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Ficha de actividades Primer

año
Primer
año

El texto narrativo
Nombre y apellidos: __________________________________________ Fecha: ____________________

Lee el siguiente texto del escritor peruano Julio Ramón Ribeyro.

EL BANQUETE —Encantado (le contestó el presidente). Me parece


Con dos meses de anticipación, don Fernando Pa- una magnífica idea. Pero por el momento me encuen-
samano había preparado los pormenores de este tro muy ocupado. Le confi maré por escrito mi acep-
magno suceso. Su residencia hubo de sufrir una tación.
transformación general. Fue necesario echar aba- Don Fernando se puso a esperar la confi mación y
jo algunos muros, agrandar las ventanas, cambiar para esperar la contestación siguió haciendo reformas
la madera de los pisos y pintar de nuevo todas las en su casa, incluyendo un retrato del presidente (que
paredes. Esta reforma trajo consigo otras y don un pintor copió de una fotografía) y que él hizo colo-
Fernando se vio obligado a renovar todo el mobi- car en la parte más visible de su salón.
liario, desde las consolas del salón hasta el último Al cabo de cuatro semanas, la confi mación llegó.
banco de la repostería. Finalmente, como dentro Aquel fue un día de fiesta, salió con su mujer al balcón
del programa estaba previsto un concierto en el jar- para contemplar su jardín iluminado y cerrar con un
dín, fue necesario construir un jardín. Lo más gran- sueño bucólico esa memorable jornada. Ya se veía en
de, sin embargo, fue la confección del menú. Don Europa, como embajador.
Fernando y su mujer, como la mayoría de la gente El día del banquete, los primeros en llegar fueron los
proveniente del interior, sólo habían asistido en su soplones, a menudo los investigadores, los agentes se-
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vida a comilonas provinciales en las cuales se mez- cretos y en general todos los que desempeñan oficios
cla la chicha con el whisky y se termina devoran- clandestinos. Luego fueron llegando los automóviles.
do los cuyes con la mano. Por esta razón, sus ideas De su interior descendían ministros, parlamentarios,
acerca de lo que debía servirse en un banquete al diplomáticos, hombre de negocios, hombre inteligen-
presidente, eran confusas. Al fi , don Fernando de- tes. Don Fernando, en medio del vestíbulo, les estre-
cidió hacer una encuesta en los principales hoteles y chaba la mano, murmurando frases corteses y con-
restaurantes de la ciudad y así puedo enterarse que movidas.
existían manjares presidenciales y vinos preciosos Cuando todos los burgueses del vecindario se habían
que fue necesario encargar por avión a las viñas del arremolinado delante de la mansión y la gente de los
mediodía. Cuando todos estos detalles quedaron conventillos se hacía una fiesta de fasto tan inespe-
ultimados, don Fernando constató, con cierta an- rado, llegó el presidente. Escoltado por sus edecanes,
gustia, que en ese banquete, el cual asistirían ciento penetró en la casa y don Fernando, olvidándose de
cincuenta personas, cuarenta mozos de servicio, las reglas de la etiqueta, movido por un impulso de
dos orquestas, un cuerpo de ballet y un operador compadre, se le echó en los brazos con tanta simpatía
de cine, había invertido toda su fortuna. Pero, al que le dañó una de sus charreteras. Repartidos por los
fin de cuentas, todo dispendio le parecía pequeño salones, los pasillos, la terraza y el jardín, los invitados
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para los enormes benefi ios que obtendría de esta se bebieron discretamente, entre chistes y epigramas,
recepción. los cuarenta cajones de whisky. Luego se acomodaron
—Con una embajada en Europa y un ferrocarril a en las mesas que les estaban reservadas y se comenzó
mis tierras de la montaña rehacemos nuestra for- a comer y a charlar ruidosamente mientras la orques-
tuna en menos de lo que canta un gallo (decía a su ta, en un ángulo del salón, trataba de imponer inútil-
mujer). Yo no pido más. Soy un hombre modesto. mente un aire vienés. A mitad del banquete, cuando
—Falta saber si el presidente vendrá (replicaba su los vinos blancos del Rhin habían sido honrados y los
la mujer). tintos del Mediterráneo comenzaban a llenar las co-
En efecto, había omitido hasta el momento hacer pas, se inició la ronda de discursos. La llegada del fai-
efectiva su invitación. Aprovechó su primera visita sán los interrumpió y solo al fi al, servido el champán,
a palacio para conducir al presidente a un rincón y regresó la elocuencia y los panegíricos se prolongaron
comunicarle humildemente su proyecto. hasta el café, para ahogarse defi itivamente en las co-
pas del coñac.

