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Nº. 29 Por la derrta del

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autoritario Acuerdo

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010 del 15 de julio
El
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del 2021 del Consejo

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Superior
Aguijón
¡Abajo las pedagogías de la opresión y la
desesperanza!
El acuerdo consuma la canallada y la vileza de la ma-
yoría simple del Consejo Académico. Porque usando un
lenguaje eufemístico y falaz -muy a tono con el estilo pre-
sidencial del uribista Duque- se dice que las decisiones
sobre el calendario -es decir, los llamados “cursos excep-
cionales de nivelación”- permiten culminar el semestre
2021-I y se trata de una medida que “permite beneficiar a
los estudiantes y a sus familias afectados por la coyuntura
que atraviesa Colombia”. Cuando, en realidad, es una me-
dida que impide culminar el semestre, pues, en contravía
de las propuestas de los representantes estudiantiles, los
profesores y las 4 decanaturas, no permite que se comple-
te el 80% del semestre académico, y porque en lugar de
beneficiar a los estudiantes y de garantizar su derecho a la
educación -como también dice el Acuerdo- representa un
atropello contra la inmensa mayoría de los estudiantes
y contra sus familias, tan violentados durante la pande-
mia y durante el paro, obligándolos a aceptar 10 semanas
de clase de un semestre que han pago con ingentes sa-
crificios económicos, y llegando incluso a posibilitar que
muchos estudiantes ni siquiera puedan tomar los menta-
dos cursos de nivelación (si no se completan 15 estudian-
tes). El acuerdo además atropella la libertad de cátedra,
vulnera las condiciones laborales de los maestros y va
contra la autonomía de las facultades y sus consejos.
Se trata de un castigo a los estudiantes que se suma-
ron a la lucha contra el gobierno uribista. Es triste re-
conocerlo, pero la administración que se vende como pro-
@el_aguijon_oficial
gresista, primero intentó una y otra vez sabotear el paro
presionando a los profesores para que obligaran a los estu-
diantes a retornar a las clases -es decir, a abandonar la lu-
cha con el resto del pueblo que era perseguido y abaleado
por el régimen- y ahora, con esta medida sancionatoria y
violatoria del derecho a la educación, la “progre” admi-
nistración que se dice Freiriana, se suma a la ofensiva
castigadora del gobierno de Duque y los ricos de este país
contra el pueblo que se rebeló contra ellos y desafió su au-
toridad y sus balas asesinas.
Se trata de una decisión autoritaria auspiciada des-
de el inicio por el Comité Directivo de la universidad
encabezado por el rector Leonardo Fabio Martínez. Y,
la verdad sea dicha, es que ese autoritarismo del rector y
su comparsa del Comité Directivo -en especial del vice-
rrector Harold Córdoba y de la represiva y pretenciosa -al
parecer- aspirante a rectora, la decana de Educación y vi-
cerrectora encargada, Sandra Durán, produjo ya el estalli-
do del Consejo Académico, un hecho sin precedentes en
la historia de la UPN: pues el Comité Directivo atropelló
a la mayoría académica del Consejo Académico, le pasó
la planadora por encima a 4 decanaturas y a la representa-
ción estudiantil, contando con la vil complicidad de los re-
presentantes profesorales, -personajes grises y abyectos-,
ajenos por completo a las dinámicas políticas de la comu-
nidad académica y en franco desprecio a las exigencias de
la inmensa mayoría de los estudiantes y de los profesores,
y ocultando que sólo 3 0 4 programas cumplieron con las
exigencias de forzar las clases y las evaluaciones.
Sí, el Consejo Académico estalló una vez que el Comi-
té Directivo pasó por encima de las principales autorida-
des académicas de la universidad -la gran mayoría de sus
decanos-, quienes coinciden con el criterio de la inmensa
mayoría de sus estudiantes y profesores. Es decir que la
academia y la comunidad han sido aplastadas por la bu-
rocracia, negándose toda posibilidad de diálogo y concer-
tación, y obligando a la “mayoría académica” del consejo
El Aguijón
-a las 4 decanaturas y a la representación estudiantil- a
pronunciarse públicamente en contra de la decisión arbi-
traria de la “mayoría simple” del consejo y a solicitar que
se reconsidere la decisión tomada.
En ambos consejos se decidió algo a las apuradas y
violando tanto los reglamentos y estatutos como los pro-
cedimientos de la universidad, así lo prueba la solicitud
de Revocatoria Directa de los representantes estudianti-
les. Justamente quienes rechazaron en principio las otras
propuestas de calendario académico -presentadas por los
representantes estudiantiles, un profesor y las 4 decana-
turas-, “por considerar que no estaban precedidas de estu-
dios jurídicos ni financieros”, hicieron aprobar a sombre-
razos una propuesta que no contaba con ningún estudio y
sin ni siquiera el respaldo de las debidas actas de los dos
consejos, y que tampoco fue discutida previamente en los
Consejos de Facultad. Esta medida autoritaria necesita-
ba de la premura y hasta de la ilegalidad para hacerse
aprobar, todo para garantizar el cumplimiento de los ob-
jetivos económicos y burocráticos de una administración
agonizante, que quiere entregar el cargo sin desplazar ca-
lendarios ni recursos, una obstinación casi maniaca, obse-
siva-compulsiva, en última instancia burocrática, que bus-
ca imponer la racionalidad administrativa por encima de
la vida de la comunidad y de la dignidad de sus miembros.
Para lograrlo se saca del sombrero una figura académi-
ca que no existe “Cursos excepcionales de nivelación”, o
que aplica sólo para casos individuales y excepcionales,
falseando la realidad, pues no se trata de nivelar a nadie,
se trata simple y llanamente de culminar el semestre
con las menores afectaciones académicas y humanas,
llegando al menos al 80% y sin atropellar tampoco a los
trabajadores administrativos y coordinadores. Sin embar-
go, para cumplir sus fines, esta administración -mezquina
y torpe, superando todas sus mezquindades y torpezas- ha
sido capaz de violar todo criterio pedagógico y adminis-
trativo, contando con el apoyo de la elite de derecha de

@el_aguijon_oficial
la facultad de Educación, triste elite, triste academia que
vive de espaldas a la vida y a la historia.
Se hizo a mansalva -aprovechando la dispersión que
impone el receso y el momento de repliegue popular y de
contraofensiva represiva del gobierno-, es decir, se mintió
a la comunidad académica cuando se dijo que se negocia-
ría el calendario académico al regreso. En lugar de eso se
impuso la propuesta ya cocinada por las directivas uni-
versitarias, pasando por encima de la inmensa mayoría de
la comunidad universitaria. Pero este pretendido castigo
-intentado ya en paros anteriores- que se sintoniza con el
afán ejemplarizante del gobierno y la oligarquía colom-
biana, no pasará, hay que apoyar las exigencias de los
representantes estudiantiles y de las 4 decanaturas para
que se revoque el Acuerdo 010 del consejo Superior, y si
persisten en su autoritarismo es preciso boicotear su
aplicación apelando a esa gran unidad forjada durante el
estallido revolucionario, movilizándonos juntos estudian-
tes, trabajadores y maestros.

01 de Agosto del 2021.

El Aguijón

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