2008:235).
Autofinanciamiento
La Secretaría podrá autorizar, en su caso, que estos sistemas de comercialización tengan por objeto los
servicios de construcción, remodelación y ampliación de inmuebles, cuando se demuestre que las
condiciones del mercado así lo ameriten y que se garanticen los derechos e intereses de los
consumidores. Tratándose de esta autorización, no operará la afirmativa ficta.
[…]
Franquicia
Es un contrato que establece un método de colaboración contractual entre dos empresas jurídicas y
económicamente independientes. La empresa franquiciadora (o franquiciador), titular de determinada
marca, patente, método o técnica de fabricación o actividad industrial y comercial (previamente
prestigiados en el mercado), concede a la empresa franquiciada (o franquiciado) el derecho a
explotarla, por un tiempo y zona delimitados bajo ciertas condiciones de control, a cambio de una
prestación económica, que suele articularse mediante la fijación de un pago inicial, que se
complementa con regalías sucesivas en función de las ventas efectuadas.
Contratos de garantía
El Código Civil Federal contiene los contratos de prenda y de hipoteca como contratos a garantizar el
cumplimiento de una obligación, constituyendo ambos un derecho, el primero sobre un bien mueble
(artículos 2856 al 2892) y el segundo sobre un bien inmueble (artículos 2893 al 2943). Por otra parte,
es importante señalar que pueden darse en prenda los frutos pendientes de bienes raíces a ser
recogidos en tiempo determinado. Conforme al artículo 334 de la Ley de Títulos y Operaciones de
Crédito, la prenda se constituye de lo siguiente:
I.- Por la entrega al acreedor, de los bienes o títulos de crédito, si éstos son al portador;
II.- Por el endoso de los títulos de crédito en favor del acreedor, si se trata de títulos nominativos, y por
este mismo endoso y la correspondiente anotación en el registro, si los títulos son de los mencionados en
el artículo 24;
III.- Por la entrega, al acreedor, del título o del documento en que el crédito conste, cuando el título o
crédito materia de la prenda no sean negociables, con inscripción del gravamen en el registro de emisión
del título o con notificación hecha al deudor, según que se trate de títulos o créditos respecto de los
cuales se exija o no tal registro;
IV.- Por el depósito de los bienes o títulos, si éstos son al portador, en poder de un tercero que las partes
hayan designado, y a disposición del acreedor;
V.- Por el depósito de los bienes, a disposición del acreedor, en locales cuyas llaves queden en poder de
éste, aun cuando tales locales sean de la propiedad o se encuentren dentro del establecimiento del
deudor;
VI.- Por la entrega o endoso del título representativo de los bienes objeto del contrato, o por la emisión o
el endoso del bono de prenda relativo;
VII.- Por la inscripción del contrato de crédito refaccionario o de habilitación o avío, en los términos del
artículo 326;
VIII.- Por el cumplimiento de los requisitos que señala la Ley General de Instituciones de Crédito, si se
trata de créditos en libros.
Contratos atípicos
Los contratos atípicos son aquellos que no tienen regulación en la legislación, respecto a la relación de
derecho privado entre los particulares que contratan.
las partes determinan libremente su contenido. De este modo se puede hablar de contratos nominados o
típicos y de contratos innominados o atípicos; o de contratos regulados y contratos no regulados. La
moderna tendencia prefiere la terminología de típicos y atípicos (Arce, 2005:149).
La razón principal por la que existen contratos atípicos es la necesidad de adaptar los contratos a los
fines empíricos y a las necesidades reales de las partes contratantes. Si los contratos regulados no se
ajustan a lo que las partes requieren, se hace un contrato “a la medida” dentro de los límites legales
En nuestra legislación el artículo 1858 del Código Civil para el Distrito Federal dispone:
Artículo 1858. Los contratos que no están especialmente reglamentados en esté Código, se regirán por
las reglas generales de los contratos; por las estipulaciones de las partes, y en lo que fueron omisas, por
las disposiciones del contrato con el que tengan más analogía, de los reglamentados en este
ordenamiento.
Esta disposición señala claramente el orden que debe seguirse para aplicar al contrato atípico las
normas de los contratos, que son:
También debe acudirse a los usos y costumbres, que pueden ser el origen del
contrato atípico, pues en las disposiciones sobre interpretación de contratos se
establece que: “el uso y costumbre del país se tendrán en cuenta” (artículo 1856 del
CC). El Código de Comercio señala que “el tribunal arbitral decidirá con arreglo a
las estipulaciones del convenio y tendrá en cuenta los usos mercantiles aplicables al
caso” (artículo 1445). Por otro lado, la jurisprudencia, las decisiones judiciales y los
estudios de los autores sobre determinada operación atípica, pueden considerarse
también como instrumentos auxiliares para su interpretación e integración.
Cierre
Cierre
Fuente: Flaticon
A lo largo de esta sesión analizaste diferentes tipos de contratos desde su naturaleza jurídica y
finalmente la importancia de los contratos atípicos, figura jurídica que se encuentra regulada en la
legislación en la materia.
Fuentes de consulta
Fuentes de consulta
Fuente: Flaticon
Arce Gargollo, J. (2005). El contrato atípico en el orden jurídico mexicano. Adame Goddard, J.
(coord.). Derecho Privado. Memoria del Congreso Internacional de Culturas y Sistemas Jurídicos
Comparados. México: UNAM. Recuperado de:
https://archivos.juridicas.unam.mx/www/bjv/libros/4/1590/11.pdf
Legislación
Código de Comercio.
Código Civil Federal.
Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.
Ley Federal de Protección al Consumidor.
Ley sobre el Contrato de Seguro.
Ley de Navegación y Comercio Marítimo.
Ley de Instituciones de Seguros y de Finanzas.