Material fotocopiable
Don Fernando, mientras tanto, veía con inquie- Una hora después el presidente se retiraba, luego de
tud que el banquete, pleno de salud ya, seguía sus haber reiterado sus promesas. Lo siguieron sus minis-
propias leyes, sin que él hubiera tenido ocasión de tros, el congreso, etc, en el orden preestablecido por
hacerle al presidente sus confidencias. Al fi , cerca los usos y costumbres. A las dos de la mañana queda-
de medianoche, cuando ya el ministro de gobierno, ban todavía, merodeando por el bar, algunos cortesa-
ebrio, se había visto forzado a una aparatosa reti- nos que no ostentaban ningún título. Solamente a las
rada, don Fernando logró conducir al presidente a tres de la mañana quedaron solos don Fernando y su
la salida de música y allí, sentados en uno de esos mujer. Cambiando impresiones, haciendo auspicio-
canapés, que en la corte de Versalles servían para sos proyectos, permanecieron hasta el alba entre los
declararse a una princesa o para desbaratar una despojos de su inmenso festín. Por último se fueron a
coalición, le deslizó al oído su modesta. dormir con el convencimiento de que nunca caballe-
—Pero no faltaba más (replicó el presidente). Justa- ro limeño había tirado con más gloria su casa por la
mente queda vacante en estos días la embajada de ventana ni arriesgado su fortuna con tanta sagacidad.
Roma. Mañana, en consejo de ministros, propon- A las doce del día, don Fernando fue despertado por
dré su nombramiento, es decir, lo impondré. Y en lo los gritos de su mujer. Al abrir los ojos, le vio penetrar
que se refiere al ferrocarril, sé que hay en diputados en el dormitorio con un periódico abierto entre las
una comisión que hace meses discute ese proyecto. manos. Arrebatándoselo, leyó los titulares y, sin pro-
Pasado mañana citaré a mi despacho a todos sus ferir una exclamación, se desvaneció sobre la cama.
miembros y a usted también, para que resuelvan el En la madrugada, aprovechándose de la recepción, un
asunto en la forma que más convenga. ministro había dado un golpe de estado y el presiden-
te había sido obligado a dimitir.

1. Responde brevemente.
a) El texto leído es
• una noticia.
• una narración.
• una descripción.
• un diario personal.

b) Escribe en las flechas lo que se indica.

Personajes principales Escenario Autor

c) Según lo leído, marca qué estructura tiene el texto.


• Introducción, cuerpo, conclusión
• Tema, tesis, argumentos
• Inicio, nudo, desenlace
• Tesis, descripción, conclusión

2. Escribe Verdadero (V) o Falso (F) dentro de los paréntesis según corresponda.

a) Don Fernando gastó toda su fortuna para realizar dicho evento. ( )


b) El Presidente le aseguró que haría lo que don Fernando le pedía. ( )
c) Don Fernando se aseguró contar primero con la presencia del Presidente antes de
hacer el banquete. ( )
d) Don Fernando no consiguió lo que quería, porque el Presidente le dio su puesto a su compadre. ( )
3. Deduce, según el contexto de lo leído, el significado de las siguientes palabras.
a) Banquete: _____________________________________________________________________
b) Panegírico: _____________________________________________________________________
c) Despojo: _____________________________________________________________________
d) Sagacidad: _____________________________________________________________________

4. Responde según tu opinión.

a) ¿Por qué crees que Fernando gastó toda su fortuna en realizar dicho banquete?

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b) ¿Te parece adecuada la actitud de Fernando Pasamano? Fundamenta tu respuesta.

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c) ¿Cuál crees que es el fi al de esta historia?
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d) ¿Qué lección podemos sacar de lo leído?

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5. Completa el siguiente gráfico.

Escribe una oración que resuma el inicio


EL BANQUETE

Escribe una oración que resuma el nudo

Escribe una oración que resuma el final

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